Professional Documents
Culture Documents
Todo
venezolana. Fue abuelo materno del poeta y jurista don Andrs Bello. Su
carrera artstica se conoce desde 1751 cuando se tiene registro de un
encargo para la iglesia de la Candelaria.
En su obra existe una soltura de dibujo, armona de valores y
elegancia de la composicin.
Ciertamente la obra de Juan Pedro Lpez resalta entre aquellas de
los pintores contemporneos a l, por el elegante y delicado tratamiento
de la tcnica pictrica, erradicando por completo cualquier vestigio de
torpeza o tosquedad en la ejecucin. Este es un aspecto fundamental,
puesto que nos lleva a pensar en una probable preparacin profesional
dentro del oficio. Sabemos que en Caracas no existi ninguna institucin
que asumiera las funciones de academia de arte o pintura, como si la
hubo en otros virreinatos como el de Nueva Espaa. De modo que Lpez
solo pudo adquirir sus conocimientos tcnicos acerca de la pintura a
travs de dos vas: las enseanzas directas de un maestro en el oficio
que lo recibiera como ayudante y que le instruyera, o aprender el oficio
afuera de la Provincia de Venezuela.
Se puede sealar que la composicin de las obras en l, y muchos
otros, es bastante predecible sin que esto disminuya la calidad de las
piezas. Lopez tambin estaba siguiendo los modelos iconogrficos que,
sin duda, l conoca y deban abundar en la poca. Estos modelos
llegaron hasta l a travs de la estampa religiosa, libros ilustrados o a
travs de obras de artistas extranjeros. Las estampas se haban utilizado
en Europa desde tiempos antiguos.
Es bastante comn en la imagen de la Inmaculada Concepcin,
observar una centralizacin de la figura de Mara, ubicando a su
alrededor una serie de objetos simblicos que se refieren a las
cualidades de la virgen.
Maria encarna un tipo femenino de facciones estereotipadas,
incluso en sus gestos. Es untipo bello, idealmente hablando, sin
defectos, unamujer joven, pero fuerte, imperturbada, pero no rgida. De
carcter amable no tiene un carcter triunfal sino sereno y atemporal.
Maria se encuentra en medio de una ruptura de gloria celestial en la
que el espectador sabe que aquello que ve es fugaz y sagrado. Existe
siempre movimiento y vitalidad en los pliegues de la ropa y hermosos
contrastes de luz y sombra.