Professional Documents
Culture Documents
Proceso de paz
Aquí es dónde radica la posibilidad de construir un proceso de paz que sea irreversible, es decir que
no tengamos que volver al uso de la violencia ni al recurso de las armas para tramitar nuestras
diferencias y conflictos. Esto pasa no sólo por un acuerdo entre el Gobierno y las guerrillas (y demás
actores armados) para terminar el conflicto armado, sino también por la creación de condiciones
para ir superando poco a poco las causas estructurales que dieron origen al conflicto, y sobre todo,
por los cambios y transformaciones en los imaginarios sociales y culturales que han soportado y
alimentado el conflicto. Estos cambios y transformaciones son los que tiene que ver con la
construcción de una cultura de paz y de convivencia, con la creación de escenarios para el diálogo,
para el reconocimiento de las diferencias, para entendernos distintos (pluriculturalidad) pero con
capacidad de con-vivir en la diferencia, para de construir los paradigmas de la fuerza y la exclusión
como formas de imponer nuestros criterios. La construcción desea cultura de paz tomará largo
tiempo, que se inicia con la fase del posconflicto, pero en la cual debemos participar todas y todos
constituyéndonos en constructores de paz y fomentando en nuestras regiones pactos ciudadanos por
la paz. Sólo así haremos realidad el “Nunca más” de ésta larga historia de destrucción entre las y los
colombianos.
Conceptualización de la Paz
Una mirada general sobre las acepciones filosófico-religiosas referidas a la paz nos permite apreciar
conceptos tan interesantes y variados como el de /Shalom/, que en hebreo se traduce como paz con
Dios; /Salaam/, que en árabe significa la llegada de la paz entre las personas; /Pax/ romana que
podría conceptualizarse como orden, autoridad y dominio; /Eirene/ griega como sinónimo de
armonía hacia el interior del grupo; /Shanti/ y /Ahimsa/ principios de la religión hindú asociados con
la virtud suprema y la paz mental; /Ho P´ing/ y /Píng Ho/ que en China indican espíritu templado y
orden mental; y, /Heiwa/ y /Chowa/ que en japonés significan armonía.
la diversidad cultural humana. En efecto, los diferentes medios y modos mediante los que hemos
construido paz han propiciado la cristalización de diferentes conceptualizaciones para un mismo
término. En este sentido, es válido decir que dependiendo de quién haga uso del vocablo paz, se
estará diciendo una cosa o, incluso, su contraria. Definitivamente, no es lo mismo hablar de paz
como sinónimo de justicia social, equidad o disfrute de los derechos humanos, que hacerlo como
sinónimo de orden, protección o defensa militar.
Contrario a la tradición Oriental en la que el concepto de paz se relaciona en mayor medida con el
equilibrio, la virtud o la armonía interior, en la tradición Occidental, el concepto de paz se relacionó,
históricamente, con la ausencia de guerra, así como con el orden y el control grupal. La radical
diferencia de sendas conceptualizaciones implicó que, en Occidente, el desarrollo científico del
objeto de estudio de la paz se enfocara, en un primer momento, en la guerra y el orden al interior
del grupo; y, en un segundo momento, en el análisis del conflicto, las violencias, y el derecho.
En tender la Paz como un proceso implica identificar distitnos momentos en su construcción y los
alcances y límites de cada uno de ellos. En paises en conflicto armado, como en Colombia, hablar de
proceso de paz está íntimamente relacionado con la idea de acabar con el conflicto armado, es decir
de llegar a un acuerdo, entre los actors armados y el Gobierno, para terminar el conflicto. Esto
corresponde a lo que en la teoría d ela paz se denomina “Paz negative” es decir, ausencia de Guerra
y silenciamiento de los fusiles.
En una vision de “paz positiva”, el proceso de paz pasa pro negociar y terminar el conflicto armado,
pero a la vez por el diseño de un proceso de largo plazo que transforme los factores estructurales
que han dado origen al conflicto. Esta idea de proceso de paz, implica involucrar a todos los aactores
de la sociedad y no solo a los actors armados (legales e ilegales) participantes en la Guerra.
El proceso de paz entonces va más allá de terminar la guerra y apuesta por impulsar
transformaciones sustanciales en la sociedad para que la convivencia pa´cífica y la capacidad de
resolver los conflictos por medio del diálogo se convierta en cultura ciudadana.
Como podrán observer en el texto de Villarraga, en Colombia tenemos multiples experiencias que
han apuntado a resolver el conflicto armado con los actors ilegales, sin embargo, un proceso de paz
que transforme los factores que han dado origen y han alimentado el conflicto, está todavía en
construcción.
Video de apoyo
Actividad a realizar