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Cortesía del PROGRAMA DE EXTENSIÓN EN RIEGO Y ASISTENCIA

TÉCNICA – PERAT Coordinación Zonal Sur, del PROYECTO


SUBSECTORIAL DE IRRIGACIÓN PSI.

III

CONCEPTOS BÁSICOS DE
FRUTICULTURA

JORGE ESCOBEDO ALVAREZ


2003
INDICE GENERAL

I. ORIGEN Y DISTRIBUCION DE LOS FRUTALES EN EL MUNDO

1. FRUTALES SIEMPREVERDES
2. FRUTALES CADUCIFOLIOS

II. ALGUNOS CONCEPTOS FISIOLOGICOS GENERALES

1. TIPOS DE REPOSO
2. RELACION COPA-RAIZ
3. CRECIMIENTO Y DESARROLLO
4. CORRELACIONES DE CRECIMIENTO Y DOMINANCIA APICAL
5. JUVENILIDAD
6. MADUREZ O ESTADO ADULTO DE LA PLANTA
7. DIFERENCIACION FLORAL
8. CRECIMIENTO Y PRODUCCION
9. RELACION PATRON-INJERTO
10. SEXO DE LAS FLORES Y TIPOS DE PLANTAS
11. PARTENOCARPIA
12. COMPORTAMIENTOS FLORALES DE ALGUNAS ESPECIES FRUTALES

III. FACTORES DEL MEDIO AMBIENTE


1. CLIMA
2. SUELO

IV. PROPAGACION DE LOS FRUTALES

1. PROPAGACION SEXUAL
2. PROPAGACION VEGETATIVA
3. POLIEMBRIONIA

V. PLANEAMIENTO DE LA INSTALACION DE UN HUERTO

VI. EL AGUA Y EL ARBOL FRUTAL

1. RELACION AGUA-SUELO-PLANTA

VII. CULTIVOS Y DESHIERBOS

VIII. CULTIVOS ENTRE HILERAS

IX. PODA

1. CONCEPTO Y FUNDAMENTOS FISIOLOGICOS


2. TIPOS DE PODA
X. NUTRICION

1. ELEMENTOS ESENCIALES PARA EL DESARROLLO DE LOS FRUTALES


2. ABSORCION DE NUTRIENTES
3. FERTILIDAD DEL SUELO
4. BALANCE NUTRICIONAL
5. FERTILIZACION O ABONAMIENTO
6. DIAGNOSTICO NUTRICIONAL
7. DETERMINACION DEL PLAN DE FERTILIZACION
8. APLICACION DE FERTILIZANTES AL SUELO
9. APLICACIONES FOLIARES DE NUTRIENTES
10. FUENTES DE NUTRIENTES

XI. PERIODO FLORACION-MADURACION

1. FACTORES QUE DETERMINAN EL F-M


2. CARACTER TEMPRANO, INTERMEDIO O TARDIO DE UN CULTIVAR
3. ALARGAMIENTO DE LA EPOCA DE COSECHA
4. CRECIMIENTO DEL FRUTO
5. MADURACION
6. MADUREZ
7. CALIDAD
8. COSECHA
9. ALGUNOS INDICES DE COSECHA EN CIERTAS FRUTAS
10. MANIPULEO O FORMA DE COSECHA
11. RENDIMIENTOS
12. CLASIFICACIÓN Y EMBALAJE

XII. MANEJO POSCOSECHA DE LA FRUTA

1. BASES DE LA CONSERVACION
2. METODOS DE CONSERVACION
3. DECOLORACION
4. COMERCIALIZACION INTERNA
5. COMERCIO EXTERIOR

XIII. CONTROL DE PLAGAS Y ENFERMEDADES

1. MEDIDAS DE CONTROL DE PLAGAS Y ENFERMEDADES


2. PRINCIPALES PLAGAS EN LOS FRUTALES
3. PRINCIPALES ENFERMEDADES DE LOS FRUTALES

XIV. ESTUDIO ECONOMICO

XV. BIBLIOGRAFIA
I. ORIGEN Y DISTRIBUCION DE LOS FRUTALES EN EL
MUNDO
Uno de los factores determinantes en la distribución de los frutales en el mundo es el clima.
Los centros de origen (conocidos también como centros genéticos o centros de diversidad
genética), están ubicados en diversos países del mundo. Así por ejemplo, los mangos son
originarios de La India, los paltos de Centroamérica y algunas regiones tropicales de
Sudamérica, los naranjos y el litchi de la China, el olivo del Asia Menor o del Este del
mediterráneo, el manzano de Afganistán, el papayo del Perú, los pecanos de los Estados
Unidos, el tamarindo, el melón y la sandía del Africa, la macadamia de Australia, etc.

Existen en el mundo dos zonas climáticas de particular importancia en fruticultura y que se


encuentran graficadas en la figura 1: la tropical y la templada.

La zona tropical que se encuentra comprendida entre el trópico de cáncer (23.5° latitud
norte), y el trópico de capricornio (23.5° latitud sur), se caracteriza por presentar un clima
uniformemente cálido todo el año y con poca diferencia de duración entre el día y la noche
durante todas las estaciones.

La zona templada se ubica por encima del trópico de cáncer y por debajo del trópico de
capricornio, hasta los 50° a 55° de latitud norte y sur, aproximadamente. En ella son muy
notorios los cambios en la temperatura y la duración del día y la noche en función de las
estaciones del año.

Figura 1. Delimitación de las zonas tropical y templada en el mundo.

En la práctica, no todas las localidades ubicadas geográficamente dentro de una u otra zona
poseen las mismas características climáticas. Es lo que ocurre en el caso de la costa y
sierra del Perú, cuyas condiciones ambientales teóricamente tropicales son atenuadas, por
efecto de la corriente marina fría de Humboldt y la presencia de la cordillera de Los Andes,
dando lugar a un clima conocido como subtropical.

De todas maneras, las dos zonas climáticas, tropical y templada, pueden considerarse como
los dos grandes centros de origen de los frutales. Esto da lugar a una clasificación de las
referidas especies en dos grupos: frutales siempreverdes y frutales caducifolios.

FRUTALES SIEMPREVERDES
Conocidos también como «de hoja perenne». Son originarios de la zona tropical, cuyo
clima estimula una actividad de las plantas más o menos uniforme todo el año, sin
variaciones muy marcadas de intensidad, por lo cual siempre poseen hojas funcionales. El
envejecimiento, caída y reemplazo de las hojas se produce en forma paulatina y en un
periodo relativamente largo. Por eso es que de manera general, en ningún momento los
árboles se encuentran totalmente desnudos o defoliados.

Entre las principales especies frutales que conforman este grupo se pueden mencionar a las
siguientes: cítricos en general, palto, mango, lúcumo, papayo, piña, banano, plátano,
maracuyá, granadilla, etc.

FRUTALES CADUCIFOLIOS
Son propios de climas templados. En tales condiciones estos frutales presentan tanto
periodos de intenso crecimiento y desarrollo como periodos de reposo o descanso
denominados dormancia. Este último, que es un tipo muy complicado de reposo cuya
salida exige una previa acumulación de frío de sus yemas, les permite sobrevivir bajo las
condiciones de temperaturas extremamente bajas de los inviernos. Una de las
manifestaciones externas del estado dormante es la caída de hojas en otoño, quedando la
planta totalmente defoliada hasta la estación de primavera. De allí deriva el nombre de
«caducos» o «de hoja caduca» con el que también se conoce a estos frutales.

CICLO ANUAL TRADICIONAL DE UN CADUCIFOLIO

Creciendo en condiciones de climas templados, el ciclo anual tradicional de una planta


adulta, puede resumirse según el siguiente esquema:

Primavera. Ocurre el brotamiento y la floración. Los promotores del crecimiento, como


las giberelinas y las citoquininas, se presentan en mayor concentración que los inhibidores.

Verano. Tiene lugar la máxima actividad fotosintética y generalmente en esta estación se


presenta la maduración y cosecha de los frutos y la diferenciación floral.

Otoño. Se producen cambios internos en la planta como la translocación de solutos hacia


las zonas de reserva y de los inhibidores del brotamiento hacia las yemas. Posteriormente
ocurre amarillamiento y caída del follaje. Las yemas, al final del otoño, han alcanzado ya,
por lo general, su estado dormante.

Invierno. Bajo la influencia del frío del invierno se producen cambios celulares
metabólicos que culminan con la ruptura de la dormancia de las yemas. Desde el punto de
vista hormonal se considera que el frío induce la producción y acumulación de promotores
del brotamiento en las yemas.

PRINCIPALES DIFERENCIAS ENTRE LOS FRUTALES CADUCIFOLIOS Y


SIEMPREVERDES

Las principales diferencias pueden agruparse dentro de los siguientes aspectos:

Clima. Los caducifolios son originarios de climas templados; necesitan de inviernos fríos
y veranos calurosos. Los siempreverdes son propios de climas tropicales y subtropicales.

Hábito vegetativo. En los climas templados los caducifolios entran en estado de


dormancia por varios meses. Los siempreverdes están en actividad todo el año, aunque es
menos intensa en invierno.

Resistencia a bajas temperaturas. En periodos de dormancia, los caducifolios pueden


soportar muy bajas temperaturas sin sufrir daños. Los siempreverdes, por no presentar
aquel estado, son más susceptibles a temperaturas frías.

Poda. La mayoría de caducifolios son exigentes en poda de fructificación. Los


siempreverdes, por lo general, sólo necesitan poda de formación. La poda en los
siempreverdes elimina follaje activo en cualquier época del año que se aplique.

Germinación. Las semillas botánicas de los caducifolios, al igual que sus yemas, presentan
el fenómeno de la dormancia y para poder germinar requieren de una previa estratificación
húmeda en frío. Además, conservan su poder germinativo por tiempo relativamente largo.

Las semillas de los frutales de hoja perenne pueden germinar inmediatamente después de
extraídas de los frutos; pero, por otro lado, pierden rápidamente su poder germinativo.

Conservación de los frutos. Los frutos de los caducifolios se conservan en frío mejor y
por mayor tiempo que los frutos de los siempreverdes.

Transplante. El transplante de los caducifolios puede hacerse a raíz desnuda,


aprovechando el periodo de reposo. La mayoría de los frutales siempreverdes se maneja en
envases o «con champa».

Cultivos intercalados. Con los caducifolios sólo es posible conducir cultivos intercalados
transitorios, cuyo ciclo completo coincida con los meses de actividad del frutal. Con los
siempreverdes, las posibilidades de instalar este tipo de cultivos son mayores.
CULTIVO DE FRUTALES EN CLIMAS DISTINTOS A LOS DE SUS LUGARES
DE ORIGEN

Las posibilidades de lograr éxito en la solución de este problema de adaptación depende por
un lado de la capacidad misma del frutal para modificar o adecuar sus hábitos y exigencias
a su nuevo ambiente, y por otro de la aplicación de técnicas especiales de cultivo por parte
del hombre.

ADAPTACION DE LOS CADUCIFOLIOS A ZONAS SUBTROPICALES

Es el caso específico del Perú, donde la introducción de frutales caducifolios,


específicamente a la costa y valles interandinos, ha obligado a la aplicación de medidas o
adopción de técnicas muy peculiares entre las que cabe destacar las siguientes:

a) Selección de algunos biotipos o cultivares «poco exigentes en frío»

La característica principal de estos es que son capaces de brotar después de un cierto


tiempo bajo condiciones de muy poco frío. Probablemente en las condiciones climáticas en
que están creciendo, sus yemas no presenten una verdadera dormancia o, estando esta
presente, las suaves temperaturas bajas son suficientes para superarla.

b) Utilización del «agoste» o suspensión del riego

Aplicado de manera temporal, normalmente en otoño y/o invierno, es una práctica que
permite inducir cierto descanso, tratando de imitar aunque de manera imperfecta a la
dormancia que, tal como se anotó anteriormente, podría no presentarse en forma normal o
suficiente. El «agoste» de ninguna manera reemplaza totalmente al fenómeno complejo de
la dormancia, por los muchos y complicados cambios internos que esta conlleva.

c) Uso de defoliantes

Estos productos se aplican como un medio de activar y permitir el brotamiento uniforme y


de un mayor número de yemas que por la dureza e impermeabilidad de sus capas
protectoras o por el insuficiente frío, podrían quedar sin brotar. Esta práctica es conocida en
el país como el «quemado» o «quema» de las plantas.

En la costa peruana la secuencia del ciclo anual y la aplicación de las dos últimas prácticas
anotadas es, por lo general, la siguiente:

Agoste : entre abril y agosto (por dos, tres o cuatro meses)


Poda : agosto o septiembre (antes de aplicación de defoliante)
Aplicación de defoliantes y primer riego: septiembre.
Brotamiento y floración: septiembre-octubre.
Cosecha: febrero-marzo.
En la región de la sierra el agoste es posible aplicarlo en épocas diferentes, de manera que
la cosecha también se realice en fechas distintas, dando lugar a lo que se conoce como
«producción fuera de época».

ADAPTACION DE FRUTALES TROPICALES O SIEMPREVERDES A ZONAS MENOS


CALIDAS O CON CIERTO FRIO

La presencia de temperaturas más bajas que en sus lugares de origen no afecta a todas las
especies tropicales de la misma manera. Las que se adaptan mejor como la mayoría de
cítricos y paltos, presentan pocas perturbaciones en sus características de desarrollo y de
calidad de la fruta producida, mientras que otras especies como las piñas y papayos pueden
ser fuertemente afectadas. Desde luego que la intensidad de afectación estará en relación
directa con la intensidad del frío.

De manera general, entre las manifestaciones más o menos características de un frutal


tropical creciendo en condiciones menos calurosas, se encuentran las siguientes:

1. Desarrollo más lento de los árboles. El periodo juvenil se alarga y, por consiguiente, las
plantas demoran más en entrar en producción. Por ejemplo los papayos en la selva
empiezan a producir a los 6-7 meses después de la plantación, mientras que en la costa lo
hacen recién a los 10-12 meses.

2. Durante la estación o las estaciones frías el frutal siempreverde, que en condiciones


tropicales mantiene una actividad intensa y más o menos constante todo el año, presenta un
periodo de reposo. Algunos agricultores en la costa del Perú adelantan, acentúan o
prolongan, hasta ciertos límites, este estado mediante la supresión temporal del riego
(agoste), logrando adelantar, uniformizar o retrasar la floración en algunas especies como el
mango y el palto por ejemplo.

3. El periodo de floración se reduce. En consecuencia, también se acortará el periodo de


cosecha.

4. El periodo F-M (floración-maduración) se alarga, como resultado del crecimiento y


desarrollo más lento de los frutos.

5. La calidad de los frutos varía. Esto es más notorio en unas especies que en otras. Por
ejemplo, las papayas, toronjas y algunos cultivares de mango, no maduran adecuadamente
en lugares fríos.

6. Daños por heladas. El fenómeno de las heladas se presenta con frecuencia en ciertas
zonas frutícolas de importancia en el mundo, como por ejemplo en Florida (EE.UU.),
donde ocasionan daños a frutos, hojas, ramas, etc., y en oportunidades pueden destruir toda
la cosecha, llegando inclusive a matar árboles adultos. En nuestro país, algunas heladas se
presentan en ciertos lugares de la sierra.
II. ALGUNOS CONCEPTOS FISIOLOGICOS GENERALES
Los factores de la producción suelen dividirse en dos grupos: factores internos y factores
externos. Los primeros, llamados también factores intrínsecos están referidos a la
capacidad potencial de la planta para cumplir con los diversos procesos propios de su
ciclo. Esta capacidad es de naturaleza genética y los mecanismos de su manifestación se
ajustan a ciertos conceptos relacionados con la fisiología vegetal, algunos de los cuales,
referidos básicamente a árboles frutales, se desarrollan a continuación.

TIPOS DE REPOSO
En todos los frutales, sean estos siempreverdes o caducifolios, en algunos momentos de año
y por periodos variados, las yemas de sus ramas no brotan, es decir no abren para dar lugar
a nuevos crecimientos o a floración. Se dice entonces que las yemas están en reposo. Según
las causas que lo originan, se reconocen tres tipos de reposo:

1. Quiescencia o ecodormancia. La causa de la inactividad reside en un factor del medio


ambiente (agua, temperatura, luminosidad).

2. Inhibición correlativa o paradormancia. Llamada también simplemente inhibición. En


este caso la actividad del meristema de la yema es limitada por la actividad de otro órgano
de la planta (hoja en crecimiento, fruto, otro meristema etc.).

3. Dormancia o endodormancia. La causa de la inactividad es interna, se sitúa en la yema


misma.

Los dos primeros son reposos bastante simples pues basta suprimir la causa que los
ocasiona para que haya una reversibilidad inmediata de la situación, con el retorno al
crecimiento.

En el caso de la dormancia, este reposo es consecuencia de un proceso sumamente


complejo en sus detalles determinantes íntimos. Como posibles explicaciones,
frecuentemente se hace referencia a:

1. balances hormonales internos entre promotores e inhibidores del crecimiento.

2. Aspectos nutricionales o metabólicos, por incapacidad de las células cercanas a la yema


y finalmente de la yema misma, para sintetizar o movilizar los diferentes metabolitos
necesarios para el crecimiento impidiendo así su acceso a las zonas activas del meristema.

3. Interacción entre órganos o efectos correlativos.

Cualquiera sea la naturaleza de los mecanismos involucrados, el resultado es que las yemas
en estado dormante serán incapaces de brotar aunque las condiciones ambientales
(temperatura, luz, humedad, etc.) sean las más adecuadas. Para que estas yemas broten
deben primero «romper» su dormancia, es decir salir de su estado dormante. Esto implica
también cambios internos en el seno de la propia yema, los cuales son activados por el frío.

RELACION COPA-RAIZ
Entre la copa, parte aérea o sistema caulinar, y la raíz o sistema radicular, que son los
elementos que constituyen la estructura de un árbol frutal, existe una mutua dependencia.
Las ramas, hojas, frutos y demás constituyentes de la copa, necesitan de las raíces sobre
todo para abastecerse de agua y minerales presentes en el suelo, y a su vez las raíces
dependen de la copa para proveerse de los metabolitos y demás sustancias que son
elaboradas principalmente en las hojas.

Debido a esto es que el desarrollo evolutivo y fisiológico de ambas partes en un árbol o


planta que crece normalmente, es paralelo y siempre existe un balance funcional entre
ellas. Si algunas de las raíces activas son, por cierta circunstancia, destruidas, el
abastecimiento de agua y minerales a la copa puede verse afectado y decrecer hasta que
nuevas raíces se desarrollen y reemplacen a las eliminadas. De igual manera, si una porción
de la copa con follaje activo es podada o eliminada, el crecimiento radicular también sufrirá
un retardo hasta que nuevas ramas y hojas ocupen el sitio y funcionen en reemplazo de las
que se suprimieron.

Este concepto debe tenerse muy presente para poder evaluar parte de los efectos que
produciría en un frutal, la aplicación de labranzas intensas y continuas y de podas severas.

CRECIMIENTO Y DESARROLLO
Son una combinación de muchos eventos a diferentes niveles y que dan como resultado la
producción integral de un organismo. Los dos procesos se encuentran íntimamente
relacionados y su ocurrencia a menudo tiene lugar en forma paralela e interdependiente uno
del otro.

El crecimiento, uno de cuyos componentes es el incremento irreversible en tamaño y en


peso, tiene lugar principalmente sobre la base del aumento del número de células y del
volumen celular.

El desarrollo puede entenderse como un cambio ordenado o progresivo hacia un estado


superior más complejo. Esto implica diferenciación de tejidos especializados y la
formación de órganos. Podría decirse que el desarrollo es un «crecimiento cualitativo».

Es posible que pueda haber crecimiento sin desarrollo y desarrollo sin crecimiento, pero a
menudo los dos están combinados en un solo proceso.

El crecimiento y desarrollo de los tallos, raíces y otros órganos o estructuras, tienen lugar a
partir de tejidos compuestos de células indiferenciadas en proceso de activa división. Son
los tejidos meristemáticos o simplemente meristemas.
Los meristemas localizados en los ápices de las raíces y tallos, responsables del crecimiento
en longitud y la formación de hojas y de yemas terminales, son los meristemas apicales.
Igualmente, las yemas en las axilas de las hojas se forman a partir de los conocidos como
meristemas axilares

El incremento en grosor tiene lugar a partir de otro tipo de meristema conocido como
cambium, que en las dicotiledóneas se ubica entre el floema y el xilema. El grado de
actividad del cambium, que es variable a través del año, es un factor de mucha importancia
en el prendimiento de los injertos.

El crecimiento vegetativo no es un proceso uniformemente continuo sino más bien cíclico.


Es decir que hay periodos en los cuales, coincidiendo generalmente con cambios
ambientales, se produce un intenso crecimiento y luego una disminución o detención del
mismo. Estos ciclos de crecimiento son más notoriamente acentuados en los caducifolios.

CORRELACIONES DE CRECIMIENTO Y DOMINANCIA APICAL


La forma y las dimensiones de un árbol están determinadas por su crecimiento en altura, el
número y la longitud relativa de las ramas y el ángulo de inserción de las mismas. Todos
estos componentes están muy relacionados o son el resultado de interacciones entre órganos
o correlaciones de crecimiento. Estas ocurren dentro de cada brote y en la planta entera.
Los mecanismos correlativos aún no han sido totalmente explicados.

El fenómeno más notable es la dominancia apical. Al iniciarse el brotamiento es la yema


apical o esta y las axilares más apicales las que acaparan el vigor de brotamiento.
Igualmente en brotes en crecimiento, los ápices terminales y las hojas jóvenes inhiben el
desarrollo de las yemas axilares. A esto se debe el concepto ampliamente generalizado y
aceptado que los árboles frutales crecen por las puntas o ápices de las ramas.

Se piensa que es la auxina producida por el ápice del brote la que inhibe el crecimiento de
las yemas axilares. Igualmente se cree que son otros factores específicos o inhibidores los
responsables de la inhibición correlativa de las yemas. También se postula que entre las
yemas dominantes y el brote que las contiene se desarrollan conexiones vasculares muy
eficientes. Finalmente otra hipótesis sostiene que la dominancia apical es el resultado del
transporte preferencial de nutrientes hacia el ápice en crecimiento.

JUVENILIDAD
Estado de la planta que, en condiciones normales, empieza inmediatamente después de la
germinación y durante el cual es incapaz de producir flores, aun cuando todas las
condiciones ambientales puedan ser favorables para que ello ocurra. Este periodo
corresponde a la fase de crecimiento vegetativo.

En un principio, el crecimiento del aparato radicular será esencialmente prioritario y sólo


un número reducido de meristemas activos producirán desarrollo vegetativo.
Durante la transición hacia el estado adulto, el número de puntos de crecimiento, así como
el grado de ramificación, progresivamente van a aumentar, mientras que la capacidad
asimilatriz de la planta se incrementa.

Algunos otros rasgos morfológicos y fisiológicos del estado juvenil en algunos frutales,
aparte de la falta de floración, son: la ausencia de vellosidades, la forma lobulada de sus
hojas, presencia de espinas, fácil enraizamiento de sus tallos y la menor concentración de
ARN en sus tejidos.

MADUREZ O ESTADO ADULTO DE LA PLANTA


En un determinado momento de la vida de un árbol, aparece una diferenciación entre los
diversos puntos vegetativos caulinares. Algunos permanecen como los más favorecidos
para un crecimiento activo y proseguirán con la edificación del tronco y de ramas
primarias. En otros puntos de crecimiento, las condiciones serán también eventualmente
suficientes como para permitir una organogénesis activa, pero orientada a la formación de
órganos reproductivos. Es en estos puntos donde la floración y la fructificación tendrán
lugar.

Se considera que el frutal ha alcanzado su madurez cuando ocurre por primera vez la
diferenciación floral, aunque lógicamente la expresión más evidente de este estado es la
floración, es decir la presencia de flores sobre el árbol. A partir del momento en que un
árbol ha madurado, la diferenciación floral normalmente ocurrirá en forma periódica en
algún momento durante el ciclo anual del frutal.

La edad necesaria para que en un frutal ocurra el cambio de una condición vegetativa a
reproductiva, varía significativamente según la especie y/o el cultivar. Es decir está bajo
control genético. Sin embargo, muchos factores externos pueden influenciar
marcadamente sobre el proceso.

DIFERENCIACION FLORAL
Básicamente consiste en la transformación de una yema vegetativa en yema floral; es
decir de la formación, dentro de la yema, de los primordios de flor. Previo a este cambio
morfológico ocurre un cambio fisiológico y bioquímico a nivel meristemático conocido
precisamente como «inducción del meristema» o «evocación floral» (para diferenciarlo
de la simple «inducción» que en plantas fotoperiódicas ocurre en las hojas como respuesta
al estímulo luminoso).

Los mecanismos de estos procesos son hasta ahora desconocidos. Parece sin embargo que
están relacionada con un complicado equilibrio hormonal interno en el ámbito de la
propia yema, y con una serie de efectos correlativos (o interacción entre órganos), sobre
los cuales influyen factores ambientales, nutricionales, fisiológicos y genéticos.

A diferencia de las especies transitorias que una vez superado su estado de juvenilidad,
todas sus yemas vegetativas se convierten en florales, sacrificando así la posibilidad de
seguir viviendo después de fructificar, las plantas perennes, entre ellas los árboles frutales,
salvaguardan su aparato vegetativo transformando cada año en florales sólo una porción de
sus yemas y manteniendo el resto como vegetativas.

En cuanto a la época o momento en el que todos los años ocurre la diferenciación floral
sobre un árbol frutal, esta tiene lugar normalmente varios meses antes de la antesis floral.
En paltos por ejemplo, se evidencian cambios microscópicos en los meristemas de las
yemas cuatro meses antes de la floración. En caducifolios, se presenta mucho antes, en la
estación de crecimiento (verano en el ciclo anual tradicional) anterior a la floración.

CRECIMIENTO Y PRODUCCION
En los árboles frutales, como es obvio, existe una relación cuantitativa inversa entre las
yemas florales y las vegetativas. Normalmente, el número de flores y finalmente de frutos
de un árbol adulto será el resultado de ajustes progresivos que la planta realizará en función
de la distribución de los recursos que posea, entre el crecimiento vegetativo y la
producción.

Este antagonismo fisiológico entre el desarrollo vegetativo y generativo es fácilmente


comprobable. Por ejemplo en los frutales jóvenes, el crecimiento vigoroso y violento tiene
lugar a expensas de la producción que es nula; o en el caso opuesto, cuando en plantas
adultas hay un exceso de fructificación, derivando hacia ella la mayor parte de los recursos
disponibles, el número de brotes vegetativos nuevos se reduce considerablemente.

Pero por otro lado, la producción es, en gran medida, dependiente del crecimiento por
cuanto este significa, entre otras cosas, formación de nuevos brotes y tallos y renovación
constante de hojas, con la consiguiente formación de nuevas yemas o estructuras florales.
Por ejemplo en mangos es frecuente asociar, en parte, la alternancia en la producción con
la inadecuada renovación del follaje.

RELACION PATRON-INJERTO
En árboles frutales se considera generalmente como una unidad individual, la combinación
de dos partes provenientes de plantas distintas: el patrón, pie o portainjerto y el injerto,
copa o cultivar.

Tal como se muestra en la figura 2, cada una de estas partes está conformada por material
genético diferente, por lo que muchas veces se encuentran capacitadas de distinta manera
para el cumplimiento de determinada función. En consecuencia, las características
intrínsecas de un frutal injertado serán las características de la combinación patrón-injerto,
que a su vez serán la sumatoria o resultante de mutuas influencias.

Tanto el patrón como la copa mantienen individualmente, a través de toda su vida, su


carga genética original, (salvo eventuales mutaciones somáticas); de manera que el fruto
producido por una planta injertada tendrá las características propias de la especie y cultivar
correspondiente a la planta madre de la cual se extrajeron las yemas, al margen del patrón
sobre el cual se haya realizado la injertación. Es decir, no existe mezcla de características
de los frutos del patrón y del injerto. Por ejemplo un limonero Sutil injertado sobre
mandarina Cleopatra, Limón Rugoso o mandarina ‘Sunki’ producirá en los tres casos frutas
de limón Sutil con todas las características generales de la planta yemera. Sin embargo,
existen influencias recíprocas entre el patrón y el injerto que pueden alterar algunos
caracteres originales de una u otra parte de la planta

Figura 2 : Constitución de un frutal injertado.

A: Planta madre yemera. Constitución genética de la copa: XX


B: Portainjerto. Constitución genética: YY
C: Nuevo frutal injertado. Constitución genética: copa: XX, patrón: YY

Bajo ciertas circunstancias, y por alguna razón que lo justifique se recurre a la utilización
de un injerto intermedio o «puente» entre las dos partes. En estos casos el injerto
intermedio tiene también alguna participación dentro del esquema de las influencias
recíprocas aludidas, algunas de las cuales se detallan a continuación.

INFLUENCIA DEL PORTAINJERTO SOBRE LA COPA

Existen muchas características de la copa que son influenciadas por el portainjerto. Algunas
están relacionadas con aspectos como anatomía interna y composición química de las hojas,
eficiencia fotosintética, tolerancia al frío, tolerancia a la sequía, etc. Sin embargo, entre las
más evidentes y fáciles de cuantificar se pueden mencionar a las siguientes:

1. Vigor y tamaño de planta. Mayores evidencias de esto se encuentran en frutales


caducifolios. En manzanos por ejemplo son bastante conocidos ciertos portainjertos de la
serie «East Malling», de los cuales se han seleccionado desde los muy vigorizantes hasta
los fuertemente enanizantes. Estos últimos (EM 7, EM 26, EM 27 etc.), son los de mayor
interés para plantaciones modernas de alta densidad en otros países. Con el patrón
membrillero, ampliamente utilizado en el Perú, se obtienen manzanos con un tamaño de
copa bastante menor que con el patrón manzano silvestre o manzano franco.

En frutales siempreverdes también se tienen referencias, aunque en mucho menor número,


de portainjertos enanizantes. Así por ejemplo para mango se informa que 'Eldon' es un
cultivar que como patrón induce enanismo. En paltos, en Israel se ha seleccionado un
portainjerto llamado 'Maoz' que es enanizante y, además, resistente a salinidad.

En cítricos, el naranjo trifoliado, y en menor grado sus híbridos, reducen el tamaño de


copa de las especies y/o cultivares injertados sobre ellos, en comparación con los otros
portainjertos. En cuanto a los dos patrones más utilizados en nuestro medio, la mandarina
'Cleopatra' y el limón rugoso, a pesar que ambos confieren aproximadamente el mismo
vigor final, inicialmente el crecimiento de la copa es mucho más vigoroso sobre el limón
rugoso.

2. Precocidad en la fructificación. El tiempo que transcurre entre la injertación y el


inicio de la producción, en algunos casos está influenciado por el patrón. Es lo que sucede
por ejemplo en cítricos con el limón rugoso en comparación con otros portainjertos.

3. Calidad de fruta. Algunos aspectos de calidad, tanto interna como externa, pueden ser
alterados por influencia del patrón.

En cítricos por ejemplo se conoce que, de manera general, un determinado injerto sobre
limón rugoso produce frutos con un grosor de cáscara mayor que cuando es efectuado
sobre mandarina 'Cleopatra', mandarina 'Sunki' o naranjo trifoliado. Otros factores de
calidad como tamaño de fruto, color de cáscara, porcentaje de jugo, porcentaje de acidez,
etc., pueden ser también influenciados por el portainjerto.

En el Perú existen evidencias de que el manzano silvestre confiere mejor calidad que el
membrillero a los frutos de los cultivares comerciales que se injertan sobre ellos.

Estudios recientes, en manzanos, muestran que muchos factores de calidad y de eficiencia


en la producción, que son influenciados por los portainjertos, no se manifiestan de manera
constante todos los años. Es decir que los efectos de los portainjertos no son absolutos.

INFLUENCIA DEL INJERTO SOBRE EL PATRON

El estudio de estas influencias es más difícil de llevar a cabo, por cuanto las evaluaciones
hay que realizarlas en el sistema radicular, lo cual supone en la mayoría de los casos,
grandes y complicadas remociones de terreno.

En general, se conocen variaciones en el vigor original del patrón como consecuencia de


ciertas modificaciones de su sistema radicular. En algunas especies de caducifolios, la
original resistencia al frío de un determinado patrón, puede ser alterada por el injerto de
ciertos cultivares que inducen la prolongación del crecimiento radicular anual por un mayor
tiempo que el normal, de manera que llegado el invierno, los tejidos de la raíz no están lo
suficientemente maduros para presentar resistencia a las temperaturas bajas. Esto tiene
especial importancia en los países de climas templados.

En los cítricos, también se ha encontrado que la resistencia al frío de los patrones puede
ser parcialmente modificada por el injerto.

Por otro lado, el injerto puede influir sobre la selectividad en la absorción y transporte de
iones por parte del patrón. Así, el limón rugoso por ejemplo, absorbe mayor cantidad de
boro cuando tiene como copa a la naranja 'Valencia'.

SEXO DE LAS FLORES Y TIPOS DE PLANTAS

De acuerdo a los órganos sexuales presentes, las flores de los frutales pueden ser:

a) Hermafroditas. Conocidas también como flores perfectas, son anatómicamente


completas. Poseen estambres y pistilos adecuadamente desarrollados, aunque
fisiológicamente pueden o no ser funcionales.

b) Estaminadas. Llamadas igualmente flores masculinas, sólo tienen desarrollados en


forma adecuada los estambres.

c) Pistiladas. Al contrario de las anteriores, son los pistilos los únicos órganos sexuales que
los tienen convenientemente formados. Se les conoce también como flores femeninas.

En las diversas especies frutales, una o más de estas tres clases de flores pueden
distribuirse, de distinta manera, dentro de una misma planta o en individuos diferentes. Esto
da lugar a que se consideren los siguientes tipos de plantas:

1. Plantas hermafroditas . Son aquellas que poseen en su totalidad flores perfectas o


hermafroditas. Dentro de este grupo se ubican frutales de gran importancia como los
cítricos en general, paltos, manzanos, perales, durazneros, tunales, etc.

2. Plantas monoicas . Cuando en una misma planta se encuentran flores estaminadas y


flores pistiladas ubicadas en diferentes lugares. Es el caso del pecano, nogal, avellano,
castaño, etc.

3. Plantas dioicas . Son aquellas en las que hay unas plantas que sólo tienen flores
estaminadas y otras que únicamente poseen flores pistiladas. Esto da lugar a la existencia
de las comúnmente llamadas plantas «macho» y plantas «hembra». A este tipo pertenecen
la palmera datilera, el pistacho, y el kiwi.

Además, hay algunas especies que no se ubican completamente dentro de uno u otro de los
grupos descritos, como el mango donde en una misma planta existen flores hermafroditas y
estaminadas o como el banano y plátano que presentarse los tres tipos de flores en una
sola planta. Inclusive hay especies como el papayo que son dioicas y hermafroditas a la
vez.

Desde el punto de vista de la fisiología reproductiva, los frutales pueden clasificarse de la


manera siguiente:

1. Plantas autofértiles . Se caracterizan porque el polen producido por un árbol, fertiliza


normalmente los ovarios de las flores de ese árbol o de cualquier otro del mismo cultivar.
La mayoría de los cultivares autofértiles pueden además ser fertilizados por el polen de
otros cultivares de la misma especie. Incluso en algunos casos, como en los cítricos, es
posible que haya también fertilización con el polen de otras especies o géneros.

2. Plantas autoestériles . Son aquellas en las cuales el polen de un árbol de determinado


cultivar no puede fertilizar las flores de ese mismo árbol o de cualquier otro del mismo
cultivar. Se presenta en algunas especies y cultivares de cítricos, en la mayoría de cultivares
de almendros; igualmente con frecuencia variable en ciertos cultivares de manzanos,
perales y paltos. Las causas más comunes de autoesterilidad son: dicogamia, polen no
viable y autoincompatibilidad.

Cuando se presenta este problema, para asegurar la producción comercial se hace necesario
intercalar en la plantación cultivares polinizantes. La eficiencia de los elegidos como tales
va a depender en gran medida de la coincidencia, con el cultivar a polinizar, en el momento
e intensidad de floración, aspectos que pueden ser marcadamente influenciados por factores
climáticos.

Por otro lado, también existen especies o cultivares autoestériles que tienen la capacidad de
desarrollar sus frutos comerciales partenocárpicamente. En este caso ya no será necesario
la instalación de plantas polinizantes.

PARTENOCARPIA
Término que define, de manera general, a un fruto sin semilla.

Existen especies cuyos frutos comerciales son exclusivamente partenocárpicos, como la


piña, el banano y el plátano. En otros, sólo algunos de sus cultivares presentan esta
particularidad, es el caso de 'Washington Navel' en naranjos, 'Thompson Seedless' en vides,
'Esparta' en paltos, etc. También hay frutales en los cuales sus frutos comerciales
normalmente poseen una o varias semillas, pero que eventualmente son capaces de producir
algunos frutos partenocárpicos. Estos, en la mayoría de los casos son más pequeños que los
normales, por ejemplo los llamados «cuaresmeros» en mango o los «dedos» en palto;
algunos, como ciertas manzanas o peras pueden desarrollar hasta alcanzar un tamaño
prácticamente normal.

El desarrollo de un fruto partenocárpico puede tener tres orígenes:


a) Sin polinización ni fecundación. A manera de ejemplo se pueden citar a especies como
el plátano y la piña y cultivares como la lima ácida 'Taití', la naranja 'Washington Navel' la
mandarina 'Satsuma', etc.

b) Con polinización y sin fecundación. Se presenta en algunas peras y manzanas.

c) Con polinización y fecundación, pero con posterior aborto del embrión. Esto ocurre
en algunas paltas y en la vid 'Thompson Seedless'.

COMPORTAMIENTOS FLORALES DE ALGUNAS ESPECIES


FRUTALES

CITRICOS

La mayoría no tienen problemas de floración y cuajado, y por lo tanto pueden manejarse


en lotes de un solo cultivar. Sin embargo, hay ciertos casos de autoesterilidad, que
mayormente pueden tener dos orígenes:

a) Ovulos y/o polen no funcionales. Es el caso del naranjo 'Washington Navel' y la


mandarina 'Satsuma', que tienen el 100 % de su polen estéril y sólo algunos de sus óvulos
pueden ser funcionales; de la lima ácida 'Tahiti' o 'Florida', que por su carácter triploide es
totalmente estéril; de la toronja 'Marsh' que posee el 70 a 90 % de su polen funcional y unos
pocos óvulos fértiles. En todos estos cultivares, los frutos desarrollan
partenocárpicamente y es precisamente característica comercial muy importante de ellos,
la ausencia total de semillas.

b) Autoincompatibilidad. Ocurre en los tangelos 'Orlando' y 'Minneola', los cuales son


además interincompatibles, y también en la mandarina 'Clementina'. En estos casos puede
ser necesario el uso de polinizantes para una adecuada producción de frutos, aún cuando la
'Clementina' en climas suaves y sin mayores variaciones puede llegar a rendir cosechas
aceptables partenocárpicamente, sin polinizantes. Como cultivares recomendables a
interplantar, cuando sea necesario, para los tres casos, se tienen al tangor 'Temple' y la
mandarina 'Dancy'.

PALTO

Las flores se localizan en sobre inflorescencias muy ramificadas que reciben el nombre de
panículas, cada una de las cuales posee de 100 a 500 flores en promedio. El total de flores
de un árbol es muy elevado; en el cultivar Fuerte por ejemplo se calcula que fluctúa entre
0.23 y 1.28 millones, sin embargo sólo 0.01 a 0.05 % alcanzan a ser frutos.

Las panículas pueden terminar en una yema vegetativa que dará lugar a un brote,
originando lo que se conoce como una inflorescencia indeterminada, o puede terminar en
una flor, en cuyo caso no habrá formación de brote en el ápice de la inflorescencia, dando
lugar a una inflorescencia determinada. En todos los cultivares de palto, las flores
individuales son sexualmente perfectas. ( figura 3 ).
Figura 3 . Esquema de una flor de palto

A pesar de ser hermafroditas, las flores se comportan como unisexuales debido al


fenómeno de la dicogamia. Es decir que sus estructuras sexuales femeninas y masculinas
no maduran en forma simultánea dando lugar a que todas y cada una de las flores abran
dos veces, y en cada oportunidad con sólo uno de sus sexos funcional. La primera apertura
es siempre como femenina (esto se conoce como protoginea).

Las aperturas florales ocurren en forma cíclica, de tal manera que en determinado
momento, durante el periodo de floración, todas las flores abiertas de un cultivar estarán
funcionando como femeninas (con sus pistilos receptivos), mientras que en otro momento,
todas las flores abiertas de ese mismo cultivar se encontrarán funcionalmente como
masculinas (con sus estambres emitiendo polen). Estas características peculiares en el
comportamiento floral del palto, se conocen como dicogamia sincrónica o sincronía
dicogámica. De acuerdo a esto, sería prácticamente imposible la autopolinización de las
flores. Según el ciclo de las aperturas, los diversos cultivares se clasifican en dos clases o
grupos: A y B.

Las flores de los árboles pertenecientes al grupo A tienen su primera apertura en la


mañana, cierran al medio día, y en la tarde del día siguiente abren por segunda y última vez.

Las flores de los cultivares de la clase B abren por primera vez en la tarde, cierran en la
noche, y en la mañana del otro día abren como masculinas.

La precisión de las aperturas florales puede sufrir modificaciones debido a variaciones


climáticas. De manera que es posible que se presenten sobreposiciones de las aperturas en
determinados momentos. Al margen de esta posibilidad, que puede ser muy errática, para
asegurar una adecuada polinización, en plantaciones comerciales debe de considerarse
como indispensable intercalar a manera de polinizantes, cultivares que tengan
comportamientos sexuales recíprocos y que floreen en la misma época, así como la
instalación de una o dos colmena de abejas por hectárea.

Entre los principales cultivares comerciales, que se reportan como del grupo A se tienen a
los siguientes: 'Hass', 'Collinred', 'Choquette', 'Gottfried' y 'Villacampa'. Dentro del grupo B
se pueden mencionar a 'Fuerte', 'Nabal', 'Zutano', ‘Bacon’, 'La Molina I' e 'Itzamna'.

MANGO

Como sucede en los paltos, las flores se localizan en panículas que son ramificadas y
contienen entre 300 y 7,000 flores cada una. Las inflorescencias nacen normalmente de las
yemas terminales en brotes de un año. Cuando estas yemas son destruidas o han producido
panículas donde por alguna razón no se ha formado fruto, suelen crecer otras panículas a
partir de las yemas laterales más cercanas al ápice y constituyen lo que se llama la
«segunda floración». Inclusive algunos cultivares, entre los cuales se hallan el `Haden' y el
conocido localmente con el nombre de `Jafru' (o `Cafro'), pueden formar panículas a partir
de yemas axilares más bajas si el brote es podado. Esto debe tenerse presente si en algún
momento se desea retrasar la floración.

Las inflorescencias del mango poseen dos tipos de flores: perfectas y estaminadas, (ver
figura 4 ). La proporción de ellas varía entre cultivares y también de un año a otro. Como
regla general las flores perfectas constituyen normalmente sólo una pequeña parte del total.
Sin embargo no existe correlación entre el número o porcentaje de flores perfectas y el
número de frutos producidos. Esto es debido, en parte, a que una porción variable pero
bastante alta de flores perfectas no llegan a alcanzar una completa maduración de sus
órganos. Otro factor importante en esta falta de correlación, es la baja eficiencia en la
polinización. Al respecto, se ha determinado que la liberación del polen ocurre
principalmente entre 8 y 10 a.m. La viabilidad del polen es de 48 horas. Por su parte el
estigma está receptivo unas 18 horas antes de la apertura floral y permanece en aquel estado
hasta 48 horas después de la antesis.

En muchos cultivares, como el 'Haden' por ejemplo, las flores perfectas se ubican en su
mayoría en el ápice de las inflorescencias y pueden ser polinizadas por el polen de los
estambres de la misma flor o por el polen de otras flores.

Figura 4 . Flores del mango.


OLIVO

Las flores del olivo, que se agrupan en panículas axilares o terminales y nacen sobre ramas
de un año, se considera que son hermafroditas. Sin embargo básicamente son masculinas
con distintos grados de desarrollo del pistilo, por eso algunos botánicos clasifican esta
especie como Andromonoica. Las diferencias en el desarrollo de la parte femenina de las
flores es una característica que varía según los cultivares y algunas condiciones del medio
ambiente como los riegos y la fertilización. No obstante ser el olivo una especie resistente a
la sequía, condiciones extremas de esta induce la masculinización de las flores. Además son
bastante susceptibles al aborto de los ovarios cuando durante la floración se presentan
vientos secos y altas temperaturas.

El Olivo es una especie extremadamente alternante y parcialmente autocompatible. La


polinización es anemófila y se recomienda siempre la instalación de polinizantes.

PAPAYO

Esta especie tiende a ser dioica, pero lo es en forma incompleta. Es dioica y hermafrodita
a la vez, ya que hay plantas masculinas, femeninas y hermafroditas.

Las flores de las plantas masculinas son estaminadas y el pistilo es rudimentario. Se


forman en racimos ubicados sobre largos pedúnculos. Algunas veces, las flores de estas
«plantas macho» producen pistilos largos y llegan a cuajar frutos que son pequeños,
piriformes y cuelgan del extremo del largo pedúnculo.

Las flores de las plantas femeninas carecen de estambres normales, son relativamente
grandes y se forman en las axilas de las hojas, donde nacen pegados al tallo y por lo general
están solitarias, (algunas veces en pequeños racimos). El fruto que se forma a partir de estas
flores es esférico o ligeramente oblongo.

Las plantas hermafroditas, fundamentalmente poseen flores perfectas, cierta proporción


de las cuales presentan diversas aberraciones en sus partes florales. Estas variaciones en la
naturaleza de las flores determina también una variación en la forma de los frutos.

En la figura 5 pueden apreciarse los tres tipos de flores a los que se acaba de hacer
referencia.

La fructificación de las «plantas macho» y los cambios o malformaciones de las flores y


frutos de las plantas hermafroditas, aparentemente están relacionados con la presencia de
bajas temperaturas y días cortos.

En plantaciones comerciales, se recomienda dejar un 5 % de plantas con flores masculinas


para asegurar la adecuada polinización.
Figura 5. Tres tipos típicos de flores de papayo.

A: Masculina B: Hermafrodita elongata C: Hermafrodita pentandra D: Femenina

PECANO

Esta especie es monoica y su hábito de floración tiene gran similitud con el del nogal.

Las flores masculinas se ubican sobre inflorescencias que nacen de yemas axilares que
son yemas compuestas localizadas en ramas que crecieron la campaña anterior, es decir de
un año de edad. En cada nudo de este tallo existen normalmente más de una de estas
yemas. Dentro de cada una de ellas hay un total de cuatro ápices florales y uno vegetativo.

A partir de cada yema o ápice floral de la yema compuesta, desarrollan tres inflorescencias
conocidas como amentos. Cada uno de los cuales se inserta en un pequeño eje que se
forma como consecuencia del crecimiento global (aunque bastante limitado) de la yema
compuesta. El ápice vegetativo de la yema mixta empieza a desarrollarse y crecer, pero
rápidamente aborta y sólo continúan desarrollando las inflorescencias masculinas.

El caso totalmente opuesto ocurre en la yema localizada apicalmente sobre los mismos
brotes (que normalmente es la yema axilar más distal que deviene en apical ). Acá, son
todas las partes florales de la yema compuesta las que abortan y por el contrario es el
ápice vegetativo el que desarrolla y crece. Previamente, poco antes del brotamiento y
sobre el meristema apical de este ápice, tendrá lugar la diferenciación floral que culminará
después, en la misma campaña, con el crecimiento y desarrollo de las flores femeninas o
pistiladas en el ápice del brote nuevo. Estas se agrupan generalmente en número de tres y
cada una de ellas está rodeada por un involucro (ver figura 6).

La polinización y fecundación tiene lugar por acción del viento, que puede llevar el
polen, que es producido en grandes cantidades, hasta a un kilómetro de distancia.

Figura 6. Ubicación de las flores en el pecano.

A: Rama crecida la campaña anterior, en descanso. Antes del brotamiento.


B: El mismo brote después del crecimiento de primavera.

Los árboles de pecano presentan heterodicogamia, es decir que hay cultivares que
presentan protoandría y otros que, como los paltos, son protogíneos. Cuando un huerto
posee un buen número de árboles, aunque sea de un mismo cultivar, es posible que exista
suficiente superposición en la liberación del polen y la receptividad de los pistilos entre las
distintas plantas, como para lograr una fecundación y cosecha normales. Sin embargo, para
una mayor seguridad al respecto, es recomendable interplantar siempre algunos otros
cultivares a manera de polinizantes.

HIGUERA

La higuera desarrolla una inflorescencia completa, compuesta por gran número de flores
ubicadas en la pared interna de un receptáculo, o eje floral, hueco y carnoso, al cual se
adhiere el receptáculo de cada flor individual.
El fruto comercial es un fruto múltiple o sinconio, constituido principalmente por el
receptáculo o eje floral desarrollado y los tejidos de las flores. Cada flor individual se
transforma en un pequeño aquenio.

Según se observa en la figura 7, los sinconios desarrollan mayormente en las ramas que
crecen el mismo año, dando lugar a lo que se conoce como frutos de segunda cosecha o
cosecha principal. Pueden así mismo formarse a partir de las yemas axilares más próximas
al ápice, en ramas del año anterior; en esta caso los frutos reciben la denominación de
brevas, son los primeros en aparecer y desarrollan al empezar la campaña, constituyendo la
llamada primera cosecha.

Figura 7. Fructificación de la higuera.

A: Rama crecida la campaña anterior. Antes del brotamiento


B: La misma rama después del brotamiento.

Las flores de un gran número de cultivares comerciales, agrupados bajo la denominación de


higueras comunes no producen polen y sus frutos desarrollan partenocárpicamente, sin el
estímulo de la polinización.

Los árboles de otros cultivares no desarrollan sus frutos sin previa polinización. Este
proceso es conocido como caprificación y es realizado por una pequeña avispita llamada
Blastophaga. El movimiento del insecto en el interior del receptáculo le permite ir dejando
el polen sobre el estigma de las flores. Los cultivares comerciales que necesitan de la
caprificación son conocidos como higos tipo Smyrna (todas sus flores son femeninas), los
cuales en efecto desarrollarán sólo después de la polinización de sus flores y la formación
de semillas. Algunas veces, sólo muy pocas brevas pueden desarrollar sin este estímulo.
Hay otro grupo de cultivares, los del tipo San Pedro, que combina las características de los
tipos común y Esmyrna. Los frutos de la primera cosecha o brevas son partenocárpicos,
mientras que los higos de la segunda cosecha no terminan su desarrollo y caen, a menos
que hayan sido previamente polinizados y fecundados, tal como ocurre con los del tipo
Esmyrna.

CHIRIMOYO

Las flores suelen ser solitarias, algunas veces se presentan en grupos de 2 a 3, y nacen en
los brotes jóvenes de un año y aparentemente también sobre brotes o ramas de mayor edad.
Las yemas laterales, están totalmente cubiertas por la base del peciolo de las hojas, y no
pueden brotar hasta que estas caigan.

Cada flor (figura 8), de aproximadamente 2.5 cm de largo, es hermafrodita y posee seis
pétalos, de los cuales tres son carnosos, visibles y cerrados hasta su ápice, los otros tres son
internos y están reducidos a escamas.

Figura 8. Estructura de la flor del chirimoyo

El fruto es un agregado o sincarpio, formado por la fusión de los pistilos y el receptáculo


floral.

Esta especie presenta dicogamia y protoginea. Los estigmas son receptivos más o menos
24 horas antes que el polen se libere, y cuando esto último ocurre, los estigmas ya no son
receptivos. Como consecuencia de lo anterior, las posibilidades de autofecundación son
bastante limitadas. Esta limitación es acentuada por la particular constitución y estructura
de sus flores que determina que la gran mayoría de insectos no sean agentes polinizadores
eficaces y que aún la polinización por el viento sea muy difícil. Por ello es que en muchos
países se recurre a la polinización manual de las flores como la única alternativa para
poder lograr cosechas comerciales. Sin embargo en el Perú, cuando el cultivo se conduce en
los valles interandinos y otros lugares de la sierra, se obtienen regulares rendimientos sin
hacer uso de la polinización manual.
MANZANO

Las flores son hermafroditas, poseen estambres y óvulos convenientemente desarrollados


aunque ocasionalmente pueden haber algunos pistilos defectuosos o también una porción
de polen puede no ser viable (ver figura 9).

Es frecuente la presencia de autofertilidad y autoesterilidad total o parcial. En algunos


casos la autoesterilidad está asociada a una desviación del número diploide normal de
cromosomas (2n = 34), tal como ocurre entre otros, con los cultivares Mutsu y Gravenstein
que son triploides y, por lo tanto, su polen es infértil.

El grado de autofertilidad es una característica de cada cultivar, pero que puede variar
considerablemente con la edad y vigor de las plantas así como con el año, la localidad, etc.
El manzano 'Jonathan' por ejemplo, en algunos lugares de Estados Unidos y Australia,
cuando los suelos tienen un contenido mediano de nutrientes, se comporta como autofértil,
mientras que en suelos más ricos se manifiesta como autoestéril.

Figura 9. Esquema de una flor de manzano.

La mayor parte de los cultivares que se conducen en plantaciones comerciales en el país, no


han sido aún convenientemente estudiados en este aspecto. Sin embargo, se tienen
evidencias que algunos, como 'Delicious de Viscas', 'San Antonio' y 'Pero Manzano', son
aparentemente autofértiles. Otras, como 'Winter Banana' y 'Sipa C-6', lo serían sólo en
forma parcial.

En las plantaciones comerciales es recomendable la instalación de polinizantes y de una


colmena de abejas por hectárea, incluso en aquellas donde el cultivar es probadamente
autofértil. Los cultivares que se usen como polinizantes deben ser cuidadosamente
seleccionados para cada localidad y aún para cada plantación en particular.
III. FACTORES DEL MEDIO AMBIENTE
Los factores del medio ambiente, constituidos por el clima y el suelo, conjuntamente con
las labores culturales constituyen los llamados factores externos de la producción.

Cada especie frutal, y aún en algunos casos cada cultivar, presenta determinadas
exigencias de clima y suelo en las que puede desarrollar y producir mejor. Sin embargo, en
la práctica, no siempre se encuentran todas ellas reunidas en el lugar de la plantación. Las
posibilidades de éxito serán mayores cuanto mayor sea el número de condiciones
favorables de clima y suelo existentes. Esto determina un concepto conocido como «factor
al mínimo» según el cual, el factor limitante en la producción es aquel que se manifiesta
como menos favorable.

CLIMA
Se puede definir como la influencia media que ejerce una serie de factores como
temperatura, luz, humedad, vientos, etc., para determinar condiciones especiales en una
zona o localidad.

Las posibilidades de una modificación del clima por parte del hombre son sumamente
restringidas. Puede llegar a atenuarse algunos de los factores climáticos, pero con grandes
esfuerzos y altos costos económicos, y no siempre se obtiene el éxito esperado.

TEMPERATURA

Es la medida sensible del calor y del frío. El calor es una forma de energía que se origina al
ser reflejada, en ondas largas, la energía lumínica que llega del sol en ondas cortas.

La temperatura juega un papel importante en todos los procesos químicos, físicos y


biológicos, puesto que su intensidad guarda relación directa con la velocidad de las
reacciones. En algunas especies frutales tropicales y subtropicales, se estima que el
crecimiento a una temperatura de 20°C puede ser mucho más del doble que el registrado a
10°C. Así mismo, la intensidad de la fotosíntesis puede duplicarse por cada aumento de
temperatura de 10°C ( dentro del margen de 10 a 25°C ), siempre y cuando el aporte de
CO2 y la intensidad de la luz sean óptimos.

En una misma zona geográfica, las temperaturas pueden sufrir modificaciones por una serie
de influencias; así por ejemplo, las temperaturas medias disminuyen con el aumento de la
altitud (aproximadamente 0.6°C por cada 100 metros de elevación sobre el nivel del mar).

Los valores de temperatura, se expresan en los términos siguientes:

a) Temperaturas máximas y mínimas. Es decir los valores extremos que, en


condiciones normales, pueden soportar los frutales sin sufrir daños apreciables.
b) Temperatura óptima. Este concepto es bastante relativo, pues no puede establecerse
una temperatura óptima para cada frutal. Lo que realmente existen son temperaturas
óptimas para cada estado de su desarrollo. Un ejemplo que es bastante ilustrativo es el de
los caducifolios, en los cuales el frío es necesario para romper la dormancia de las yemas,
mientras que en otras etapas de su ciclo anual es perjudicial. Así mismo en los cítricos, las
temperaturas óptimas para el crecimiento y floración son relativamente elevadas, sin
embargo para el proceso de decoloración de los frutos, aquellas son mucho más bajas.

Existen algunos otros conceptos importantes con relación a la temperatura, entre los que
pueden mencionarse los siguientes:

1. Daños por frío

Se presentan tanto en siempreverdes como en caducifolios y están relacionados con las


temperaturas mínimas invernales y la presencia de heladas. Los daños directos más grandes
son aquellos que significan muerte de los tejidos por formación de hielo dentro de ellos.

En los daños por congelación, el hielo tiende a formarse inicialmente en los espacios
intercelulares, luego el agua de los protoplastos puede ser congelada o absorbida por el
hielo intercelular.

En los tejidos que tienen algo de resistencia a las heladas, ocurre la segunda posibilidad
anotada y el agua congelada es pura, pues las sustancias disueltas permanecen dentro de las
células, en las que la solución se hace cada vez más concentrada. La célula va reduciendo
su tamaño y distorsionándose por la presión externa del hielo. Esto puede no causar daño, y
el tejido será capaz de recuperar después su normalidad total.

Si el descenso de la temperatura es muy rápido, el hielo se formará dentro de las células y


esto producirá la muerte del tejido. En los tejidos tiernos, el agua celular es rápidamente
congelada.

La temperatura del aire no siempre es una medida exacta de la temperatura de los órganos
de la planta expuestos a la intemperie. En una noche despejada y sin viento, la temperatura
real de las plantas es mucho más baja que la del aire. Por eso los órganos tiernos, como
flores y frutos recién formados, pueden helarse hasta morir aún cuando la temperatura del
aire a pocos centímetros de ellos esté por encima del punto de congelación.

La resistencia al frío en una característica que varía según diversos factores como especie,
cultivar, edad de las plantas, grado de actividad, órganos presentes y grado de desarrollo de
estos, estado nutricional, etc.

En frutales siempreverdes la presencia de heladas en cualquier momento ocasiona daños


significativos. Temperaturas inclusive por encima del punto de congelación, pueden ser
perjudiciales para muchos frutales tropicales, en los que pueden presentarse los llamados
«daños por enfriamiento».
En frutales caducifolios, cuando los árboles están en reposo, normalmente en los meses de
invierno, la sensibilidad de los órganos es variada, pero serán más sensibles a la acción del
frío cuanto más incompleto sea el reposo. En esta época, en climas templados, los daños
pueden incluir destrucción de yemas y de tejidos conductores en las ramas jóvenes y en la
unión del injerto, destrucción de raíces, etc. Las raíces no son tan resistentes al frío como
algunas otras partes de la planta; pero en compensación a ello, el suelo se enfría más
lentamente que el aire y además hay una cierta cantidad de calor que asciende desde el
subsuelo.

Cuando los caducifolios están en actividad, los daños por heladas casi siempre son graves.
Los diversos órganos difieren entre sí en cuanto a su resistencia al frío. En manzanos por
ejemplo, los frutos jóvenes son más sensibles que las flores a los daños por frío. Para la
mayor parte de las especies caducas, los límites de resistencia durante el periodo de
floración se ubican, aproximadamente y en promedio, dentro de los siguientes valores: -5°C
en la fase previa a la aparición de los pétalos, -3°C en la aparición de los pétalos, -1.5°C en
plena floración.

En el Perú, la mayoría de las zonas frutícolas de importancia actual no tienen el problema


de la presencia de heladas. Estas sólo ocurren en algunos lugares de la sierra y en
determinadas épocas del año (junio y julio mayormente), aunque no con la intensidad con
que se registran en otros lugares del mundo.

2. Requerimientos de frío

Término empleado en frutales caducifolios. Está referido al número teórico de «unidades


de frío» u “horas frío” que requeriría acumular determinado cultivar para romper la
dormancia de sus yemas y puedan estas después brotar y continuar con todos los procesos
fisiológicos que son propios del normal desarrollo de su ciclo anual.

Hay variación en las demandas de unidades de frío entre los distintos cultivares de las
especies caducas. En este sentido, pueden considerarse las siguientes categorías:

Muy exigentes. Sus necesidades de horas frío se ubican entre 800 a 1,000 o más.
Medianamente exigentes. Requieren entre 400 y 600 unidades de frío.
Poco exigentes. Cuyos requerimientos son menores de 400 unidades de frío.

La temperatura mínima límite, a partir de la cual el frutal empezaría a acumular unidades de


frío, no está aún bien definida. Muchos investigadores, sobre todo para cultivares de altos
requerimientos de frío, consideran que 7.2°C es el óptimo para una satisfacción eficiente de
las necesidades de frío. Sin embargo, otros estudios indican que para cultivares poco
exigentes en frío, temperaturas unos cinco grados más elevadas pueden ser igualmente
efectivas.

En el Perú, la mayoría de las zonas en las cuales se conducen plantaciones comerciales de


caducifolios, a excepción de algunos lugares de la sierra, no presentan condiciones de
temperaturas suficientemente bajas y constantes, por periodos más o menos considerables,
como para permitir la acumulación de unidades de frío según el esquema rígido al que se
hizo referencia. No obstante, muchas especies y cultivares de caducifolios considerados
como de bajos requerimientos de frío, son cultivados con relativo éxito en nuestro medio.
Posiblemente existen otros factores ambientales que aunados a ciertas prácticas culturales
especiales, como la aplicación de defoliantes, podrían reducir la cantidad de frío necesario.
Igualmente es posible que el reposo de las yemas, en las condiciones climáticas del Perú,
no alcance la categoría de una verdadera dormancia.

3. Requerimientos de calor

Este concepto es aplicable tanto a frutales caducifolios como siempreverdes. Se refiere a


que cada una de las diversas etapas, en el desarrollo de una planta o en el transcurso de su
ciclo anual, necesita cierto número de grados de temperatura acumulados por encima de un
mínimo predeterminado. Estos grados acumulados se conocen como «unidades térmicas».

Para el cálculo de la cantidad de estas unidades, se hace necesario conocer la temperatura


promedio diaria y la temperatura base. Esta última es establecida previamente, y con
valores por encima de ella la planta avanza hacia la culminación del periodo de su vida en
estudio.

La diferencia entre la temperatura promedio diaria y la temperatura base indica el número


de unidades térmicas acumuladas. En el cálculo no se consideran unidades térmicas
negativas.

ASPECTOS DE TEMPERATURA EN ALGUNOS FRUTALES CADUCIFOLIOS

MANZANO

a) Resistencia al frío

En términos generales, se reporta que los árboles en dormancia pueden soportar


temperaturas hasta de -34°C sin sufrir grandes daños; mientras que las raíces son afectadas
a -7°C y mueren a -12°C.

En los árboles en actividad, sus órganos son dañados a temperaturas mucho más elevadas.
Las yemas o botones florales aún cerrados e iniciando el color plateado, pueden soportar
sin mayores problemas hasta -3.9°C, y las flores ya abiertas hasta -2.2°C. Los frutos
jóvenes sólo pueden soportar hasta -1.6°C, y las raíces pueden morir, en algunos casos,
inclusive a temperaturas de -3°C.

b) Requerimientos de frío

Las yemas florales tienen un requerimiento de frío ligeramente menor que las yemas
foliares. Cuando no se completan las unidades necesarias no habrá brotamiento ni floración,
o ambos serán irregulares y reducidos.

Entre los cultivares americanos más importantes que poseen bajos requerimientos de frío,
se encuentran los siguientes: 'Winter Banana', 'Pettingil', 'Early Mc Intosh'. Como
moderadamente exigentes se clasifican a 'Golden Delicious', 'Red Delicious', 'Gravenstein',
'Yellow Newton', 'Bellflower', etc. Por último, como muy exigentes en frío se tienen a 'Mc
Intosh', 'Macoun Red', 'Red Canadá', etc.

En el Perú, entre los principales cultivares comerciales considerados de bajos


requerimientos de frío, están los siguientes: 'Delicious de Viscas' ('Viscas' o 'Delicia'),
'Pachacamac' (o 'Sipa C-6'), 'Anna', 'Winter Banana', 'Hoover Rayada', 'Hoover Roja', 'San
Antonio', etc.

c) Otros aspectos relacionados con temperatura.

Existe influencia de la temperatura sobre la coloración de las manzanas. La


descomposición de la clorofila es más acelerada en climas fríos; lo cual es evidente en los
valles interandinos del Perú, donde, debido a que las noches son bastante frescas, los frutos
de cáscara roja colorean mucho mejor que en la costa.

En algunos casos, el fenómeno de la «manzana helada» puede ser consecuencia de la


incidencia de altas temperaturas sobre los frutos que estimularían la formación de azúcares
en las células, con lo cual aumentarían su presión osmótica y tomarían agua de otros
tejidos, parte de la cual pasaría posteriormente a ocupar los espacios intercelulares.

El proceso de fecundación del ovario de las flores es también afectado por la temperatura.
La germinación del grano de polen y el crecimiento del tubo polínico ocurren más
rápidamente con temperaturas de 22 a 28°C. La germinación disminuye a los 30°C y se
anula por debajo de 5°C.

Hay así mismo cierta influencia de la temperatura en la forma de los frutos. Cuando las
temperaturas son frías durante las tres a cuatro semanas después de la floración, los frutos
tienden a ser más oblongos.

DURAZNEROS

a) Resistencia al frío

La madera de los tallos, en los árboles en dormancia de muchos cultivares, puede sufrir
severos daños a temperaturas de -26°C. Por su parte, las yemas florales dormantes pueden
soportar fríos invernales de hasta -25 a -30°C. Sin embargo, después que las yemas
florales han hinchado, un gran porcentaje de ellas puede morir a -23°C si antes hubieron 5 a
7 días con temperaturas relativamente elevadas, pero pueden sobrevivir a -29°C, o menos,
si antes se registraron días fríos.

En estados iniciales del brotamiento, antes de la apertura de los pétalos, las yemas pueden
soportar hasta -5°C, y en plena floración las flores son dañadas a -3.9°C.

Los frutos en sus primeros estados de desarrollo, aproximadamente hasta que estos
alcanzan un diámetro de 1.25 cm , son más sensibles al frío que las flores abiertas.
b) Requerimientos de frío

Los requerimientos de frío de las yemas vegetativas son más elevados que los de las yemas
florales, y cuando no son debidamente satisfechos, ocurre la abscisión de estas estructuras.

Entre los cultivares comerciales más importantes que se reportan como muy exigentes en
frío se encuentran entre otros los siguientes: 'Elberta', 'Dixired', 'Springold' 'Redhaven',
'Ranger', 'Redglobe' y 'Garnet Beauty'.

Como medianamente exigentes en frío se pueden considerar a ciertos cultivares


conocidos entre nosotros como 'Amarillo Moqueguano', 'Huaycot' y 'Blanquillo', cuyos
mejores rendimientos, sobre todo de los dos primeros, se obtienen en las zonas de
quebradas o valles interandinos.

Existen así mismo, cultivares de bajos requerimientos de frío, muchos de los cuales
tienen gran importancia en nuestro país sobre todo en la zona de la costa. Destacan entre
estos: 'Flordared', 'Flordabell', 'Sharpe', 'Amarillo La Molina' (conocido también como
'Florida 39'), 'Reliquia' y la nectarina 'Sunred', además del 'Okinawa' que es utilizado como
portainjerto.

ASPECTOS DE TEMPERATURA EN ALGUNOS FRUTALES SIEMPREVERDES

CITRICOS

Según las especies y cultivares, existen variaciones en las exigencias de temperatura, o en


los comportamientos de los árboles en condiciones extremas de este factor climático. No
obstante, de manera general, es posible anotar los siguientes datos de importancia.

a) Los cítricos pueden, en promedio, resistir temperaturas mínimas de aproximadamente -


2°C sin presentar daños apreciables. Algunas especies pueden incluso soportar hasta -8°C,
o aún temperaturas más bajas como en caso del naranjo trifoliado y algunos de sus
híbridos.

Entre las especies comerciales más importantes, el ordenamiento de menos a más


resistentes al frío es el siguiente:

1. Limonero sutil
2. Toronja
3. Naranjo dulce
4. Mandarina
5. Kumquat

En cuanto a los portainjertos, el más resistente al frío es el naranjo trifoliado, seguido por la
naranja agria y el limón rugoso
b) En lo que concierne a las temperaturas máximas, los árboles cítricos pueden resistir
hasta 50°C sin vientos secos, con alta humedad relativa y alto contenido de humedad del
suelo.

c) Las temperaturas óptimas se ubican entre 30 y 38°C para el crecimiento y floración, y


entre 20 y 13°C para la maduración de los frutos.

d) El periodo F-M (floración-maduración), se acorta en zonas cálidas. Por ejemplo en el


naranjo 'Valencia' es de 9 a 10 meses en los climas tropicales, mientras que en zonas con
cierto frío puede llegar a 15 o 16 meses.

e) El periodo de floración se alarga cuando las temperaturas medias anuales son altas.

f) Las temperaturas más o menos uniformes y altas en los meses finales de la maduración,
tienden a retrasar en forma sensible la decoloración de los frutos.

PALTO

a) La resistencia a temperaturas mínimas es un factor que varía con la raza hortícola a la


que pertenecen los diversos cultivares de esta especie.

Raza antillana. Los árboles adultos mueren a temperaturas de alrededor de -4°C y son
seriamente afectados a -2.5°C.

Raza guatemalteca. Los árboles mueren aproximadamente a -6°C y son fuertemente


dañados a -3°C.

Raza mejicana. La muerte se presenta a -9°C y son gravemente perjudicados a -5.5°C.

b) Las temperaturas frías o los cambios de temperatura durante la época de floración


pueden afectar el particular comportamiento dicogámico de las flores.

c) Aparentemente no hay un efecto de la temperatura sobre el sabor de los frutos.

d) El periodo F-M se acorta a medida que la temperatura media es mayor.

MANGO

a) Son muy susceptibles al frío. Temperaturas próximas a 0°C causan fuertes daños a los
brotes y estancan el crecimiento. Temperaturas inferiores a la anotada afectan a plantas
adultas y matan a las jóvenes.

b) Algunos cultivares parecen mejorar la coloración de sus frutos en climas más cálidos.

c) El periodo F-M, al igual que lo anotado para cítricos y paltos, se acorta con temperaturas
promedio elevadas.
PAPAYO

a) Prospera mejor en regiones con temperaturas medias altas, sin variaciones durante el
año. En estas condiciones, propias de los climas tropicales, las plantas crecen y entran en
producción en corto tiempo.

b) Su cultivo en zonas no tropicales trae como consecuencia un desarrollo más lento y una
reducción en la producción total de frutos.

c) En lugares con temperaturas algo frías, los frutos son pequeños y de pobre calidad
interna, que se manifiesta por un sabor insípido, debido a la falta de una adecuada
translocación de los azúcares. Igualmente, en estas condiciones, las plantas hermafroditas
tienden a tener polen estéril y se producen, además, malformaciones en las flores y en los
frutos.

d) Temperaturas cercanas a 0°C causan daños severos a las plantas, aunque no


necesariamente lleguen a matarlas. A -4°C las plantas mueren.

PIÑA

a) Es muy susceptible a las heladas. Las plantas mueren a temperaturas inferiores a -1°C.

b) Temperaturas entre 10 y 16°C pueden detener su desarrollo.

c) El rango aproximado de temperaturas más convenientes para su cultivo es de 18 a 27°C.

Para la maduración del fruto, la temperatura promedio óptima es de 20°C. Cuando es más
baja, hay una disminución del tamaño y un incremento de la acidez; mientras que con
temperaturas superiores a la anotada, disminuyen tanto la acidez como los azúcares y, en
consecuencia, el sabor de los frutos se torna insípido.

LUZ

Para el caso de los árboles frutales, de los procesos fisiológicos influenciados por la luz, ,
tiene una mayor importancia relativa el relacionado con la fotosíntesis.

Los compuestos de Carbono que derivan del azúcar sintetizada en los cloroplastos de las
hojas, constituyen más del 90 % del peso seco de los árboles. La glucosa y la fructosa
aparentemente son los primeros azúcares en ser sintetizados durante la fotosíntesis, y luego
se transforman rápidamente en sacarosa y almidón. Este último compuesto es importante
porque es la principal forma en que los hidratos de carbono que no son empleados en el
crecimiento y la respiración, se acumulan en los leucoplastos.

En lo que respecta al fotoperiodismo, la mayoría de los frutales, que son especies leñosas
perennes, son neutros; es decir que florean dentro de rangos amplios de fotoperiodo y, por
consiguiente, este no constituye un factor limitante.
A pesar que la fotosíntesis es el proceso más importante, no existe un control eficiente
sobre ella, y en la mayoría de los casos hay que adaptarse a la cantidad y calidad de la
radiación natural que incide en la zona. Parcialmente puede tratarse de manejar y controlar
la radiación. Muchas operaciones culturales, como las siguientes, están dirigidas, directa o
indirectamente, hacia este objetivo.

1. Orientación de las hileras de la plantación. Lo óptimo es la orientación E-O para


evitar el sombreamiento entre ellas.

2. Sistemas de conducción. Se refiere a la forma individual que se da a cada planta, lo


cual se logra con la aplicación de la poda de formación y, en algunos casos, con el uso
adicional de ciertas estructuras de soporte. La conducción sobre espalderas o en palmeta
permite una mayor exposición del área foliar al disminuirse el autosombreamiento. Por lo
general pueden ser conducidos así, entre otros, frutales tan importantes como la vid y el
maracuyá en el primer caso, y el manzano y el peral en el segundo.

3. Raleo de frutos. Se realiza para regular el número de frutos a fin de lograr, entre otras
cosas, una mejor utilización de la capacidad fotosintética de la planta.

4. Podas. A través de su aplicación se permite el ingreso directo de la luz a las hojas y


frutos que se encuentran en el interior de la copa. Son importantes en este sentido, tanto la
poda de formación, que da lugar a la estructura arquitectónica de la planta, como las podas
de limpieza y cultural.

5. Densidad de plantación. La tendencia moderna en fruticultura es hacia el uso de altas


densidades que permiten la utilización más eficiente de la radiación, expresada en altos
rendimientos por unidad de superficie. Bajo estas condiciones, la producción individual de
cada planta es relativamente reducida debido a la gran competencia (por la radiación
misma, por nutrientes y por agua), que genera el elevado número de plantas.

6. Uso de estructuras especiales. Referido principalmente al empleo de invernaderos y


tinglados en la fase de propagación de los frutales.

LLUVIA

Las lluvias tienen gran influencia como fuente de aprovisionamiento de la humedad


necesaria para el cultivo de frutales, sobre todo en zonas sujetas a la presencia significativa
de precipitaciones pluviales. La intensidad de este fenómeno y su periodicidad a través del
año, determinan finalmente que se haga uso o no de la irrigación. En relación con la
intervención de las lluvias como factor activo en el manejo de los riegos se pueden darse
los siguientes casos:

a) Riego supeditado en forma total al uso del agua de los ríos, lagunas, pozos, etc. Es la
situación típica de la costa peruana, donde la ausencia de precipitaciones (salvo parte de la
costa norte), que puedan tomarse en cuenta desde el punto de vista agrícola, trae como
consecuencia que se tenga que recurrir a la irrigación, utilizando sobre todo el agua de los
ríos complementado en muchos casos con abastecimientos de lagunas y manantiales e
inclusive con agua del subsuelo.

b) Riegos supeditados exclusivamente al agua de las lluvias. Las plantaciones sujetas a


este sistema están localizadas en las regiones donde existen precipitaciones pluviales más o
menos bien distribuidas todo el año. En el Perú, es el caso de la selva baja que corresponde
al trópico húmedo. También se presenta en muchos huertos ubicados en la selva alta
(trópico seco), a pesar que las estaciones de lluvia son seguidas de estaciones secas, en
forma alternada y sucesiva.

c) Un tercer caso combina los dos métodos. Es un sistema mixto, es decir utiliza las lluvias
durante unos meses del año y luego, durante la estación seca, se recurre a la irrigación. Este
sistema es propio de zonas con lluvias insuficientes o con estaciones pluviales cortas. En
nuestro país es lo que ocurre en la zona de la sierra, y sería también lo más recomendable
para la selva alta donde, normalmente, de mayo a agosto no hay lluvias.

ALGUNOS ASPECTOS POSITIVOS DE LA LLUVIA SOBRE LOS FRUTALES

1. Decrecen o son nulas las necesidades de irrigación. Esto baja los costos en agua,
infraestructura de riego y mano de obra.

2. Disminuyen los problemas entomológicos, pues la lluvia realiza una acción de lavado de
diversos estados de los insectos: huevos, larvas e inclusive adultos.

ALGUNOS ASPECTOS NEGATIVOS DE LA LLUVIA SOBRE LOS FRUTALES

Se derivan de la absoluta falta de control que hay sobre la intensidad o volumen de agua
que la precipitación aporta.

1. Se incrementan los problemas fitopatológicos.

2. Se intensifica el lavado de fertilizantes del suelo.

3. Aumentan los problemas de drenaje.

4. Se agravan los problemas de erosión, sobre todo en terrenos desnudos y con pendiente
pronunciada.

5. Impide la acción de insectos polinizadores.

6. Arrastra el polen y diluye las secreciones estigmáticas.

7. Cuando es insuficiente, pueden haber pérdidas de la producción, las cuales se acentúan a


medida que más se dependa de la lluvia como fuente de agua.
VIENTOS

También ejercen una marcada influencia sobre la productividad de los frutales. En la costa
peruana los vientos predominantes son los del Sur-Oeste y soplan más fuerte en las tardes.
La magnitud de los efectos de los vientos depende de tres factores: intensidad, temperatura
y humedad.

ALGUNAS INFLUENCIAS DE LOS VIENTOS SOBRE LOS FRUTALES

1. Vientos fuertes pueden desequilibrar la copa por inclinación de las plantas.

2. Incrementan la transpiración.

3. Desecan los estigmas y el polen. Esto ocurre sobre todo con vientos secos y cálidos,
aunque no sean muy fuertes.

4. Interfieren con la acción de los insectos polinizadores.

5. Pueden ocasionar caída de flores y frutos.

6. Las ramas de los árboles pueden quebrarse y en ciertos casos, sobre todo en especies
con sistemas radiculares poco profundos como el papayo y el plátano, pueden causar la
caída de las plantas enteras.

Un método para atenuar los efectos de los vientos es el empleo de las barreras
rompevientos que de preferencia deben ser instaladas antes de realizar la plantación.

Las plantas usadas como barrera rompevientos deben de estar ubicadas más o menos a diez
metros de la plantación, y se establecerá una barrera cada 200 metros, aproximadamente.
Muchas especies forestales pueden utilizarse como rompevientos, y la más empleada en el
Perú, es la casuarina. Sin embargo cualquiera sea la que se determine instalar, es preciso
que reúna los siguientes requisitos:

a) Crecimiento vertical.
b) Rápido desarrollo.
c) Follaje denso.
d) No albergar plagas ni enfermedades comunes al frutal de la plantación.

SUELO

Dentro de las múltiples características de este componente del medio ambiente, que pueden
estudiarse en relación con los frutales, merecen especial atención las siguientes:

1. Aspectos físicos: contenido de materia orgánica, textura, drenaje, profundidad,


aireación.

2. Aspectos químicos: pH, salinidad.


Algunos rangos de estos factores, que pueden considerarse beneficiosos, son comunes a
todas las especies frutales. Es el caso del contenido elevado de materia orgánica (que
mejora las condiciones de estructura del suelo, libera lentamente los nutrientes y mejora la
retención del agua), de la necesidad de un buen drenaje y de una adecuada profundidad y
aireación.

Sin embargo, otras características del suelo deben de ser analizadas en función de las
exigencias o tolerancias de cada especie o aún de cada cultivar. Así, en lo que respecta a la
salinidad hay una gran variación en el grado de tolerancia que presentan las diversas
especies frutales. Entre las más resistentes a condiciones salinas podemos mencionar a la
datilera, el olivo y la higuera, y en el otro extremo, como una de las más susceptibles, se
ubica el palto.

En cuanto al pH, las diversas especies muestran diferentes preferencias o tolerancias para
determinados reacciones del suelo. Si la acidez potencial es demasiado grande, puede
corregirse agregando una sustancia que tenga reacción alcalina. Algunas veces basta la
modificación de la fuente de fertilizante empleada; por ejemplo aplicando nitrato o
cianamida de calcio en lugar de sulfato de amonio. Una mejor corrección se logra mediante
la aplicación de cal.

Si la reacción del suelo tiende a ser demasiado alta, se puede lograr cierta mejora
empleando fertilizantes ácidos en lugar de los de naturaleza alcalina. Si no es suficiente
puede recurrirse a una sal ácida como sulfato de fierro por ejemplo.
IV. PROPAGACION DE LOS FRUTALES
Gran parte del éxito de un huerto frutícola depende de la calidad y sanidad de las plantas
instaladas, y estos dos aspectos están en relación directa con el origen de la planta y los
cuidados en su propagación. En principio, es bien sabido que los frutales se pueden
propagar por vía sexual o asexual.

PROPAGACION SEXUAL
Utiliza como material de propagación la semilla botánica (que contiene genes de la planta
madre y de la planta que proporcionó el polen). Una planta frutal originada de semilla, y
que crece sin ser injertada, es conocida como «planta franca».

La propagación sexual fue la más utilizado en la antigüedad. Actualmente ha sido


desplazada como método de obtención de plantas definitivas de especies frutales, y sólo se
la utiliza, en la gran mayoría de los casos, para propagar patrones. La excepción de esto lo
constituyen algunas especies como granadilla, maracuyá, papayo, tumbo, etc., que se
siguen propagando comercialmente por semillas.

Entre las especies frutales más importantes cuyos patrones se propagan generalmente por
semillas se encuentran las siguientes: palto, mango, pecano, cítricos en general, duraznero,
chirimoyo, lúcumo.

Una de las razones por las que la propagación sexual ha sido dejada de lado para la
obtención de plantas francas definitivas, es la fuerte segregación de caracteres de las
plantas hijas en relación con las plantas madres. Esta variabilidad en la herencia trae como
consecuencia que en huertos instalados con árboles francos, de semilla, estos sean
desuniformes en tamaño, vigor, producción, calidad de frutos, época de cosecha, etc. La
variabilidad es mucho más marcada en especies de polinización cruzada, como el palto por
ejemplo.

A pesar que las semillas de los siempreverdes pueden sembrarse inmediatamente después
de ser extraídos del fruto, es mejor someterlas antes a un lavado, para eliminar algunas
sustancias que las cubren externamente y que en muchos casos pueden contener
inhibidores de la germinación. Luego las semillas deben ser secadas a la sombra y
desinfectadas. Si no se usan de inmediato pueden almacenarse en frío a fin de preservar su
poder germinativo. Las temperaturas de conservación están alrededor de 8 a 10°C y
generalmente corresponden a las que se registran en la parte media de las refrigeradoras
domésticas. En estas condiciones, la duración de las semillas en buen estado depende de la
especie de que se trate. Algunas, como las de lúcumo y mango, tienden a conservarse por
menor tiempo que las de los cítricos por ejemplo. Conviene resaltar el caso de las semillas
de papayo, de las cuales se reporta que en recipientes herméticos y en lugares frescos
pueden conservar su viabilidad hasta por tres años. Las semillas de maracuyá mantienen
su poder germinativo por espacio de tres meses al medio ambiente y por un año en
refrigeración.
Cuando se trata de semillas de caducifolios, estas igualmente deben ser lavadas y
desinfectadas para luego ser sometidas a estratificación húmeda en frío a fin de romper el
estado de dormancia en que se encuentran al ser extraídas de los frutos. En algunas
especies, como las de hueso, es además necesario escarificarlas o eliminar totalmente el
caroso que las protege.

Cada frutal posee sus propias particularidades en cuanto a la técnica de propagación de sus
semillas. Sin embargo, al margen de la especie que se trate, hay aspectos generales como
los siguientes a tenerse siempre en cuenta para la obtención de resultados satisfactorios.

1. Semilla. Debe ser obtenida de frutos maduros y no haber sufrido daños durante su
manipuleo. Igualmente es importante que la semilla sea fresca o, en su defecto, haber sido
almacenada en condiciones especiales de conservación (refrigeración) por un tiempo que
esté dentro de lo establecido para la especie.

2. Sustrato de propagación. Debe de permitir una buena aireación y retención de


humedad. Mayormente se usan mezclas, en proporciones variables, de dos o más de los
siguientes elementos: arena, tierra, musgo, compost y humus de lombriz. En el caso de
estos dos últimos debe tenerse mucho cuidado con su contenido de sales, pues muchas
veces es demasiado alto, sobre todo para especies susceptibles como los paltos.

Los lugares donde el sustrato de propagación será colocado para después efectuar la
siembra de las semillas, son las llamadas camas almacigueras, que pueden ser altas o
bajas. La longitud de estas camas puede variar, pero su ancho no debe pasar de 1.20 m, y
su profundidad será de aproximadamente 0.4 m

3. Desinfección del sustrato y de las semillas. Para el primero se emplea ya sea vapor de
agua o bien productos químicos como Vapam (1 litro en 50 litros de agua por cada 10 m2
de sustrato, 20 a 30 días antes de la siembra), o Bromuro de metilo (muy tóxico para el
hombre, debe manejarse con mucho cuidado, siguiendo estrictamente las instrucciones de
la etiqueta de los envases). Otros productos como Dexón, Basamid, Terraclor,
Formaldehido, etc., pueden igualmente ser usados.

Una técnica muy económica y muy efectiva es la «solarización» que consiste en cubrir con
plástico, y en un lugar soleado, el sustrato humedecido en su capacidad de campo y ubicado
en una sola capa de 30 a 40 cm de espesor. Cada semana debe procederse a voltear la
mezcla, la misma que al cabo de tres a cuatro semanas ya estará lista para su uso.

Para desinfectar las semillas pueden usarse productos como Homai, Arazán, Benlate,
Dexón, Terraclor, etc.

En el caso de semillas de palto, una desinfección bastante efectiva se logra sumergiéndolas


en agua caliente a temperatura de 48 a 50°C por espacio de 20 minutos. De manera similar,
para las semillas de cítricos se recomienda el agua a 52°C por 10 minutos.

4. Control de la humedad. Las plántulas son generalmente muy susceptibles a ataques


fungosos, sobre todo a la zona del cuello donde ocasionan el síntoma conocido como
«chupadera». Estos problemas se presentan en condiciones de excesiva humedad del
sustrato.

ALGUNOS DATOS PRACTICOS DE IMPORTANCIA EN LA PROPAGACION


POR SEMILLA BOTANICA DE CIERTOS FRUTALES.

a) Número aproximado de semillas por kilo.

Limón rugoso: 10,600 Mandarina 'Cleopatra' : 11,100


Palto: 30 – 35 Mango: 60
Lúcumo: 35-40 Chirimoyo: 900 - 1,000
Pecano 'Munición' : 250 Papayo: 35,000
Duraznero: 300 – 35 Manzano: 34,000

b) Distanciamientos de siembra en almácigo (cm)

Cítricos 10 x 2 = 500 semillas por m2


Mango 10 x 10 = 100 « « «
Palto 20 x 5 = 100 « « «
Papayo 6x3 = 550 « « «
Chirimoyo 6x4 = 416 « « «
Lúcumo 8x5 = 250 « « «

PROPAGACION VEGETATIVA
Este sistema aprovecha la facultad de regeneración que poseen los tejidos de los vegetales
para dar origen a nuevas plantas. Es sobre esta base que se aplican tanto los métodos de
propagación vegetativa que podemos llamar tradicionales, en los que se emplean secciones
relativamente grandes de algunos órganos de las plantas, como aquellos que requieren de
técnicas de laboratorio más finas y en los cuales se utilizan sólo pequeñas porciones de
tejidos. Este último tipo de propagación vegetativa es lo que se conoce como «cultivos in
vitro», «cultivo de tejidos» o «cultivo de meristemas y su utilización como método de
obtención de nuevas plantas a gran escala para plantaciones comerciales de árboles frutales,
es aún limitada.

La propagación vegetativa permite transmitir con toda seguridad los caracteres de la planta
madre, ya que la sección vegetativa de esta, a partir de la cual se forma la nueva planta o
planta hija, mantiene intacta su carga genética. Este sistema permite la clonación de las
plantas, y muchos de sus métodos son conocidos y utilizados desde tiempos inmemoriales.

METODOS DE PROPAGACION VEGETATIVA

En exclusiva referencia a los métodos tradicionales, estos son diversos y pueden implicar la
formación de raíces, es decir la obtención de una nueva planta íntegra, o solamente la
formación de una nueva copa. Entre los primeros, que generalmente toman el nombre del
órgano o sección de la planta utilizado, se encuentran los siguientes: propagación por
estacas, por estolones, por hijuelos, por rizomas y por acodos. El método que supone
únicamente la formación de un nuevo aparato caulinar es el injerto.

Algunas especies pueden propagarse por más de uno de estos métodos, mientras que en
otras sólo es posible utilizar uno de ellos.

La propagación vegetativa se emplea para la obtención tanto de portainjertos como de


plantas definitivas. En este sentido, las principales especies frutales que son susceptibles de
ser propagadas vegetativamente pueden agruparse de la siguiente manera:

a) Frutales cuyos patrones son posibles de ser propagados por estacas: manzano, peral,
cirolero, vid, olivo

b) Frutales que pueden propagarse en forma directa por estacas: higuera, membrillero,
granado, vid, olivo.

c) Frutales que se propagan directamente por otras estructuras vegetativas:

Rizomas: banano y plátano.


Hijuelos: banano, plátano, piña, fresa, datilera.
Estolones: fresa.

d) Frutales en los que la copa es obtenida por injerto: palto, mango, cítricos en general,
manzano, duraznero, chirimoyo, lúcumo, macadamia, pecano, vid, olivo, etc.

INJERTO

Este tipo de propagación vegetativa merece una especial atención, pues es ampliamente
utilizado en el cultivo de árboles frutales.

Además de las ventajas propias de la propagación vegetativa en general, el injerto posibilita


la obtención de una serie de beneficios como los siguientes:

1. Propagar cultivares sin semilla. Como el naranjo 'Washington Navel' o la mandarina


'Satsuma' por ejemplo.

2. Propagación rápida de una planta selecta.

3. Uso de portainjertos sirve para atenuar u obviar algún factor limitante de la


producción. Sea debido a condiciones del medio ambiente o a cuestiones sanitarias. Por
ejemplo para zonas frías se recomienda el empleo del naranjo trifoliado, o sus híbridos,
como patrones de los cítricos; en terrenos con problemas de nematodos debe emplearse el
cultivar Okinawa como portainjerto de durazneros; en vid es recomendable el uso de
patrones resistentes a filoxera, etc.

4. Regular el tamaño de las plantas. Mediante la utilización de portainjertos vigorizantes


o enanizantes.
Sin embargo, existen también algunos riesgos derivados del uso del injerto como método
de propagación. Estos están referidos principalmente a la posibilidad de transmisión de
enfermedades, muchas de las cuales son de enorme importancia económica como la
tristeza y otras enfermedades virósicas en cítricos, el pie negro o Lasiodiplodia
(Botryodiplodia) en manzanos, la mancha de sol («sun blotch») en paltos, la antracnosis y
la Dyplodia en paltos y mangos, la bacteriosis en durazneros, etc.

CONDICIONES QUE DEBE REUNIR UN PATRON O PORTAINJERTO

a) Buena compatibilidad. Se refiere a que los tejidos del patrón deben mostrar una buena
disposición natural para realizar una unión apropiada con los tejidos del injerto. Cuando
esto no sucede, la continuidad histológica se perturba y la vida comercial del árbol es
bastante limitada. En casos extremos, al poco tiempo de realizado el injerto puede
producirse la caída de la copa.

En ciertas ocasiones, para resolver la falta de compatibilidad se recurre al uso de «puentes»


o injertos intermedios, que consiste en injertar entre la copa y el patrón, una variedad o
cultivar que sea compatible con ambos. Su empleo es común en el caso de algunos
cultivares comerciales de manzano injertados sobre membrillero.

b) Adaptabilidad al suelo y clima. Es imprescindible que el portainjerto, que


proporcionará el sistema radicular al árbol, muestre una buena adaptación a las condiciones
del suelo donde se instalará la plantación. Aspectos como textura, estructura, profundidad,
presencia de sales, etc., deben de ser tomados en cuenta. Igualmente es necesario que el
patrón se adapte y responda bien a los factores climáticos imperantes, especialmente
temperatura.

c) Resistencia o tolerancia a principales problemas sanitarios. Sobre todo a aquellos que


afectan el aparato radicular de las plantas.

d) Manejo poco complicado en el vivero. El desarrollo de las plantas en esta etapa debe
ser vigoroso y uniforme y mostrar una resistencia, aunque sea relativa, a plagas y
enfermedades. Además deben ser de fácil injertación.

e) Fácil de conseguir. Esto guarda relación con la disponibilidad de las semillas o material
vegetativo de los portainjertos, o de los portainjerto en sí, en cantidades suficientes como
para satisfacer la demanda. De poco sirve conocer las excelentes bondades de algunos
patrones si es imposible adquirirlos o si existen en número muy limitado.

Es muy difícil, casi imposible, que en la práctica exista un patrón ideal para cada especie o
cultivar y para cada localidad en particular. La selección final se realiza teniendo como
base los factores de evaluación que, a criterio del responsable técnico de la plantación, se
consideren de mayor importancia.
CONDICIONES QUE DEBE REUNIR UNA PLANTA MADRE

La selección de las plantas madre o yemeras debe de ser una labor a la que hay que prestar
un gran cuidado, pues no hay que olvidar que la yema o la pluma que de ellas se extrae, es
portadora de todas las características genéticas de esta planta y, por consiguiente, la copa
que se desarrollará reproducirá exactamente estos caracteres. Por ello, entre los requisitos
más importantes que debe reunir una planta madre destacan los siguientes:

a) Responder a todas las características propias del cultivar o variedad. Tanto en lo


que se refiere al aspecto externo y a los hábitos de comportamiento de la planta misma
como a las características de los frutos. En la labor de selección de las plantas madres es
frecuente encontrar algunos individuos que no manifiestan los rasgos distintivos del
cultivar o variedad, estos son conocidas como «plantas fuera de tipo».

b) Buen vigor. Es decir un buen desarrollo vegetativo dentro de los límites establecidos por
su genotipo.

c) Sanidad. Lo ideal sería contar con plantas certificadamente libre de problemas


sanitarios. Sin embargo, en la práctica hay que conformarse con verificar, con los medios
que estén a nuestro alcance circunstancial, la ausencia de síntomas de enfermedades y/o
plagas. Se debe tener especial cuidado con lo referente a problemas virósicos.

d) Buena producción. Se considera que una planta presenta esta característica cuando sus
rendimientos de cosecha se ubican sobre el promedio general de un huerto bien conducido
de la misma especie y cultivar. Es necesario que se tengan registros del control de la
producción de por lo menos cinco campañas.

e) Producción uniforme. Teniendo en cuenta el hábito propio del cultivar, las plantas no
deben presentar una tendencia marcada a la alternancia.

TIPOS DE INJERTO

Según se use una sola yema o una porción de tallo conteniendo varias de ellas, puede
hablarse de injertos de yema e injertos de pluma o de púa, respectivamente. Estos últimos, a
su vez, pueden ser terminales o laterales.

Entre los injertos de yema más comunes tenemos los siguientes: en T, de astilla y de
parche.

Por su parte, los injertos de pluma terminal que más se usan son: inglés simple, inglés doble
(o doble lengüeta), de hendidura, de corona.

Los injertos de pluma lateral se conocen como injertos de hendidura lateral o injertos de
costado. En las figuras 10, 11, 12, 13 y 14 pueden verse algunos detalles de ciertos injertos.
Figura 10. Injerto de yema en T.

Figura 11. Injerto ingles simple


Figura 12. Injerto ingles doble

Figura 13. Injerto de corona con una pluma.


Figura 14. Injerto de hendidura con una pluma.

En cualquier tipo de injerto que se realice, es de suma importancia que el cambium del
portainjerto esté activo. Esto se confirma fácilmente si la corteza se separa con facilidad del
xilema. En estas condiciones, las posibilidades de prendimiento serán muy altas. En el caso
de frutales caducifolios, las plumas por lo general se colectan de plantas cuyas yemas ya
están listas para brotar, es decir después de concluido el «agoste».

En el cuadro 1 se anotan, para algunos de los principales frutales, los tipos de injerto más
usados en el Perú, conjuntamente con los cultivares más comunes.
Cuadro 1 . Portainjertos, cultivares y tipos de injerto más empleados para algunos frutales en el Perú.

Especies Cultivares Portainjertos Tipos de


injerto
__________ _________________________ ________________________ ____________

Cítricos Limón rugoso, mandarina Yema en T


Cleopatra, mandarina
Sunki, Citranges
Naranjos Washington Navel,
Valencia

Mandarinas Satsuma, Dancy, Kara

Tangores Murcott o Río de


Oro (equivocadamente
conocido como mandarina)

Tangelos Minneola, Orlando

Limones Sutil, Florida o Tahití (limas ácidas)

Toronjas Duncan, Marsh

Mango Haden, Kent, Keitt, Chato Mangos criollos, Saygón, Inglés simple
de Ica, Cafro, Tolbert Cambodiana, California y doble, Corona

Palto Fuerte, Hass, Nabal, Zutano Duke, otros mexicanos, Inglés simple
y doble, corona

Manzano Delicious de Viscas, Anna Membrillero (algunas veces Inglés doble


Pachacamac (Sipa C-6) con injerto intermedio), hendidura
manzanos francos astilla

Vid Italia, Quebranta, Borgo- SO4, 5-BB, R-99, R-110, Inglés doble,
ña, Alphonse Lavallée, Rupestris Du Lot astilla
Thompson Seedless hendidura,

Duraznero Blanquillo, Amarillo Okinawa Yema en T


La Molina, Flordared, hendidura
Huaycot, Ulincate

Pecano Mahan, Stuart Munición Hendidura,


parche,
astilla

____________________________________________________________________________________________
POLIEMBRIONIA
Término que designa la presencia de más de un embrión en una semilla, sin tener en
consideración la forma o el proceso mediante el cual estos se han originado.

APOMIXIS

Es el proceso a través del cual tiene lugar la formación de un embrión como resultado de un
desarrollo reproductivo asexual. Este embrión puede originarse por partición de una célula
huevo o cigoto no reducida, a partir de la nucela, o de otras varias formas; pero en todas
ellas desarrolla sin carga genética de un progenitor masculino y, en consecuencia, es
genéticamente idéntico a la planta madre
.
EMBRIONIA NUCELAR

Conocida también como embrionía adventicia, es un tipo de apomixis en el cual los


embriones asexuales se originan de una célula o un grupo de células de la nucela. El
desarrollo de estos embriones tiene lugar a través del fenómeno de dediferenciación, por el
cual células ya diferenciadas sufren un proceso regresivo hacia la condición de células
germinales, a partir de las cuales se forman los embriones nucelares.

La embrionía adventicia está probablemente controlada por uno o más genes recesivos y
se presenta en algunos frutales como los cítricos y mangos. La iniciación de los embriones
asexuales necesita muchas veces del estímulo de la polinización y la fertilización.

En el grupo de los cítricos la embriogénesis nucelar es iniciada después de la fertilización,


inmediatamente antes o después de la primera división del cigote, y prácticamente todas las
especies y cultivares lo poseen, a excepción de los pomelos, la mandarina 'Clementina' y el
tangor 'Temple'. En los mangos, es característica de algunos cultivares.

USOS HORTICOLAS DE LA EMBRIONIA NUCELAR

1. Obtención de patrones. Las plantaciones hechas con árboles injertados sobre patrones
de origen nucelar son más uniformes en sus características, puesto que no hay variabilidad
genética entre los portainjertos.

Sin embargo, en el momento de la propagación es imposible distinguir el embrión sexual de


los embriones asexuales y, por lo tanto, la posibilidad que alguna planta de origen sexual
sea seleccionada como patrón siempre estará presente. En algunos híbridos de los cítricos,
sobre todo interespecíficos (como los tangores y los tangelos) e intergenéricos (como los
citranges), el embrión sexual aborta. Esto posibilita que los referidos híbridos puedan ser
mantenidos con toda su pureza genética a través de la propagación por semilla.

2. Obtención o renovación de plantas madres yemeras libres de virus. Esto es


especialmente importante en el caso de cítricos, en los cuales la mayoría de los virus que
los atacan no se transmiten por semilla. Así es posible obtener lo que se conocen como
plantas de «líneas nucelares».
V. PLANEAMIENTO DE LA INSTALACION DE UN
HUERTO
Siendo las plantaciones de árboles frutales inversiones a largo plazo, los errores que se
cometan al inicio, en su instalación, pueden ocasionar daños que serán evidentes años
después e imposibles de reparar, o en todo caso su corrección será difícil y costosa y no
siempre los resultados alcanzarán a ser plenamente satisfactorios. Por eso es importante que
antes de ejecutar la plantación, se hayan analizado todos los factores y posibilidades
involucrados que sustenten la decisión optada.

La programación o planeamiento de la plantación se presenta en la práctica como


resultado de dos situaciones diferentes:

1) Se conoce la (s) especie (s) y cultivar (es) que se quiere producir, y lo que se busca es
determinar la localización más adecuada del terreno para realizar la plantación. Se origina,
generalmente, como resultado de un conocimiento detallado del mercado. En este caso sólo
será necesaria una evaluación exhaustiva de todos los factores del medio ambiente, a fin de
asegurar la producción en la época y de la calidad requerida. Igualmente la elección del
portainjerto será una resultante de todas estas determinaciones.

2) Se tiene el terreno y se desea conocer cuál sería el frutal a instalar. Es la más frecuente y
difícil de resolver. En esta coyuntura, se está frente al problema de la elección de la
especie y cultivar.

La secuencia de los factores a analizar o las determinaciones a realizar, en lo que


corresponda a cada una de las dos posibilidades anotadas, es la siguiente:

1. EVALUACION DEL MERCADO

Este es un factor regulado en gran medida por los hábitos de los consumidores. Es lo que
constituye principalmente el aspecto de la demanda, la que a su vez puede evolucionar en
función de los precios. Ambos, demanda y precios, están en función de la calidad y
estacionalidad de la producción.

Por otro lado, en cuanto al destino de la producción, ésta puede estar orientada hacia los
mercados de fruta fresca (nacional o de exportación) o a la industria.

2. EVALUACION DEL MEDIO AMBIENTE

Los aspectos a los cuales debe de prestarse especial atención son:

Clima: temperaturas máximas y mínimas, temperaturas promedio anual y mensual,


presencia de heladas, lluvia, humedad relativa, vientos, horas de sol, etc.

Suelo: propiedades físicas y químicas, topografía, profundidad, capa freática, etc.


3. SELECCION DE LA ESPECIE Y CULTIVAR

Uno de los factores tiene mucho peso en la elección de la especie o en todo caso en el
descarte de otras, es el medio ambiente. Los factores climáticos son por lo general
determinantes en la decisión de optar entre el grupo de frutales siempreverdes o
caducifolios. El cultivar, o los cultivares, serán seleccionados en base al mercado y a las
condiciones particulares de cada zona.

4. SELECCION DEL PORTAINJERTO

Esta debe de ser hecha considerando lo siguiente:

a) Propiedades del suelo. Se tendrán en cuenta los aspectos anotados anteriormente al


referirse a la evaluación del medio ambiente. Para la gran mayoría de los frutales existen
patrones que se adaptan mejor que otros a suelos con determinadas características. Un
ejemplo bien conocido es la elección del limón rugoso como patrón de los cítricos en
suelos arenosos, o la alta tolerancia a sales de la mandarina 'Sunki'.

De la misma manera, para vid se tienen patrones resistentes a sales como 'R-99' y 'R-110'
que soportan hasta 0.5 por mil de ClNa, o el '1-616' que llega a resistir de 1 a 1.5 por mil
de concentración de la sal anotada.

b) Características del clima. Dentro de este, el factor de mayor importancia que debe
evaluarse para decidir por uno u otro portainjerto, es la temperatura. Por ejemplo para
climas fríos, tal como ya fue indicado oportunamente, el patrón más recomendable para
cítricos, es el naranjo trifoliado o sus híbridos.

c) Evaluación sanitaria de la zona. Debe ser realizada de manera bastante minuciosa, a fin
de tener como resultado un conocimiento claro de los problemas fitosanitarios a los cuales
el patrón tendrá que hacer frente y con los que finalmente tendrá que convivir. Algunos
patrones están más capacitados que otros para que esta convivencia se desenvuelva en
condiciones favorables al frutal.

Los aspectos sanitarios más importantes, en este sentido, se refieren generalmente a


patógenos que habitan en el suelo. Entre otros, es el caso de los nematodos a los que el
portainjerto de los cítricos mandarina 'Cleopatra' es susceptible. Estos patógenos son
también sumamente agresivos con algunos cultivares de durazneros, como el 'Blanquillo',
que suelen emplearse algunas veces en el Perú como patrones de otros cultivares
comerciales. En este último caso es recomendable utilizar el portainjerto 'Okinawa', que es
resistente al ataque de nematodos.

Para el caso de la vid existen patrones americanos resistentes a la filoxera y a los


nematodos, como 'Rupestris du Lot', 'SO4', '5-BB', 'R-99' y 'R-110'.

Cuando se trate de plantaciones de paltos, debe preferirse, de primera instancia, al


portainjerto 'Duke' que tiene cierta tolerancia a la pudrición radicular.
d) Compatibilidad con el cultivar seleccionado. Este problema se presenta con más
frecuencia en el caso de frutales caducifolios en los que ciertos cultivares, o aún algunas
especien en su conjunto, muestran grados variados de incompatibilidad con algunos
patrones usualmente empleados. En manzanos por ejemplo, cultivares como 'Pachacamac'
o 'Anna 'que no tienen buena compatibilidad con el membrillero, deben de ser injertados
utilizando un injerto intermedio o «puente». Igualmente es el caso de los durazneros
injertados sobre ciroleros donde se manifiesta una incompatibilidad retardada, a pesar que
la combinación contraria, es decir ciroleros sobre durazneros, funciona bien.

5. TRAZO DE LA PLANTACION

Dentro de este rubro hay que tener en cuenta tres aspectos:

a) Sistema de plantación. Es decir la forma en que estarán distribuidas las plantas, unas
respecto a las otras. Las formas tradicionalmente más comunes son: en cuadrado, tresbolillo
y rectángulo.

b) Orientación de las hileras. A pesar que, desde el punto de vista de la eficiencia en la


utilización de la radiación solar, lo más recomendable es la orientación Este-Oeste, en la
práctica este aspecto está determinado fundamentalmente por la topografía y la forma del
terreno así como por la manera en que las plantas son abastecidas de agua (por lluvia o por
riegos).

c) Distanciamientos. Se refiere a la separación entre hileras y entre plantas. Con la


determinación de los distanciamientos se distribuye el área de suelo y de espacio aéreo que
será ocupada por cada individuo. Entonces, aquí está evidentemente involucrado el tamaño
final de los árboles.

Por otro lado, en la determinación de los distanciamientos hay que tener también en cuenta
el grado de mecanización con el que va a manejarse la plantación. Si en algún momento las
labores culturales van a ser realizadas con maquinaria agrícola, los distanciamientos deben
de permitir el paso de esta.

El número de plantas por hectárea, que es lo que se conoce como la densidad de


plantación, variará de acuerdo a los distanciamientos elegidos.

En algunas oportunidades, como cuando se trata de frutales precoces que empiezan a


producir jóvenes, mucho antes de alcanzar su tamaño final, la plantación puede diseñarse
con distanciamientos temporales más cortos. Según esto, algunos árboles se eliminarán
ordenadamente y a intervalos, a medida que necesiten mayor espacio, hasta finalmente
alcanzar los distanciamientos definitivos programados.

Los sistemas modernos de plantación de especies frutales tienden a la utilización de altas


densidades, lo que supone el empleo de plantas de reducido tamaño. Esto puede lograrse
fundamentalmente en base al uso de:
1) Variedades o cultivares enanos o de poco desarrollo de copa, como los paltos ya
mencionados anteriormente, 'Fuerte Enano' y 'Rincón', los papayos de la serie PAUNA, el
banano 'Cavendish Enano', el duraznero 'Bonanza', y algunos otros. En realidad es bastante
reducido el número de cultivares, con valor comercial, de las diversas especies frutales que
pueden considerarse verdaderamente enanos.

2) Portainjertos enanizantes o desvigorizantes. La especie para la cual se emplean más


intensivamente es el manzano. A parte de algunos portainjertos de la serie East Malling
usados en climas templados con esta finalidad, como EM9, EM26, etc., hay que hacer
mención también al membrillero, sobre el cual están efectuadas prácticamente todas las
plantaciones comerciales en el Perú.

Para ciroleros y durazneros se reporta que pueden utilizarse Prunus tomentosa y P. besseyi,
para cítricos existe el naranjo trifoliado y, tal como oportunamente ya se indicó, para
mangos puede emplearse como patrón enanizante a 'Eldon' y para paltos a 'Maoz'.

3) Tratamientos que restrinjan el crecimiento. Referidas principalmente a podas y


aplicaciones de frenantes del crecimiento.

6. EVALUACION DE LOS RECURSOS DE AGUA

Hay varios puntos importantes a determinar. En primer lugar es preciso conocer la fuente
de abastecimiento del agua: lluvia, de agua de río o de pozo.. Luego debe determinarse la
cantidad y oportunidad del abastecimiento. Finalmente, sobre todo cuando se trata de
agua de pozo, es necesario conocer la calidad del agua (en agua de río prestar atención al
contenido de boro y en el agua de pozo a la salinidad). Con todos estos datos a la mano se
determinará la infraestructura necesaria para el aprovisionamiento del agua al suelo.

7. DETERMINACION DE LA NECESIDAD DE BARRERAS ROMPEVIENTOS

El factor que va a determinar la instalación de las barreras rompevientos es,


definitivamente, la intensidad de los vientos. Si se decide por su establecimiento, es
necesario conocer la dirección en que aquellos soplan y luego elegir la especie más
adecuada a utilizar.

8. TRAZO DE CAMINOS INTERIORES

Debe realizarse en función al tamaño del huerto y a la maquinaria o vehículos que van a
transitar. Se estima que para este fin debe de dedicarse un máximo del 10 % del área total
del terreno. Es poco recomendable la existencia de caminos con mucho tránsito.

9. DETERMINACION DE LA MAQUINARIA Y ACCESORIOS

En la actualidad existe maquinaria agrícola para la ejecución de prácticamente todas las


labores culturales de una plantación. El grado de mecanización que puede implementarse es
variado, y generalmente es más alto a medida que las plantaciones ocupan áreas más
grandes. Estas, por lo general poseen su propia maquinaria agrícola, mientras que las
plantaciones pequeñas la obtienen en alquiler.

10. PLANIFICACION DE LAS CONSTRUCCIONES GENERALES

Según las necesidades de cada plantación, en este rubro se considerará la construcción de


depósitos, oficinas, talleres, guardianías, viviendas, etc.

11. DISEÑO DE LAS INSTALACIONES DE COSECHA Y EMPACADO

De acuerdo a la importancia de la explotación, habrá de considerar la construcción de


simples colcas de acopio y encajonado o de instalaciones más o menos sofisticadas que
pueden incluir verdaderas centrales empacadoras, cámaras de conservación, etc.

12. ESTUDIO DE CANALES DE DISTRIBUCION Y COMERCIALIZACION

Es importante tener conocimiento de la forma en se va a comercializar la cosecha, tanto en


lo referente al tipo de envases a utilizar como al mecanismo secuencial que sigue la fruta
hasta su llegada al consumidor final.
VI. EL AGUA Y EL ARBOL FRUTAL
El agua es uno de los factores más estrechamente ligados a la planta frutal, imprescindible
tanto para su crecimiento y desarrollo como para su producción. La importancia del agua se
puede resumir en dos aspectos:

a) Es parte constituyente de todos los tejidos vegetales, alcanzando proporciones máximas


en los órganos jóvenes en pleno crecimiento. Además es conformante de componentes
orgánicos.

b) Es factor indispensable en el proceso de asimilación, ya que los nutrientes minerales,


para ser absorbidos por las raíces, deben ser previamente disueltos por el agua.

RELACION AGUA-SUELO-PLANTA
Está referida al hecho de que la fuente de la cual la planta se aprovisiona del agua, es casi
exclusivamente el suelo. Es conveniente por lo tanto, tener presente los siguientes
conceptos referentes a esta importante relación:

Ubicación. El agua suministrada al suelo, por lluvia o riego, se sitúa en los espacios o
poros que dejan entre sí las partículas del suelo, desplazando el aire existente en ellos. El
descenso del agua en el suelo es por gravedad.

Retentividad. Los suelos de textura gruesa (arenosos), retienen menos agua que los suelos
de textura fina. Estos últimos tienen poros más pequeños, pero hay mayor cantidad de ellos.

Rapidez de penetración. El movimiento de penetración del agua en el suelo es más rápido


en aquellos de textura gruesa que en los de textura fina.

Profundidad. La profundidad de penetración del agua está, generalmente, en función de la


cantidad de agua aplicada al suelo. A mayor cantidad mayor penetración.

Saturación. Para que el agua penetre en el suelo, debe ir saturando en forma sucesiva el
estrato superior adyacente, (la saturación supone que todo el espacio libre del poro ha sido
ocupado por el agua). El agua sobrante se convierte en agua libre y seguirá descendiendo a
la capa inferior.

Capacidad de campo. Al terminar el riego o la lluvia, el suelo saturado pierde por


drenaje natural parte del agua de saturación, permaneciendo el remanente a manera de
cuñas en los ángulos que se forman entre las partículas y quedando al centro del poro un
pequeño espacio con aire. En el momento en que esta agua se estabiliza, y no hay mayor
movimiento descendente por drenaje, se ha alcanzado el estado de capacidad de campo del
suelo ( CC ).

Punto de marchites permanente. Las raíces pueden tomar el agua existente en los poros
del suelo en forma constante, hasta que la cantidad de agua en ellos haya disminuido a tal
punto que la restante es retenida fuertemente por las partículas. En el momento en que la
planta ya no puede tomar el agua del suelo, se ha llegado al punto de marchites permanente
(PMP). Si en este estado, el suelo no recibe una nueva cantidad de agua, se presentará un
desbalance hídrico de la planta que ocasionará una marchites temporal o permanente.

Humedad disponible. Es un estado de humedad que se ubica entre los valores de


capacidad de campo y punto de marchites permanente. En la práctica, es esta humedad
disponible en la zona del suelo donde está implantado el sistema radicular del árbol la que
realmente tiene importancia desde el punto de vista del aprovisionamiento de agua por
parte del frutal.

Existe una diferencia marcada entre la ubicación de las raíces (en cuanto a su profundidad),
y la eficiencia de absorción del agua. Utilizando árboles de naranjo 'Valencia' injertados
sobre limón rugoso se determinó que, de toda el agua utilizada por un árbol, el mayor
porcentaje de absorción, 33 % , tuvo lugar en los primeros 30 cm de profundidad. Este
porcentaje disminuye a medida que la profundidad es mayor. Sin embargo, el 56 % del
agua fue absorbida en los primeros 60 cm.

EFECTOS EVIDENTES DE LA DEFICIENCIA DE HUMEDAD DEL SUELO EN


LOS FRUTALES

Reducción en el tamaño del árbol.


Reducción del rendimiento.
Tamaño reducido de los frutos.
Afecta la calidad interna de los frutos.

EFECTOS DEL EXCESO DE HUMEDAD EN EL SUELO

Un exceso de humedad en el suelo puede tener tres orígenes:

a) Un riego muy pesado. En este caso el daño es, generalmente, mínimo.


b) Por inundación, como consecuencia de fuertes lluvias.
c) Por ascensión de capas freáticas superficiales.

Cualquiera sea la causa, los efectos negativos serán mayores cuanto más tiempo
permanecen las raíces en tales condiciones de exceso. En casos extremos se produce la
muerte de la planta.

Los daños que sufren los frutales por la excesiva humedad de los suelos, pueden ser
directos o indirectos. Los primeros son resultado de la pobre aireación del suelo, por
saturación de los poros. Los daños indirectos se refieren a:

1. Las condiciones favorables que se crean para la proliferación de patógenos.


2. El lavado de los nutrientes hacia capas profundas del suelo.

Para plantaciones adultas de frutales, se considera que los excesos de humedad producen
daños de mayor significación que los ocasionados por las sequías. En este último caso, un
colapso total de la planta se producirá sólo en casos extremos de sequía muy prolongada.
En cambio los excesos de humedad, al destruir en poco tiempo el sistema radicular, pueden
producir con mayor frecuencia la muerte.

REQUERIMIENTOS HIDRICOS

Los volúmenes de agua que son necesarios para el crecimiento y desarrollo de las diferentes
especies frutales es variable. Depende de las necesidades teóricas del frutal y de factores
relacionados con características de suelo, densidades de plantación, sistemas de irrigación
empleados, etc.

Los frutales caducifolios por su particular manejo, requieren de manera general menos
volumen de agua anual que el grupo de los siempreverdes. Las necesidades hídricas de los
primeros para árboles adultos en producción, se ubican de manera general y en promedio
entre 3,500 y 6,000 m3 /ha/año, mientras que las de los siempreverdes están alrededor de los
8,000 a 12,000 m3/ha/año.

Existen muchas especies frutales que son resistentes o tolerantes a la sequía, sin embargo
esto no significa que tales condiciones sean las más apropiadas para una buena producción.
Estos frutales responden muy favorablemente a aportes adecuados de agua. Un caso
bastante ilustrativo es el referido para el olivo en España, donde por siete años consecutivos
el riego por goteo complementario a las lluvias durante las épocas de secano, incrementó
los rendimientos en 61 % en relación a los testigos no regados.

En el cuadro 2 se anotan los efectos negativos que pueden ocurrir a través de una campaña
por un aprovisionamiento inadecuado de agua en el olivo.
VII. CULTIVOS Y DESHIERBOS

Las finalidades de ambas labores son diferentes, sin embargo en la práctica, sobre todo
cuando los deshierbos son mecánicos, frecuentemente se realizan en forma conjunta.

CULTIVOS
Son operaciones culturales realizadas con el objeto de que el suelo oponga la mínima
resistencia mecánica al desarrollo radicular, y de que haya así mismo una buena aireación y
un humedecimiento uniforme y adecuado.

DESHIERBO
Tienen como finalidad la eliminación, generalmente temporal, de las malezas del huerto.
La presencia de las malezas, dentro de una plantación frutal, configura una situación de
competencia ínter específica. Los daños que causan pueden explicarse, en gran medida,
por su extraordinaria capacidad reproductiva y su facilidad para diseminarse
aprovechando las labores agrícolas que se aplican, así como por su crecimiento rápido y
su rusticidad.

Los perjuicios que ocasionan son de dos tipos:

a) Problemas de competencia propiamente dicha o efectos alelopáticos. Al competir las


malezas con el frutal por recursos como luz, agua y nutrientes, pueden verse afectados los
rendimientos y/o la calidad. Este daño es más acentuado, o notable, en plantas de porte
normal reducido, como la fresa por ejemplo.

b) De manera indirecta pueden ocasionar daños cuando son hospederos de plagas y


enfermedades, como arañita roja y pulgones entre otros, o cuando su presencia causa
disminución en el flujo del agua de riego. Es posible, incluso, considerar como un daño, el
incremento en los costos de producción.

Para poder elegir adecuadamente el método y momento de control más efectivo, las malas
yerbas deben de ser previamente identificadas.

Las malezas suelen clasificarse en anuales o de hoja ancha, las mismas que son
propagadas por semilla, y perennes o de hoja angosta que se reproducen tanto por semilla
como vegetativamente.

ORIGEN DE LA INFESTACION DE MALEZAS EN UN HUERTO FRUTAL

1. Semillas de malezas existentes en el terreno.

2. El agua de riego, que transporta tanto semillas como porciones vegetativas capaces de
desarrollarse en nuevas plantas.
3. El viento, que transporta sobre todo semillas pequeñas de poco peso y que están
especialmente adaptadas, en su forma y estructura externa, para ser trasladadas de esta
manera.

4. El estiércol fresco, que contiene semillas que no han sido digeridas por los animales.

CONTROL DE MALEZAS

En el mejor de los casos, el control de las malas hierbas debe de iniciarse antes de la
instalación del huerto, especialmente cuando se identifican en el terreno malezas perennes.

En general se conocen tres tipos de deshierbos:

1. A mano. Consiste tanto en el «arrancado» de las malezas, que no es muy común y sólo
se aplica en plantaciones muy pequeñas o en viveros, como en el empleo de la lampa como
instrumento de corte y/o de extracción de las plantas.

2. Mecánico. Supone el uso de tractores con implementos como rastras o gradas. Como
efectos indeseables de la utilización de esta maquinaria, se producen daños a las raíces de
los frutales y se compacta el suelo. Esto es de especial importancia en algunos frutales
como el palto por ejemplo, que es atacado por el hongo causante de la pudrición radicular
que penetra precisamente por las heridas de las raíces.

En la gran mayoría de casos, los daños producidos al sistema radicular por el deshierbo
mecánico están en relación directa con la profundidad de penetración de los implementos.
Esto se agrava más si este tipo de deshierbos son frecuentes.

La tendencia moderna en países donde la fruticultura está más avanzada, es al empleo


mínimo de maquinaria para el control de las malezas. En nuestro país lo más frecuente es
que los deshierbos de las interlíneas se realicen con gradas de disco o de dientes, mientras
que entre las plantas se hacen con lampa.

3. Químico. El control se realiza en base al empleo de herbicidas. Estos, según su modo


de acción, pueden ser de contacto o sistémicos, y pueden aplicarse sólo uno de ellos, ambos
sucesivamente o ambos simultáneamente. Las dos últimas opciones son la más
recomendables.

La política a seguir en el uso de los herbicidas depende principalmente del tipo de malezas
que predominen en el huerto.

a) Cuando se trata de malezas anuales, su control es relativamente fácil, con herbicidas de


contacto. En este caso, lo mejor es eliminarlas antes que produzcan semillas, para así
romper la continuidad de su ciclo biológico y evitar un foco de reinfestación.

Entre los productos más utilizados se encuentran el gramoxone y el gesaprim.


Además de los herbicidas de contacto, pueden utilizarse también los llamados pre-
emergentes que, como su nombre lo indica, deben de ser aplicados antes que las semillas
de las malezas germinen. En este caso es preciso que el suelo tenga un buen contenido de
materia orgánica y buenas condiciones de humedad para que el herbicida actúe
adecuadamente. Algunos de estos productos que han dado buenos resultados en huertos de
frutales son: goal, dalapon y gesatop.

b) En el caso de malezas perennes, debido a que se propagan por semillas y otras


estructuras vegetativas como bulbos, rizomas, etc., son muy difíciles de erradicar del
huerto. Los herbicidas de contacto pueden matar la parte aérea pero no sus órganos
subterráneos. Sólo algunos herbicidas sistémicos o de translocación, generalmente
considerados específicos para cada maleza en particular, pueden trabajar eficientemente.
Entre los más utilizados, hasta el momento, podemos mencionar al roundup o batalla para
el «coquito» y la «grama china», el basinex para «grama dulce», «gramalote « y «kikuyo»,
el poast y el gesapax.

c) Si la infestación del huerto es por malezas anuales y perennes, primero hay que actuar
sobre las anuales con herbicidas de contacto y luego sobre las perennes con productos
sistémicos. Es preciso realizar siempre el control de los dos tipos de malas hierbas, pues de
lo contrario se registrará un incremento de la población no controlada.

CONSIDERACIONES GENERALES A TENER EN CUENTA PARA UN ADECUADO Y


EFICIENTE CONTROL QUIMICO DE MALEZAS

1. DOSIS.

Se expresan en kilos o litros por hectárea. El volumen de agua empleado para diluir el
producto y hacer la aplicación es indiferente. De ser posible podría usarse el herbicida puro.
Sin embargo, su aplicación generalmente se hace con bombas de mochila, y el gasto de
agua por hectárea es de 500 a 800 litros. A partir de este dato, es posible calcular
fácilmente la concentración de la solución a emplear. Por ejemplo si la dosis recomendada
es de 1 litro por hectárea, el herbicida se aplicará al 2.0 por mil (si se usan 500 litros de
agua/ha), o al 1.3 por mil (si se emplean 800 litros de agua/ha).

2. EQUIPO.

Las bombas de mochila deben de ser exclusivamente para herbicidas. La falta de


cumplimiento de esta norma trae como consecuencia muchos accidentes por los residuos
del herbicida que quedan (tanto en el recipiente mismo de la bomba como en la manguera
de salida), y que pueden causar daños, algunas veces bastante graves, a las plantas.
Igualmente, la aplicación de los herbicidas debe hacerse sólo con boquillas especiales, tipo
tee-jet.

3. FORMA DE APLICACION.

Existen tres modalidades:


a) Masal, a todo el campo. Generalmente se hace antes de la plantación.

b) En franjas. Es decir sólo en los surcos de riego y en las secciones laterales de estos.
Mayormente se aplican de esta manera los herbicidas para el control de malezas de hoja
ancha o anuales.

c) Localizado, en desmanche. De esta manera se utilizan los herbicidas para malezas


permanentes.

4. MOMENTO DE APLICACION.

Las malas hierbas por lo general deben estar en estados tempranos de su desarrollo y en
plena actividad de crecimiento vegetativo. De este modo el producto mojará bien todas las
hojas y, en el caso de los herbicidas sistémicos, la absorción se llevará a cabo de manera
más eficiente.

Así mismo, es importante que el terreno sea previamente humedecido, sobre todo cuando se
trata de herbicidas pre-emergentes.

Finalmente hay que anotar que, durante el día, los mejores momentos para realizar las
aplicaciones son cuando no hay vientos. Esto normalmente ocurre entre las 6 y 10 de la
mañana.
VIII. CULTIVOS ENTRE LAS HILERAS DE LA
PLANTACION
Según sea la finalidad que se busca, estos tipos de cultivo suelen recibir diferentes
denominaciones.

Se habla de cultivos intercalados cuando se trata de aprovechar con algunas siembras


comerciales, el área de terreno que se encuentra entre las hileras de los árboles; sobre todo
durante los primeros años de la plantación, en que los frutales, aún jóvenes, no ocupan
todavía todo el suelo ni el espacio aéreo que individualmente les corresponde. En algunas
oportunidades, cuando los distanciamientos lo permiten, pueden conducirse cultivos
intercalados inclusive en plantaciones ya adultas.

Cualquiera sea la especie intercalada, esta va a competir con el frutal por todos los recursos
que ambos cultivos necesitan. En consecuencia, para que se justifique su instalación o
siembra, los efectos de esta competencia deben estar ampliamente compensados con los
beneficios que el cultivo intercalado puede aportar. Por ello es que, como regla general,
deben observarse tres recomendaciones:

a) No usar especies muy exigentes en nutrientes, como maíz por ejemplo. Si este fuera el
caso, es indispensable la aplicación de un fuerte abonamiento o fertilización suplementaria

Igualmente debe evitarse la siembra de especies cuyo desarrollo en altura sea considerable
y signifique mucha competencia por luz. Puede ser el caso del mismo maíz o la yuca, entre
otros.

b) No utilizar plantas que sean hospederas de patógenos comunes al frutal. Por ejemplo,
siendo bastante común la susceptibilidad de muchos frutales al ataque de nematodos, debe
evitarse, si este fuera el caso, la siembra de especies como tomate, zapallo, pepinillo,
camote, etc.

c) De preferencia deben conducirse cultivos intercalados sólo en los primeros años de la


plantación.

Entre las especies más recomendables a intercalar se tienen a la mayoría de leguminosas de


porte pequeño, como la alfalfa, el frijol, la lenteja, etc. Todas las especies de esta familia
fijan el nitrógeno atmosférico en sus sistemas radiculares, lo cual puede significar un aporte
nutritivo de mucha importancia para el suelo.

En la práctica, suelen emplearse igualmente especies olerícolas. En este caso, tal como ya
se adelantó, deben de tenerse muy en cuenta las limitaciones de orden sanitario que pueden
existir para cada caso en particular.

Alguna veces también se instalan, como cultivos intercalados, especies frutales de porte
pequeño como piña o fresa. Incluso se da el caso de la utilización de otras especies frutales
de mucho mayor desarrollo. Esta última posibilidad puede justificarse en los primeros años
después de la instalación del huerto, sobre todo cuando las plantación principal tiene un
desarrollo lento y un periodo juvenil bastante prolongado, y la especie a interplantar, por el
contrario, muestra precocidad en su entrada en producción. Ocurre, por ejemplo, en el caso
de plantaciones de pecanos, en las que con frecuencia se instalan como cultivos
intercalados transitorios ciertos cultivares de durazneros. El intercalar otras especies
frutales, se conoce generalmente como ínter plantación.

Con frecuencia, algunos de los cultivos de las entrelíneas pueden incorporarse como abono
verde, lo cual es una práctica muy conveniente por cuanto, al margen del valor como
aporte de nutrientes, se mejora la estructura del suelo, dando lugar a una mayor cohesión en
los arenosos y a una mayor soltura en los terrenos pesados. De este modo se beneficia su
capacidad de retención, tanto de agua como de nutrientes. Cuando se emplean con esta
finalidad, se denominan cultivos asociados. Por lo general se usan de esta manera las
leguminosas, así como también crucíferas y gramíneas.

En terrenos con pendientes, los cultivos entre las líneas de la plantación tienen como
finalidad evitar la erosión de los suelos. Pueden instalarse cada hilera, cuando la pendiente
es fuerte, o cada dos a tres hileras si la pendiente es menos pronunciada. En este caso se
trata de cultivos de contorno o en franjas.

En las zonas con lluvias, la finalidad de estos cultivos es evitar la erosión por agua de
escorrentía, y reciben la denominación de cultivos de cobertura. En los trópicos secos se
instalan sólo durante la época de lluvias y luego se incorporan al terreno tal como los
cultivos asociados. En los trópicos húmedos deben estar presente todo el año.
IX. PODA
CONCEPTO Y FUNDAMENTOS FISIOLOGICOS
La poda puede definirse como una práctica de cultivo que consiste en el corte racional de
algunos órganos de la planta buscando un fin determinado. Su aplicación a la parte aérea,
que es la más general e importante, tiene como principal objetivo regular y orientar el
crecimiento en función de la producción. Es decir que a través de la poda se trata de
conseguir un equilibrio fisiológico que permita un crecimiento controlado de la parte
vegetativa y, al mismo tiempo, una producción uniforme y abundante.

La poda de los árboles frutales es, generalmente, una drástica operación que influencia,
directa o indirectamente, muchos procesos fisiológicos. Cuidadosas investigaciones
parecen sugerir que los efectos de la poda son el resultado de un perfecto funcionamiento
del sistema de comunicaciones dentro del árbol. Por ejemplo, si el ápice de un brote es
cortado, la parte restante del árbol es informada que el órgano faltante debe de ser
reconstituido a fin de restaurar el balance entre sus diferentes partes. Probablemente las
hormonas promotoras del crecimiento juegan un rol bastante importante en este sistema
de comunicación a través de diversos mecanismos, uno de los cuales sería el control de la
manifestación o represión de ciertos genes.

Cuando el ápice de un brote es removido, las yemas laterales son estimuladas a brotar, se
induce la ramificación, se incrementa la fotosíntesis de hojas basales y se altera la
distribución de la materia seca, de manera que el árbol pueda reconstruir rápidamente la
parte faltante. Al mismo tiempo otros procesos «más distantes» parecen estar subordinados
al proceso del nuevo crecimiento. Así por ejemplo, decrece el ritmo de crecimiento del
tronco y de nuevas raíces, puesto que los metabolitos y nutrientes minerales son
directamente derivados a la reconstrucción del brote. A la vez, se desarrolla un sistema de
transporte al nuevo meristema en crecimiento, y se interrumpe la formación de yemas
florales, pues la reproducción se subordina a la actividad vegetativa.

Los efectos de la poda sobre el crecimiento de los brotes, dependen, en parte, del tipo de
corte aplicado y la época de la poda. La terminología anglosajona es bastante precisa para
referirse a los diferentes tipos de poda que es posible aplicar a los frutales, en relación a la
porción y clase de ramas que se corten. Así, para indicar al acortamiento de brotes que
crecieron la campaña anterior utilizan los términos «tipping» o «heading» ( cuando la poda
se hace en verano se la llama «pinching»), el acortamiento de ramas es llamado «heading»
o «stubbing», y a la eliminación de brotes o ramas la denominan «thinning».

TIPOS DE PODA
De acuerdo al momento en que se realicen, y en referencia especial a los frutales
caducifolios, existen la poda de invierno y la poda de verano.
PODA DE INVIERNO

Se aplica cuando los árboles están en reposo. En los climas templados esto coincide con la
estación invernal. En el Perú, como se ha anotado oportunamente, el reposo de los
caducifolios no necesariamente tiene lugar en los meses de invierno.

Un efecto bastante conocido de la poda de invierno es el estímulo de la formación de


nuevos brotes.

En el pasado, se creía que esta poda, y en especial el acortamiento de los brotes, favorecía
el incremento de la estructura del árbol. Sin embargo, los árboles podados, a pesar del
mayor número de brotes, son más pequeños, con ramas de diámetro más reducido y más
compactos.

La formación de nuevos brotes se incrementa con la severidad de la poda, pero sólo hasta
cierto límite. Si la poda es muy drástica la producción de nuevos brotes puede decrecer.

También hay que considerar que una poda muy severa y mal dirigida puede eliminar un
alto porcentaje de yemas florales, las mismas que en los caducifolios se diferencian
mayormente en la estación de plena actividad de la planta (verano en el caso del ciclo anual
tradicional).

Como la poda estimula la formación de nuevos brotes, hay un cambio en la proporción de


las partes del árbol ( es decir en la relación de peso entre la madera nueva y la vieja, y entre
la parte aérea y la subterránea). Se ha determinado que la poda de invierno disminuye el
ritmo de engrosamiento de los tallos antiguos y del tronco. De esta manera entonces, el
crecimiento total de la parte aérea del árbol, decrece. Igualmente la poda de invierno
reduce el crecimiento de nuevas raíces. Después de varios años de aplicación puede haber
un significativo efecto enanizante en el árbol entero.

El crecimiento de brotes, como respuesta a la poda de invierno, está influenciada no


solamente por la cantidad de madera removida sino también, como ya se indicó, por el tipo
de corte aplicado. Así, el acortamiento de brotes y ramas, en comparación con la
eliminación de estos, induce un mayor número de nuevos brotes.

De manera similar, hay una influencia del tamaño de los cortes. Asumiendo una poda que
elimina similares cantidades de madera, numerosos cortes pequeños estimulan más que
pocos y severos, el crecimiento de nuevos brotes.

PODA DE VERANO

También llamada «poda en verde», se aplica cuando las plantas están en actividad,
generalmente sobre brotes nuevos, en pleno desarrollo o cuando ya estos han concluido su
crecimiento.
Es una antigua práctica cultural en huertos de frutales caducifolios de alta densidad en
países de clima templado, principalmente para controlar el tamaño y la forma de los
árboles y para mejorar la calidad de la fruta.

Muchos experimentos han demostrado que la poda de verano aplicada a frutales jóvenes
produce menos crecimiento de brotes, en comparación con árboles podados en invierno o
no podados. Esto no ocurre en el caso de árboles productores, más viejos. En estos se
produce un mayor crecimiento de brotes y además retrasa el crecimiento del tronco,
disminuye el crecimiento de las raíces y reduce las dimensiones de la copa.

La influencia de la edad de los árboles en la respuesta a la poda de verano, se explica sobre


la base de las reservas de fotosintatos en los dos aspectos puntuales siguientes:

a) El crecimiento de brotes de árboles muy jóvenes depende mayormente del


abastecimiento de fotosintatos desde las hojas. La disminución de fotosintatos causada por
la poda de verano no puede ser compensada rápidamente, en consecuencia el crecimiento
de todas las partes del árbol es restringido.

b) En árboles adultos el crecimiento de los brotes tiene lugar a expensas de las reservas
almacenadas en el tronco y las raíces, los cuales, a su vez, crecen menos.

La conveniencia de dirigir el crecimiento de los árboles frutales para dotarlos de una


arquitectura adecuada, obliga necesariamente a efectuar podas en plantas jóvenes. Sin
embargo, manteniendo esta operación dentro de límites estrictamente necesarios, se puede
lograr la orientación de la forma sin reducir el desarrollo de la planta en forma apreciable.

Según el resultado o la finalidad que se busque, las principales clases de poda que se
pueden aplicar a un árbol frutal en general, son las siguientes:

a) poda de formación
b) « « fructificación
c) « « limpieza
d) « « renovación
e) « cultural

PODA DE FORMACION

Se realiza sobre árboles jóvenes, sean caducifolios o siempreverdes, generalmente cuando


recién inician su desarrollo. Puede ser hecha en el vivero o bien después, cuando la planta
se encuentra ya en el terreno definitivo y tiene por finalidad orientar la constitución de una
copa bien compartida, dirigiendo la distribución de las ramas primarias de acuerdo a la
forma que se desea dar a los árboles (ver figura 15) . En el caso de frutales caducifolios esto
guarda directa relación con el tipo de conducción en que se piensa llevar la plantación
(palmeta, líder central, vaso abierto, etc.).

A fin de obtener los resultados esperados, es necesario conocer el hábito natural de


crecimiento de la especie así como cualquier característica peculiar del cultivar.
En los siempreverdes esta poda se limita, habitualmente, a la eliminación del brote terminal
para después escoger, entre los nuevos brotes, las tres o cuatro ramas primarias de la copa.
En los caducifolios, por el contrario, la obtención de ciertas formas de las plantas se logra
después de podas sucesivas a través de varios años. En la figura 16 se muestra el esquema
de la secuencia de podas para la obtención de una palmeta en manzano.

Figura 15 . Esquema del brotamiento de un frutal joven, con y sin poda.


A: Antes del brotamiento B: Luego del brotamiento
C: Al año siguiente sin haber sido podado
D: Al año siguiente habiendo sido podado

Figura 16. Formación de una palmeta en manzano en cuatro años consecutivos.


a: antes del brotamiento b: después del brotamiento p: poda
PODA DE FRUCTIFICACION

Como bien lo indica su nombre, se aplica con el fin de regular la producción. Su uso está
fundamentalmente limitado a especies caducifolias, en las cuales muchas veces no hay
producción uniforme sin esta operación.

No es posible establecer reglas estrictas sobre el modo de efectuarla. La intensidad, la


manera y la época (es decir el cuánto, cómo y cuándo), serán determinados de acuerdo a los
siguientes criterios:

a) Hábito vegetativo y de producción de la especie


b) Características peculiares del cultivar o variedad.
c) Características peculiares de cada planta.
d) Condiciones ecológicas particulares de la zona.
e) Propósito y destino de la producción.

HABITOS DE FLORACION

La intensidad de la poda de fructificación para cada especie en particular, guarda estrecha


relación con la localización de sus yemas florales En las especies caducifolias, la mayor
parte de estas estructuras son formadas en ciertas posiciones bien definidas, lo que
determina sus hábitos de floración, de acuerdo a los cuales los frutales de hoja caduca se
agrupan en tres categorías:

1. Aquellos cuya floración se presenta en ramas que brotan el mismo año. Es el caso de la
vid, el membrillero y la higuera. Estos frutales deben someterse a una poda severa a fin de
estimular un mayor brotamiento de yemas axilares.

2. Especies en las que la floración tiene lugar sobre las ramas que brotaron y crecieron el
año anterior. Sucede en los durazneros y almendros por ejemplo. La poda de estos árboles
debe ser moderada para no eliminar un exceso de estas yemas, pero a la vez suficiente para
promover nuevos brotes sobre los que se ubicarán las yemas florales para la siguiente
campaña.

3. Frutales que presentan su floración mayormente en ramas de dos años o más. En este
grupo se encuentran el manzano y el peral. Aquí, de manera muy general la poda debe de
ser ligera, a fin de no eliminar muchas de las ramas portadoras de yemas florales y también
para permitir que las ramas jóvenes acumulen más edad.

PODA DE LIMPIEZA

Comprende la eliminación de ramas secas, enfermas, muertas, mal ubicadas, etc. Su


aplicación, que usualmente responde a cuestiones sanitarias, no siempre es imprescindible,
y en todo caso dependerá de una previa evaluación de la situación, teniendo en
consideración los costos y la disponibilidad de mano de obra.
PODA DE RENOVACION

Consiste en una poda severa que con frecuencia elimina toda la copa, dejando únicamente
las partes basales de las ramas primarias o el tocón del tallo principal. No es una operación
normal en frutales. Se aplica por razones sanitarias, cuando la mayor parte de las ramas
están severamente afectadas y su control por medios químicos o biológicos ya no es
posible, o cuando se desea cambiar de cultivar. Esta poda anula la producción por uno,
dos o hasta tres años, dependiendo de la especie que se trate.

PODA CULTURAL

Se realiza para permitir o facilitar la aplicación de alguna otra operación cultural en el


huerto que, por lo general, implica la utilización de maquinaria agrícola (paso de la
cultivadora, aplicación mecanizada de fertilizantes o herbicidas, etc.).

A menudo se hace referencia también a la poda de transplante y a la poda de vivero. La


primera se efectúa al momento de trasladar y colocar la planta en su lugar definitivo, y es
usada cuando el transplante se hace a raíz desnuda. Consiste en el corte de las porciones
de raíces que estén mal ubicadas, mal conformadas o que hayan sufrido desgarraduras al
extraer las plantas. Cuando existen hojas al momento del transplante la poda de transplante
implicará también la eliminación de parte del área foliar (usualmente se corta el 50 % de
cada hoja), para reducir la pérdida de agua por transpiración y asegurar así una buena
recuperación de la planta.

Como poda de vivero se entiende todas las podas a que son sometidas las plantas mientras
permanecen transitoriamente en el vivero. Por lo general comprende la eliminación de
brotes laterales mal ubicados. Algunas veces puede aplicarse también una poda de
formación.
X. NUTRICION

La nutrición vegetal puede definirse como la serie de procesos, predominantemente


activos, mediante los cuales las plantas se abastecen de los elementos nutritivos necesarios
para sintetizar los diferentes compuestos orgánicos que constituyen sus diversos tejidos,
estructuras y órganos.

Teniendo en cuenta la secuencia de la vida de una planta o la evolución del ciclo anual de
un árbol frutal adulto, la utilización de los nutrientes está orientada a los siguientes
procesos:

1. Metabolismo de la planta.
2.Crecimiento propiamente dicho. Renovación del follaje y raíces.
3. Acumulación de reservas.
4. Floración y producción.

ELEMENTOS ESENCIALES PARA EL DESARROLLO DE LOS


FRUTALES
Hasta el momento, existe la evidencia que los elementos esenciales para la vida de las
plantas son 16: carbono (C), hidrógeno (H), oxígeno (O), nitrógeno (N), fósforo (P),
potasio (K), magnesio (Mg), calcio (Ca), azufre (S), fierro (Fe), manganeso (Mn), boro (B),
zinc (Zn), cobre (Cu), molibdeno (Mo) y cloro (Cl).

El C, H y O son considerados nutrientes no minerales y, por su abundancia, no son factor


limitante, pues las plantas los obtienen del CO2 del aire y del agua. Estos tres elementos
integran el agua y los compuestos orgánicos, constituyendo el 95 % del peso seco de los
tejidos.

Los otros trece elementos son obtenidos de fuentes minerales u orgánicas del suelo y
pueden, eventualmente, encontrarse en condiciones de deficiencia o exceso para un normal
desarrollo de las plantas. Esto determina que el concepto de nutrición mineral esté referido
sólo a estos trece elementos en particular.

CLASIFICACION DE LOS ELEMENTOS ESENCIALES

A) MACRONUTRIENTES. Elementos que los frutales requieren en cantidades relativamente


grandes. Son los siguientes: N, P, K, Ca, Mg y S. A los tres primeros se les suele
denominar principales y a los otros, secundarios.

B) MICRONUTRIENTES. Son requeridos en muy pequeñas cantidades, normalmente 1/100


o menos que los macronutrientes. Están constituidos por el Fe, Mn, Cu, Zn, B, Mo y Cl.

A ambos grupos de elementos esenciales se les conoce también como elementos mayores y
menores, respectivamente, en función de las cantidades en que son requeridos. Sin embargo
esta nomenclatura puede, algunas veces, dar lugar a interpretaciones erróneas en cuanto a la
importancia de cada uno de estos.

ABSORCION DE NUTRIENTES
Los elementos nutritivos son absorbidos, en forma de iones, principalmente por las raíces.
Estos pueden ser tomados de la solución del suelo o directamente de la materia mineral u
orgánica.

Algunos principios importantes de la absorción de nutrientes

1. La absorción de iones implica gasto de energía.

2. El aprovechamiento de los nutrientes, a partir de la solución suelo, depende de:

a) Los compuestos de los cuales son obtenidos aquellos.

b) La reacción del suelo. De manera general, el máximo aprovechamiento de los elementos


esenciales se obtiene entre pH 5.5 y 6.5 .

3. La absorción de ciertos elementos es afectada por la concentración de ellos con relación


a la de otros. Esto constituye lo que se conoce como antagonismo iónico. Entre los más
comunes se encuentran los siguientes: K/Ca, Mg/Ca, K/Mg, N/K, N/B, P/Zn, P/Cu, Cu/Fe,
Fe/Mn, K/B, K/Mn, Ca/micronutrientes.

4. La absorción de dos elementos puede reforzarse mutuamente. Esto constituye los casos
de sinergismo, de los cuales los más importantes son NO3/Mg, Mg/P, K/Fe.

5. Las plantas pueden mostrar síntomas de deficiencia de determinado elemento debido a


las siguientes causas:

a) Una baja disponibilidad del elemento en el suelo.

b)Una deficiencia inducida, causada por una reacción desfavorable del suelo o por
antagonismo con otro elemento.

6. Cantidades excesivas de los elementos en el suelo pueden producir también síntomas de


toxicidad, además de síntomas de deficiencia de otros elementos.

FERTILIDAD DEL SUELO


FERTILIDAD NATURAL

Es la que existe en tierras que no han sido sometidas a la acción del hombre, en las cuales
se ha establecido un equilibrio natural suelo / flora. Es decir que la fertilidad se mantiene en
ciclos de circulación cerrados de los elementos nutritivos, los mismos que son restituidos al
suelo a partir de la descomposición de los tejidos de las plantas por acciones enzimáticas y
de los microorganismos del suelo.

En tierras no cultivadas, sólo con vegetación espontánea, al no haber cosechas no hay


tampoco extracción de principios nutritivos, salvo los que puedan ser consumidos por los
animales y que queda después compensado por sus excrementos y/o cadáveres.

MODIFICACION DE LA FERTILIDAD NATURAL

Se presenta al poner el hombre una tierra en cultivo. Esto modifica profundamente el ciclo
de circulación descrito para la fertilidad natural, pues las plantas son cultivadas para su
aprovechamiento, y al extraer las cosechas se extraen también los principios nutritivos
contenidos en ellas.

LOS FRUTALES Y EL DESEQUILIBRIO DE LA FERTILIDAD NATURAL

El establecimiento de plantaciones de árboles frutales, como monocultivo perenne, trae


como resultado trastornos importantes con relación a la fertilidad de los suelos, ocasionados
entre otros, por los siguientes motivos:

1. Extracciones desequilibradas de nutrientes año tras año. Esto ocurre en contraste con
lo que sucede en el caso de la vegetación espontánea en la que, por estar compuesta por
varias especies perfectamente adaptadas al suelo, sus necesidades alimenticias se equilibran
y complementan.

2. La intensificación del cultivo. A través del cual se busca obtener los mayores
rendimientos, obliga por un lado al empleo de variedades o cultivares mejorados más
productivos y por lo tanto más exigentes, y por otro a una mayor densidad de plantación
por unidad de superficie.

BALANCE NUTRICIONAL
Este concepto está referido a la relación cuantitativa en que son absorbidos los nutrientes,
de tal manera que su utilización por la planta sea óptima. Este balance puede ser variado
por condiciones de deficiencias o excesos, las mismas que son factibles de ser corregidas
mediante fertilizaciones o enmiendas adecuadas aplicadas por el hombre.

La necesidad del balance cuantitativo se da por la existencia de interacciones de los


elementos entre sí. Por ejemplo:

1. La deficiencia de Fe puede ser inducida por las siguientes situaciones:

a) Por la insuficiente absorción de K o P. Igualmente, un exceso de P puede acentuar una


deficiencia de Fe ya existente.

b) A niveles adecuados de P, la severidad de la deficiencia de Fe está determinada por el


nivel de K.
c) Suelos alcalinos, o con exceso de calizas, oxidan el Fe a su forma trivalente y precipita
en forma de hidróxido férrico.

d) El exceso de Mn mantiene al Fe en forma férrica, dificultando su absorción.

2. Grandes cantidades de fosfatos solubles precipitan el Zn disponible.

FERTILIZACION O ABONAMIENTO
Este concepto, en su sentido tradicional, puede definirse como la incorporación que se hace
al suelo de cantidades adecuadas de fuentes de nutrientes, con la finalidad de poner a
disposición de la planta los elementos nutritivos que sirvan para compensar a aquellos que
fueron extraídos, en parte, para producir la cosecha. Si esto no ocurre así, se producirá, en
un tiempo más o menos largo, el agotamiento del suelo. Por su carácter de plantas
permanentes, en frutales no se puede recurrir, como en el caso de los transitorios, a la
rotación de cultivos.

En principio, es la relación suelo - planta el criterio básico que debe sustentar la práctica
del abonamiento. Un tercer factor a considerar, y que influencia sobre ambos componentes
de la relación, es el clima.

NIVEL DE NUTRIENTES EN LA PLANTA

En los tejidos de las plantas los elementos nutritivos pueden encontrarse en tres niveles:

1. Satisfactorio o adecuado. Este está, a su vez, entre dos límites: máximo y mínimo
satisfactorio.

2. En exceso. Esta situación trae como resultado que se presenten problemas de toxicidad,
con síntomas de deterioro o malformación de tejidos u órganos (como sucede en el caso del
boro), o bien de acentuación de alguna característica que perjudica la producción y/o la
calidad de la fruta (como ocurre con el nitrógeno, cuyo exceso da lugar al «enviciamiento»
de la planta y a la falta de una buena coloración de los frutos).

Además, un contenido excesivo de determinado elemento en la planta es consecuencia, casi


siempre, de una sobre fertilización, la cual representa, adicionalmente, un gasto inútil.

3. En deficiencia. Esto origina trastornos fisiológicos diversos en los distintos órganos de


la planta como: amarillamiento de hojas, deformaciones y muerte de hojas, frutos y brotes,
estancamiento del desarrollo, etc. Así mismo puede presentarse una reducción cuantitativa
de la producción y una baja en la calidad de los frutos.

Como consecuencia de todo lo anteriormente señalado, mediante la técnica de la


fertilización debe de buscarse que todos los nutrientes de la planta se mantengan dentro de
niveles adecuados.
DIAGNOSTICO NUTRICIONAL
Consiste en la evaluación de los requerimientos nutricionales de una plantación. Es la base
para la elaboración de un adecuado plan de fertilización en frutales. Entre los principales
métodos que pueden ser empleados para realizar esta evaluación se tienen los siguientes:

Síntomas visuales
Parámetros fisiológicos
Cálculos de extracción de cosecha
Ensayos con fertilizantes
Análisis enzimáticos
Análisis de suelos
Análisis foliar

Ninguno de estos métodos es simple. En mayor o menor grado requieren de cierta


especialización. A continuación se anotan algunos de sus aspectos más interesantes.

SINTOMAS VISUALES DE DESORDENES NUTRICIONALES

La gran parte de síntomas visuales están relacionados con estados de deficiencias


nutritivas, aunque también pueden ser consecuencia de excesos. En frutales se detectan
sobre todo en el follaje, (en algunas ocasiones los indicios pueden presentarse en otros
órganos de las plantas como los frutos por ejemplo).

Las sintomatologías típicas, que se usan como claves para identificar la deficiencia o el
exceso de cada elemento en particular, han sido previamente obtenidas de plantas o árboles
creciendo en condiciones controladas de exceso o deficiencia.

VENTAJAS

1. Proporciona una idea general sobre el estado nutricional. La sola presencia de cualquier
síntoma visual, aún cuando no pueda precisarse exactamente el elemento causante,
constituye un valioso índice de alerta.

2. En algunos frutales es posible determinar con aceptable certeza la causa de ciertos


síntomas visuales. Por ejemplo en los cítricos las deficiencias de Mg, Mn, Fe y Zn.

LIMITACIONES

1. Cuando el síntoma visual se manifiesta, el crecimiento y/o rendimiento ya han sido, por
lo general, afectados considerablemente.

2. Los síntomas pueden variar de acuerdo a la especie, y para la misma especie pueden
presentarse algunos cambios en función de las condiciones de clima y suelo.

3. Rara vez los síntomas se manifiestan exactamente igual a las claves.


4. Con mucha frecuencia se presentan dos o más síntomas visuales simultáneos y
superpuestos. Esto puede originar el enmascaramiento entre ellos, o una distorsión en su
manifestación.

5. Muchos síntomas son comunes a varias deficiencias.

6. La detección y correcta interpretación de la sintomatología requiere de una considerable


experiencia.

7. La información derivada de los síntomas visuales es sólo cualitativa.

En resumen podemos decir que este método constituye un buen comienzo para cualquier
estudio técnico del balance nutricional de un huerto frutal.

SINTOMAS DE DEFICIENCIAS MAS IMPORTANTES

Nitrógeno

Las hojas maduras se presentan cloróticas o, como en el caso de los manzanos, con
coloraciones ligeramente rojas o rosadas. Esto ocurre porque en condiciones de deficiencia,
el nitrógeno es translocado de las hojas viejas hacia los meristemas y hojas nuevas. En
situaciones de deficiencia más marcada, las hojas nuevas son pequeñas, erectas,
decoloradas uniformemente a tonos verde claro o verde amarillento.

Igualmente, es frecuente observar caída de flores y frutos jóvenes. Esta sintomatología es


más marcada en algunas especies que en otras.

En caducifolios se presenta una temprana detención del crecimiento y, por consiguiente,


una prematura defoliación natural que afecta directamente la producción de reservas. El
brotamiento es retrasado y la floración abundante, pero luego hay una gran caída de frutos
recién cuajados. Los que quedan sobre el árbol son pequeños y, en el caso de las manzanas
rojas, serán muy coloreadas a la madurez.

Algunas veces, la maduración adelantada de los frutos puede ser un síntoma de


deficiencia de nitrógeno.

Fósforo

No existen síntomas muy confiables. Las hojas maduras se presentan al principio con una
coloración verde más oscura de la normal que luego pasa a ser grisácea o castaña opaca.
Después, pueden adquirir un color amarillo anaranjado o, como en el caso de los manzanos,
bronceado a rojo púrpura.

Las hojas de árboles jóvenes deficientes tienden a ser más estrechas y oblongas que las
normales, y los brotes más grandes pueden estar terminados en un penacho de tales hojas.
Potasio

La deficiencia se pone de manifiesto por la presencia de zonas necróticas, a manera de


quemaduras, en el ápice y bordes de las hojas así como entre las nervaduras. Hay gran caída
de hojas.

En manzanos es frecuente observar que la parte inferior de los brotes se defolia, mientras
que en su extremo superior las hojas permanecen verdes. En esta misma especie, algunas
veces las hojas pueden presentar también un enrollamiento hacia abajo.

En los cítricos, la cáscara de los frutos se vuelve más delgada, lo cual afecta la
conservación de los mismos. En este grupo de frutales, a la deficiencia de potasio se la
asocia con el desorden conocido como «creasing», que se evidencia por las rajaduras
transversales de los frutos, localizadas precisamente en las zonas donde la cáscara se
adelgaza.

En los manzanos también se presenta con frecuencia rajaduras de los frutos, tanto jóvenes
como adultos.

En durazneros, una pobre calidad de frutos y una inadecuada conservación poscosecha de


los mismos, se relacionan con niveles deficientes de potasio.

Magnesio

Su deficiencia se manifiesta en hojas maduras, en las que son evidentes zonas cloróticas
internervales (que pueden empezar como un moteado), a lo largo de la nervadura central y
que progresan hacia los bordes. En estados avanzados, sobre todo en cítricos, la base del
limbo cercana al peciolo es la única que permanece verde, en una zona que tiene la forma
de una V invertida. La severidad de este síntoma es mayor en los cultivares de cítricos con
muchas semillas como las naranjas 'Valencia' y 'Criolla'.

En los manzanos, las zonas cloróticas de las hojas, por lo general, se necrosifican
posteriormente.

Calcio

La deficiencia de este elemento está relacionada, en manzanas, al síntoma conocido como


pudrición amarga ( o bitter pit) que puede presentarse antes o después de la cosecha.

Manganeso

Las hojas presentan áreas cloróticas entre las nervaduras. En estados avanzados, en los
cítricos, al costado de cada nervadura sólo queda una franja verde y el resto está clorótico.
En caducifolios aparecen pústulas o manchas rojizas o marrones en las zonas donde la
clorosis fue más intensa.

El tamaño de la hoja no es mayormente afectado por una deficiencia de manganeso.


La translocación de este elemento es muy fácil, motivo por el cual su deficiencia
frecuentemente tiende a desaparecer con la edad.

Zinc

La clorosis se presenta en las hojas, en forma de manchas irregulares entre las nervaduras.
Al final, sólo estas permanecen verdes.

En algunas especies, uno de los síntomas más confiables es la aparición de brotes con hojas
erectas, angostas, puntiagudas y de tamaño muy reducido en comparación a las normales.
Es lo que se conoce como «hoja de clavel». Igualmente es afectado el tamaño de los tallos,
presentando entrenudos extremadamente cortos, por lo cual toman un aspecto de «roseta».

Los frutos, en general, son más pequeños y deformes. En duraznos se presenta una
elongación anormal del ápice y además ocasiona, en la madurez, la aparición de áreas
marrones y blandas. En el caso de los cítricos, sus frutos presentan la cáscara más gruesa.

Fierro

La clorosis de las hojas es total, a excepción de las nervaduras que pueden verse como un
finísimo retículo verde. Las hojas afectadas no se recuperan pues, por ser un elemento
muy pesado, no es retranslocado.

En manzanos los frutos son poco coloreados y de sabor insípido.

Cobre

En los cítricos, las hojas suelen presentar un tamaño mayor al normal y son de color verde
oscuro y con bordes irregulares. Los frutos presentan secreciones gomosas.

En los frutales caducifolios, las hojas pueden también tener una apariencia de verde más
oscuro o aparecer con los ápices, y algunas veces también los márgenes, marrones. Se
produce, además, una gran defoliación. Igualmente puede presentarse muerte descendente
de las ramas, originando brotamientos laterales a manera de penachos.

Boro

En cítricos, las hojas nuevas presentan nervaduras prominentes y manchas acuosas


translúcidas. Los frutos contienen trozos gomosos debajo de la cáscara, en el albedo.

En manzano y perales se manifiesta por la presencia, en los frutos, del síntoma conocido
como «drought spot» o «mancha seca», que es una necrosis de los tejidos superficiales. La
piel afectada deviene áspera y puede, eventualmente, rajarse. Igualmente las hojas se tornan
rojas, bronceadas o tostadas. En los brotes, algunas áreas del cambium, especialmente justo
debajo de la yema terminal, pueden morir. También suelen presentarse heridas o daños en
ramas jóvenes y viejas, muchas veces con exudaciones de goma. Los frutos de plantas
deficientes en boro tienden, por otro lado, a ser más pequeños que los normales.

En diversas especies frutales, la deficiencia severa de boro puede causar también la muerte
descendente de las ramas.

Particularmente en perales, una deficiencia de boro podría ser la causante de un pobre


cuajado.

Molibdeno

La sintomatología de su deficiencia ha sido establecida principalmente para cítricos. En


estos, sus hojas adultas presentan, en su parte inferior, manchas grandes amarillentas o
rojizas, como antracnosis, debajo de las cuales se encuentran porciones gomosas.

PARAMETROS FISIOLOGICOS

Es un método de diagnóstico nutricional bastante práctico en frutales. La edad es el


parámetro más utilizado, y sobre esa base se establecen dosis estandarizadas, generalmente
sin tomar en cuenta condiciones particulares de clima, suelo, cultivar, portainjerto, etc.

Las tablas de fertilización así elaboradas, deben de ser tomadas como pautas generales de
uso inmediato, sobre todo cuando no se tiene información nutricional en el ámbito local.
Las dosis empleadas deben de ser posteriormente ajustadas según los resultados obtenidos.

En los cuadros 3, 4, 5, 6 y 7 se anotan algunas cantidades recomendables para ciertas


especies frutales.

Cuadro 3. Dosis de nutrientes anuales, en gramos/planta, recomendadas para palto.

a) En la costa
___________________________________________________
Nitrógeno Fósforo Potasio Magnesio
Año gramos de N gramos de gramos de gramos de
P2O5 K2O MgO
___________________________________________________
45 - 90 45 - 90 45 - 90 22 - 45
2 135 - 180 135 – 180 135 - 180 68 - 90
3 270 - 360 270 - 360 270 - 360 135 - 180
4 560 - 700 200 - 350 560 - 700 140 - 175
5 840 - 980 420 - 490 840 - 980 210 - 245
6 1120 -1260 560 - 630 1120 - 1260 280 - 315
7 1400 -1680 700 - 840 1400 - 1680 350 - 420
8 1680 -1960 840 - 980 1680 - 1960 420 - 490
____________________________________________________
b) En la sierra
____________________________________________________
Nitrógeno Fósforo Potasio Magnesio
Año gramos de gramos de gramos de gramos de
N P2O5 K2O MgO
____________________________________________________
1 42 - 56 42 - 56 42 - 56 21 - 28
2 83 - 112 83 - 112 83 - 112 42 - 56
3 138 - 166 138 - 166 138 - 166 69 - 83
4 312 - 374 156 - 187 312 - 374 78 - 94
5 500 - 582 250 - 291 500 - 582 125 - 145
6 624 - 750 312 - 375 624 - 750 156 - 188
7 830 - 936 415 - 468 830 - 936 208 - 234
8 1040 - 1250 520 - 625 1040 - 1250 260 - 313
_____________________________________________________

c) En la selva
_____________________________________________________
Nitrógeno Fósforo Potasio Magnesio
Año gramos de gramos de gramos de gramos de
N P2O5 K2O MgO
_____________________________________________________
1 30 - 60 30 - 60 30 - 60 15 - 30
2 87 - 115 87 - 115 87 - 115 44 - 58
3 175 - 230 175 - 230 175 - 230 88 - 115
4 195 - 255 65 - 85 260 - 340 65 - 85
5 294 – 345 98 - 115 329 - 460 98 - 115
6 393 - 441 131 - 147 524 - 588 131 - 147
7 489 - 585 163 - 195 672 - 780 163 - 195
8 585 - 684 195 - 228 780 - 912 195 - 228
______________________________________________________
Cuadro 4 .Dosis de nutrientes anuales, en gramos/planta, recomendadas para mango.

a) En la costa
____________________________________________________
Nitrógeno Fósforo Potasio Magnesio
Año gramos de gramos de gramos de gramos de
N P2O5 K2O MgO
____________________________________________________
1 60 - 80 45 - 60 45 - 60 15 - 20
2 120 - 160 90 - 120 90 - 120 30 - 40
3 240 - 300 180 - 225 180 - 225 60 - 75
4 540 - 670 180 - 225 360 - 450 120 - 150
5 670 - 805 225 - 270 450 - 540 150 - 180
6 940 -1075 315 - 360 630 - 715 210 - 240
7 1075 -1210 360 - 405 715 - 805 240 - 270
8 1345 -1615 450 - 540 895 -1075 300 - 360
____________________________________________________

b) En la selva
___________________________________________________
Nitrógeno Fósforo Potasio Magnesio
Año gramos de gramos de gramos de gramos de
N P2O5 K2O MgO
___________________________________________________
1 60 - 80 60 - 80 60 - 80 15 - 20
2 120 - 160 120 - 160 120 - 160 30 - 40
3 240 - 300 240 - 300 240 - 300 60 - 100
4 490 - 610 245 - 305 490 - 610 120 - 150
5 610 - 730 305 - 365 610 - 730 150 - 190
6 850 - 975 425 - 485 850 - 975 215 - 245
7 975 -1095 485 - 545 975 -1095 245 - 280
8 1215 -1460 610 - 725 1215 -1460 305 - 365
____________________________________________________

Cuadro 5. Dosis de nutrientes anuales, en kg/ha/año, recomendadas para maracuyá.

a) En la costa
_____________________________________________________

Edad (años) N P2O5 K2O


_____________________________________________________

1 80 - 150 80 - 150 40 - 80
2 100 - 180 100 - 180 50 - 100
3 120 - 200 120 - 200 60 - 120
_____________________________________________________
b) En la selva
______________________________________________________
Edad (años) N P2O5 K2O
______________________________________________________

1 60 - 120 60 - 120 50 - 100


2 80 - 140 80 - 140 60 - 120
3 80 - 140 80 – 140 60 - 120
_______________________________________________________

Cuadro 6. Dosis anuales de fertilizantes, en gr/planta/año, recomendadas para papayo.


________________________________________________________
Lugar N P2O5 K2O
________________________________________________________

Costa 80 - 100 30 - 50 40 - 50
Selva 100 - 120 50 - 70 60 - 80
_________________________________________________________

Cuadro 7. Dosis de nutrientes anuales, en gramos/planta, recomendadas para manzano


en la costa
_________________________________________________
Nitrógeno Fósforo Potasio Magnesio
Año gramos de gramos de gramos de gramos de
N P2O5 K2O MgO
_________________________________________________

1 100 50 100 25
2 150 75 150 25
3 200 100 200 50
4 300 150 300 75
5 400 200 400 100
6 500 250 500 150
7 600 300 600 150
8 700 350 700 150
__________________________________________________

CALCULO DE EXTRACCION DE COSECHA

Este método se basa en el principio de que los nutrientes extraídos con una cosecha deben
ser restituidos mediante la aplicación de fertilizantes, para restablecer y, eventualmente,
incrementar la fertilidad del suelo.

Para hacer el cálculo respectivo es necesario conocer la composición química de los frutos
y el volumen de la cosecha.
ENSAYOS DE DOSIS DE FERTILIZANTES

Es uno de los métodos más clásicos. Probablemente es el más práctico para cultivos
olerícolas o anuales en general, cuyas plantas son de poco desarrollo y corto periodo
vegetativo y que, además, pueden cultivarse en una superficie moderada de terreno para el
experimento. Sin embargo, en el caso de árboles frutales, un número aún reducido de ellos
ocupa una área bastante extensa, lo que en sí ya significa un problema. Esto ocasiona
también una variación considerable de las condiciones del suelo entre los árboles
experimentales, lo que obliga a que el número de repeticiones tenga que ser elevado. En
paltos por ejemplo, se considera que para ensayos de este tipo son necesarias 100
repeticiones. Por otro lado, la obtención de los resultados supone un periodo de espera de
varios años.

ANALISIS ENZIMATICOS

Aún no es un método de aplicación generalizada. Se basa en el hecho de que muchas


enzimas requieren nutrientes metálicos, ya sea como parte integrante de ellas o como
cofactor. En el primer caso las enzimas son conocidas como metaloenzimas, y el método
consiste en medir la velocidad de reacción bioquímica en función de la cantidad de
nutriente metálico contenido en la metaloenzima. Es decir que se trata de cuantificar la
proporcionalidad directa existente entre la velocidad de reacción y el nutriente conformante
de la enzima. En consecuencia, si el nutriente está en deficiencia la velocidad de reacción
disminuirá considerablemente.

ANALISIS DE SUELOS

Es uno de los métodos que pueden catalogarse como básicos. Desde el punto de vista
técnico se le considera siempre de mucha conveniencia, debido a que el suelo es el factor
más importante que determina la absorción de los nutrientes por los frutales.

ALCANCES O VENTAJAS

1. Determina el estado de fertilidad del suelo y su capacidad para suministrar nutrientes a


los frutales, permitiendo calcular o prever el déficit de elementos nutritivos y las cantidades
a aplicar.

2. Predice la probabilidad de la respuesta a la fertilización.

3. Determina la presencia de factores limitantes para el desarrollo de las plantas, tales como
exceso de sales o exceso de aluminio por ejemplo.

4. Indica si alguna de las deficiencias o excesos que se observan o determinan en las hojas,
deben de ser corregidas en el suelo o en la planta.

LIMITACIONES

1. Requiere experiencia para la interpretación de los resultados.


2. Los «niveles críticos», con los cuales hay que comparar los resultados obtenidos, no
están establecidos para todos los frutales.

3. Los solventes químicos que podrían utilizarse para extraer algunos de los elementos
minerales en el laboratorio, pueden ser demasiado fuertes o débiles. En estas circunstancias,
los resultados obtenidos serían difíciles de interpretar.

MUESTREO DE SUELOS

A fin de disminuir la variabilidad del muestreo del suelo en el campo, se recomienda que la
muestra sea compuesta y que esté constituida por 4 - 16 muestras individuales.

La muestra compuesta puede provenir de una área variable de terreno, dependiendo de la


homogeneidad de este. Como regla general, el área total representada por una mezcla
compuesta no debe de exceder de 8 ha. Cada muestra individual, a su vez, debe cumplir
con los siguientes requisitos:

1. Ser del mismo volumen que las demás.

2. Deben tomarse al azar. En la práctica se hace siguiendo un sentido transversal a la


dirección de los surcos o a la pendiente.

3. Las muestras serán tomadas a dos profundidades: de 0 a 30 y de 30 a 60 cm.

De cada una de estas profundidades por separado, las muestras individuales se colocan en
un recipiente plástico, se mezclan y luego se toma aproximadamente 1.0 Kilo para su
remisión al laboratorio.

TIPOS DE ANALISIS DE SUELOS

1. Análisis de rutina. Llamado también análisis simple, de fertilidad o análisis de NPK.


Se determina lo siguiente:

a) Cantidad de materia orgánica


b) Nitrógeno total
c) Fósforo disponible
d) Potasio disponible
e) pH
f) Conductividad eléctrica

2. Análisis de caracterización. Además de todo lo anotado para el de rutina, el análisis de


caracterización incluye:

a) Textura (porcentajes de arena, arcilla y limo)


b) Calcáreo total
c) Capacidad de intercambio catiónico ( CIC )
d) Calcio, magnesio, potasio y sodio cambiables

Es necesario pedir, adicionalmente, que se incluya la determinación de boro. Si se desea


puede solicitarse otro u otros análisis extras como fierro, zinc y manganeso, por ejemplo.

El análisis de caracterización cuesta normalmente más del doble que el simple y se


recomienda realizarlo antes de iniciar la plantación, o cuando en un huerto ya establecido
nunca se hizo algún tipo de análisis. Posteriormente es suficiente el análisis de rutina.

NIVELES CRITICOS Y RECOMENDACIONES

El contenido de un determinado nutriente en el suelo, de acuerdo a su correspondiente


análisis, puede ubicarse en tres grupos o niveles críticos: bajo, medio o alto. Estos niveles
críticos, que son producto de largos y pacientes estudios experimentales, desgraciadamente
no existen para todos los frutales.

Las recomendaciones, que usualmente las da el laboratorio que realizó el análisis, pueden
estar referidas a una sola dosis o a una dosis máxima y otra mínima. Esta opinión del
laboratorio debe de ser tomada con mucha reserva y es preciso que, en última instancia, sea
interpretada y ajustada por el propio fruticultor, en base a los siguientes criterios:
exigencias muy particulares del cultivar, rentabilidad del frutal y costo del fertilizante
puesto en el huerto.

Como una guía para ayudar a la interpretación de los resultados de los análisis de suelos, a
continuación se anotan ciertos estándares generales promedios.

ALGUNOS ESTANDARES APROXIMADOS PARA LA INTERPRETACIÓN DE LOS


ANALISIS DE SUELOS

1. Conductividad eléctrica (mmhos/cm)

0.00 - 0.25 Salinidad baja


0.25 - 0.75 « moderada
0.75 - 2.25 « entre media y alta
2.25 - 4.00 « alta
4.00 - 6.00 « muy alta
más de 6.00 « excesiva

2. pH a los que son más disponibles algunos nutrientes

N : 6.0 - 7.5 Fe : < 6.5


P2O5 : 6.5 - 7.5 Mn : 5.0 - 6.5
K2O : 6.0 - 8.0 B : 5.0 - 7.5
S : 6.0 - 8.0 Cu : 5.0 - 7.0
Ca : > 7.0 Zn : 5.0 - 7.0
Mg : > 6.5
3. Porcentaje de calcáreo

0 – 2 : Bajo 2 – 4 : Medio Más de 4 : Alto

4. Porcentaje de materia orgánica

a) Para la costa

0.0 - 1.0 Muy bajo 1.0 - 1.5 Bajo


1.5 - 2.5 Medio Más de 2.5 Alto

b) Para la sierra: 1.0 % más para cada nivel.

5. Determinación del porcentaje de carbono

% C = % M.O./1.724

6. Contenido de nitrógeno (en %)

0.0 - 0.1: Muy bajo 0.1 - 0.2 : Medio Más de 0.2: Alto.

7. Relación C/N (%C / %N)

10.0 : Equilibrio
10.0 - 17.0 : Suficiente nitrógeno para los microorganismos que descomponen la materia
orgánica sin recurrir al nitrógeno del suelo.
17.0 - 33.0 : Nitrógeno es tomado del suelo.
Más de 33.0 : Materia orgánica no se descompone.

8. Contenido de fósforo (en ppm)

0.0 - 7.0 : Bajo 7.0 - 14.0 : Medio 15.0 - 30.0 : Alto

9. Contenido de potasio.

a) En ppm.

0.0 - 150.0 : Bajo 150.0 - 250.0 : Medio


255.0 - 350.0 : Alto Más de 355.0 : Muy alto.

b) En kg/ha

0.0 - 300.0 : Bajo 300.0 - 600.0 : Medio Más de 600.0 : Alto.

10. Contenido de magnesio (en ppm)

0.0 -150.0 : Bajo 150.0 - 250.0 : Medio Más de 250.0 : Alto.


11. Contenido de boro (en ppm)

0.0 - 0.7 : Bajo 0.7 - 1.5 : Optimo Más de 1.5 : Alto.

12. Capacidad de intercambio catiónico ( CIC ), en me/100 g

0 - 5 : Muy bajo 5 - 10 : Bajo


10 - 20 : Medio más de 20 : Alto.

13. Relación óptima de cationes cambiables

Ca/Mg : 5.0 - 8.0 Mg/K : 1.8 - 2.5 Ca/K : 14.0 - 16.0

14. Pesos mili equivalentes

Ca : 0.02 Na : 0.023 Mg : 0.012 K : 0.039

15. Densidades aparentes (en g/cm3)

Suelo arenoso : 1.7 - 1.9


« franco arenoso : 1.5 - 1.7
« franco : 1.5
« franco arcilloso : 1.3 - 1.5
« arcilloso : 1.1 - 1.3

16. Tolerancia relativa de algunos frutales a las sales

Muy tolerantes Medianamente Poco tolerantes


tolerantes
______________ _______________ _______________

Palmera datilera Granado Peral


Olivo Manzano
Higuera Naranjo
Vid Toronja
Maracuyá Cirolero
Tuna Almendro
Guayabo Albaricoquero
Duraznero
Fresa
Limonero
Piña
Papayo
Lúcumo
Palto.
17. Tolerancia relativa de algunos frutales al boro

Muy tolerantes Semitolerantes Sensibles


_______________ ______________ _________
Palmera datilera Olivo Nogal
Cirolero
Peral
Manzano
Higuera
Níspero
Naranjo
Duraznero
Palto
Limonero

18. Análisis nematológico (en 100 cc de suelo)

a) Para Tylenchulus semipenetrans.

0 larvas : Infestación nula


1 - 500 « : « ligera
501 - 1000 « : « regular
1001 - 1500 « : « fuerte
Más de 1500 « : « muy fuerte.

b. Para Meloidogyne sp.

0 larvas : Infestación nula


1 - 25 « : « ligera
26 - 50 « : « regular
51 - 75 « : « fuerte
más de 75 « : « muy fuerte.
_____________________________________________________________

ANALISIS FOLIAR

Se basa en la consideración técnicamente establecida de que un frutal cualquiera se


encuentra en las mejores condiciones para una alta producción, cuando sus niveles de
nutrientes en las hojas se hallan dentro de ciertos límites. Esto no significa, de ninguna
manera, que todos los elementos desempeñen su función primordialmente en las hojas, sino
que el contenido, alto o bajo, en ellas puede ser también similar en cualquier otro órgano de
la planta que lo necesite.

Hoy en día, su mayor uso es para el diagnóstico de elementos nutritivos sospechosos de


deficiencia.
VENTAJAS

1. Se trata de una determinación llevada a cabo sobre la planta misma, y es precisamente


ella quien mejor puede proporcionar una medida de su propio estado nutricional.

2. En general, la cantidad de un elemento presente en las hojas, es una buena indicación de


la absorción deficiente, suficiente o excesiva del mismo por la planta.

3. Individualmente es el método que proporciona la mayor y más útil información sobre los
requerimientos de fertilizantes.

4. Permite detectar niveles bajos de los elementos nutritivos en las plantas, antes que
alcancen el grado de deficiencias.

LIMITACIONES

1. No es un método sencillo de operar. Su realización requiere de una verdadera


especialización, pues supone el cumplimiento de varias etapas, todas ellas críticas y que son
determinantes en su éxito o fracaso final.

2. No existe una relación de proporcionalidad estrecha entre el nivel foliar de un elemento y


la magnitud de las medidas correctivas que deben aplicarse para lograr el adecuado balance.
Es decir que es un método que no es suficiente por sí solo, pues si bien es cierto que puede
indicar qué elemento está deficiente, no señala la dosis a aplicar para solucionar el
problema.

El diagnóstico definitivo ha de basarse, finalmente, en los síntomas visuales, en los análisis


de suelos y en el análisis foliar; o al menos en los dos últimos.

ETAPAS QUE COMPRENDE LA REALIZACION DEL ANALISIS FOLIAR

1. ESTUDIO PREVIO DE LA PLANTACION

Esto significa, en primer lugar, tener un conocimiento preciso de una serie de aspectos
como especie, cultivar, portainjerto, las características del suelo, las prácticas culturales a
que es sometido el huerto, etc.

Luego, el campo debe de ser dividido en secciones aparentemente homogéneas en cuanto a


factores como patrón, edad, suelo, etc. Cada una de tales secciones se denomina unidad de
muestreo. El área de cada una de estas es variable, según la superficie total del huerto. Sin
embargo, aún para plantaciones bastante grandes, es aconsejable que no sea mayor de 3.0
ha.

2. MUESTREO

Es una de las fases más críticas. Antes de realizarlo es necesario revisar, en la literatura
especializada existente, la metodología más adecuada, que es recomendada por los
especialistas, para cada especie en particular. Esto es importante a tener en cuenta, pues hay
variaciones, según el frutal de que trate, en aspectos como edad de las hojas o parte de las
hojas a muestrear.

Algunas de estas variaciones se dan inclusive cuando se trata de una misma especie. Así,
para el caso de los cítricos hay dos sistemas de muestreo, cada uno con sus propias reglas:
muestreo de terminales con fruto y muestreo de terminales sin fruto. En el primero de
estos, deben tomarse hojas de 4 - 10 meses de edad, mientras que en el otro serán de 5 - 7
meses.

En cuanto al número de hojas por unidad de muestreo, no existe un criterio uniforme entre
los especialistas. Para cítricos, por ejemplo, en el Perú generalmente son 72, sin embargo
algunos consideran que deben ser 80 a 100 hojas. En otros países, estas cifras varían entre
100 y 300.

No todos los árboles que constituyen una unidad de muestreo deben de ser muestreados.
Estos serán elegidos al azar y el número de ellos depende finalmente del número total de
árboles que la conforman y del número de hojas por unidad de muestreo que se desea.

Las hojas son envueltas en papel periódico y luego puestas en bolsas de papel. Así son
enviadas al laboratorio respectivo.

ALGUNAS TECNICAS DE MUESTREO FOLIAR

Manzano y peral

Hojas maduras con peciolos. De ramas en crecimiento, a mitad de verano (de 4 a 6 meses).
Deben muestrearse el 10 % de los árboles.

Palto

Hojas sin peciolos, de 3 - 4 meses de edad, de terminales no fruteros. Deben ser


muestreados el 10 - 20 % de árboles.

Mango

Hojas con peciolos, tomadas en plena floración del centro del brote terminal no frutero.

Duraznero

Hojas maduras incluyendo peciolos, extraídas de la parte central o cerca de la base de la


rama cuyo terminal esté en crecimiento, 12 - 14 semanas después de la floración. Muestrear
el 10 % de los árboles.

Chirimoyo
Hojas maduras con peciolos, de terminales no fruteros. Muestrear, entre mayo y
septiembre, el 10 % de árboles.

Cirolero

Hojas con peciolos. Tomar las muestras entre las 8 y 12 semanas después de la floración, de
la parte central de las ramas. Debe muestrearse el 10 % de los árboles.

Vid

Hojas con peciolos, hojas sin peciolos o peciolos solos. Las muestras se recolectarán al
final del periodo de floración. Si se trata de hojas, con o sin peciolos, serán tomadas del 5º
nudo. Tratándose de peciolos solos se hará del 5º al 7º nudo.

Fresa

Hojas sin peciolos, bien expandidas y maduras, 5 semanas después de la floración.

Higuera

Hojas maduras, bien desarrolladas, con peciolos.

3. ANALISIS DE LAS MUESTRAS

Una vez en el laboratorio, las hojas son lavadas en solución clorhídrica 0.1 N, agua de caño
y agua destilada. Luego son secadas durante 24 horas a 65 - 70º C. Posteriormente se
procede a su molienda. De esta manera las muestras están listas para su análisis.

4. INTERPRETACION DE LOS RESULTADOS

La concentración de los elementos mayores (N, P, K, Ca, Mg, S) en los tejidos analizados,
es normalmente expresada como porcentaje en relación al peso seco de las muestras,
mientras que los microelementos se indican como ppm.

Existen tres técnicas utilizadas para la interpretación de un resultado de análisis de plantas o


foliar, según se use como comparación: a) un valor estándar, b) un nivel crítico, c) un
rango de suficiencia.

Si los resultados que se desean interpretar, para cada elemento nutritivo en particular, se
ubican alrededor del valor estándar, se considera que la concentración del nutriente en
cuestión es «normal». Si por el contrario el contenido está por debajo o por encima del
valor estándar, se asume que el nutriente estará en deficiencia o en exceso, respectivamente.
Como una referencia, se anotan los datos del cuadro 8.
Cuadro 8. Valores estándares del contenido de nutrientes foliares determinados para
plantaciones de tres especies en Mitigan (USA)

Elemento Manzano Duraznero Cerezo dulce

N % 2.33 3.87 2.95


P « 0.23 0.26 0.25
K « 1.53 1.68 1.67
Ca « 1.40 2.12 2.09
Mg « 0.41 0.67 0.68
Mn ppm. 98 151 150
Fe « 220 166 203
Cu « 23 18 57
B « 42 48 50
______________________________________________

Un nivel crítico, es la concentración del elemento debajo de la cual ocurre una deficiencia
y sobre la cual, pero sólo hasta ciertos límites, existe un contenido adecuado.

El rango de suficiencia, por su parte, se da entre dos limites. Debajo del inferior se
presentará la deficiencia y sobre el superior habrá un exceso del nutriente considerado.

A partir de estos conceptos se han elaborado tablas bastante didácticas, con los cuales se
comparan los resultados remitidos por el laboratorio. Esto último constituye en la práctica,
la interpretación de los resultados.

Lo más recomendable es que las tablas conteniendo los estándares, los niveles críticos o los
rangos para cada especie, deben de indicar la modalidad del muestreo para la cual serán
válidos los valores anotados.

Como corolario de la interpretación del análisis foliar, y conociendo además la cantidad de


cada fertilizante aplicado la campaña anterior, la decisión a tomar estará referida finalmente
a mantener o modificar, incrementando o disminuyendo, las dosis de fertilización.

A continuación en los cuadros 9, 10, 11 y 12 se anotan algunos niveles de nutrientes en las


hojas, como una guía de referencia para la interpretación de los análisis foliares.

Cuadro 9. Niveles adecuados de nutrientes en hojas de 5-6 meses de terminales sin fruta
de palto.
________________________________________________
N : 1.60 - 2.00 % Mn : 30 - 50 ppm
P : 0.08 - 0.25 « Cu : 5 - 15 «
K : 0.75 - 2.00 « Fe : 50 - 200 «
Ca : 1.00 - 3.00 « Zn : 30 - 150 «
Mg : 0.25 - 0.80 « B : 50 - 100 «
S : 0.20 - 0.60 « Mo : 0.05-1.0 «
_________________________________________________
Cuadro 10. Niveles del contenido de nutrientes para terminales no fruteros de naranjo.
___________________________________________________________________
Elemento Defic. Bajo Optimo Alto Exceso
___________________________________________________________________

N (%) < 2.0 2.00-2.20 2.20-2.5 2.6- 2.8 > 2.8


P « « 0.09 0.09-0.11 0.12-0.16 0.17-0.28 « 0.29
K « « 0.7 0.7 -1.1 1.2 -1.7 1.8-2.3 «2.3
Mg « 0.16 0.16-0.25 0.26-0.6 0.7 -1.1 « 1.2
Ca « « 1.6 1.6 -2.9 3.0 -5.5 5.6 -6.9 « 7.0
S « « 0.14 0.14-0.19 0.2 -0.4 0.4 -0.6 « 0.6
Zn (ppm) « 16 16 - 24 25 - 100 110 -200 « 300
Mn « « 16 16 - 24 25 - 200 300 -500 « 800
Fe « « 36 36 - 59 60 - 120 130 -200 « 250
Cu « « 3.6 3.7 - 4.9 5 - 15 15 - 20 « 20
B « « 21 21 - 30 31 - 100 101 -260 « 260
Mo « « 0.05 0.06-0.09 0.1- 1.0 1 - 50 « 100

Cuadro 11. Estándares de contenidos foliares de nutrientes determinados en hojas de 4-10


meses del brote de primavera, en terminales con fruto de naranjo.
________________________________________________________________
Elemento Defic. Bajo Optimo Alto Exceso
________________________________________________________________

N (%) 0.6-1.9 1.9-2.10 2.2-2.7 2.3- 3.5 3.6


P « 0.07 0.7-0.11 0.12-0.18 0.19-0.29 0.3
K « 0.15-0.30 0.4-0.9 1.0-1.7 1.8-1.9 2.0
Mg « 0.05-0.15 0.16-0.2 0.3-0.6 0.7-1.1 1.2
Ca « 2.0 2.0-2.9 3.0-6.0 6.1-6.9 7.0
S « 0.05-0.13 0.14-0.19 0.2-0.3 0.4-0.49 0.5
Zn (ppm) 4-15 15 - 24 25-100 110-200 200
Mn « 5-20 21 - 24 25-100 100-200 300
Fe « 40 40 - 60 60-150 150 -
Cu « 0.01-0.05 0.06-0.09 0.1-3.0 4-100 100
B « 15 15-40 50-200 200-250 250
___________________________________________________________________
Cuadro 12. Niveles de nutrientes en hojas de manzano.
_______________________________________________
Elemento Deficiente Normal
_______________________________________________

Nitrógeno (%) Menos de 1.6 1.7 - 2.5


Fósforo « « « 0.13 0.15 - 0.3
Potasio « « « 1.0 1.2 - 1.9
Calcio « « « 0.7 1.5 - 2.0
Magnesio « « « 0.25 0.25 - 0.35
Manganeso (ppm) « « 25.0 25 - 150
Fierro « « « (*) 40 - 500
Boro « « « 20.0 20 - 60
Cobre « « « 4.0 5 - 12
Zinc « « « 14.0 15 - 200
Molibdeno « « « 0.05 0.1 - 0.2
________________________________________________
* : No hay datos

DETERMINACION DEL PLAN DE FERTILIZACION


El método moderno de determinación de un programa de fertilización, está basado en el
análisis de suelos y el análisis foliar. Sin embargo, los datos aportados por ambos análisis
muchas veces no son suficientes, y para una correcta decisión se hace necesario conocer
además:

a) Cantidad de fertilizantes aplicados en campañas pasadas.


b) Producción lograda por hectárea.
c) Análisis nematológico.
d) Presencia de virus (muy importante en cítricos).
e) Problemas de drenaje, etc.

Como una buena guía práctica, ha que tener presente que las dosis o fórmulas de
fertilización iniciales deben de ser determinadas en función del análisis de suelos, las
exigencias teóricas del frutal y la experiencia local de otros fruticultores. Posteriormente se
realizarán ajustes anuales sobre la base de los resultados de los respectivos análisis
foliares.

la necesidad de lograr un adecuado balance nutricional, obliga a poner a disposición del


frutal cantidades extras de elementos nutritivos minerales, bien sea de origen orgánico u
inorgánico. Para que sean adecuadamente tomados por la planta, la aplicación de estos
fertilizantes puede hacerse al suelo o al follaje.
APLICACION DE FERTILIZANTES AL SUELO
En esta forma se aplican los abonos orgánicos y, por lo general, todas las fuentes de
macroelementos. Para poder efectuar una correcta aplicación, es necesario tener bien
presente cuatro consideraciones o principios esenciales:

a) La absorción se realiza por los pelos absorbentes y las zonas en crecimiento, aun no
suberizadas, de las raíces.

b) La aireación del suelo es fundamental para suministrar el oxígeno requerido para los
procesos de oxidación en las células de la raíz, que darán la energía necesaria para la
absorción de los nutrientes.

c) Las raíces deben estar convenientemente abastecidas delos carbohidratos de la parte


aérea.

d) Es necesario conocer las características particulares del sistema radicular del cultivar a
fertilizar (profundidad, distribución lateral y cantidad de raíces). Esto será decisivo en la
determinación del lugar en que será localizado el fertilizante. Como regla general se
recomienda distribuirlo alrededor de la planta y a la altura de la proyección de la copa. Se
asume que en esta zona se encuentra la mayor proporción de raíces activas en la absorción.

DOSIS

Las cantidades a aplicar deben de ser expresadas en gramos por planta ( también se suelen
anotan como kilos/ha), y determinadas de preferencia sobre la base de los análisis de suelos
y foliar, tal como se anotó oportunamente. Sin embargo con mucha frecuencia se recurre a
las tablas de fertilización, las que indican, en la mayoría de los casos, las dosis de los cuatro
macroelementos, N, P, K, Mg. Algunas veces sólo se refieren a N, P y K.

EPOCAS DE APLICACION

En plantas adultas, para determinar las épocas de aplicación de los fertilizantes, se hace
necesario conocer la intensidad de la actividad del sistema radicular. Un segundo factor
a tener en cuenta en las épocas de aplicación, es el carácter estacional de la absorción,
sobre todo en lo que respecta a N, P y K. El nitrógeno y potasio, por ejemplo, mantienen
una correlación positiva con la curva de temperatura. En el caso del fósforo, esta
correlación no es muy marcada.

La existencia de estos dos factores determina que las dosis anuales recomendadas deban de
ser fraccionadas. El número de fracciones estará en función del tipo de suelo y también, en
algunas oportunidades, de las temperaturas y del tipo de riego utilizado.

Considerando el empleo de sistemas de riego por gravedad, la primera aplicación, en


plantaciones adultas, debe tener lugar antes del inicio del brotamiento principal o poco
después, en primavera. Luego, la segunda, 3 a 4 meses después, y si hay una tercera,
igualmente 3 - 4 meses más tarde. El esquema general sería el siguiente:

a) El primer año de la plantación.

A la plan- 3-4 meses 3-4 meses


Elemento tación después después
___________________________________________

N 1/3 1/3 1/3


P todo — —
K 1/2 1/2 __
Mg — todo __
___________________________________________

b) En los años siguientes. Mientras la planta no supere aún su estado juvenil, la época de
aplicación y el fraccionamiento será similar al primer año.

c) A partir del año en que empieza a florear

Al bro- 3-4 3-4


tamiento meses meses
y flora- después después
Elemento ción
___________________________________________

Nitrógeno a. 1/3 1/3 1/3


b. 1/2 1/2 —
Fósforo todo — —
Potasio 1/2 1/2 —
Magnesio — Todo —
____________________________________________

Cuando se emplean sistemas de riego presurizado existen posibilidades de un mayor


número de fraccionamientos de los nutrientes a aplicar por campaña, lo que incrementa la
eficiencia en su utilización por las plantas..

FORMAS DE APLICACION AL SUELO

a) En inyección o puyado

Los fertilizantes, generalmente en mezclas, son colocados en 4 - 5 puntos en el suelo, bien


distribuidos al rededor de la planta y a la altura de la proyección de la copa. Para ello se
hace, en cada punto, una perforación de aproximadamente 30 cm de profundidad con la
lampa.

b) En bandas
Según la forma que estas adopten, pueden presentarse las siguientes variantes: en anillo, en
cuadrado, en dos líneas, etc. Las más recomendables son aquellas que permiten la
distribución de los fertilizantes alrededor del árbol.

c) Junto con el agua de irrigación

Se conoce como fertirrigación. es ampliamente utilizado por ejemplo en el riego por


goteo.

APLICACIONES FOLIARES DE NUTRIENTES

De esta manera se aplican principalmente los micronutrientes y deben de ser consideradas


como un complemento de las aplicaciones al suelo. La penetración de los elementos
nutritivos al interior de la hoja tiene lugar por varias vías:

a) Por la cutícula, a través de las resquebrajaduras de esta.


b) Por los pelos epidérmicos de las hojas, generalmente, más abundantes en el envés.
c) Por intercambio iónico.

Ventajas de las aplicaciones foliares

a) Permite una absorción y utilización bastante rápidas.

b) Pueden realizarse en combinación con tratamientos fitosanitarios. Sin embargo, pueden


presentarse ciertos problemas de incompatibilidad de mezclas entre algunos productos.

c) Es un buen complemento de las aplicaciones al suelo.

Desventajas de las aplicaciones foliares

a) Al emplearse forzosamente concentraciones bajas, las cantidades absorbidas son


pequeñas. Por eso es que su uso está más dirigido a los microelementos, en cuyo caso, los
reducidos volúmenes absorbidos son suficientes.

b) Deben usarse con frecuencias limitadas, pues se necesitan varios días (hasta 10 - 15),
para una completa absorción.

c) Son poco efectivos en ciertas condiciones, como por ejemplo en presencia de lluvias.

d) Pueden haber pérdidas significativas por la caída del fertilizante al suelo.

La absorción foliar de nutrientes se verá muy favorecida con el empleo de elementos


quelatizados (productos comercialmente llamados «quelatos»). Normalmente los iones de
elementos menores metálicos, por estar cargados positivamente, no penetran con facilidad
hacia el interior de las células del tejido foliar, pues son retenidos por la cutícula de la hoja
o aún por las paredes celulares mismas que, por el contrario, son electronegativas. La
quelatización es un proceso a través del cual el ion metálico es totalmente cubierto con un
coloide protector electronegativo. De esta manera se obtiene un ion metálico quelatizado
que es neutro y que, por lo tanto, penetra con facilidad al interior de las células en donde el
coloide protector se separa del ion metálico.

EPOCA DE APLICACION DE ABONOS FOLIARES

Generalmente, el mejor momento es cuando las hojas tienen 3/4 partes de su desarrollo
total. Sin embargo, en el caso del Zn se han obtenido buenos resultados, en caducifolios,
con aplicaciones durante la dormancia, antes que las yemas estén muy hinchadas, en
dosis de 1 - 5 %

FUENTES DE NUTRIENTES EN GENERAL

La utilización de sustancias portadoras de elementos nutritivos ha evolucionado a través del


tiempo, desde los abonos orgánicos naturales tipo guano y los fertilizantes minerales
naturales, hasta los fertilizantes químicos artificiales. Estos últimos, que son los más
empleados en la actualidad, se expenden muchas veces como mezclas de varios nutrientes.

FERTILIZANTES NATURALES ORGANICOS TIPO GUANO

A pesar que, desde el punto de vista de pureza o aporte de nutrientes por unidad de peso,
estos fertilizantes son menos eficaces que los sintéticos, (ver cuadro 19 ), su aplicación a
plantaciones de frutales es sumamente beneficiosa sobre todo por sus efectos positivos
sobre características físicas del suelo, como por ejemplo el aumento de la retentividad de
los suelos ligeros y el incremento de la soltura de los suelos pesados. Otro aspecto a favor
de este tipo de fertilizantes es que los nutrientes se liberan lentamente.

Cuadro 13. Porcentaje aproximado de nutrientes de algunos fertilizantes orgánicos


naturales.

N P2O5 K2O CaO MgO


___ ____ ___ ___ ___

Estiércol seco de res 2.0 1.5 2.0 4.0 1.0

« « « aves 5.0 3.0 1.5 4.0 1.0


Guano de islas 13.0 12.0 2.5 11.0 1.0
Harina de pescado 9.5 7.0 - 8.5 0.8
Humus de lombriz 1.5 1.2 1.0 3.0 -
____________________________________________________________
FERTILIZANTES MINERALES

NITROGENADOS

Urea. 46 % de N. Realmente el nitrógeno de la urea es orgánico, pero en el suelo se


transforma rápidamente en amoniacal. La formación de amoniaco provoca un aumento
temporal de pH, lo que muchas veces resulta útil para disminuir la toxicidad de
microelementos.

Nitrato de amonio. 33.5 % de N. Recomendable para la zona de selva.

Sulfato de amonio. 21.0 % de N. Es ácido. Puede favorecer la absorción de


microelementos, pero no en suelos que ya son ácidos. No recomendable para la selva.

Nitrato de sodio. 15 - 16 % de N.

FOSFORADOS

Superfosfato simple de calcio. 20 % de P2O5. Es soluble en agua y se libera en forma


gradual.

Superfosfato triple de calcio. 47 % de P2O5.

Hiperfosfato de calcio. 28 - 32 % P2O5.

POTASICOS

Sulfato de potasio. 50 - 53 % K2O. Es también una fuente importante de otro elemento


esencial como el azufre.

Cloruro de potasio. 50 - 52 % de K, que es equivalente a 60 - 65 % de K2O. Conocido


también como «muriato de potasa», contiene un porcentaje elevado de cloro que es
perjudicial, sobre todo para frutales de hueso.

Sulfato de potasio y magnesio. 22 % K2O. Es también fuente de magnesio ( 18 % MgO )


y azufre.

MAGNESICOS

Sulfato de magnesio. 20 % MgO. A pH elevado se insolubiliza.

Sulfato de potasio y magnesio. 18 % MgO. Es también fuente de potasio y azufre.

Dolomita. 15 - 18 % de MgO. Es un fertilizante mineral natural formado por carbonatos


de calcio y magnesio. Muy recomendable en la selva para corregir el pH.

MEZCLAS DE FERTILIZANTES
Con mucha frecuencia se expenden en el mercado productos fertilizantes que están
conformados por una mezcla de varios nutrientes. Algunos tienen nombres comerciales
específicos, mientras que la mayoría se identifica únicamente con las cifras que representan
los porcentajes de los elementos que los constituyen, siguiendo el orden: N, P, K y Mg.
Entre los más comunes se encuentran los siguientes:

12-12-12 (12 % de N, 12 % de P2O5, 12 % de K2O).


8-8-8-4 (8 % de N, 8 % de P2O5, 8 % de K2O, 4 % de MgO).
8-4-8-4 (8 % de N, 4 % de P2O5, 8 % de K2O, 4 % de MgO).

ALGUNAS FUENTES DE MICRONUTRIENTES

Cobre. Sulfato de cobre . 30 % Cu

Boro. Borax. 36 % B
Acido bórico. 18 % B

Fierro. Sulfato de fierro. 33 % Fe


Quelato de fierro. 2 - 8 % Fe

Manganeso. Sulfato de manganeso. 30 % Mn

Molibdeno. Molibdato de amonio. 60 % Mo

Zinc. Sulfato de zinc. 45 % Zn

XI. PERIODO FLORACION-MADURACION


El término «floración», generalmente se usa como sinónimo de antesis floral, es decir el
estado de apertura de los pétalos de las flores. Sin embargo, en un sentido más estricto, este
término debe abarcar desde la apertura de las yemas florales hasta la caída de los pétalos.

La aparición de las flores sobre el árbol es sólo la culminación de todo un complicado


proceso previo que comenzó por lo general muchos meses antes, incluso en la campaña
anterior, con la transformación de algunas de las yemas vegetativas en yemas florales. El
tiempo que transcurre entre la floración y la cosecha se conoce como periodo F-M.

FACTORES QUE DETERMINAN EL F-M


1. ESPECIE
Las diversas especies frutales tienen periodos F-M que se ubican entre rangos más o menos
definidos para cada condición climática en que desarrolle. Así, en la costa central peruana
la duración aproximada promedio de este periodo para algunas especies es la siguiente:

Fresa : 60 días
Manzanos : entre 4 y 6 meses
Naranjos : « 7y9 «
Paltos : « 6 y 12 «

2. CULTIVAR

Independientemente del factor climático, también hay variaciones en el F-M entre


cultivares de una misma especie. A continuación se anotan algunos ejemplos con datos
obtenidos para condiciones de la Molina (costa central).

PALTOS

'Zutano' : 6 meses
'Fuerte' : 8-9 «
'Nabal' : 10 «
'Itzama' : 12 «

DURAZNEROS

'Flordared' : 3 meses
Nectarina 'Sunred' : 3.5 «
'Blanquillo' : 4.5 «
'Amarillo Moqueguano' : 5 «

La diferencia de F-M entre cultivares en una misma localidad, es uno de los factores que
determinan la característica de «tempranos», «intermedios» y «tardíos», con que se les
conoce, según su época de recolección.

3. TEMPERATURA

Una misma variedad o cultivar reduce su F-M en lugares más abrigados. Esto se presenta
como consecuencia de la acumulación más acelerada del número de «unidades térmicas»
requeridas para completar este periodo. Por ello es que el mango `Haden' por ejemplo, se
cosecha primero en Piura y después en la costa central.

De un año a otro pueden haber cambios más o menos importantes en la duración del F-M,
debido a variaciones anuales de los valores de la temperatura.

CARACTER TEMPRANO, INTERMEDIO O TARDIO DE UN


CULTIVAR
En una misma localidad, las diferencias en la época de cosecha entre los cultivares de una
misma especie son debidas a que ellos poseen:

A. F-M DIFERENTES

Es decir, existen casos en que los cultivares florean en la misma época pero la madurez de
recolección se presenta en momentos diferentes. Por ejemplo, en el caso de los cultivares de
mango Sensation y Golek floreando ambos en el mes de septiembre, la cosecha del
primero tiene lugar en mayo (F-M = 8 meses), mientras que el otro se cosecha dos meses
antes, en marzo (F-M = 6 meses). Igualmente es el caso que se observa entre muchos
cultivares de palto, manzano, duraznero, etc.

B. IGUAL F-M PERO DIFERENTE EPOCA DE FLORACION

Ocurre por ejemplo en los mangos 'Cambodiana' y 'Haden', los cuales, a pesar de
poseer un F-M similar de 7 meses, se cosechan en febrero y marzo respectivamente,
debido a que el primero florea en julio, mientras que el último lo hace en agosto.

ALARGAMIENTO DE LA EPOCA DE COSECHA


Por diversas razones, relacionadas sobre todo con precios de venta, casi siempre conviene
que la época de cosecha, o de oferta, de determinadas especies de frutas sea lo más amplia
posible. Existen tres alternativas para ello:

a) Instalación de variedades o cultivares diferentes que, bien sea por no tener igual F-M o
por florear en épocas diferentes, se cosechen también en periodos no coincidentes. O sea
mediante el uso de cvs. tempranos, intermedios y tardíos. Así por ejemplo en la costa
central, la cosecha de algunos cultivares de paltas se realiza aproximadamente en los
siguientes meses:

'Gottfried' : marzo - abril


'Zutano' : abril - mayo
'Fuerte' : junio - julio
'Hass' : agosto - septiembre
'Nabal' : septiembre - octubre

En zonas con temperaturas más elevadas, la cosecha tendrá lugar antes, pero siempre se
mantendrá el orden anotado precedentemente.

De la misma manera, la secuencia en la cosecha de algunos de los principales mangos es


como sigue: 'Cambodiana', 'Haden', 'Kent', 'Keitt', 'Tommy Atkins', 'Sensation', “Cafro”.

b) La época de cosecha puede alargarse también con un mismo cultivar conducido en


diferentes zonas climáticas. La cosecha se adelanta en zonas más cálidas y se retraza en
aquellas con temperaturas más bajas. Esto se verifica por ejemplo, además del ya anotado
caso de los mangos, con los cítricos, que se cosechan primero los de la selva y luego los
conducidos en la costa.

c) Finalmente, existe la posibilidad de ampliar la época de la cosecha en la misma zona y


con los mismos cultivares. Esta alternativa está referida exclusivamente a especies
caducifolias, muchas de las cuales son susceptibles de ser manejadas a través de técnicas
especiales (las mismas que ya han sido anotadas oportunamente), que permitan el
cumplimiento de su ciclo anual en diversos periodos durante el año. Este particular manejo
cultural está supeditado a la existencia de condiciones climáticas especiales, que se dan
sobre todo en los valles interandinos.

Sin embargo, también es posible, aunque de manera mucho más limitada, adelantar la
producción en algunos siempreverdes como mangos y mandarinas, manejando el agua de
riego y aplicando productos químicos que favorezcan o promuevan la apertura de las
yemas antes de la época normal.

CRECIMIENTO DEL FRUTO


El aumento de volumen, que se asocia al crecimiento de los frutos, es el resultado de los
siguientes procesos:

1. Divisiones celulares
2. Alargamiento o expansión celular
3. Expansión de los espacios intercelulares

Las divisiones celulares están asociadas a los estados iniciales de crecimiento de los frutos,
mientras que el aumento del tamaño de las células predomina en las últimas etapas. Sin
embargo, hay variación en cuanto a la duración de ambos procesos entre las diferentes
especies y, por lo general, en algún momento las divisiones celulares ocurren
simultáneamente con las expansiones celulares. En algunas especies la situación se
presenta, parcialmente, de la siguiente manera:

a) Manzanos y durazneros. La división celular cesa 3 - 4 semanas después de la floración.

b) Género Rubus (frambuesa). La división celular cesa antes de la polinización. A partir


de esta, el crecimiento del fruto es sólo por alargamiento celular.

c) Palto. Las divisiones celulares persisten hasta la madurez. En algunos trabajos


experimentales se determinó que inclusive secciones de pulpa aisladas, colocadas sobre
agar, siguieron mostrando divisiones celulares por varias semanas.

FORMAS DE CRECIMIENTO

Si se grafica el crecimiento de los frutos, expresado en el incremento de su volumen, peso,


longitud o diámetro, en función del tiempo, se aprecia claramente que este proceso se ajusta
a la curva de una determinada función matemática. Para un gran número de frutos el
gráfico corresponde a una sigmoide simple, y es el caso de las manzanas, peras, piñas y
fresas, entre otros. Un segundo grupo presenta una sigmoide doble de crecimiento,
correspone entre otros a duraznos, ciruelas, olivas, cerezas, higos, uvas, etc.

Las formas de crecimiento reflejan que este no es uniformemente continuo sino que, muy
por el contrario, se presenta con intensidades variables. Estos cambios, generalmente, están
asociados con otros procesos internos del fruto.

Figura 26. Curvas de crecimiento de los frutos.


A: sigmoide simple B: sigmoide doble.

MADURACION
Esta denominación abarca todos los procesos internos y externos a través de los cuales los
frutos logran su máximo crecimiento y desarrollo y alcanzan la madurez.

ALGUNOS CAMBIOS INTERNOS DURANTE LA MADURACION

1. En especies como manzanos, perales y bananos, cuyos frutos maduros contienen


almidón, este empieza a disminuir por su transformación en azúcares, bastante antes que el
fruto esté en estado de ser cosechado. Por ejemplo en los bananos los almidones bajan de
aproximadamente 21.5 % a 1.5 % y los azúcares suben de 0.1 % a 19.0 % . Algunos
compuestos como el etileno y otros reguladores del crecimiento, aceleran el proceso,
mientras que los taninos lo retardan.

2. El contenido total de ácidos tiende a disminuir notablemente. El caso más notable es el


de la mayoría de los cítricos

3. En frutos oleosos como las paltas, el contenido de aceite aumenta.

4. Los compuestos solubles de taninos (que dan el sabor astringente característico de frutos
inmaduros como plátanos, membrillos y manzanos), pueden ser solubilizados.
5. En las membranas celulares, los compuestos pécticos insolubles relativamente rígidos,
como la protopectina, se transforma en pectina, que es menos rígida cuando se mezcla con
el agua. Esto permite que el fruto adquiera una consistencia blanda. La transformación de la
protopectina en pectina es también acelerada por el etileno.

ALGUNOS CAMBIOS EXTERNOS DURANTE LA MADURACION

Generalmente se presentan como consecuencia de transformaciones internas.

Tamaño. Las dimensiones finales, características de los frutos de cada especie y cultivar,
frecuentemente son alcanzadas antes que todos los otros procesos de maduración se hayan
completado.

Color. En la mayoría de los frutos, los cambios de coloración son los síntomas más
notorios de la maduración, y se presentan principalmente como consecuencia de la
descomposición de la clorofila y la manifestación o la síntesis de otros pigmentos como
los carotenos, xantofilas, antocianinas y flavonoides.

En algunas frutas como manzanas, peras, duraznos y nectarinas, las antocianinas no


pueden desarrollar mientras los frutos no sean expuestos a la luz solar directa.

Textura. Las variaciones en este aspecto se refieren a una pérdida de la rigidez o dureza
que experimentan la mayoría de los frutos durante el proceso de maduración. Ocurren como
resultado de modificaciones en la estructura física y química de los componentes celulares.

En los duraznos suaves poco consistentes y muy jugosos, el cambio de protopectina a


pectina de las paredes celulares, deja a estas muy delgadas y frágiles. Esto trae como
consecuencia que algunas de las células se rompan y su jugo sea vaciado en los espacios
intercelulares.

En los duraznos de pulpa más firme hay menos cambio de la protopectina. Mucho de esta
permanece entremezclada con la celulosa.

Sabor. En la mayor parte de los frutos, la percepción del gusto típico de cada uno de ellos a
la madurez, es debida a la combinación de muchas substancias. De estas, tres son las más
importantes: azúcares, ácidos y productos astringentes.

Los azúcares que están presentes en los frutos en cantidades importantes y en proporciones
variables, son: glucosa (la menos dulce), fructosa (la más dulce) y sacarosa.

Los ácidos orgánicos más comunes son:

a) Acido cítrico. Propio de las frutas cítricas (y aparentemente el más importante en peras,
guayabas y piñas).

b) Acido málico. Dominante en la mayoría de caducifolios (manzanas, cerezas, ciruelas),


y también en plátanos y melones, entre otros.
La astringencia en los frutos es debida a los taninos y a otros compuestos, cuya
concentración es mucho mayor en los frutos inmaduros,

Aroma. Muchos frutos presentan un olor característico en las etapas finales de su


maduración. Este es ocasionado por substancias volátiles específicas, constituidas, en parte,
por diversos ésteres de los ácidos fórmico, acético, caproico y caprílico.

Todos los cambios propios de un proceso de maduración pueden ocurrir íntegramente en


el fruto adherido al árbol (tal como sucede en los cítricos de la costa y sierra, en las
manzanas en general, etc.), o bien parte de ellos presentarse después de la cosecha, como
es el caso del ablandamiento de las paltas y las peras.

Cuando un fruto ha completado todas las transformaciones propias de su maduración


normal, se dice que ha alcanzado su madurez botánica u hortícola. Luego empezarán a
presentarse procesos degenerativos o de deterioro.

MADUREZ
Este término se emplea, indistintamente, para designar el estado de un fruto apto para ser
colectado o consumido.

MADUREZ FISIOLOGICA

Estado de un fruto que ha alcanzado su máximo crecimiento y desarrollo. Por lo general


coincide con la culminación del proceso de maduración y, en consecuencia, los frutos
estarán listos para ser consumidos (salvo algunas excepciones como las pecanas por
ejemplo).

MADUREZ COMERCIAL

Estado en que un fruto puede ser colectado y comercializado. El fruto comercialmente


maduro, por lo tanto, puede o no haber alcanzado su madurez fisiológica. Por ejemplo, en
el caso de los bananos, paltas, peras, kiwis, chirimoyas, olivos, etc., la madurez comercial
(cosecha) normalmente se presenta antes que la fisiológica (consumo), mientras que en los
cítricos, manzanas, granadillas, uvas, etc., ambos estados coinciden.

En algunos casos, la madurez comercial se presenta después que la fisiológica. Es la


situación ya anotada de las pecanas y otras nueces, las cuales a pesar de estar
fisiológicamente maduras no se recolectan, ni menos se consumen, hasta que hayan secado
convenientemente.

Madurez comercial óptima. Es el estado en el cual los frutos al ser extraídos del árbol ya
tienen, o alcanzarán después, las mejores características para su consumo.
Inmadurez. Concepto de significado totalmente opuesto al anterior. Dentro de ciertos
límites, cuanto más inmaduros sean cosechados, los frutos tendrán finalmente menor
calidad.

Sobremaduración. Cuando las características comestibles dejaron ya de ser las mejores y


la calidad se deteriora. Puede ocurrir en el fruto aún adherido al árbol, como en los cítricos,
duraznos, etc., o después de cosechado (caso de paltos y mangos, por ejemplo).

CALIDAD
Conjunto de propiedades físicas, químicas y bioquímicas características de un fruto,
presentes en proporciones variables, y que determinan su valor comercial. Es un concepto
bastante relativo pues algunas categorías de calidad de un fruto varían de acuerdo a los
requerimientos, gustos o costumbres particulares del o de los consumidores.

La calidad es el resultado directo de los cambios internos y externos que experimenta un


fruto durante el proceso de maduración. En consecuencia puede hablarse de calidad interna
y externa.

Los factores de calidad interna son mayormente específicos para cada especie o aún para
cada cultivar. Por ejemplo para las paltas tiene mucha importancia el contenido de aceite,
en cítricos el porcentaje de jugo, etc. Sin embargo uno de los factores que puede
considerarse común es el relacionado con el contenido de azúcares que, por lo general, se
expresa como porcentaje de sólidos solubles o mejor aún como la relación sólidos - ácidos.

A continuación se anotan los porcentajes de azúcar que contienen algunas de las frutas más
importantes en estado de consumo.

Cuadro 14. Contenido de azúcar de algunas frutas

% de azúcar (gr/100gr)
_____________________
Fruta Peso fresco Peso seco
______________________________________
Plátano 16.2 55
Uva 15.5 80
Mango 15.3 90
Nectarina 12.4 63
Piña 11.6 74
Naranja 8.5 57
Durazno 9.1 61
Palta 1.8 06
Fresa 6.2 56
_______________________________________
FACTORES DE CALIDAD EXTERNA

Tamaño. Un mayor tamaño de fruto, hasta ciertos límites, es normalmente un factor


positivo de calidad.

Forma. Ayudará a determinar una buena calidad externa, la forma que se ajuste a la que es
característica del cultivar o variedad. Por ejemplo la forma redonda de la palta 'Nabal' o del
mango 'Tolbert', la apariencia aplanada lateralmente del mango 'Chato de Ica', o aplanada
en el sentido apical-basal de la manzana 'Hoover', etc.

En la figura 17 se indican de manera aproximada las siluetas típicas de algunas paltas.

Figura 17. Formas aproximadamente típicas de algunas paltas.

Color. La calidad externa se verá beneficiada en la medida que la coloración de los frutos
se ajuste a aquella que es típica del cultivar o variedad. Es el caso del color de las
manzanas: rojo para las del tipo 'Red Delicious', amarillo para la 'Golden Delicious' o
verde para 'Granny Smith'.

Sanidad. Cualquier evidencia de daños por problemas sanitarios sobre los frutos, es un
elemento que disminuye su calidad. Ocurre por ejemplo en el caso de frutas cítricas con
ataques de ácaros o queresas, manzanas o duraznos con huellas de ataques de oídium,
mangos con antracnosis, etc.

Daños mecánicos. Restan calidad a los frutos. Se producen, habitualmente, por una
cosecha inadecuada o un mal manipuleo posterior. La presencia de estos daños es bastante
frecuente en frutas de producción nacional.

Apariencia fresca. Este es un factor positivo de calidad. La pérdida de humedad o


deshidratación de las frutas se presenta como consecuencia de un periodo demasiado
prolongado desde la cosecha o, en todo caso, por deficiencias en los métodos de
conservación.
COSECHA
Llamada también recolección, es la operación que consiste en la extracción de los frutos de
la planta, cuando estos alcanzan su madurez comercial.

La cosecha puede considerarse el objetivo final hacia el cual estuvieron dirigidas todas las
otras actividades culturales. Una operación de cosecha mal efectuada puede convertir en
inútiles todos los esfuerzos e inversiones que demandaron el resto de labores.

CRITERIOS GENERALES DE COSECHA

Supone la utilización de métodos de determinación de la madurez de recolección, y


están relacionados con evaluaciones de ciertas características de los frutos.

Algunos de los métodos utilizan criterios únicamente subjetivos, mientras que otros
suponen mediciones cuantitativas. Igualmente la aplicación de la metodología puede
implicar o no la destrucción de las muestras evaluadas.

Entre los más comunes se pueden mencionar a los siguientes:

1. Edad cronológica (F - M)
2. Tamaño y forma
3. Apariencia general. Mayormente color
4. Textura o consistencia
5. Gravedad específica
6. Factores composicionales. Contenidos de: almidón, azúcar, ácidos, aceite, etc.

ALGUNOS INDICES DE COSECHA DE CIERTAS FRUTAS


PALTAS

a) F - M. Variable, según el cultivar. Como ya se indicó oportunamente, puede variar entre


6 y 12 meses.

b) Color de cáscara. Cvs. de cáscara verde: Tono más opaco, pérdida de brillo. Cvs. de
cáscara negra: 50 % de coloración.

c) Color del pedúnculo. La zona cercana al fruto se torna marrón.

d) Color de lenticelas. En frutos de cáscara verde las lenticelas adquieren una coloración
bronceada.

e) Envolturas seminales. Se tornan marrones.


f) Porcentaje de aceite. Debe de determinarse para cada lugar y cada cultivar en particular.
En California, EE.UU., el porcentaje mínimo de aceite que deben tener los frutos del cv.
Fuerte para ser cosechados es 8 %

Otros datos importantes: El ablandamiento del fruto sólo se produce una vez cosechado,
normalmente (al medio ambiente) entre 5 y 10 días después.

MANZANAS

a) F - M. Variable. Entre 4 y 6 meses.

b) Tamaño. También es variable, dependiendo del cultivar y de las condiciones del cultivo.

c) Color de la cáscara. Según el cultivar. Hay algunos que maduran de color rojo total,
amarillo, verde, con estrías rojas sobre un fondo crema o amarillo, etc.

d) Facilidad de separación de la fruta de la planta. En algunos casos este criterio no es


muy confiable.

e) Firmeza o dureza de la pulpa. Debe de determinarse para cada cultivar en especial. El


patrón membrillero confiere más dureza a la fruta.

f) Color de las semillas. En los frutos maduros las semillas se tornan marrones.

MANIPULEO O FORMA DE COSECHA


El manipuleo de las frutas al momento de ser recolectadas, debe ser realizado
cuidadosamente. Los golpes y las magulladuras afectarán más marcadamente a aquellas
con cáscara delgada. En casi la totalidad de casos, la cosecha es manual y en su ejecución
deben emplearse, en lo posible, materiales como guantes, escaleras, tijeras, bolsas
cosechadoras especiales, canastos de poco fondo, etc.

Existen ciertos detalles particulares a tener en cuenta en algunas especies, entre los que se
pueden mencionar, a manera de ejemplo, los siguientes:

Paltas. Deben cosecharse siempre con una porción del pedúnculo adherida al fruto. En
consecuencia, la recolección debe de ser hecha a mano y con la ayuda de una tijera. En
algunas ocasiones suele usarse una vara cosechadora en cuyo extremo lleva una bolsa así
como una tijera (que será manipulada desde el otro extremo) o una superficie metálica
afilada que pueda cortar el pedúnculo.

Cítricos. La cosecha también debe hacerse a mano. Cuando se trata de naranjas, toronjas,
limones, limas , entre otras, los frutos pueden ser desprendidos de la planta efectuando una
ligera torsión y luego tirando de ellos o empujándolos hacia arriba o a los costados. De esta
manera el cáliz queda adherido al fruto. No obstante, cuando se trata de ciertas mandarinas
como 'Satsuma', 'Dancy', 'Clementina' y otras, una cosecha similar a la anotada trae como
consecuencia que la cáscara, alrededor de la inserción del pedúnculo, se rompa. Por eso es
que en estos casos la recolección debe de realizarse cortando los pedúnculos con s tijeras.

RENDIMIENTOS
Se expresan en kg/ha o t/ha. Algunas veces pueden también anotarse como kg/planta.

Los rendimientos que pueden obtenerse con una determinada especie y/o cultivar son
variables , según las condiciones de clima y suelo en que se desarrollen y el nivel técnico
del manejo de la plantación (densidad, riegos, abonamiento, sanidad, etc.).

De manera general, en nuestro país los rendimientos promedio, para la mayoría de los
frutales, son relativamente bajos en comparación con los obtenidos en otros países que son
productores importantes. Algunos como ciertas uvas, mandarinas y paltos están más o
menos mejor ubicados en este aspecto.

En las condiciones actuales del Perú, para algunas especies, podrían considerarse como
aproximadamente buenos rendimientos, expresados en kg/ha, los siguientes:

Manzanos : 25,000 - 30,000


Durazneros : 15,000
Ciroleros : 10,000
Pecanos : 2,500
Naranjos : 25,000 - 30,000
Mandarinas : 35,000 - 45,000
Paltos : 15,000
Mangos : 20,000
Maracuyá : 15,000
Lúcumos 18,000

CLASIFICACION Y EMBALAJE
La clasificación se puede realizar de acuerdo a criterios variados, como grado de madurez,
coloración, sanidad, etc. Sin embargo la clasificación más usada es según el tamaño.

Para el embalaje deben de emplearse envases adecuados para cada especie frutal, de manera
tal que permitan el transporte de la fruta sin ocasionarle daños. Lo más aconsejable es el
uso de envases de madera o cartón, de medidas determinadas según la especie, que
posibilite colocar un número fijo de frutas según su tamaño.

La fruta destinada a exportación está sujeta a estrictas normas de clasificación, embalaje y


sanitarias, a las que el fruticultor y/o el exportador deben de sujetarse en forma muy
precisa.

Entre las labores de clasificación y embalaje, algunas frutas, como las cítricas, pueden
algunas veces ser sometidas a acciones de lavado, encerado, lustrado, sellado y etiquetado.
XII. MANEJO POSCOSECHA DE LA FRUTA
Después que la fruta es cosechada, la principal preocupación es, o debería de ser,
mantenerla en las mejores condiciones de calidad hasta su consumo, o hasta su venta al
consumidor final.

A parte del manipuleo cuidadoso de las frutas para evitar daños mecánicos, uno de los
factores que inciden directamente en el éxito o fracaso de este objetivo, es el tiempo que
transcurre entre la recolección y el consumo. Este periodo tiene una duración bastante
variable y a medida que sea menos prolongado, la posibilidad de mantener una buena
calidad de las frutas será mayor.

Un tercer factor es el medio ambiente en el que se desenvuelve toda la etapa de


comercialización. En este sentido es necesario tener en cuenta los siguientes aspectos:

Temperatura. El metabolismo es más acelerado a temperaturas altas. En estas condiciones,


la calidad será rápidamente afectada pues los cambios internos propios de la maduración se
verán acelerados o, si estos ya culminaron, todas las reacciones del proceso de deterioro
serán igualmente acentuadas. El ataque de patógenos encuentra, en estas condiciones, el
mejor campo para su acción.

Humedad. En la mayoría de frutas, el contenido de agua es bastante alto. Si el ambiente


posee baja humedad relativa, la fruta sufrirá pérdida de agua por deshidratación,
afectándose negativamente la calidad. Algunas, como el pepino dulce (Solanun
muricatum), tienden a perder la humedad mayormente por la herida que deja el pedúnculo
al ser recolectado.

Definitivamente, las pérdidas de las fruta después de cosechadas, y hasta que llegan al
consumidor final, son en nuestro país sumamente elevadas. Esta situación es más o menos
similar en todos los países subdesarrollados. En estos se estima que los porcentajes de
pérdidas del producto cosechado para algunas de las principales especies, son los
siguientes:

Paltas : 43 %
Papayas : 40 o más (incluso pueden llegar al 100%)
Cítricos : 23-33 %
Plátanos : 20-80 %
Manzanas : 14 %
Uvas : 27 %
Duraznos : 28 %

BASES DE LA CONSERVACION
Existen diversos medios que pueden utilizarse para mantener a las frutas, por tiempo más o
menos largo, en buen estado. La condición indispensable es que estos métodos sean
económica y biológicamente realizables.
El fundamento de la conservación poscosecha de las frutas es la reducción de su ritmo
respiratorio mediante la modificación del medio ambiente que las rodea. De todos los
factores ambientales que afectan el ritmo respiratorio, los más importantes son:
temperatura, composición atmosférica (oxígeno, CO2, etileno) y daño físico.

En consecuencia, se puede considerar que los procesos de conservación son factibles,


fundamentalmente, en base a tres posibilidades:

1. Descenso de la temperatura hasta límites tolerables sin riesgo para la integridad de las
frutas.

2. Reducción de la cantidad de oxígeno en la atmósfera.

3. Eliminación de catalizadores que aceleran procesos metabólicos.

METODOS DE CONSERVACION

Cuando se aborda el tema de la conservación de las frutas, frecuentemente se olvida


considerar que mucho del éxito de las diversas metodologías posibles de emplear para
determinada especie o cultivar, depende de la composición interna particular de los frutos,
que puede variar según las condiciones en que estos crecieron mientras estuvieron aún
sobre la planta.. Así, las frutas pueden estar predispuestas a una pobre conservación
cuando su contenido de agua es excesivo por abuso de los riegos en las fases finales de su
desarrollo, poco antes de la recolección, o cuando crecen en estados de deficiencias
nutritivas ( potasio para cítricos y duraznos principalmente, o calcio para manzanas, etc.).

El método de conservación más comúnmente usado es el de las cámaras de conservación.


Estas pueden ser: cámaras frías y cámaras frías con atmósfera controlada.

CAMARAS FRIAS

Se basa en el hecho que los frutos, como todos los seres vivientes, presentan exigencias
térmicas variables para sus funciones vitales. Por lo general es de más o menos 20°C. Las
temperaturas más bajas hacen más lentos los procesos. Entre los principales fenómenos
vitales que pueden reducirse considerablemente cabe destacar a la respiración.

De manera indirecta, las bajas temperaturas detienen, además, el crecimiento y la


multiplicación de bacterias y hongos que son agentes de deterioro.

Temperatura óptima de conservación. Es la temperatura a la cual la velocidad de los


procesos vitales es mínima, sin que las cualidades de la fruta se alteren. Por debajo de este
límite pueden producirse accidentes graves.

En el cuadro 15 se anotan algunos datos de almacenamiento en frío.


Cuadro 15. Temperaturas aproximadas de refrigeración recomendadas para ciertas frutas.
En todos los casos la humedad relativa no debe de ser menor de 85 %

Temperatura de Tiempo límite de


Frutas Almacenamiento Almacenamiento
°C
______________________________________________________

Bananos verdes 10 a 12 1 - 2 meses


Limones verdes 6 1-2 «
Naranjas maduras 0a2 2 «
Paltas 5 a 13 2 -4 semanas
Duraznos 0a2 2 - 3 semanas
Manzanas -1 a 5 3 - 6 meses
Ciruelas 0a5 4 - 7 semanas
______________________________________________________

CAMARAS FRIAS CON ATMOSFERA CONTROLADA

En este sistema, además del descenso de la temperatura, se modifican también, hasta ciertos
límites, otros factores como el contenido de oxígeno, que se baja, y el contenido de CO2,
que se aumenta. En estas condiciones, las temperaturas puede ser un poco más elevadas
que las utilizadas en las cámaras frías simples, lo cual reducen los riesgos de los daños por
exceso de frío. A manera de ejemplos, se anotan los niveles, generalmente usados, de tres
factores en cámaras frías con atmósfera controlada para la conservación de algunas frutas.

Para paltas
a b
______ ______
CO2 10 % 10 %
Oxígeno 2% 2%
T° 7.2°C 4.5°C
________________________________________

a: La fruta se conserva por 40 días.


b: « « « « « 60 «

Para duraznos

Se ha logrado alcanzar hasta 6 semanas en buenas condiciones, en los dos casos siguientes:
a b
______ _______

CO2 5% 5.0 %
Oxígeno 1% 2.5 %
T° 0°C -0.5°C
___________________________________________
Para una misma especie, los niveles de los tres factores involucrados en este método de
conservación, generalmente varían según el cultivar, la región, y aún el año de cosecha.

DECOLORACION
Tal como ya se manifestó oportunamente, una de las características más notables de la
calidad externa de muchas frutas, además del tamaño, es la coloración de la cáscara o
exocarpio que alcanzan durante el proceso de maduración.

Sin embargo, bajo ciertas circunstancias, algunas especies y/o cultivares alcanzan su
madurez y buena calidad interna sin el cambio normal de color. En la mayoría de casos
significa que las frutas permanecen total o parcialmente verdes.

La decoloración es el proceso que acelera artificialmente los cambios de color externo de


algunos frutos que, en condiciones naturales, tardarían mucho o serían incompletos.

ALGUNAS CAUSAS O FACTORES RESPONSABLES DE LA FALTA DE


COLOR

1. Clima. En las condiciones de climas diversos en que se cultivan los frutales en el Perú,
existen claras evidencias de un marcado efecto de las condiciones ambientales en el
desarrollo del color característico del fruto de un cultivar determinado.

Por ejemplo, en las manzanas se ha determinado que los pigmentos rojos de los frutos
aparentemente no se forman si la temperatura media nocturna, durante las cuatro últimas
semanas que permanecen sobre el árbol, es de aproximadamente 21°C o más. Un promedio
de temperaturas nocturnas entre 15 y 16°C permiten alguna coloración, pero con 7°C es
mucho más intensa. Las temperaturas diurnas parecen tener menos influencia. Igualmente
existe un efecto de la iluminación relacionada con la luz ultravioleta que favorece la
coloración roja de algunos cultivares de manzanas.

En el caso de las naranjas y frutas cítricas en general, la obtención del color está
relacionada con la variación de la temperatura diurna y la nocturna. Por ello es que la fruta
que provienen de la selva no llegan a tener la coloración amarilla anaranjada que
caracteriza a los frutos que se cosechan en la sierra o aún en la costa. Al respecto, en
Florida (EE.UU.), se ha determinado que para que se inicien los cambios de color deseados,
las temperaturas nocturnas deben de estar por debajo de 13°C.

2. Prácticas culturales. Algunas prácticas culturales como un abundante abonamiento


nitrogenado, por ejemplo, perjudica la expresión de otros pigmentos diferentes a la
clorofila, tanto por favorecer la síntesis de esta, como por promover el crecimiento excesivo
de brotes que sombrean a los frutos. En cítricos es igualmente perjudicial el abuso de la
fertilización potásica y la aplicación de aceites agrícolas a los frutos.
Uno de los objetivos de la poda en verde, en los frutales caducifolios, es permitir una
mejor penetración de la luz a las partes internas de la copa y favorecer, de esta manera, la
coloración de los frutos.

TRATAMIENTOS DE DECOLORACION

La aplicación de los tratamientos de decoloración pueden hacerse a los frutos adheridos al


árbol o después de cosechados. En ambos casos la operación está basada en el uso de
substancias o de condiciones ambientales que aceleran el proceso natural.

El compuesto al cual se le atribuye la responsabilidad del cambio normal de coloración de


muchos frutos es el etileno, que es un producto natural del metabolismo vegetal y está
considerado como un regulador del crecimiento.

Se ha sugerido que el etileno actuaría como una coenzima con las oxidasas para acelerar la
respiración y posiblemente para descomponer la clorofila pues sólo el incremento de la
actividad respiratoria parece que no es suficiente para acelerar significativamente la
decoloración. Se piensa también que el etileno podría tener una acción conjunta con las
enzimas hidrolíticas para descomponer el material de los plastidios y exponer la clorofila a
la acción de la enzima clorofilasa.

El producto comercial más utilizado como fuente de etileno, en los tratamientos de


decoloración, es el Ethrel o Ethepon (ácido 2- cloroetilfosfónico).

Decoloración de frutos antes de la cosecha. La aplicación de etileno en esta forma


generalmente no es muy recomendable por cuanto puede ocasionar defoliación o caída de
los frutos. Además, la decoloración podría tener lugar inclusive en frutos que aún no hayan
alcanzado su madurez.

Decoloración de frutos después de cosechados. A pesar de no dar resultados en todas las


especies, es el método más ampliamente utilizado y recomendado en aquellas donde la
respuesta es positiva. Puede aplicarse de dos maneras:

1. Por inmersión de los frutos, por tiempo variable, en las soluciones. Con el Ethrel,
algunos de los buenos logros que se reportan en cítricos son los siguientes:

a) Limones cosechados verdes: 1,000 ppm. El cambio de color ocurre entre los 7 y 13
días.
b) Naranja 'Valencia': 240 - 2,400 ppm. Los resultados se observan a los 3 o 5 días.

En otras especies se puede también usar otros productos como por el Alar ( SADH o B-9),
que a 2,500 ppm. se le reporta como beneficioso en el cv. de mango Alphonse. Sin
embargo los resultados son menos consistentes y, en todo caso, sería conveniente ajustar
dosis y tiempo de remojo antes de proceder a su aplicación a escala comercial.

2. Utilizando cámaras o ambientes especiales. Estos pueden ser sencillos como los
utilizados en el norte del país para decolorar el mango y el limón, que son unos «hornos»
a los que se les agrega carburo como fuente de etileno y la fruta se maneja a granel, o
pueden ser más sofisticados como las «cámaras de decoloración» que se emplean para los
cítricos, especialmente naranjas y mandarinas.

COMERCIALIZACION INTERNA
La comercialización, en su sentido teórico más amplio, debe de entenderse como la serie de
servicios sucesivos que prestan una o más personas y que permiten la colocación de las
frutas del productor al consumidor. Este concepto ubica dentro de lo que es
comercialización, a las actividades de acopio (principalmente en el caso de producciones
dispersas), tratamiento de las frutas, embalaje, transporte a los centros de consumo,
distribución a nivel minorista y distribución al consumidor.

El cumplimiento adecuado de todos estos servicios permitirá que el consumidor reciba un


producto en las mejores condiciones de calidad. En nuestro país esto es muy limitado.

Fuentes de origen de la producción de frutas en el Perú

La diversidad del volumen de cosecha de cada productor influye fuertemente en el proceso


de comercialización en el Perú. Las fuentes de origen de la producción de frutas son:

a) Muy pequeños productores


b) Pequeños productores
c) Medianos productores
d) Grandes productores

En la comercialización de la mayoría de las frutas, se sigue toda una cadena complicada, en


la que el producto pasa por varias manos, encareciéndolo artificialmente.

CADENAS DE COMERCIALIZACION

1. A nivel de muy pequeños y pequeños productores

La cadena de comercialización en sí, después de la cosecha y el embalaje, se inicia con la


presencia del mayorista local o acopiador que rabajan por su cuenta o por encargo de un
mayorista principal. Una vez reunido suficiente volumen de carga, esta puede ser
transferida a otro intermediario que es el mayorista transportista o bien el mayorista local
puede contratar uno o varios camiones para transportar su carga hasta el mercado.

Ya en la ciudad, como sucede en Lima, la fruta puede ser entregada directamente al


mayorista del mercado. Si la carga es demasiado importante para uno solo de ellos, es
adquirida por el denominado mayorista principal, el que, a su vez, revende luego a los
mayoristas del mercado.

Los mayoristas de mercado venden posteriormente a los minoristas, que pueden ser:
tiendas, bodegas, fruterías, mercados distritales, supermercados, paraditas, carretilleros, etc.
2. Cuando se trata de plantaciones de mediano o gran tamaño.

Con frecuencia el productor puede realizar varios escalones sucesivos en la cadena de


comercialización como cosecha, clasificación, empacado y transporte.

En este caso, el producto es generalmente entregado por el productor directamente en el


mercado y va a las manos del mayorista, que teóricamente actúa como comisionista o
consignatario.

PROBLEMATICA GENERAL DE LA COMERCIALIZACION INTERNA DE


FRUTAS

1. A nivel de productor

a) Falta de espíritu asociativo. Cada pequeño productor, y aún muchos medianos,


comercializan su producción en forma aislada, siendo los comerciantes mayoristas, quienes
imponen las condiciones de compra, pagando con frecuencia precios inferiores a los justos.
Muchos mayoristas, principalmente locales, adelantan dinero al productor para los gastos
de la campaña, y de esta manera aseguran la compra de la producción.

b) Las labores de cosecha, tratamiento de la fruta poscosecha y embalaje son, generalmente,


deficientes. Esta deficiencia se acentúa cuando se trata de pequeños productores.

2. A nivel del intermediario mayorista

a) Falta de un verdadero reglamento operativo para comerciantes mayorista y minoristas,


que normen realmente sus derechos y obligaciones. Estos agentes, trabajan de una manera
totalmente libre, cumpliendo solamente con el pago respectivo por el uso de las
instalaciones del mercado.

b) Tanto a nivel mayorista como minorista, existe una exagerada cantidad de comerciantes
en relación al número de consumidores y al volumen que, teóricamente, es conveniente que
cada comerciante mueva.

c) El mayorista cumple una labor de comercialización incompleta ya que por lo general


sólo se limita a entregar el producto al minorista en la misma forma en que lo recibió del
productor.

3. A nivel de minorista

a) El principal inconveniente es derivado del problema social de desempleo, que trae como
resultado la proliferación, cada vez mayor, de comerciantes minoristas ambulantes, quienes,
prácticamente, no están sujetos a ningún tipo de control.
b) Los minoristas no eventuales están sujetos al dominio absoluto de los mayoristas, pues a
fin de asegurarse un abastecimiento durante todo el año (aún en épocas de escasez), se ven
obligados a acudir de manera permanente a estos.

4. A nivel general

a) Envases. La mayoría son improvisados, sin ninguna base técnica de diseño. Se


confeccionan con retacerías de maderas diversas que, por lo general, han sido mal aserradas
y se astillan, malogrando una gran proporción de frutas, ya que no se usa ningún material
protector en el interior del envase. Los cajones son reutilizados varias veces y aún para
frutas diferentes cada vez. Así por ejemplo, el «cajón limonero» que viene de Chulucanas
se vuelve a utilizar para mangos, uvas, duraznos, etc.

Sin embargo en los últimos años se está haciendo más usual la utilización de envases más
adecuados para ciertas frutas como uvas, papayas, manzanas, ciruelas, etc., que utilizan
cajones de cartón corrugado, o inclusive de madera pero con un diseño especial.

b) Mermas. Es una consecuencia del trato inadecuado a la fruta. De manera general,


pueden estimarse que no son menores del 25 % . Quiere decir entonces que la deficiente
comercialización trae como consecuencia una pérdida en el abastecimiento efectivo del país
de no menos de la cuarta parte del total de fruta que se produce. Estas pérdidas ocasionan
escasez y encarecimiento pues, en última instancia, es el consumidor quien asume las
pérdidas por mala comercialización.

El problema de las mermas no se presenta únicamente en el Perú, ni es exclusivo de las


frutas. Según estimaciones de la FAO, con el 10 % de las mermas en productos
alimenticios en el mundo, podría alimentarse a 200 millones de personas.

COMERCIO EXTERIOR
La antigua mentalidad exportadora nacional, orientada casi exclusivamente a los productos
agrícolas tradicionales, ha cambiado en forma muy significativa durante la última década.
Hoy, son cada día más numerosos los exportadores que incursionan o que intensifican sus
acciones en el campo de los productos no tradicionales, dentro de los cuales las frutas como
mangos, uvas, paltas, ocupan un lugar de mucha importancia.

Los mercados internacionales tienen diferencias bastante marcadas con los nacionales en
cuanto a sus características, las mismas que, finalmente, determinan sus exigencias.

Características del mercado externo

a) Mercado de gran volumen


b) Precios más estables
c) Exigente en calidad
Debido a su ubicación latitudinal y a la gran variedad de microclimas o zonas de vida que
posee (84 de las 102 existentes en el planeta), el Perú puede producir durante todo el año
casi todas las frutas que se consumen en el mundo. Estos productos frescos pueden
ofertarse en contra estación a los mercados exteriores, tanto en el hemisferio norte como en
el sur.

Así mismo, un aspecto que refuerza estas posibilidades es la modificación de los hábitos de
consumo de los países desarrollados, que se manifiesta en una preferencia cada vez más
acentuada por los alimentos naturales y frescos.

Por otro lado, debe tenerse presente que para la exportación de determinado producto no
sólo es importante tener la posibilidad de producirlo y contar con la existencia de una gran
demanda internacional, sino también contar con lo que se denomina «Ventana de
oportunidad», es decir el periodo en el cual resulta rentable la colocación del producto, bien
sea porque la época de cosecha coincide con el momento del año en que el precio en el
mercado internacional es el más alto, o en su defecto simplemente porque el precio CIF es
mayor que el costo de producción y los servicios de exportación. En el caso del mango
peruano para el mercado de los Estados Unidos, por ejemplo, esta ventana es, por el
momento, Enero y Febrero. Brasil entra antes que el Perú, y México después.

En el cumplimiento de las normas y exigencias que impone el mercado internacional, sobre


todo en lo que respecta a calidad, la tecnificación de la producción ocupa un lugar
preponderante. Debe entenderse que el costo de aplicación de nuevas tecnologías no es un
gasto sino una inversión. Igualmente es imprescindible tanto la implementación de centros
de acopio y vías de comunicación adecuadas, como también la existencia de empresas de
servicios de todo tipo, especialmente donde hay pequeña y mediana propiedad.
XIII. CONTROL DE PLAGAS Y ENFERMEDADES

Para tener una idea de la magnitud de los daños que puede ocasionar un problema sanitario,
basta mencionar que una sola plaga, la mosca de la fruta, causa en el Perú pérdidas
anuales de hasta 25 a 30 % de la producción de frutas altamente susceptibles como los
duraznos, chirimoyas, guayabas, etc. Otro caso ilustrativo es la presencia de complejos
virósicos que en décadas pasadas prácticamente arrasaron con las plantaciones de naranjos
y, más recientemente, están limitando de manera muy marcada el cultivo del papayo en el
Perú.

MEDIDAS DE CONTROL DE PLAGAS Y ENFERMEDADES


ACCIONES PREVENTIVAS

Las medidas utilizadas para prevenir la incidencia de las plagas y enfermedades son
bastante variadas. Sin embargo, conviene prestar atención especial a las siguientes:

a) Al momento de la planificación del huerto, se hace preciso realizar una evaluación


sanitaria de la zona. De acuerdo a ella puede decidirse si se hará o no la plantación.

b) Lo técnicamente correcto es que el material de propagación que se emplee sea


comprobadamente sano. Ante la imposibilidad actual de conseguir material certificado en
el Perú, debe de tenerse cuidado en elegir a los viveristas o proveedores. Es aconsejable
hacer un diagnóstico fitosanitario de algunas plantas antes de adquirirlas.

OTRAS MEDIDAS DE CONTROL

A parte de las precauciones anotadas, el conjunto de medidas orientadas al control de los


problemas sanitarios pueden agruparse en cuatro rubros:

1. EXCLUSION. Incluye las medidas que se utilizan para evitar que las plagas y/o
enfermedades se establezcan en aquellas áreas donde aún no se las encuentra. En
cumplimiento de esto, muchos países han adoptado reglamentos cuarentenarios para
controlar el movimiento y la importación de frutas y de material de propagación.

2. ERRADICACION. Las medidas de este tipo se ejecutan para liberar a una área de una
plaga o enfermedad seria después que esta se ha establecido. En general no son muy
efectivas, pues cuando se pone en marcha un programa de combate, el agente causal se ha
extendido tan ampliamente que es imposible eliminarlo en forma total. Sin embargo puede
reducirse la velocidad de diseminación. Entre las principales acciones que pueden
efectuarse con esta finalidad, se encuentran las anotadas a continuación:

a) Destrucción de plantas infestadas y de hospederos.


b) Control biológico.
c) Esterilización de suelos.
d) Uso de pesticidas.
3. INMUNIZACION. Consiste en el establecimiento de condiciones especiales dentro de
una planta para que resulte resistente o inmune al ataque de una plaga o enfermedad. Esto
se logra a través del mejoramiento genético.

4. PROTECCION. Normalmente se entiende como sinónimo de tratamiento


antiparasitario, es decir de la aplicación, sobre los órganos a proteger, de productos
capaces de destruir a los parásitos existentes o impedir su multiplicación. Esta protección
puede realizarse con productos en forma sólida o líquida. Cualquiera sea la naturaleza de
estos, los resultados serán dependientes de los siguientes factores:

a) Eficacia de los productos utilizados. Debe de comprobarse su toxicidad y persistencia


en forma experimental en el campo. Muchas veces un producto funciona bien para un frutal
pero no para otros.

b) Epoca de aplicación. Para cada plaga o enfermedad existe un periodo en que los
tratamientos presentan un máximo de eficacia. Una aplicación demasiada temprana o
demasiada tardía puede significar un gasto inútil.

c) Material de aplicación. Normalmente se utilizan dos tipos de aparatos: las fumigadoras


para aplicaciones líquidas (soluciones), y las espolvoreadoras para la dispersión de
productos sólidos.

d) Personal que lo realiza. La aplicación de los tratamientos constituye normalmente un


trabajo desagradable y riesgoso. Por eso es que muchas veces los trabajadores realizan la
aplicación muy de prisa o no la dirigen adecuadamente a las partes de la planta a proteger.

La ejecución de las medidas de protección deben de estar acompañadas, en lo posible, de


un eficiente control cultural y además deben usarse productos químicos selectivos que
respeten el control biológico.

PRINCIPALES PLAGAS EN LOS FRUTALES


a) MOSCAS DE LA FRUTA. Ceratitis capitata (mosca del mediterráneo) y Anastrepha
spp. (mosca sudamericana).

Es una plaga común a varias especies frutales. El daño, conocido como «gusanera», lo
ocasionan las larvas que se desarrollan al interior del fruto, a partir de los huevos que las
hembras adultas depositan debajo de los tejidos superficiales externos del mismo. Algunas
de las frutas más atacadas son las siguientes: duraznos, mangos, chirimoyas, manzanas,
guayabas, pacaes, nísperos, peras, naranjas, mandarinas, membrillos, etc.

Control Químico. Se basa en el uso de cebos tóxicos, constituidos por la mezcla de un


insecticida y una sustancia atrayente (proteína hidrolizada) para el insecto adulto. La
combinación más empleada es:
Dípterex 80 PS al 0.4 % + Buminal al 0.4 %

La mezcla puede aplicarse en aspersión, remojando en ella a las «bolsas matadoras» o


ubicándola en botellas plásticas a manera de trampas. En el primer caso, la aplicación se
hará a un 30 % de las plantas (1 hilera aplicada y dos sin aplicación), y aproximadamente
cada 15 días en la fase final de desarrollo del fruto.

Control genético. Se basa en el uso de machos estériles, que son liberados en el campo
para competir con los machos fértiles por el apareamiento con las hembras. Una hembra
apareada con un macho estéril producirá huevos estériles que no desarrollarán en larvas. Su
eficiencia como método único es limitado

Control cultural. Consiste en la eliminación de hospederos como pacaes, guayabos,


nísperos, etc., que existen como árboles aislados en muchas plantaciones comerciales de
frutales y que son muy atractivos para las moscas de la fruta.

Igualmente forma parte del control cultural, la destrucción de los frutos atacados y que caen
al suelo. Estos pueden quemarse o bien enterrarse aplicando una capa de algún insecticida
en polvo, como Sevín por ejemplo.

En huertos pequeños o para especies de alto valor económico, puede recurrirse al


embolsado de los frutos.

Una de las principales restricciones a la entrada de algunas frutas a ciertos mercados de


exportación, lo constituye la presencia de esta plaga en el país productor. Es el caso del
mango. Se permite el envío de esta fruta a los Estados Unidos sólo si ha sido previamente
sometida a un tratamiento térmico con agua caliente a 46.1 °C. Esta temperatura es
suficiente para matar las larvas que podrían encontrarse dentro de los frutos.

b) QUERESAS

Son insectos picadores chupadores del orden Homopthera y pertenecientes a varias


familias, especialmente Diaspididae y Coccidae. Muchas queresas son comunes a varios
frutales, mientras que otras son más específicas.

QUERESAS COMUNES

A continuación se anotan las principales especies de estas, así como los frutales en los
cuales se presentan con más frecuencia.

1. Queresa redonda. (Selenaspidus articulatus) . Cítricos, palto, datilera, mango,


cocotero, olivo.
2. Queresa parda o blanda marrón. (Coccus (Lecanium) hesperidium) . Cítricos,
mango, higuera, guayabo y vid.
3. Queresa coma. (Lepidosaphes spp.) . Cítricos, palto e higuera
4. Piojo blanco. (Unaspis (Chionaspis) citri). Cítricos, olivo y palto.
5. Queresa pulverulenta. (Protopulvinaria pyriformis). Palto y mango.
6. Ceroplastes. (Ceroplastes sp.). Mango, palto y maracuyá
7. Queresa negra o lapilla. (Saissetia oleae). Cítricos, olivo, higuera, chirimoyo, lúcumo.
8. Queresa blanca móvil. (Orthezia olivicola). Cítricos, olivo, mango, ciruelo.

QUERESAS MAS ESPECIFICAS.

1. Queresa blanca del duraznero. (Pseudaulacaspis pentágona). Ataca igualmente al


cirolero.
2. Queresa «San José» del manzano. ( Quadraspidiotus perniciosus). También suele
presentarse con frecuencia atacando perales.
3. Queresa del mango. (Coccus mangiferae).

CONTROL DE QUERESAS

Control químico. Está basado en el empleo de aceite agrícola, que por lo general es
mezclado con Rotenona o un insecticida fosforado. La dosis más usual del Aceite Triona
Nº 5 es al 0.5-1.5 % (uno a tres litros por cilindro de 200 litros)

Muchas especies, como los papayos y los paltos por ejemplo, son muy susceptibles a los
aceites, por las quemaduras que les producen y, por lo tanto, no soportan un tratamiento con
estos productos. Cuando este sea el caso, o cuando se trate de caducifolios en plena
actividad vegetativa, entonces debe recurrirse a otros insecticidas que se aplicarán solos
(sin aceite ), como Selecrón, Supracid, Gusathión o Saluthión.

Control biológico. Algunas especies de estos insectos tienen controladores biológicos


bastante eficientes. Por ejemplo las queresas coma y redonda son parasitadas,
respectivamente, por dos microavispas: Aphytes lepidosaphes y Aphytes roseni

Para la temible queresa San José, existe igualmente un enemigo natural con el que se logra
un control parcial, se trata de Prospaltella perniciosi.

Control Cultural.

1) Aplicación de podas a las partes afectadas y posterior quema de las porciones de las
ramas extraídas.

2) Efectuar lavados con agua a presión, cuyos efectos colaterales son múltiples y
beneficiosos. Mejores resultados se logran con la adición de jabón.

c) PULGONES

Son insectos picadores chupadores que pertenecen al orden Homóptera y a la familia


Aphididae. Se localizan principalmente en las hojas y brotes jóvenes.

Uno de ellos, que es común a varios frutales, es el pulgón verde (Myzus persicae).
Principalmente ataca a: manzano, peral, duraznero, membrillero.
Algunos otros pulgones son más específicos. Por ejemplo:

EN CITRICOS.

Pulgón negro de los cítricos (Toxoptera aurantii).


Pulgón marrón o moreno de los cítricos (Aphis (Toxoptera) citricidus).
Pulgón verde de los cítricos (Aphis spiraecola).

EN MANZANO.

Pulgón lanígero (Schizoneura (Eriosoma) lanigerum).

CONTROL DE PULGONES

1. Control químico. Se basa en el uso de insecticidas sistémicos, que deben ser aplicados
en forma localizada, sólo a los brotes. Entre la gran diversidad de productos que pueden
emplearse se encuentran los siguientes:

Metasistox al 0.1 - 0.2 % Folimat al 0.1 %


Ekatín al 0.1 % Perfektion S al 0.15 - 0.2 %
Pirimor al 0.1 % Sulfato de nicotina al 0.5 %

Para el «pulgón lanígero» se obtienen buenos resultados con:

Kilvall al 0.15 - 0.2 %


Gusathión al 0.1 %
Lannate al 0.4 %

2. Control biológico. Los pulgones simples tienen numerosos predatores, siendo los más
comunes los coleópteros de la familia Coccinelidae (entre ellos los de los géneros
Cycloneda, Hippodamia, etc.), conocidos como «mariquitas». Sin embargo su acción
reguladora puede ser tardía.

El pulgón lanígero también tiene su controlador biológico, se trata del Aphelinus mali

d) ACAROS

La mayoría de estos parásitos son conocidos como «arañitas rojas», atacan hojas y
pertenecen a los géneros Panonychus y Tetranychus. Constituyen un problema, muchas
veces serio, en gran número de especies frutales.

A continuación se anotan algunos de los frutales atacados con más frecuencia y la(s)
especie(s) de «arañita»(s) responsable (s).

Cítricos: (Panonychus citri), (Tetranychus cinabarinus).


Manzano: (P. ulmi), (T. telarius).
Duraznero: (T. cinabarinus).
Otras especies de ácaros son más específicas y su ataque se manifiesta en otro tipo de
síntomas. Dos casos merecen ser destacados:

Acaro del tostado de los cítricos (Phyllocoptruta oleivora). Se presenta en los frutos, en
los que la zona atacada muestra una coloraciónb bronceada oscura.

Acaro de la erinosis de la vid ( Eriophyes vitis). El ataque se localiza en las hojas, en cuya
cara superior, como consecuencia del mismo, se forman una especie de ampollas. Muchos
suelen confundir estos síntomas con el problema entomológico de la filoxera, sin embargo
en este último caso el tumor o ampolla de la hoja se presenta en el envés de las hojas.

CONTROL QUIMICO DE ACAROS

Se realiza con el empleo de los acaricidas. Algunos de estos productos sólo son efectivos en
determinado estado de desarrollo de los ácaros. En este caso es recomendable hacer varias
aplicaciones sucesivas para ir eliminando las nuevas generaciones.

Por otro lado, existen acaricidas que tienen un rango de acción más amplio y controlan más
de un estado de desarrollo de la plaga. Estos son los más efectivos.

Algunos de los acaricidas más usados son los siguientes:

Kelthane. No es ovicida. Se usa al 0.25 %


Mitac 20. Es ovicida. La concentración usualmente empleada es de 0.2 %
Neorón. Es ovicida, larvicida y también controla adultos. Se emplea en la concentración de
0.1 %
Omite. Controla adultos y ácaros jóvenes. Se aplica al 0.2 - 0.25 %
Nissorum. En dosis de 0.05 % controla huevos y estados larvales.

e) ALGUNAS PLAGAS MAS ESPECIFICAS PARA CIERTOS FRUTALES

CITRICOS

Pegador de hojas y perforador de frutos (Argyrotaenia sphalaeropa).


Perrito del naranjo (Papilio thoas).

PALTO

Bicho del cesto (Oyketicus kirbyi).


Gusano medidor (Sabulodes coberata).
Serruchador (Oncyderes poecila).
Oruga barrenadora del fruto (Stenoma catenifer).

MANZANO

Polilla de la manzana (Carpocapsa pomonella o Laspeyresia pomonella).


Control químico: Alsystin 0.04 - 0.06 %
Escarabajo de las flores (Anomala sp.).

DURAZNERO

Barrenador del tronco (Scolytus rugulosos).

HIGUERA

Perforador del brote (Tortyra fulgens).

VID

Filoxera (Phylloxera vitifoliae o Daktulosphaira vitifoliae)


Barrenador del sarmiento (Neoterius fairmairei).
Oruga de las hojas (Pholus vitis).

PLATANO

Gorgojo negro (Cosmopolitus sordidus).

MARACUYA

Gusano negro (Dione june).


Gusano espinado negro (Agraulis vanillae).

PRINCIPALES ENFERMEDADES DE LOS FRUTALES


Los agentes causales de la mayoría de las enfermedades de los frutales son: virus, hongos,
bacterias, micoplasmas y nematodos.

ENERMEDADES VIROSICAS

Los virus no son considerados organismos vivos. Presentan una estructura muy simple,
pues están constituidos externamente por una capa proteica delgada, e internamente por
ácido nucleico, DNA o RNA.

Hasta hace algunos años, se consideraba que los virus eran los patógenos más pequeños que
existían. Sin embargo, se han descubierto otros de tamaño aún más reducido: los viroides.

Las enfermedades virósicas, incluyendo dentro de estas a las que tienen como agente causal
a los viroides son incurables y posiblemente constituyen el mayor problema sanitario de la
fruticultura en su conjunto, y no pueden controlarse directamente con fumigaciones o
pulverizaciones. Su control está prácticamente limitado a la adopción de medidas
preventivas, que van desde el simple empleo de portainjertos o cultivares resistentes o
tolerantes, cuando los hay, hasta la utilización de tecnologías más complicadas como son la
obtención de plantas libres de virus (a través del cultivo de meristemas o del uso de la
embrionía nucelar), la inoculación en la planta de razas suaves de un virus para protegerla
de los efectos de otra raza más virulenta del mismo virus (protección cruzada), etc.

En el mundo existe un gran número de virus afectando a frutales, y su incidencia tiende a ir


en aumento. Las especies en las cuales se ha determinado el ataque de un mayor número de
estos agentes patógenos son las siguientes:

Fresa : 20 virus principales


Manzano : 18 virus
Frutales de hueso : 20 «
Vid : 12 «
Cítricos : 15 «

En el Perú, muchos de ellos no han sido aún detectados. Es muy probable que existan, pero
que, por efectos de clima u otro factor, ocurra un enmascaramiento de síntomas.

En menor número, sin que esto signifique que sean de menor importancia, se presentan
también enfermedades virósicas en papayo, higuera, piña, olivo, maracuyá, etc. En el caso
del papayo, actualmente el factor limitante para su cultivo en el Perú lo constituye,
precisamente, el problema virósico conocido como «mancha anular». En el palto, los
viroides son un real problema para la producción.

ENFERMEDADES VIROSICAS MAS COMUNES PARA ALGUNAS ESPECIES


FRUTALES EN EL PERU.

1. Cítricos

Tristeza. Se transmite por injerto y por áfidos.


Agalla leñosa. Tiene la misma forma de contagio que la anterior.
Psorosis. El contagio es por injerto y por semilla.
Xiloporosis. Se transmite por injerto.
Exocortis. Viroide transmitido por injerto, herramientas de poda y cuchillas para injertos.

2. Vid. Hoja en abanico y hoja enrollada. Ambas son transmitidas por injerto.

3. Palto. Quemadura de sol («sun blotch»). Viroide que se transmite por injerto, por
contactos radiculares con plantas enfermas y por semilla.

4. Papayo. Mancha anular que se transmite por pulgones y mosaico

5. Manzano

Corteza de papel («bark paper»). Muchos consideran que los síntomas son únicamente
manifestaciones de deficiencias nutritivas.
Corteza arrugada. Igual a lo anotado en el caso precedente.

6. Olivo. Hoja en hoz


7. Maracuyá. Mancha amarilla, mosaico

8. Duraznero. Mosaico

ENFERMEDADES FUNGOSAS Y BACTERIANAS

La mayor parte de estas enfermedades son producidas por ataques de hongos, y pueden
controlarse por fumigaciones o pulverizaciones. En un menor número, las enfermedades
son consecuencia de ataques bacterianos, que se presentan de preferencia en condiciones de
clima frío y lluvioso. Su control se basa en aplicaciones de antibióticos en forma de
aspersiones, combinadas con labores de limpieza y la cirugía de cancros y posterior
desinfección y cobertura de las heridas.

A continuación, para algunos de los frutales, se anota el nombre común de cada


enfermedad, así como el agente causal de la misma y algunas de las medidas de control más
utilizadas en el Perú.

1. CITRICOS

Podredumbre de las flores (Botrytis cinerea). Conocido también como «moho gris».

Control químico: Benlate 0.1 % , Cercobim M 0.1 %, Ronilán 0.1 %, Captan 0.3 %,
Sumisclex 0.05 - 0.1 %, Folicur 0.1 %

Gomosis fungosa (Phytophthora parasitica)

Control químico: Ridomil 0.1 %, Alliete 0.1 %


También debe prestarse atención a la forma de aplicación de los riegos y recurrir a la
cirugía de partes afectadas.

Podredumbre negra del fruto (Alternaria citri)

Control químico: Cercobim M 0.1%

2. PALTO

Pudrición radicular (Phytophthora cinnamomi)

Control: Mayormente preventivo. Evitar exceso de humedad en el suelo y no causar


heridas al sistema radicular.

El portainjerto 'Duke' tiene cierta tolerancia al patógeno, por lo cual tiende a preferirse,
a pesar que no ofrezca una total garantía en este sentido.

Químicamente puede lograrse un control parcial de la enfermedad con aplicaciones de


Aliette al 0.4 % o de otros productos abase de fosfitos o fosfonatos.
Antracnosis (Physalospora perseae).

Control químico: Productos a base de cobre, como Cupravit al 0.5 % o caldo bordelés.
Debe recurrirse también a la cirugía en las partes afectadas.

Pudrición del pedúnculo y el ápice del fruto (Diplodia theobromae)

Control químico: Benlate 0.1 %


Igualmente es recomendable aplicar podas de limpieza.

3. MANGO

Oidiosis (Oidium mangiferae)

Control químico: Preventivamente, al momento de la floración y el brotamiento las


aplicaciones de azufre en polvo o soluble, en concentraciones de entre 0.2 a 0.5 % , (
Kumulus, Sulfodín, Tiovit ) da buenos resultados. Cuando la enfermedad ya está declarada
hay que emplear otros fungicidas más costosos como: Benlate 0.1 % , Cercobim 0.1 %,
Morestán 0.1 - 0.2 % , Folicur 0.02 - 0.04 %

Antracnosis (Colletrotrichum gloeosporioides)

Control químico: Como en el caso del palto. Las aspersiones deben aplicarse cuando los
frutos están aún pequeños.

Mancha de la hoja (Diplodia natalensis)

Control químico: Benlate 0.1 %

Fumagina (Capnodium sp.)


Se controla con lavados a presión.

4. PAPAYO

Antracnosis (Gloesporium sp.)


Pudrición radicular (Phytophthora cinnamomi)
Oidiosis (Oidium caricae)

5. PLATANO Y BANANO

Mal de Panamá (Fusarium oxysporum var. cubense)


'Gross Michel' es muy susceptible y el 'Cavendish' es resistente. Se recomienda seleccionar
material de propagación sano.

Sigatoka (Cercospora musae)


Moko (Pseudomonas solanacearum)
Mancha de la hoja (Cordana musae)
Punta de cigarro (Stachylidium theobromae)

6. CHIRIMOYO

Roya (Uredo cherimoliae)


Oidiosis (Oidium sp.)

En ambos casos se obtienen buenos resultados con aplicaciones de azufre

Mancha de la hoja (Colletotrichum sp.)

7. MANZANO

Pie negro (Lasiodiplodia theobromae) (anteriormente reportada como Botryodiplodia


theobromae).

Control: Preventivamente debe tenerse sumo cuidado con la sanidad de las plantas que se
instalarán. Ya en el terreno definitivo, no deben ser sometidas a periodos demasiado
prolongados de agoste, y también evitar, en lo posible, ocasionar daños mecánicos al
sistema radicular.

Las heridas de poda de ramas gruesas deben de ser desinfectadas y protegidas con Fermate
(Ferbam), disolviendo 250 gramos en 1.0 litro de agua. El mismo producto puede
emplearse también para fumigaciones, a la concentración 0.25 % ( 2.5 gramos por litro).

Sarna (Venturia inaequalis). De importancia en zonas productoras donde se presentan


lluvias.

Agalla de la corona (Agrobacterium radiobacter pav. tumefaciens)

Control: Igual que melocotonero

Oidiosis (Podosphaera leucotricha)

8. MELOCOTONERO

Agalla de la corona (Agrobacterium radiobacter pv.tumefaciens)

Control: Desinfestación de camas de propagación, desinfección de semillas con hipoclorito


de sodio al 0.5 % en remojo por tres minutos. Las raíces de las plántulas pueden igualmente
ser sumergidas en una solución al 0.25 % del mismo desinfectante por 30 minutos.

Cloca (Taphrina deformans)

Control químico: Antracol 0.25 %, Dithane 0.25 - 0.3 %


Roya (Tranzchelia discolor)

Control químico: Folicur 0.1 %, Bayfidan 0.05 %, Rubigan 0.1 %, Polyram 0.25 - 0.3 %

Viruela (Coryneum carpophilum)

Control químico: Pomarsol 0.3 %, Manzate 0.25 - 0.3 %, Captan 0.3 %, Benlate 0.1 %

Oidiosis (Sphaerotheca pannosa)

Control químico. Igual que mango.

Pudrición morena (Monilinia fruticola)

Control químico: Captan 0.3 %, Manzate 0.25 %, Rovral 0.1 %, Folicur 0.05 %, Tecto 0.1
%, Sumi-8 0.05 %.

DAÑOS POR NEMATODES

Los nematodos (nemátodes o nemátodos), son organismos multicelulares, la mayoría de


pequeñísimo tamaño, lo que permite verlos sólo a través del microscopio. Algunas
especies de estos animales producen daños a los vegetales. Se les llama nematodos
fitoparásitos y atacan principalmente al sistema radicular.

Los daños directos son consecuencia del debilitamiento de la planta y se traducen en una
disminución de la producción. En casos extremos pueden causar la muerte de la planta.

Igualmente, estos patógenos pueden servir como vectores a otros agentes causantes de
enfermedades o facilitarles su instalación en las heridas que ocasionan.

La sintomatología de su ataque, que obviamente es más fácil de ser observada en la parte


aérea de los frutales, no es un método muy confiable para asumir la presencia de nematodos
en una plantación. Hay enfermedades y transtornos nutricionales que producen similares
síntomas.

Hay una sola manera de determinar inequívocamente la presencia de nematodos


perjudiciales en una plantación, y es tomar muestras de suelo y raíces para ser analizadas en
un laboratorio especializado.

Existe en las plantas un nivel de tolerancia para cada uno de los nematodos en particular. Si
la cantidad de estos no sobrepasa ese nivel, las plantas pueden convivir con ellos sin sufrir
pérdidas económicamente significativas.

Entre los síntomas típicos más frecuentes con que suele manifestarse el ataque de estos
parásitos, tenemos los siguientes:
1. Nudos o agallas en las raíces
2. Lesiones en las raíces
3. Podredumbre de raíces
4. Reducción del crecimiento de la copa
5. Marchitamiento y debilitamiento general
6. Reducción de la cosecha y baja calidad de los frutos

TIPOS DE NEMATODOS QUE ATACAN FRUTALES

La mayor parte de los nematodos de más importancia en fruticultura, se agrupan en los tres
géneros que a continuación se anotan conjuntamente con algunas de sus características más
saltantes.

a) Género Meloidogyne. Producen una secreción que afecta a las células de la raíz,
disolviendo sus paredes y fusionando varias de ellas en una sola, lo que da lugar a un
engrosamiento o formación de células gigantes. Esto ocasiona la presencia de estructuras
conocidas como «nudos», «agallas» o «nódulos» que caracterizan su ataque y que son
visibles a simple vista. Estas especies son conocidas precisamente como nematodos del
nudo.

b) Género Heterodera. Forman quistes, los que no son otra cosa que el cuerpo de la
hembra muerta, repleta de huevos, que se convierte en una cápsula protectora de estos.

c) Género Tylenchulus. Las hembras adultas se adhieren a las raíces, introduciéndose en


ellas sólo hasta el cuello.

En algunas especies frutales, son también de importancia los géneros Pratylenchus,


Xiphinema y Radopholus.

ESPECIES MAS IMPORTANTES DE NEMATODOS Y LOS PRINCIPALES FRUTALES


QUE ATACAN

Tylenchulus semipenetrans. Sobre todo causan daños a cítricos, pero también a otros
frutales como olivo y vid.

El naranjo trifoliado y los Citranges son bastante resistentes a este nematodo.

Pratylenchus spp. Conocidos como nematodos de las lesiones radiculares. Atacan a vid,
banano, papayo y otros diversos árboles frutales.

Meloidogyne spp. Parásito de banano, papayo, vid, duraznero, y árboles frutales en


general.

Xiphinema spp. Llamado nematodo daga, ataca a la vid.

Radopholus spp. Son nematodos minadores. Atacan a palto, banano, cítricos, piña y otros.
CONTROL DE NEMATODOS

El control de los nematodos es muy difícil. Su erradicación de determinada zona de cultivo


es casi imposible. La mayoría de las medidas de control están dirigidas a bajar el nivel de
la población hasta alcanzar niveles que no sean dañinos para el frutal.

1. Control cultural

a) Uso de portainjertos resistentes. Es el caso típico del empleo del cultivar de duraznero
Okinawa como patrón de otros durazneros comerciales o de ciroleros; también el uso de
portainjertos americanos, como 'SO4', '5-BB', 'R-99', entre otros, para la propagación de la
vid; etc.

b) Araduras profundas y gradeos para exponer los nematodos al sol y propiciar su


desecación. El uso de estas prácticas, sin embargo, puede significar una interferencia con
las labores culturales normales y, además, el control que se logra sólo es parcial y no son
suficientes por sí solas para obtener los resultados buscados.

c) Incorporación de materiales orgánicos (estiércol, compost, etc.) al suelo. La


descomposición, por los microorganismos del suelo, del material que contiene celulosa
transforma el nitrógeno a nitrógeno amoniacal, que tiene gran poder nematicida. Cuando se
utilice material con contenido alto de quitina se favorecerá el crecimiento de organismos
que se alimenten de este compuesto o que tengan efecto quitinolítico, y de esta manera se
afectará la cubierta quitinosa de los huevos de los nematodos.

2. Control químico

Se basa en el empleo de productos nematicidas, que son en realidad mayormente


nemastáticos.

Estos compuestos, por su manera de acción, suelen clasificarse como fumigantes y no


fumigantes. Los primeros se difunden al ser aplicados al suelo, y entre los más conocidos se
encuentran: Bromuro de Metilo, Cloropicrina y DBCP. A excepción de este último, todos
son fitotóxicos y no deben emplearse una vez que las plantas ya estén instaladas.
Los no fumigantes son no volátiles y actúan por contacto, por acción sistémica, o de las dos
maneras. Raramente son fitotóxicos, (pero sí, son muy tóxicos para animales de sangre
caliente). Los productos que se utilizan con más frecuencia son los siguientes:

a) Grupo de los fosforados: Mocap, Terracur, Basamid, Nemacur. Sus efectos nemastáticos
son inmediatos.

b) Grupo de los carbamatos: Furadán, Curater, Temik, Vidate. La manifestación de sus


efectos no son tan inmediatos como los del grupo anterior.

Un buen producto nematicida debe reunir, de manera general, los siguientes requisitos:
1. Ser tóxico para los nematodos, pero no para las plantas.
2. No dejar residuos tóxicos en las plantas o en el suelo.
3. Ser de fácil aplicación y de uso seguro.
4. Ser compatible con las prácticas culturales usuales.
5. Tener una buena dispersión en el suelo.
XIV. ESTUDIO ECONOMICO DE LOS CULTIVOS

PROGRAMA DE PRODUCCION Y VENTAS

Los árboles frutales tienen periodos de juvenilidad relativamente largos. Entonces la


producción se planificará de acuerdo a la especie que se trate. Para la gran mayoría de
árboles frutales, como mangos, limones, paltos, lúcumos la primera producción de frutos
se tienen al tercer año de instalada la plantación (cuadro 16)

Cuadro 16. Evolución Aproximada de la producción de cuatro especies frutales


___________________________________________________________________
Edad Mandarina Mango Palto Lúcumo
(años) Kg/ha Kg/ha Kg/ha Kg/ha
___________________________________________________________________
1 __ __ __ __
2 __ __ __ __
3 3,000 1,500 1,000 1,000
4 6.000 3,500 2,500 1,500
5 10,000 5,500 4,000 3,500
6 15,000 8,000 6,500 6,500
7 25,000 12,500 8,500 10,000
8 35,000 16,000 12,000 14,000
9 45,000 20,000 15,000 18,000
____________________________________________________________________

En fruta de exportación hay que considerar que sólo una porción de la cosecha cumple por
lo general con los requisitos exigidos. En mango por ejemplo se considera que el 70 % de
los recolectado va para el mercado interno y sólo un 30 % para exportación. En mandarina
‘Satsuma’ es el 50 % para cada mercado, en palto ‘Hass’ 60% para exportación.

Por otro lado, los precios de venta también son diferentes. El mango en promedio alcanza
US $ 0.30/kg puesto en chacra para exportación, la palta USA $ 0.70 y la mandarina USA
$ 0.40.

COSTOS DE PRODUCCION

Son los costos de mantenimiento que demandan anualmente las plantaciones. Por lo general
se consideran en estos cálculos los siguientes rubros:

I. GASTOS DE CULTIVO
Preparación del terreno
Plantación
Labores de cultivo
Cosecha
II. GASTOS ESPECIALES
Plantas
Herramientas
Equipo
Fertilizantes
Pesticidas
Cajones cosecheros
Jabas
Canon de agua

III. GASTOS GENERALES


Administración
Leyes sociales
Imprevistos

Algunas veces el no se considera dentro de los gastos especiales el valor de la maquinaria y


equipo (incluso hasta los plantones) que son ubicados como inversión fija.

Los datos aportados por los costos de producción y el programa de producción y ventas
serán la base para determinar el flujo de caja y para aplicar los parámetro de evaluación
correspondientes.

Como ejemplo puede anotarse los siguientes costos de producción calculados para mango

Cuadro 17. Resumen de los costos de producción de una hectárea de mango (USA $)

Edad Gastos de Gastos Gastos Costo total


(años) cultivo especiales generales
___________________________________________________________________
1 244.00 460.63 104.38 809.01
2 144.00 95.86 57.90 297.76
3 166.40 174.35 79.87 420.62
4 248.00 338.29 126.46 712.75
5 286.40 476.54 164.49 927.43
6 318.40 611.83 198.17 1,128.40
7 382.20 760.28 243.24 1,386.72
8 408.80 890.80 272.42 1,572.02
9 440.80 1,045.21 308.02 1,794.03
10 466.40 1,135.10 333.15 1,934.65
____________________________________________________________________
Fuente: Franciosi T. Manual del cultivo del mango en el Perú. 1992

Con estos costos de producción y los parámetros que a continuación se anotan


conjuntamente con la evolución de las cosechas, se determinaron los valores de los índices
de evaluación económica respectivos.
Destino de la fruta vendida.

Mercado interno: 70 %
Exportación : 30 %

Precio de venta en chacra

Para el mercado interno : USA $ 0.18 el kilo


Para el mercado externo: USA $ 0.25 el kilo

Evolución de la producción

Años kg/ha
_____ ______
1 -
2 –
3 1,500
4 4,000
5 7,000
6 10,000
7 13,000
8 15,000
9 18,000
10 24,000
___________________

VAN (valor actual neto): + 1830.52


TIR (tasa interna de retorno): 35.44 %
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