Professional Documents
Culture Documents
El ECRO y Lacan
Lic. Gladys Adamson
EL ECRO Y LACAN
EL ECRO PICHONIANO
Ahora, esto Pichon lo construyó en la década del `60, con lo cual creo que nuestra
responsabilidad como psicólogos sociales es tomar los desarrollos que siguieron
aconteciendo en estos tres campos, para hacerlos dialogar con el ECRO pichoniano.
En el campo del psicoanálisis hubo un desarrollo fundamental que es el
psicoanálisis de Lacan. Vamos a la teoría lacaniana, con el espíritu de poder obtener
conceptos instrumentales para poder descubrir herramientas que nos permitan
comprender mejor el campo de indagación, de lectura, de comprensión y de
intervención nuestra. En este sentido es que yo siempre digo que nuestra intención
no es volvernos lacanianos, sino esta búsqueda instrumental de conceptos que nos
enriquezcan la lectura de nuestro campo. Creo que esta es la posición pichoniana,
buscar en los distintos marcos referenciales instrumentos para pensar nuestra
práctica, aquello que nos es instrumental a nuestra práctica.
Lacan en ese sentido toma los síntomas como significantes y a partir del psicoanálisis
va a decir que hay una primacía del significante por sobre el significado. El
significante tiene primacía, debajo estaría el significado que es resistido en
su significación, el síntoma como significante requiere un trabajo de retraducción,
digamos, para encontrarle el sentido, el significado que tiene ese síntoma.
Una de las primeras producciones de Lacan tuvo que ver con el estadío del
espejo, aquí hay una consecuencia importante y que es el origen de alienación que
tiene nuestra subjetividad. El estadío del espejo, uds. saben, se comprueba poniendo
un bebé delante de un espejo, el alborozo del bebé al ver su imagen unificada, cómo
él a través de esta imagen unificada anticipa una unidad que aún no tiene, pero le
permite superar esta vivencia de cuerpo fragmentado, pero esa unidad que ve el
bebé en el espejo es una mezcla de lo que él ve pero fundamentalmente como lo ve
la madre; es el significante que la madre imprime a esa imagen que va a constituir la
subjetividad o la identidad de este bebé. Entonces la constitución de nuestra
subjetividad tiene ese origen de alienación, nos conformamos en el campo
del otro, construimos nuestra subjetividad de acuerdo a cómo nos mira el otro, qué
imagen, qué significantes nos vienen desde el otro (en principio la madre).
Lacan hace un aporte que a mí me parece interesante, que es cómo el estadío del
espejo nos permite también pensar la rivalidad humana. Lacan lo que dice es que
esa identificación con la imagen del otro, es origen de que queramos lo que el
otro tiene o podría tener y ahí comienza una lucha donde al mismo tiempo deseamos
que nos reconozca como poseyendo, como... acá habría que agregar un concepto que
es el falo, el falo es completud, es lo que nosotros elaboramos como concepto de
completud, y se busca reconocimiento en esa apropiación o en esa completud. En
general se suele poner el ejemplo: de dos chiquitos que por ahí tienen seis meses,
nueve meses, y que uno los sienta juntos, rodeados de juguetes, basta que uno
agarre un juguete para que el otro se le abalance y quiera exactamente el mismo.
Pag. 2 de 9
Lo que Lacan dice, la rivalidad, la agresión no es algo que pueda ser eliminable
del campo interaccional; lo cual no quiere decir que no pueda ser limitada. Aparece la
palabra como apaciguadora de esa rivalidad. La rivalidad es algo que está
fundamentalmente en un plano imaginario, en un plano fantasmático, en un
plano de indiscriminación del otro. Podemos seguir con el ejemplo: el bebé agarra un
autito azul, el otro le manotea exactamente el mismo autito, empieza la puja,
empiezan las agresiones, los gritos, los llantos, aparece la mamá o el papá y dice
bueno qué pasa acá, ve la rivalidad y aplica alguna ley; bueno, quince minutos el
autito para cada uno, busca otro autito casi idéntico, aparece la posibilidad de la
palabra, la posibilidad de ley, como la gran apaciguadora de este mecanismo de
rivalidad que es estructural de la subjetividad humana, que no es eliminable, si es
posible de intervenir sobre él, pero es esperable que siempre aparezca.
Otra producción lacaniana es el sujeto barrado, esto tiene que ver con la
concepción del sujeto como una falta en ser. Yo siempre relaciono esto de Lacan,
donde habría estructuralmente una falta en ser, yo siempre lo ligo con la frase de
Pichon del capítulo 6 de Conversaciones, donde él dice: “No hay nada en el ser
humano que no sea la resultante de su interacción con otros grupos y
clases”. No hay nada, o sea que el ser de esta nada se constituye en la interacción
con los otros, no hay nada previo, no hay nada que no sea la resultante de su
interacción con otros grupos y clases, o sea no hay nada que no sea social.
Pag. 3 de 9
respuestas automáticas y que lo adaptan a sus congéneres, a su territorio, a su
habitat, ya nace con este paquete instintivo, ya nace con estas respuestas a
estímulos. En el ser humano no hay nada que se parezca a esto, el ser
humano nace inmaduro, prematuro, en estado fetal, termina su maduración
en un útero social, y esto es lo que lo hace tan maleable a las distintas
culturas. Además los significantes son culturales un mismo gesto puede significar
cosas distintas en distintas culturas por ejemplo en las tribus de la Polinesia cuando el
bebe recién nacido llora es porque lo atacaron los espíritus malignos mientras que
para uds. que significa que el bebe llora? Que significa para la madre?
El deseo humano en principio es el deseo del otro, el bebé desea ser el deseo
de la madre, esta unidad de dos, lo que se suele llamar la madre fálica, pero no la
madre fálica en términos negativos, sino en esa necesaria completud que es
fundamental para la constitución de la subjetividad. Esa unión libidinosa de la
madre con el bebé es fundamental para su constitución y su supervivencia, si
esto no se da los bebés mueren como a veces pasa en los hospitales.
Esta carencia en ser, esta incompletud estructural hace que sea el significante,
la cultura, el otro, el gran Otro, que es sinónimo de cultura y lenguaje, lo que
divide al sujeto, y esto es sumamente importante, porque nos posibilita
entenderlo en términos de que nuestro inconsciente repite la cultura de la
cual nosotros emergemos. Esto que dice Pichon, los psicoanalistas extrañan que
además del discurso individual del paciente tienen que escuchar a un emisario, un
emisario que proviene de tramas vinculares, de culturas, o sea del portavoz, del
emergente, del emisario.
Pichon, en las clase ponía énfasis en una psicología que transitaba niveles de
la cotidianidad, del discurso cotidiano. Lacan en ese sentido no tiene tanto la
concepción de un sujeto narcisista como de un sujeto transindividual, o sea que el
sujeto se comprende en relación con un otro como semejante o al gran Otro de la
cultura.
Como sucede esto? el estadío del espejo nos permite visualizar la estructura
de alienación en la cual comenzamos la constitución de nuestra subjetividad.
El Edipo tiene tres momentos.
Pag. 4 de 9
permite, además, a la madre constituirse nuevamente en un sujeto
deseante
Ése es el período del padre como dueño de la ley, es el padre castrador, es el padre
terrorífico, es el padre como amo, es el padre como dueño de la ley, donde el padre es
la ley.
Pag. 5 de 9
Pichon los llama: sociodinámico, psicosocial, institucional y comunitario.
Como Uds. ven lo individual es psicosocial, está la presencia del otro,
sociodinámico es el grupo, institucional y comunitario. Ahí estaba el “A” completo,
el gran otro completo, que sería la madre en el primer caso, o el Otro, el gran Otro,
según como lo quieran, en francés o en español.
La madre es el otro completo para el bebé, todas las respuestas, todos los
significantes, le vienen desde la madre al bebé. El padre, en el segundo momento del
Edipo también es un padre completo, un padre que no le falta nada, que todo lo sabe,
la escisión digamos, o el gran Otro barrado aparece en el tercer momento del Edipo.
El otro completo, diferente del otro barrado, el gran Otro es el código, el gran Otro,
dice Lacan, es el aval de la buena fe. ¿Qué quiere decir eso? Quiere decir que la
cultura es el gran tercero, referente de todas las interacciones humanas,
cuando uno discute con otro los argumentos que utiliza los hace referente al gran
Otro, uno busca argumentos que tiene al gran otro como referente.
Uno no discute con un psicótico porque no está el gran Otro que le pregunte,
como dice el dicho popular, a los locos hay que correrlos para donde corren, no te vas
a poner a discutir con un loco, es inútil, por que no existe el mismo código, porque no
hay un referente común que es la cultura. Bueno, lo simbólico tiene que ver con
la ley, tiene que ver con las normas sociales.
Pag. 6 de 9
determinada cultura o sociedad. Es el reservorio de lo que toda una
cultura ha logrado acumular como saber. Esto es lo simbólico, lo más
estructural, esto que dice Castoriadis, ese magma de
significaciones que una sociedad crea. Que nos dice qué es un
hombre, qué es una mujer, qué es lo sano, qué es lo enfermo, qué es
lo bueno, qué es lo malo, qué es el pecado, qué es la virtud.
Ahora, lo simbólico es lo que marca a lo real, recuerdan que nosotros
hacíamos referencia a que los griegos pensaban el origen del universo
como el abismo. El abismo, el vacío, lo indeterminado, el caos, esto es
lo real. Es aquello que no ha podido ser simbolizado, que no ha
podido ser mordido por el significante simbólico. Lo simbólico no
ha dejado su marca, no ha podido atrapar eso real, eso es lo real.
Es importante en este punto pensar que una cosa es la demanda que surge de un
Sujeto y otra cosa es el Otro cómo sanciona esta demanda. La mamá llama al
llanto hambre pero es esto lo único que significaba ese llanto? Esta diferencia entre
la demanda y lo que el otro sanciona como mensaje, queda la precipitación de un
sujeto escindido, de un sujeto incompleto, o sea de alguien que nunca se puede
completar en el otro. Esto que dice Pichon: los malos entendidos forman parte del
horizonte de la comunicación, porque hay distintos esquemas referenciales, y hay
distintos aparatos para pensar la realidad. El mensaje que yo emito no es lo que
Pag. 7 de 9
el otro recibe, porque son dos esquemas referenciales diferentes. Y si bien la
comunicación es poner en común algo, hay una parte que estructuralmente va a ser
diferente. Y eso nos hace sujetos incompletos, sujetos que no nos podemos completar
con el otro. Hay una diferencia en ese sentido irrenunciable o imborrable, que no se
puede explicar, en la interacción humana.
El significante es llanto, entonces acá este significado puede variar, puede ser:
es un mal chico, es un malcriado, mirá que amoroso, te extraña, te llama. Los
significados de este mismo significante pueden ser varios, no hay una relación
unívoca significante-significado, sino que es una relación con barreras.
El primero que trajo a Lacan es Pichon, fue Masotta el que se interesa pero a
través de Pichon, porque Masotta llega a hacerle una serie de planteos a Pichon sobre
ideologías, malestar personal, y entonces Pichon se para y saca de su biblioteca un
libro de Lacan y entonces decide abrir un grupo de estudio con Masotta como alumno
y él como profesor, y el comentario del libro es que es el primer caso que alguien
enseña lo que todavía no sabía, que era la teoría lacaniana.
Hay una revista muy vieja que es de un reportaje a Pichon de su encuentro con
Lacan. Hay mucha afinidad entre el psicoanálisis lacaniano y Pichon. Su concepción
de sujeto transindividual, la importancia de la cultura, la importancia del otro. Lo
llaman con palabras diferentes. Pichon lo llama Sujeto Social. Pero la ubicación,
inclusive Lacan le dice en un momento a Pichon “¿Por qué le llamás psicología social,
y no psicoanálisis?”, porque él no veía diferencia entre la concepción de Sujeto de
Pichon y la concepción de él desde el psicoanálisis.
Son dos campos distintos. Yo creo que no tenemos que olvidarnos que una
cosa es la práctica psicoanalítica, y otra cosa es la práctica nuestra, que tiene que ver
con los campos interaccionales, las tramas vinculares, es otra estructura. A mí me
gusta la definición de contextos de descubrimiento, contexto de práctica. Es distinto
el fenómeno, aunque sea un fenómeno humano, si uno se está basando en el
discurso individual, o si uno se está basando en una estructura grupal, donde
hay un cara a cara, donde hay discursos múltiples, donde la producción es social. Y
por lo tanto los conceptos instrumentales también son diferentes. Eso no quita que
muchos de los aportes de Lacan no nos sirvan para trabajar en nuestra especifidad de
la Psicología Social.
Pag. 8 de 9
Bibliografía:
Actividad de Aplicación.
Cuestionario
3 -¿A qué denomina Lacan “Estadio del Espejo”? enumere sus rasgos
fundamentales.
Pag. 9 de 9