ISMAEL QUILES, S. I. FILOSOFIA’ DE LA RELIGION seuioTeca MADRIDINTRODUCCION 1, RAZON DE SER DE LA FILOSOFIA DE LA RELIGION «Siempre que el hombre se siente removido y con- movido hasta en su dltimo fondo por cualquier cosa, ‘ea por el placer 0 el dolor, no puede huir esa hora sin que levante el hombre sus ojos interiores, espirituales, lo etemo y a lo absoluto y Jo anhele en voz alta 0 baja, secretamente o en Ja forma de un grito aunque sea linarticulado. Pues en la totalidad indivisa de la Persona y en el nécleo de Ja persona humana —n0 ‘como cada esfera cultural particular, en una de las fun- ciones, dotes, necesidades parciales de la persona, ni cen las capas superficiales de la corriente psiquica— re- side en lo més profundo de nosotros aquel maravilloso resorte, en circunstancias usuales y regulares inadvertido yy desatendido la mayoria de las veces, que siempre actiia ‘constantemente para elevarnos a lo divino, por encima de nosotros mismos y més allé de todo lo finito» (1). (WD), Max Scheles, De lo eterno en el hombre, Revista de Occidente, Madrid, 1940, pig. 7ISMAEL QUILE, 8.1 Estas profundas reflexiones con que Max Scheler co- mienza su estudio sobre filosofia de Ja religién, en el que nos ha dejado una de las mejorés descripciones ‘modernas de la esencia de lo religioso, demuestra el por una filosofia de la religion. El filésofo, tudiar ante todo la realidad humana, no puede perder de vista esa gran realidad que, a través de la historia de los hombres, en todas las edades y en todos los medios sociales, y en cada uno de los indivi- espiritu, mucho mis debe estudiar este fenomeno esen- cialmente humano, por el que el hombre se ve conectado necesariamente con algo que lo trasciende, que lo atrae irresistiblemente, y de lo que no puede prescindir. Esta atraccién de algo absoluto y eterno nunca la experimenta fn Ge Io etemo y 10 absoluto, que parece atraer constante- mente a la humanidad, como el santo y en general el hombre cuando esti bajo el influjo de Ja experiencia religiosa. ‘Nada extrafio que la flosofia de la religion sea tan ‘antigua como la filosofia misma, aunque el nombre de filosofia de la religion sea relativamente muy reciente. Desconocido atin en la Edad Media y en el Renacimien- 10, s6lo puede hallarse consagrado en el siglo x1x aun- | ' LOSOFIA DE 1A aRLIGION 15 que ha ido adquiriendo una importancia caracteristica dentro de la filosofia, que ha obligado a todos los grandes filésofos modemos a ocuparse de este gran capitulo de Ja filosofia. 2. NOCION La nocién precisa de filosofia de la religion nos la dan las dos palabras que la designan: El estudio filos6- fico de ta ‘Quien dice filosofia, dice investigacién de los tltimos jundamentos, de la esencia y de las leyes fntimas de la religion, que escapan a los métodos de las ciencias positivas o experimentales. Asimismo dice un bir, fundamentar, guidndose por lo que é! mismo puede comprobar y no por el textimonio de una autoridad, asi sea la dé una Iglesia 0 la de una Revelacién divina. Esta actitud es esencial en Ia filosofia de la religion Para que no se:convierta en teologia o en una simple apologética, 3. SISTEMAS DE CONOCIMIENTOS POSIBLES SOBRE LA RELIGION Describamos los otros sistemas de conocimientos po- sibles sobre la religion, para poderlos distinguir mejor de la filosofia de la religion. Ciencias de la religion se llaman las que pueden utili- zar los métodos los fen6menosIsMArt OUI, 6 1. historia de las religiones, que describe el proceso hist6- rico de las manifestaciones religiosas del hombre. EI nombre de teologia se ha reservado ya desde la Edad Media a la ciencia que estudia la religion tomando como principios las verdades reveladas por Dios. El ob- jeto directo de la teologia son los dogmas revelados, los cuales, por estar fuera del aleance natural del hombre, ‘exorbitan el campo de la filosofia. Mas adelante debemos ‘estudiar el punto de conexidn racional, el puente por el que el hombre y el filésofo pueden pasar humanamente Y filoséficamente hacia el dominio de la teologis. Por ahora es necesario dejar bien asentado que son dos eien- cias diferentes Ja teologia y la filosotia de ln religion, tanto por su método enteramente irreductible, como pot su mismo objeto, ya que la divinidad es estudiada por la teologia en aquellos aspectos (los dogmas y los misterios) que estén fuera del alcance de la raz6n, y la filosofia es- ia ciertamente la misma divinidad, pero s6lo en aque- spectos que estén al alcance de las fuerzas naturales ‘como sinénimos. Hemos descrito lo que entendemos por filosofia de la religi6n, respondiendo al significado mis- ‘mo de las palabras: estudio filosofico de la religién. En cambio, la expresién filosofia religiosa no presenta el mismo sentido, sino que propiamente significa un siste- ‘ma filosofico empapado esencialmente de religién. His- toricamente conocemos filosofias en las que la desempetia un papel esencial, transoendiendo toda st terpretacién del mundo, del hombre y de la moral. T than sido algunas filosofias orientales, como el hinduis- ‘mo: son filosofias que més propiamente podrian Ilamar- « TUOSOMA DE LA RELIGION sofia religiosa, 4, RELIGION Y FILOSOFIA Es cierto que casi todos Jos sistemas filoséticos con- vergen hacia el punto de lo eterno, de lo divino, de 10 absoluto, de Dios. En ese sentido algunos pretenden que toda filosofia debe ser religiosa. No vamos a discutir ahora este problema, que més adelante debemos tratar @ fondo, pero es evideate que ya una mirada sobre la superficie nos revela cieria diferencia entre filosofia y religi6n, y que es esencialmente diferente la actitud del filésofo que contempla a Dios, de la del hombre reli- gioso que lo adora. Quedan asi perfectamente - das Ja mision de la filosofia y de la religion, o mejor, la funeién que puede y debe corresponder a la filosofia sobre la religion. Es la filosofia la que debe darnos la ‘dtima fundamentacion de los valores religiosos del hom- bre, llegando hasta fa esencia, el origen y la trascendencia ‘dtima para el hombre de los valores de la religion. 5. TERMINOLOGIA: RELIGION, REVELACION, CULTO 1. Religién, a) EL TéRotNo—Religion proviene del verbo relegere = volver a leer, leer una y otra gin interpretacién de Cicern (De natura deorum, |. I, €. 28): «Los que tratan con diligencia repetidamente, y ‘como releyendo, lo que pertenece al culto de los dioses,18 ISMAEL QUILES, S. 1. han sido lamados religiosos, del verbo relego; como los elegantes han sido lamados asi por el verbo elego.» Otros prefieren la derivacién del término religion del verbo religare = atar apretadamente, generalmente més aceptada. Tal hace Lactancio (Institutions di- vine, 1. IV, 28): «Estamos obligados por este vinculo, y atados fuertemente con Dios, de donde tomé su nom- bre la religion.» En Jos autores latinos existen vestigios claros de la conexi6n entre religion y religare; asi Lu- crecio (I, 931): «Desatar el Animo de los nudos de la religions; Tito Livio (1. V, c. 23): «Librarse, desatarse a si y su casa de la religion»; la expresién corriente latina religio iuvis iurandi, «la obligacion producida por el juramento», confirma esta relacién etimol6gica. Segiin otros, el término religioso viene de relegere, pero no en el sentido de «volver a leer», sino «recoger, juntarn; relego en este sentido se opondria a neglego. En el Nuevo Testamento el término latino religién aparece tan s6lo tres veces, correspondiendo al griego, que generalmente significa las ceremonias del culto, aun- que también pueda incluir las virtudes 0 deberes de la religion en general. En griego no parece existir un tér- mino que corresponda exactamente al latin religio: los términos Opyaxeta y eboéfeve significan perfectamente Ja liturgia, y la piedad, la veneracion hacia los dioses. 4) La SiGNticaci6N.—En su significado directo, y en las expresiones del latin clisico, la palabra religion nos recuerda siempre alguna relacién con la divinidad. Posteriormente esta significacién puede decirse exclusi- va, y ya para todos y en todas las lenguas modemas con- término religidn el significado de relacién con in precisa de lo que ¢s la religién no puede adelantarse a un estudio filoséfico de la misma; pero podemos y debemos designar muy en concreto, y como FILOSOFIA DB LA RELIGION 19 sefialar desde ahora, cuAl es el objeto de nuestro estudio, cuyas caracteristicas esenciales y cuyo tltimo fundamen- to debemos investigar. Para ello atendamos a aquellas tealidades, a aquellas manifestaciones de la historia hu- mana, que todos unénimemente reconocen pertenecer al plano religioso, Tales son, por ejemplo, el cristianismo, el judaisino, el mahometismo, el budismo, etc, En todos ellos se nos muestra el hombre en una relacién para con Dios, que implica cierto reconocimiento de su exce- lencia, de su dominio y poder sobre los hombres y sobre las cosas, de donde se originan ciertas obligaciones del hombre para con Dios. Esta declaraci6n inicial de la religion prescinde del valor objetivo y del fundamento de la misma, nos consigna simplemente el hecho, que coincide con la experiencia religiosa y con los elementos caracteristicos de las diversas religions histbricas. La religion puede ser natural y sobrenatural: la pri- mera es Ja que el hombre puede llegar a conocer y prac- ticar por sus fuerzas naturales; se funda en la naturaleza misma del hombre, y por eso necesariamente debe brotar de ella; religién sobrenatural es la que est4 por en- cima de la capacidad natural cognoscitiva y activa del hombre, y solamente puede serle manifestada por libre disposicién de la divinidad. La religion sobrenatural suele lamarse también religion positiva, porque al re- basar los limites de la naturaleza misma, solamente llega al hombre como algo afadido a la naturaleza, por una disposicion especial de la divinidad. 2. Revelacién es, en general y en su sentido religioso, Ja manifestacién que Dios hace de si mismo, de su vo- luntad y de ciertas verdades al hombre. La revelacién puede ser también natural y sobrenatural 0 positiva. Es natural la que Dios hace por medio de las cosas del mundo, por medio de la naturaleza, a través de la cual20 ISMAEL QUILES, 8. 1. puede el hombre llegar a conocer a Dios. Es sobrenatural a la revelacién que Dios hace directamente indo al hombre en una especie de conversacién sus designios, su voluntad, sus misterios inaccesibles a Ja sola raz6n natural. 3. Afin con la idea de religiGn es la de culto. Propia- mente hablando, culto es el honor y reverencia hacia al- guno en reconocimiento de su excelencia. Generalmente, cuando se trata de otro que no sea Dios, el culto se llama simplemente honor, pues el uso ha reservado la palabra culto como acto de honrar a la divinidad. El culto puede ser interno o externo, segin que solamente sea practicado por las facultades internas del hombre, 0 por acciones y actitudes corporales. 6. METODO Lo que hemos indicado nos da la pauta del méto- do que debe seguir Ia filosofia de la religion. Método racional, en cuanto que son las facultades cognoscitivas y debe por lo tanto utili- n, mente al estudio de la rel zarlo la filosofia de la 7. PROBLEMAS El camino que deberia recorrer Ia filosofia de la reli- gion es a grandes rasgos el siguien a) En primer lugar necesita deli dadosamente la esencia de lo reli inicial es aplicable el método fenomenol6gico, y lo han FILOSOFIA DE LA RELIGION at hecho con acierto en muchos puntos modernos filésofos como Otto y Scheler. ies de Ja fenomenologia, de- teorfas, Para ello ordenaremos previamente los problemas, y examinaremos luego las diversas teorfas sobre la religién, que modernamente han tenido mayor resonancia. ©) Finalmente, después de una valoracién de las teo- rias, haremos, por nuestra parte, el estudio directo de los problemas, recogiendo las experiencias de los demés.