Tratar el problema del racismo es muy complejo, ya que lleva más de 3 centurias en ser

implantado. En esos tiempos y aun en el presente muchas personas que se llaman

“blancos” tienen arraigado en su subcociente que es una raza superior a las demás,
sabiendo que solo existe una sola raza y esta es la humana, en ese sentido todos somos
iguales con las mismas capacidades físicas e intelectuales.

Con miras en solventar este inconveniente se debe inculcar desde la infancia el respeto
a todas las personas independientemente de su color de piel, características físicas y
modo de vestirse o actuar. El principio de la discriminación comienza desde una idea
social y es allí donde debemos atacarla, la educación es en principio la forma más
efectiva de ensenar a las personas lo valioso que son las personas por ser seres
humanos, más que por sus características físicas.

Las políticas de estado también son importantes para ayudar combatir cualquier
discriminación a las personas. Las entidades gubernamentales mediante unas leyes de
divulgación del respeto de las personas y el libre desarrollo de la personalidad pueden
ayudarnos a reforzar las enseñanzas que deben partir de casa.

No en vano un país altamente racista como los Estados Unidos pudo elegir un presidente
de raza negra que ha demostrado dirigir los hilos de un país tan complicado de manera
eficiente y mejor que muchos de los anteriores presidentes. El racismo, además, parte
de una ceguera mental que no permite ver más allá de los prejuicios que han venido
como se dijo anteriormente desde periodos históricos. La convivencia personas de todo
tipo de personas da una amplia gama de visiones que abre la mente de las personas y
además permite avanzar a las sociedades en todos los aspectos, aparte de llevarnos a
estados de paz entre todos nosotros.

Finalmente, debemos combatir el racismo y cualquier tipo de discriminación que vulnere

el desarrollo de la personalidad de cualquier ser humano, ya que a ninguno le gustaría
pasar por la vergüenza y el desasosiego que pasan las personas que han sido sometidas
a este tipo de presión.