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Tahyshaa Rivera
Área: Ed artística
Integrantes:
Evelyn Fuentes
Nelson Humanante
Stephanie Cuadra
Maily Mejía
Tahyshaa Rivera
Asignatura: ED. ARTISTICA
Curso: 1 de bachillerato
Paralelo: “B”
Profesor: yamil Córdova
Año Lectivo
El movimiento de arte y de crítica de arte feminista emergió en los años sesenta y se consolidó a
lo largo de los setenta como parte del movimiento feminista más amplio, enfocándose en
examinar las representaciones de las mujeres en el arte y del arte producido por mujeres. Sus
desarrollos continúan hasta la actualidad.1 Abarca el estudio de los esfuerzos y logros del
movimiento feminista para hacer más visible el arte realizado por mujeres dentro de la historia
del arte y la práctica artística; asimismo, examina conceptos y temas de la crítica de arte desde
la óptica feminista, tales como la representación, las estrategias materiales y la estética.
Ha de diferenciarse el «arte hecho por mujeres», que puede ser exactamente igual, en cuanto a
temas y géneros, al de otras tradiciones, de lo que es un «arte feminista», que pretende ser
diferente, tratar otros temas y alterar los valores tradicionales en el arte
El movimiento de arte y crítica de arte feministas emergió en los años sesenta y se consolidó a
lo largo de los setenta como parte del movimiento feminista más amplio, enfocándose en
examinar las representaciones de las mujeres en el arte y del arte producido por mujeres. Sus
desarrollos continúan hasta la actualidad.1 La creciente preeminencia de mujeres artistas dentro
de la historia del arte, así como en la práctica artística contemporánea puede atribuirse a este
movimiento.
Entre algunos de los temas presentes en este movimiento y que están normalmente excluidos en
otros movimientos de arte, como las funciones biológicas femeninas o la maternidad. Es por lo
tanto un arte político, que pretende ser hecho por mujeres y sobre las mujeres y su situación
social, tratando temas como la violación, el racismo o las condiciones laborales. Los medios
fueron diversos, desde las performances a las artes menores como el bordado, telas, papel
recortado o el patchwork.
El Edificio de la mujer de los Ángeles fue un prominente museo conocido por sus muestras de
arte feminista.
Dentro del arte feminista destaca la corriente pattern painting (pintura de patrones y decorativa,
o Pattern & Decoration). Su nombre deriva de Pattern, motivo decorativo. Fue una corriente que
nace de un grupo de artistas californianas opuestas al minimalismo, que usaron técnicas
artesanales de naturaleza «femenina». Esta tendencia está personificada por Tony Robbin,
Valérie Jaudon y Myriam Schapiro.
Mario Merz (1925) destaca entre los artistas italianos que han practicado este arte. Sus
obras parten de una ley estructural muy elemental, la del matemático medieval Fibonacci,
para quien el desarrollo derivaba no de la simple sucesión de números, sino de la
progresión en la cual cada número resulta de la suma de los dos precedentes. Esta
progresión matemática es la que publica Merz en cualquiera de sus trabajos, ya sean
objetos, espacios, vegetales, etc. Como por ejemplo, la disposición de paquetes de
periódicos en el suelo, con los números de Fibonacci realizados en neón o grupo de frutas
y verduras esparcidos por el suelo, que se van deteriorando como sucede con otros
fenómenos naturales, o la realización de un iglú recubierto por una estructura de neón,
donde aparece la serie de números Fibonacci, etc.
Destacan asimismo: Jannis Kounellis, Luciano Fabro, Richard Serra; y entre los alemanes
Joseph Beuys (1921-1985). El material preferido de este último era la grasa, con la cual
realizaba enigmáticos objetos o recubría otros, en los que destacaba principalmente, el
valor expresivo del propio material. En los años sesenta (1960), junto con otro artista
alemán, Wolf Vostell, y los vieneses del grupo Fluxus, Beuys llevó a cabo infinidad de
Happenings en los que se hacía patente su marcado inconformismo.
El término arte povera (del italiano arte pobre) es una tendencia dada a conocer a finales
de la década de 1960, cuyos creadores utilizan materiales considerados pobres, de muy
fácil obtención, como madera, hojas o rocas, vajilla, placas de plomo o cristal, vegetales,
telas, carbón o arcilla, o también materiales de desecho y, por lo tanto, carecían de valor.
En un esfuerzo por huir de la comercialización del objeto artístico, ocupan el espacio y
exigen la intervención del público. Tratan de provocar una reflexión entre el objeto y su
forma, a través de la manipulación del material y la observación de sus cualidades
específicas.
Arte efímero
Se denomina arte efímero a toda aquella expresión artística concebida bajo un concepto
de fugacidad en el tiempo, de no permanencia como objeto artístico material y
conservable. Por su carácter perecedero y transitorio, el arte efímero no deja una obra
perdurable, o si la deja —como sería el caso de la moda— ya no es representativa del
momento en que fue creada. En estas expresiones es decisivo el criterio del gusto social,
que es el que marca las tendencias, para lo cual es imprescindible la labor de los medios
de comunicación, así como de la crítica de arte.1
Dentro de ese género pueden considerarse artes efímeras a expresiones como la moda,
la peluquería, la perfumería, la gastronomía y la pirotecnia, así como diversas
manifestaciones de arte corporal como el tatuaje y el piercing. También entrarían dentro
del concepto de arte efímero las diversas modalidades englobadas en el llamado arte de
acción, como el happening, la performance, el environment y la instalación, o bien del
denominado arte conceptual, como el body art y el land art, así como otras expresiones
de cultura popular, como el grafiti. Por último, dentro de la arquitectura también hay
una tipología de construcciones que se suelen expresar como arquitectura efímera, ya
que son concebidas como edificaciones transitorias que cumplen una función restringida
a un plazo de tiempo.
Arte encontrado
El término arte encontrado –más comúnmente objeto encontrado (en francés objet
trouvé; en inglés, found art o ready-made) o confeccionado– describe el arte realizado
mediante el uso de objetos que normalmente no se consideran artísticos, a menudo
porque tienen una función no artística, sin ocultar su origen, pero a menudo
modificados. Marcel Duchamp fue uno de los pioneros de su establecimiento a inicios
del siglo XX.
El arte encontrado deriva su identidad como arte del nombre que se le da por el artista.
El contexto en el que se ubica, generalmente una galería o museo, es también un factor
muy relevante. La idea de dignificar objetos cotidianos de esta manera era
originalmente un desafío chocante para la distinción hasta entonces aceptada entre lo
que se consideraba arte en oposición a lo que no era arte.
El arte encontrado, sin embargo, tiene que tener creación artística, al menos una idea
sobre ello. Hay también en su mayor parte una modificación del objeto, aunque no hasta
el extremo de hacerlo irreconocible. La modificación puede llevar a que se lo designe
como objeto encontrado «modificado», «interpretado» o «adaptado».
En el siglo XIX, el escritor uruguayo Isidore Lucien Ducasse conocido como Conde de
Lautréamont, había llamado la atención sobre las posibilidades de transformar objetos
vulgares con la frase, hoy famosa de «Bello como el encuentro fortuito de una máquina
de coser y un paraguas sobre una mesa de disección»
Grafiti
Se llama pintada, grafito o grafiti(las dos últimas del italiano graffiti, graffire, y este a su vez
del latín scariphare, ‘incidir con el scariphus’ —estilete o punzón, con el que los antiguos
escribían sobre tablas—) a una modalidad de pintura libre, destacada por su ilegalidad,
generalmente realizadas en espacios urbanos. Su origen se remonta a las inscripciones que
han quedado en paredes desde los tiempos del Imperio romano especialmente las que son de
carácter satírico o crítico. Para denominar estas inscripciones de época arqueológica es más
frecuente el uso de la palabra «grafito». En el lenguaje común, el grafiti es el resultado de
pintar textos abstractos en las paredes de manera libre, creativa e ilimitada con fines de
expresión y divulgación donde su esencia es cambiar y evolucionar; buscando ser un atractivo
visual de alto impacto, como parte de un movimiento urbano revolucionario y rebelde. Es uno
de los cuatro elementos que conforma la cultura Hip Hop
Es un término que proviene del italiano graffiti, plural de graffito, que significa ‘marca
o inscripción hecha rascando o rayando un muro’ y del mismo modo arqueólogos y
epigrafistas llaman a las inscripciones espontáneas que han quedado en las paredes
desde tiempos del Imperio romano. El arqueólogo Raffaele Garrucci divulgó el término
en medios académicos internacionales a mediados del siglo XIX,5 el neologismo se
popularizó y pasó al inglés coloquial al usarse en periódicos neoyorquinos en los años
setenta.6
Entre los hispanohablantes es habitual oír grafitis en plural, porque aunque en la lengua
de origen el término ya esté en plural, no se considera de este modo el calco.