INTERVENCIÓN INICIAL DEL MINISTRO DE FOMENTO, JOSÉ BLANCO,

EN LA CONFERENCIA SECTORIAL DE TRANSPORTES

Madrid, 14 de septiembre de 2010
Como sabéis, vamos a tratar dos temas.

El primero es “el Plan Estratégico para el Impulso del Transporte Ferroviario de

Mercancías”, que vamos a presentar hoy aquí, cuyas principales medidas han
sido consensuadas con el conjunto de las Comunidades Autónomas.

En especial, la definición de la futura Red Básica de Mercancías, tanto en su

aspecto de infraestructuras de línea, como en sus nodos logísticos
intermodales.

En segundo lugar os informaremos de las directrices y el calendario para la

actualización del PEIT, con el objetivo de abrir un proceso de diálogo y
colaboración.

Hoy tenemos una de las mejores redes de comunicaciones de Europa. Somos

líderes en autovías y en alta velocidad. Nuestros puertos y aeropuertos están
también entre los mejores.

Pero también es cierto que tenemos algunas deficiencias, sobre todo, en el

campo del transporte de mercancías.

Debemos reequilibrar nuestro sistema de transportes, reforzando aquellos

modos que más lo necesiten y facilitando a nuestras empresas la posibilidad de
elegir el modo o modos de transporte que más se ajusten a sus necesidades.

Y si tenemos una asignatura pendiente, hoy por hoy, es el transporte de

mercancías por ferrocarril.

España es el tercer país europeo con menor cuota de este tipo de transporte.
Actualmente representa tan sólo un 4,1% del transporte terrestre, debido a la
caída progresiva que ha experimentado desde 1997.

Por el contrario, en otros países como Alemania, Francia, Gran Bretaña esta
cuota representa el 22%, 16% y el 12%; respectivamente.

Esta situación de deterioro no se corresponde con la demanda potencial, ni con

los niveles de calidad, fiabilidad y flexibilidad que precisaría una red logística
competitiva.

De manera que la falta de integración del ferrocarril en la Cadena Logística

supone una importante pérdida de competitividad para el tejido productivo;
sobre todo, en el actual contexto de integración europea y globalización de la
economía.

No olvidemos que los costes logísticos son para muchas empresas superiores
incluso a los de personal.

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Y que pasan a constituir un factor crítico en decisiones tan importantes como la
localización o deslocalización de las empresas, cada vez más integradas en
cadenas logísticas globales.

Disponer de un sistema logístico eficiente es un valor estratégico al que no

vamos a renunciar.

Por eso, para impulsar el desarrollo del transporte ferroviario de mercancías

tenemos ya, en estos momentos, inversiones en marcha por valor de casi
1.800 millones de euros.

Y, por eso, hemos diseñado el Plan que presentamos hoy aquí.

Un plan que ha contado con vuestro apoyo así como con la colaboración de
todo el sector, con el que hemos realizado hasta casi 70 reuniones.

Un Plan estratégico que completa y desarrolla las medidas enunciadas en el

Plan de Choque presentado en el Consejo de Ministros en diciembre de 2008;
y que yo he querido acordar con el sector y las comunidades autónomas.

Para empezar, se completa el plan anterior con un estudio exhaustivo del

mercado del transporte de mercancías.

Incluyendo un análisis de los flujos actuales, tanto por carretera como por
ferrocarril, así como un estudio de la viabilidad de las diferentes alternativas de
tráfico para el ferrocarril.

A partir de este análisis se han definido en detalle las medidas precisas para
resolver sus debilidades estructurales.

De esta forma, el Plan Estratégico establece una “Red Básica para

Mercancías” e incide especialmente en el establecimiento de una red de nodos
logísticos, distribuida por todo el territorio.

Asimismo, define las condiciones de operación de esas líneas y de la red

nodal, de forma que permita a las empresas que las exploten aumentar su
eficiencia y rentabilidad.

En este sentido, con el Plan promovemos una mejora de la gestión para

alcanzar una verdadera liberalización del sistema.

La búsqueda de una integración eficiente del ferrocarril en la cadena logística

dará lugar a un incremento de la calidad y fiabilidad del servicio.

Y, en esta línea, el plan refuerza el posicionamiento de los Puertos Españoles.

Una red bien conectada a los Puertos, unida a una Red de Terminales
Logísticas Intermodales, junto a una gestión eficiente, nos permitirá
posicionarnos como Plataforma Logística Intercontinental.

De esta manera, potenciaremos la figura de nuestro país como puerta de

entrada y salida de Europa, para América, África y Asia.

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Para alcanzar todos estos objetivos, este plan contará con una inversión de
unos 7.000 millones de euros.

A la que contribuirán, además del Ministerio de Fomento, otras entidades y

administraciones, como las Comunidades Autónomas, así como el sector
privado.

Permitirme recordaros de nuevo que ya estamos invirtiendo casi 1.800

millones, en el impulso de este modo para las mercancías, de los que más de
400 ya pertenecen a este Plan.

Además, antes de que finalice este año, vamos a licitar proyectos constructivos
para adaptar la circulación de trenes de 750 metros en varios corredores
logísticos.

Y también vamos a aprovechar la entrada en servicio de nuevas

infraestructuras de alta velocidad para poner en marcha corredores completos
eficientes para mercancías.

Estamos hablando de corredores tan importantes como el Madrid–Valencia y el

Barcelona–Frontera francesa o el Eje Atlántico.

Por ello, quiero destacar que este Plan no es para certificar nuestro
compromiso con el impulso del ferrocarril para las mercancías. El compromiso
ya está más que probado.

Se trata más bien de planificar rigurosamente, en función de los análisis de

mercado, y de forma conjunta, con vuestra colaboración, para que nuestros
esfuerzos no sean en vano.

El elemento clave de este plan es que nace como fruto de un proceso de

concertación transparente, superando el alejamiento que había en esta materia
entre el Estado, las Comunidades Autónomas y el sector.

Planificar es coordinarse y priorizar. Y eso significa que todos tenemos que

renunciar a algo, para poder concentrar los recursos en aquello que pueda
ofrecer mayor beneficio al conjunto de los españoles.

No puede ser que cada uno vaya por su lado, en una materia tan importante
para nuestra economía. Y, en este sentido, quiero lanzar un mensaje claro:

Este Plan en ningún modo debe ser interpretado como una agresión, sino como
una oportunidad, para un sector como es el del transporte por carretera.

Un sector que ha venido demostrando su eficiencia a lo largo de los últimos

años y, que es y seguirá siendo, imbatible en determinados segmentos del
mercado del transporte.

Y un sector que debe aprovechar esta iniciativa para posicionarse y evolucionar

hacia su conversión en verdaderos operadores logísticos.

Es necesario superar la situación de confrontación modal y lograr un escenario

de colaboración y alianzas entre los distintos modos de transporte.

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La cooperación, el diálogo y la transparencia, entre administraciones y con los
sectores implicados son fundamentales para mejorar nuestro sistema de
transportes.

Y considero que el principio de acuerdo alcanzado con Comunidades

Autónomas, y otros organismos y entidades, en la elaboración de este plan
sienta un buen precedente para iniciar el dialogo alrededor de la actualización
del PEIT.

Una actualización, prevista dentro del propio Plan, y que constituye una pieza
básica del nuevo patrón de crecimiento que impulsa el Gobierno a través del
Proyecto de Ley de Economía Sostenible.

Porque aspiramos a alcanzar una planificación que se ajuste a los retos

actuales y de futuro de la forma más racional posible.

De manera que el sistema de transportes se ponga al servicio de la economía,

y no la economía al servicio del sistema de transportes.

Porque un sistema de transportes caro e ineficiente puede lastrar el desarrollo

de la economía, en lugar de fortalecerlo.

Por ello, esta actualización debe contemplar la eficiencia como la premisa más
importante en la selección y ejecución de inversiones.

En este sentido, debemos desarrollar también un nuevo marco económico que

profundice en la apertura de los mercados en todos los modos de transporte.

La búsqueda de la eficiencia del sistema nos debe llevar, de forma prioritaria, a

la interconexión de las distintas redes modales, siendo éste un factor clave
para superar nuestro déficit en términos de intermodalidad.

Las directrices para la actualización del PEIT abordan otros ámbitos como la
innovación y el desarrollo de los sistemas inteligentes de transporte.

Así como también la necesidad de una mayor transparencia y participación

pública.

Transparencia que también aplicamos con el establecimiento de un calendario

para la actualización, y que os entregamos esta misma mañana.

En definitiva, los desafíos a los que nos enfrentamos ahora no tienen tanto que
ver con la extensión de las redes de transporte como con su gestión, su
eficiencia, su seguridad y su sostenibilidad.

Hoy con el Plan de impulso al transporte ferroviario de mercancías ya estamos

dando un importante paso en esa dirección.

Estoy seguro que con la actualización del PEIT también lo daremos. Y estoy
seguro que será un paso que también daremos juntos.