INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL

Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos 3

Estanislao Ramírez Ruiz

Unidad de Aprendizaje: Entre dos mundos

Expresión Oral y Escrita II
Evidencia: Cuento
Fecha de entrega: 12/04/18
Nombre:__Díaz Esquivel Ailyn_________________Grupo:
2IM5__ Díaz Esquivel Ailyn
Valor de la evidencia: 20 Puntos obtenidos________
Tabla para evaluación

Indicadores Nivel de logro

Fondo Valor Puntos
obtenidos

1. Asigna un título atractivo al cuento. 0.5

2. Inicia el cuento con el personaje principal, ubicado en un 1.0
lugar y tiempo determinados, a quien se le presenta un conflic-
to.
3. Agudiza el conflicto hasta llegar al clímax 3.0

4. Escribe un desenlace sorpresivo y contundente. 1.0

5. Escribe con un lenguaje literario y estético un cuento creati- 5.0

vo y original.
Forma Valor Puntos
obtenidos
1. Redacta un cuento en dos cuartillas (Publisher: 43 renglones 0.5
por página) escrito en párrafos justificados, interlineado 1, letra
Calibri 10 para contenido y 11 (negritas) para título.

2. Redacta con claridad, coherencia y fluidez. 5.0

3. Escribe con menos de 5 errores ortográficos. 2.0

4. Usa, según las reglas gramaticales, mayúsculas, minúsculas y 2.0
diversos signos de puntuación.
Total de puntos obtenidos
Observaciones
Poco a poco con el tiempo me he dado cuenta de que soy diferente a los de-
más, muchos me toman de a loca, otros cuantos se burlan, otros mas se
asustan, muy pocos son los que de verdad me creen, pero a fin de cuentas
me dejan sola.
Desde pequeña las demás personas se alejaban pero "ellos" se acercaban,
siempre estaban cerca de mi, unos de “ellos” se quedaban conmigo durante
días, otros semanas, otros meses; se iban pero llegaban en su lugar así que
no me preocupe por hacer el esfuerzo de terminar con mi “forma rara de
ser” que hacia que los humanos huyeran. Mis horas de juego eran junto a
"ellos" pero siempre nos miraban de mala gana, como si tuviéramos la peste
y contagiáramos a cualquiera, los susurros comenzaban cada vez que pasába-
mos., parecía que “ellos” no le tomaban importancia, solamente yo; eso me
pareció injusto parecía que solo era a mi a quien criticaban ¿Y ellos? Pero me
acostumbre un par de años después.
Nunca comprendí en esos momentos lo que pasaba, pero conforme pasaba
el tiempo mas claro quedaba. Los demás no veían a mis amigos, no tenían los
mismos ojos que yo, la verdad no conocía a alguien que los tuviera, era la
única en ese entonces. Vivía en "mi mundo", mejor dicho "su mundo" lleno
de cosas desconocidas y aventuras inolvidables, parecía que yo comprendía
de diferente manera, mismos lugares, mismos objetos, mismas personas,
pero, diferente ambiente, diferentes criaturas, diferentes intenciones, dife-
rentes tensiones.
A la luz de su dimensión establecida no había otro humano, solo en la altera-
da (una combinación de ambos mundos) pero ellos no se daban cuenta de
que así era, seguían su camino conociendo solo el mundo humano, solo yo
soy quien interpreta la dimensión por el lado de los humanos o eso creí. ¿Un
don o una maldición? Esa era la cuestión, debía sentirme orgullosa de poder
percibir la realidad verdadera o querer arrebatar esa parte de mi por el re-
chazo humano.
Todo se agudizo en el momento de conocerla a ella. Pareció ser una de las
que se acercaban por ser yo la única quien podía "jugar" con ellos. Pero no
fue así, tenía algo especial.
El mismo día que ella se presentó, alguien más lo hizo. Aún recuerdo sus ojos,
su mirada clavada en mí. Intento hacerme daño, era de los malos; hasta en-
tonces no me había topado con alguno, ni siquiera sabía sobre su existencia.
Todos salieron corriendo al notar su presencia, todos menos ella. "Eso" había
tomado forma humana, con una sonrisa demoniaca pronuncio las palabras -
Juguemos a lo mío.– Su voz sigue grabada hasta en el momento perfecta-
mente que me dejo paralizada por unos instantes
Ella me tomo de la mano y corrimos hacia el bosque que se encontraba cer-
ca, me escondí detrás de unos arbustos intente detenerla pero ella se fue por
el mismo lugar por el que llegamos me preocupe demasiado que quería ir
corriendo a donde “ella” se encontrara..
Regreso después de un rato un poco cansada y desgastada, parecía que se
desmayaría, salí corriendo hacia ella, esperaba que no le hubiera pasado nada
y así fue, solo tenía un poco de sangre pero no parecía ser suya, su ropa rasga-
da pero no había ni una sola herida, la única evidencia de aquel combate era
los rastros que note en sus pertenencias, de no ser así juraría que no habría
pasado nada entre “ella” y “eso”.
Me dijo que corría un gran riesgo al pertenecer a la dimensión alterada. ¿La
dimensión alterada? ¿Qué era eso? Pues es la realidad a la que pertenezco, no
a la humana ni a la de ellos, atrapada entre ambos, estando en las dos pero a
la vez sin estar en ellas. Hasta el momento no se sabía de otro humano perte-
neciente a mi dimensión solamente era yo. Nadie más, no había nadie como
yo en ese sentido, se tenían antecedentes pero en aquel tiempo no había re-
gistros de alguien más. Todo ese tiempo sola en un mundo sin darme cuenta.
Ahora todo tenía un sentido, ahora sabia porque todo estaba tan cerca pero
tan lejano a mí.
Ella llego a aclarar todas las dudas que de noche me atormentaban y me co-
mían viva, tal vez sin ella seguiría en la perdición. Tal vez me hubiera vuelto
loca de verdad sin saber que ocurría a mí alrededor. Sin duda alguna gracias a
ella puedo seguir y no me han hecho daño.
Ese mismo día me acompaño a mi casa y le dije que se quedara a dormir, no
quería dejarla sola. En ese momento fue cuando mas miedo sentía pero ella
me tranquilizo. Me presento una posible solución para que ningún otro malo
o quien sea puediera lastimarme en un futuro, esta solución era un contrato
con ella.
Aquel contrato comenzaba de la siguiente forma:
“Acepto las condiciones que este contrato me establece por el resto del tiem-
po, no habrá poder alguno que lo rompa ni me arrepentiré de establecerlo.
Pongo mi alma como condición, como garantía de que los siguientes puntos
se cumplan:
I. Mi cuerpo esta a tu disposición en todo momento…”
Aquel contrato aparte de extraño conforme más avanzaba era muy extenso
que tarde días en leerlo completo, aunque no convencida acepte aquel docu-
mento que me salvo de volver a vivir escena tan escalofriante como la de
aquel día, pues desde el inicio “ella” me mostro confianza.
Aquella desconocida que solo miraba yo se volvió mi mejor amiga, aunque
nunca supe su nombre ni me atreví a preguntárselo ni llamarle de otra forma
por la que se distinguiera de tal importancia que tenia para mi.
“Ellos” y “Esos” siguieron apareciendo a lo largo de los años, pero ya no como
antes, pues “ella” los alejaba; fue como un ángel que se apodero de mi y has-
ta el momento sigue protegiendo, devorando lentamente mi existencia sin
quererlo pero necesitarlo, un demonio que salvo mi vida de sus cómplices. Mi
mundo sigue partido en dos o el mundo en el que me encontraba era un tra-
mo intermedio pero ahora “ella” no se ira.