Revista No.

159 -- 6 de abril de 2009

Sumario:

Editorial

LA CRISIS MUNDIAL RECAERÁ SOBRE EL PUEBLO

Nacional

• DERROTAR LA REELECCIÓN
• EL BLINDAJE DE LOS RICOS

Editorial

LA CRISIS MUNDIAL RECAERÁ SOBRE EL PUEBLO

La manipulación de la verdad es la práctica preferida del gobierno,

empecinado en perpetuar el régimen de ultraderecha, que carga a sus
espaldas miles de crímenes de lesa humanidad e injusticia social.

En la ofensiva mediática contra la oposición y en defensa de su proyecto

político, el Presidente divide el país en uribistas y terroristas; los primeros
son buenos, los segundos malos y contra éstos últimos arremete con
improperios rabiosos y todo tipo de calumnias.

Una división similar hicieron las dictaduras del Cono Sur, inspiradas en la
Doctrina de Seguridad Nacional, en la lucha contra el comunismo y el
Presidente Bush en la cruzada contra el terrorismo; dicha doctrina crea la
figura de un enemigo interno, al que hay que destruir, sin importar los
métodos para lograrlo.
La política de Seguridad Democrática que aplica el régimen colombiano, es
la nueva versión camuflada de la Doctrina de Seguridad Nacional.

El Presidente manipula la verdad poniendo en blanco lo que es negro y

viceversa, con el propósito de crear en el ideario colectivo el temor a un
enemigo interno, representado en la figura del terrorismo, al estilo de la
propaganda hitleriana.

A la guerrilla que es un movimiento popular de resistencia armada, que lucha

contra el régimen imperante y por transformaciones sociales, económicas y
políticas, la simplifica y reduce a la categoría de bandidos sin ideario político
y como terroristas; a la oposición política y a los que disienten de su política,
los relaciona con la guerrilla para satanizarlos como terroristas o de estar al
servicio del enemigo interno.

Con esta manipulación y tergiversación de la verdad se cubre, en la

propaganda uribista, a los verdaderos terroristas que históricamente han
causado los crímenes de lesa humanidad y los grandes dolores al país.

Pero nadie que esté medianamente informado de lo que ocurre en Colombia,

ignora que los narco paramilitares son responsables de miles de masacres,
en que murieron miles y miles de inocentes pobladores y sindicalistas, del
desplazamiento forzoso de casi cinco millones de campesinos, a quienes
expropiaron 5,5 millones de hectáreas de tierra, además de otros crímenes
de lesa humanidad.

Pero lo más grave está en que el Estado terrorista asignó el papel represivo a
los capos del narcotráfico, dentro de la alianza macabra, que establecieron
como pacto de conveniencias. A los narco paramilitares dejó vía libre para el
narcotráfico, mientras el Estado con el apoyo de éstos, le “quitaba el agua
al pez”, para eliminar el enemigo interno.

Este pacto terminó narcotizando la sociedad, convirtiendo el régimen en un

capitalismo mafioso.

Los escándalos reiterados dejan al desnudo día a día los vínculos del
Presidente y su gobierno, con el narco paramilitarismo.

Decenas de congresistas del partido uribista son investigados, procesados y

condenados por sus nexos con el narcotráfico y el paramilitarismo, lo
mismo que muchos otros funcionarios del gobierno; el Presidente fue elegido
con votos del narco paramilitarismo, lo mismo que más del 35 por ciento del
Congreso.

El segundo mandato presidencial fue habilitado mediante componendas y

compra de votos, por un Congreso de mayoría mafiosa y clientelista, que
reformó la Constitución para que Uribe se reeligiera, ejerciera un segundo
mandato y ahora se está cocinando un tercer mandato que le permitiría al
Presidente, darle continuidad a la política de Seguridad Democrática y la
entrega del país a las corporaciones extranjeras.

No cabe la menor duda, los uribistas son los continuadores del terrorismo
de Estado y los herederos de la oligarquía, que siempre recurrió a la violencia
para imponer sus intereses.

Ellos son los verdaderos terroristas. Los que están patrocinando y cubriendo
a los nuevos paramilitares, las Águilas Negras que amenazan y asesinan a
opositores al gobierno, a líderes sociales y sindicales en todo el país. Y son
los que pretenden continuar gobernando por muchos años más, para impedir
los cambios que el país necesita, que conduzcan a la paz con justicia social y
genere bienestar a todos los colombianos.

La unidad de los revolucionarios, demócratas y progresistas en torno a un

programa mínimo de dignidad, y defensa de la vida, la democracia y
soberanía, es urgente para frenar el paso al proyecto ultraderechista y abrir
el camino hacia el nuevo país del bienestar y unidad nacional.

Nacional

DERROTAR LA REELECCIÓN

Es ya un hecho que Uribe buscará gobernar en un tercer periodo. El

gobierno y los partidos uribistas están dedicados en la actualidad a conseguir
que el Presidente pueda presentarse a su segunda reelección.

Para conseguirlo, aún tienen que recorrer un largo trecho. Están pendientes
la aprobación del Congreso, el fallo favorable de la Corte Constitucional y un
Referendo. El cual para que sea valido requiere que acudan a las urnas unos
7 millones de colombianos.

Trampas y reelección

En el camino recorrido hasta ahora para la segunda reelección ha estado

presente, como ha sido lo propio de este gobierno, las trampas y mentiras.
La campaña de recolección de las firmas requeridas para que el Congreso
tuviese que abordar el tema, tuvo irregularidades ya comprobadas en la
financiación.

Hay serios indicios de que esta campaña, recibió dineros de la Pirámide DMG,
hasta hace poco, tolerada por Uribe y hoy puesta en la picota pública por
desavenencias con altos funcionarios del régimen y presiones
internacionales.
Además el texto con el que se recogieron las firmas, está siendo cambiado
en el Congreso.

Nada de ello es extraño. Cuando se aprobó la primera reelección el fraude

también estuvo presente. Yidis Medina ha sido juzgada por Cohecho. Faltan
los funcionarios del gobierno que participaron en el mismo. Teodolindo
Avendaño está siendo procesado por faltar a la sesión del Senado y así
viabilizar la mayoría de los votos, para aprobar la primera reelección a
cambio de dineros y prebendas entregados por el gobierno.

No la tiene asegurada

En el camino que falta por recorrer está asegurada la aprobación del

Congreso y el visto bueno de la Corte. El Partido de la U, Cambio Radical y
los conservadores, los partidos de la coalición de gobierno y la seguridad
democrática, tienen la mayoría en el parlamento y por tanto cuentan con los
votos necesarios para que Uribe pueda presentarse a una segunda
reelección. También el gobierno tiene el control de la Corte Constitucional.

Queda un escollo grande por resolver en el Referendo. Al gobierno le será

difícil conseguir la votación mínimo de 7 millones de colombianos, si el Polo
Democrático Alternativo y el Partido Liberal, convocan a la abstención, pues
abstenerse de votar, será en este caso equivalente a votar por el no.

Coyuntura favorable

El Referendo está convocado para los últimos meses de este año.

Corresponde desplegar una gran campaña contra la reelección y en esta
dirección propiciar la unidad de las distintas fuerzas que se oponen a la
misma.

Es un contexto favorable para llegarle a sectores muy amplios de la

población, para desarrollar una intensa agitación y para desplegar la lucha
política del campo popular y la insurgencia, en un marco mucho más amplio
que en otros momentos. Una coyuntura que le permitirá a las fuerzas de
izquierda, a las fuerzas alternativas y a los sectores democráticos, explicar
por qué no debe ni puede continuar el régimen de la Seguridad Democrática,
de la guerra, del narco paramilitarismo, del neoliberalismo, de la sujeción a
los Estados Unidos y a las transnacionales. Igualmente, será una coyuntura
favorable para promover una opción de cambio, de nuevo gobierno de
nación, paz y equidad.

Nacional

EL BLINDAJE DE LOS RICOS

Mientras el gobierno declaraba que la economía colombiana estaba blindada
contra la crisis económica mundial, hoy se siente con pasmoso dramatismo,
en el crecimiento económico negativo, que se estimaba en 1,5 por ciento
para este año, pero ahora lo calculan en sólo 0,7 por ciento.

Las importaciones seguirán bajando. El decrecimiento de la producción

industrial para enero, se calcula en 10,7 por ciento.

Estas expresiones críticas se explican porque Colombia, en materia

económica y política, está subordinada a los Estados Unidos, país en donde
es más grave la crisis económica y financiera.

El pueblo paga

Esta dura realidad, elevará los niveles de desempleo calculándose este

ejército de desocupados en un aproximado de 3 millones quinientos mil
colombianas y colombianos.

El 65 por ciento de la población económicamente activa, vive del rebusque o

empleo informal, otro 10 por ciento tienen trabajo temporal y un 7 por ciento
apenas logran obtener empleo inestable, lo que significa pérdida de derechos
laborales y máxima explotación.

Aceitar la máquina de guerra

El abultado presupuesto nacional es destinado principalmente para la guerra

y manejado con criterio clientelista, destacándose en ello, las llamadas
Familias en Acción, como importante cauda electoral del primer mandatario.

Con 4.700 millones de dólares financian la guerra interna cada año y los
Estados Unidos como ayuda militar, aportan legalmente apenas 700 millones.

Esto, sacrifica de manera considerable los recursos económicos para cubrir el

gasto social, manteniéndose una crisis de carácter social de profundas
consecuencias.

El problema vial es muy grave, si se tiene en cuenta que se suma a la crisis

del resto de servicios públicos, así como a los damnificados de la actual ola
invernal.

Ganancias para la camarilla

El gobierno de Uribe se ha destacado por desarrollar con más fuerza que sus
predecesores, una política entreguista de los recursos nacionales a empresas
extranjeras, sobre todo de EEUU.
La inversión extranjera no va en desarrollo del valor agregado para el país,
sino para negocios de las multinacionales en la ganadería, grandes
plantaciones de agro exportación y los agrocombustibles.

Los 4.500 millones de dólares de Inversión Extranjera Directa, proceden de

los Paraísos Fiscales, dentro de su negocio de lavandería de narco-capitales y
su destino más que con propósito de desarrollo, ha sido el turismo, la
hotelería, los casinos, la extracción de minerales y petróleo.

El actual escándalo del gobierno Uribe, es el de las Pirámides de estafa y

lavado de dinero sucio, como DMG, las cuales fueron toleradas y en ellas
invirtieron y participaron muchos funcionarios del Estado, además de hacer
parte de la cadena irregular del acopio de firmas para el Referendo
reeleccionista.

Unidad, solidaridad y lucha

La crisis económica del régimen, que se descarga sobre los hombros del
pueblo y los sectores medios, debe motivar, del lado de los revolucionarios,
los patriotas, los demócratas las organizaciones populares, el más amplio
espíritu de lucha, solidaridad y unidad, en la que al centro esté la defensa de
los intereses de las mayorías nacionales, por encima de los intereses de
sector, grupo o partido, sólo de esa manera, la perspectiva será clara y con
proyecciones de futuro.

El ELN reafirma su compromiso en este esfuerzo de acción política y social.

www.eln-voces.com
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