I

RMA PALACIOS
TIEMPO 45 MIRADOR
Juego desombras, leo/tela, 150 x 200 cm.
TIEMPO 46 MIRADOR
Tal vez lo ms sorprendente en Irma Palacios sea ese equili-
brio alcanzado entre libertad expresiva y estructuracin for-
mal y colorstica. Por eso, ante su trabajo, se nos viene a la
cabeza el concepto de perfeccin, tan ajeno a la idea actual
del arte.
Jorge Alberto Manrique
No es frecuente hallarnos ante una artista que no hace ms
que llamarnos al silencio de la contemplacin.
Juan Garca Ponce
La imagen mental que el pintor abstracto plasma es un dise-
o, una segunda cosa, que proviene de un inmenso e indefi-
nido arsenal privado, conformado de cosas concretas. Las
pinturas de Irma Palacios, incluyendo sus ttulos, ejemplifican
admirablemente la manera en que los circuitos sensoriales
van nombrando los elementos conforme stos se aparecen en
Limosdemrmol, leo/tela, 180 x 140 cm.
Lmitedela sombra, leo/tela, 150 x 190 cm.
Escritura deluz ysombra, leo/tela, 200 x 200 cm.
TIEMPO 47 MIRADOR
Juegosdeaire, leo/tela, 200 x 150 cm.
TIEMPO 48 MIRADOR
Archipilago, leo/tela, 190 x 160 cm.
Encuentros, leo/tela, 150 x 190 cm.
Paisajenocturno, leo/tela, 190 x 150 cm.
la tela La pintura de Irma Palacios est poblada
de signos. stos no son descifrables de causa a efec-
to, sino polivalentes, tal y como lo son las palabras
que arman una frase potica.
Teresa del Conde
Pintura del silencio que nos convida el placer y la
meditacin. La artista escucha sus voces profun-
das, se expresa desde dentro, logrando transfor-
mar en materia una sensibilidad reflexiva que, con
independencia de las tcnicas empleadas, se im-
pone por su valor esttico: la belleza natural que
esquiva el anlisis y la interpretacin, absorbiendo
al espectador en el fluir de su existencia espiritual.
La imposibilidad de proferir palabra articulada ante
sus imgenes y sus formas marca el contacto de
quien tiene la fortuna de verlas, acariciarlas, con-
templarlas, ser en unas y otras.
Luis Ignacio Sinz