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Los avances tecnológicos han otorgado beneficios no sólo en el ámbito de las ciencias
exactas, sino también en el ámbito de la cibernética y de las comunicaciones. Dichas
innovaciones se han ido adoptando en varias áreas de conocimiento y, el Derecho, no
pudo ser la excepción, esto se refleja en la informática jurídicai, la cual se clasifica en
documental, operacional, de gestión, registral y de decisión o, dicho de otra manera,
Informática documental, Informática de gestión e Informática de decisión. A
continuación se describe brevemente el objetivo de cada una de las clasificaciones de
la informática jurídica:
En México, al igual que en otros países, muchos de los procesos judiciales que
competen tanto a la procuración (integración del expediente), como a la
administración de justicia (determinación de la eventual inocencia o culpabilidad de
una persona) son lentos. Hay personas que llevan años privados de su libertad, o en
proceso en centros de reclusión, sin que se les dicte sentencia por burocracia o rezago
de expedientes. Ante este panorama, la ciberjusticia puede ayudar a que la impartición
de la justicia sea más rápida, expedita y transparente.
A pesar de las ventajas que dicha herramienta otorga, muchos juristas se oponen ante
la idea de la “justicia electrónica” ya que creen que las computadoras (con la ayuda de
la inteligencia artificial) reemplazará a los humanos en la impartición de justicia; el
objetivo de dicha herramienta es ayudar al juez de una manera simple y eficaz, no para
reemplazarlo.
En Nuevo León, por ejemplo, los juicios orales se pueden video grabar (si el inculpado
está de acuerdo) permitiendo tener elementos de prueba que sean rápidos y su
condena es menor que la que tendría en caso de que fuera en un juicio normal.
El Dr. Julio Téllezii afirma que el objetivo de la Ciberjusticia es: “Eficientar la impartición
de justicia, reducir los costos de los procesos judiciales y evitar el rezago de
expedientes”
Los cibertribunales permiten a las partes interesadas elegir a aquellos que propondrán
soluciones a los conflictos (académicos, expertos en el tema, etc).
Pero, ¿cómo funciona un cibertribunal?; una vez presentada la solicitud de arbitraje, el
cibertribunal operará como filtro de ambas partes, la comunicación entre los
representantes del cibertribunal se desarrollará mediante correo electrónico. Las
audiencias se realizarán utilizando en algunos casos el correo electrónico o chat o de
videoconferencia entre las partes en conflicto y el Tribunal, se utilizan sistemas de
encriptación para asegurar la confidencialidad de las comunicaciones. Finalizado el
caso, se publica en la página web del cibertribunal un resumen de la resolución
únicamente con el fin de crear precedentes.
El uso de la informática, y específicamente de la computadora, como instrumento para
la consecución de la justicia (fin óptimo del Derecho) facilita que los procesos judiciales
de cualquier naturaleza sean más cortos.