Professional Documents
Culture Documents
Shiedam
“¿Quién es ese Ángel?” le preguntó a su guía. “Es”, dijo él, “el Ángel
guardián del pecador en cuya suerte estas interesada. Su alma está
dentro de ese pozo, donde tiene un Purgatorio especial”. Tras estas
palabras, Liduvina miró inquisitivamente a su Ángel; ella deseaba ver esa
alma que le era tan querida, y tratar de librarlo de tan espantoso hoyo. El
Ángel que comprendió su deseo, descubrió el pozo, y una nube de llamas,
junto con los más lastimeros lamentos brotaron de él.
La visión de ésta alma, presa del más terrible tormento de fuego, le causó
tal conmoción a nuestra Santa que el cinturón que ella usaba alrededor del
cuerpo se rasgó en dos; y siéndole imposible seguir viéndole en tal estado,
despertó repentinamente de su éxtasis.