Smalty Nova

Las pinturas, barnices y tintas de imprimir se han convertido, con el paso de los años, en
productos que necesitan de gran desarrollo tecnológico para cumplir las necesidades de
nuestra sociedad. Para dar respuesta a las innovaciones y nuevas necesidades de las diferentes
industrias, en nuestro sector se fabrican unos 500 tipos de productos diferentes, que dan lugar
a más de 50000 subtipos distintos, cada uno con una formulación diferente. Las pinturas,
barnices y tintas de imprimir están presentes en la prensa escrita, electrodomésticos, medios
de locomoción, mobiliario, edificios… Se han hecho insustituibles, no sólo por su función
decorativa, sino porque protegen los productos - alargando así su durabilidad, con lo que se
preservan recursos naturales como madera o minerales metálicos además de recursos
energéticos y económicos-, facilitan la limpieza y descontaminación de superficies, están
presentes en el ámbito de la seguridad (en la señalización de tráfico o con pinturas
antideslizantes), integran todo tipo de estructuras en el medio ambiente, aíslan las superficies
del frío y de las inclemencias meteorológicas, de la acción del sol, etc. Todos los productos y
servicios tienen un cierto impacto sobre el medio ambiente. La industria de la pintura es
consciente del efecto que ejercen sus productos y ha realizado grandes esfuerzos para adaptar
sus instalaciones y procesos de producción, buscando siempre un desarrollo compatible y
respetuoso con el medio ambiente. También las líneas de investigación miran hacia el medio
ambiente: pinturas con máximo grado de biodegradabilidad; otras que generen la energía
suficiente para desintegrar determinados materiales, como por ejemplo el plástico, con lo que
disminuiría la generación de residuos; pinturas capaces de eliminar el olor de una determinada
estancia y limpiar el aire; pinturas decorativas conductoras de electricidad, que se emplearán
para llevar los efectos de la calefacción hasta las paredes, reduciendo así el consumo
energético; pinturas que acumulan energía al absorber las radiaciones visibles e infrarrojas
(empleadas en los paneles solares); aislantes de superficies metálicas expuestas a elevadas
temperaturas durante mucho tiempo; pinturas que ayudan a combatir plagas de insectos
portadores de enfermedades o pinturas que son capaces de absorber las radiaciones
electromagnéticas (aquellas que emiten los teléfonos móviles) son sólo algunos ejemplos de
las innovaciones en las que se está trabajando.

Las pinturas y barnices son productos que forman sobre el sustrato donde se aplican una
película con propiedades protectoras, decorativas u otras características específicas. En el caso
de las pinturas, la película que se forma es opaca, mientras que es sólida transparente -
coloreada o no – en los barnices. Para conseguir formar esta película (que no es más que un
recubrimiento continuo), las pinturas y barnices están formulados con diferentes compuestos.
Las diferentes combinaciones de las materias primas hacen que nos podamos encontrar
pinturas en polvo, en pasta o líquidas, y que exista un amplio catálogo de las mismas:
decorativas, anticorrosivas, antideslizantes, antigraffitis, antiincrustantes, ignífugas, etc.

Componentes de la pintura

La formulación de una pintura depende de las propiedades finales que se desee obtener. De
forma general, los componentes de una pintura son:

 Ligantes o vehículos fijos: sustancias orgánicas, de origen natural o sintético (resinas o

polímeros) que se emplean como aglutinantes (mantienen juntas las partículas). Una vez que
se seca la pintura, se quedan formando la película. De ellos dependen características como el
brillo, la dureza o la resistencia a la intemperie. Básicamente se pueden clasificar en sintéticos
(alquídicos ó gliceroftálicos, ureas y melaminas, acrílicos, vinílicos, a base de caucho sintético
clorado, poliésteres, siliconas, epoxis, poliuretanos, fenólicas), naturales (aceites vegetales,
asfaltos, breas) o mezcla de ambos.

 Pigmentos: sustancias (generalmente en forma de finas partículas) normalmente insolubles

en el ligante que, como las resinas, se quedan en la pintura seca y se añaden principalmente
para dar color y opacidad (determinan que la pintura sea mate o brillante). Los dos grandes
grupos son orgánicos e inorgánicos.

 Disolventes/diluyentes o vehículos volátiles: líquidos que disuelven los ligantes y que se

evaporan en las condiciones normales de secado. Son indispensables para poder aplicar las
pinturas sobre los sustratos, ya que dan una viscosidad apropiada al resto de componentes
para su aplicación. Suelen ser inorgánicos (agua) u orgánicos (derivados del petróleo).

 Aditivos: sustancias que se añaden en pequeñas cantidades a las pinturas o barnices para
conferir ciertas propiedades específicas. Entre ellos se encuentran conservantes, plastificantes,
antiespumantes, dispersantes, biocidas, filtros UV, modificadores de la tensión superficial,
catalizadores, etc. Los porcentajes en los que estos compuestos están presentes en las
pinturas y barnices varían según el tipo de producto. Así pues, mientras que un esmalte blanco
puede tener una composición elemental de 30-40% de ligante seco, 30-40% de vehículos
volátiles, 25-30% de pigmento y 1-3% de aditivo, una pintura de paredes interior la
composición podría ajustarse a 5-10% de ligante seco, 20-30% de vehículos volátiles, 40- 60%
de pigmento/extendedores y 1-3% de aditivo.

LEGISLACIÓN QUE GARANTIZA EL RESPETO POR EL MEDIO AMBIENTE DE LAS PINTURAS

Son muchas las disposiciones legislativas que afectan al sector de las pinturas y tintas de
imprimir; aspectos como el control y la prohibición de sustancias (contacto alimentario,
biocidas, detergentes), la clasificación y etiquetado, Registro, Evaluación, Autorización y
Restricción de Productos químicos, la comercialización y uso de determinadas sustancias que
forman parte de los preparados, la seguridad laboral e industrial, las exigencias
medioambientales que debe cumplir la instalación y los productos, los envases, los residuos,
vertidos… son algunos de los muchos aspectos que están regulados en nuestro sector, a nivel
europeo, nacional y autonómico. A continuación se hace referencia a las disposiciones de
mayor relevancia en el ámbito del medio ambiente que la mayoría de los productos de nuestro
sector deben cumplir (no se incluyen las modificaciones de cada uno): MEDIO AMBIENTE Ley
34/2007 Calidad del aire y protección de la atmósfera. Ley 16/02 Prevención y Control
Integrado de la Contaminación. R.D. 1073/2002 Evaluación y gestión de la calidad del aire
ambiente en relación con el dióxido de azufre, dióxido de nitrógeno, óxidos de nitrógeno,
partículas, plomo, benceno y monóxido de carbono. Orden 18 octubre 1976 Prevención y
corrección contaminación atmosférica industrial. R.D.L. 1/2008 Evaluación Impacto Ambiental.
R.D. 117/2003 Limitación de emisiones de compuestos orgánicos volátiles debidas al uso de
disolventes en determinadas actividades. R.D. 9/2005 Actividades potencialmente
contaminantes del suelo. Rgto. 1005/2009 Sustancias que agotan la capa de ozono. R.D.
227/2006 Limitación de las emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COV’s) en
determinadas pinturas y barnices y en productos de renovación del acabado de vehículos. Ley
26/2007 Responsabilidad Ambiental. 8 CRITERIOS ECOLÓGICOS El cumplimiento de la
legislación medioambiental y de otros textos legislativos pertinentes es requisito
imprescindible para conceder los sistemas de gestión medioambiental y etiquetas ecológicas
que veremos en el siguiente capítulo.
Ecoetiquetas

Las etiquetas ecológicas y declaraciones ambientales son herramientas de gestión ambiental

que brindan información acerca de un producto o servicio en cuanto a su carácter ambiental
general, a un aspecto ambiental específico, o a una serie de tales aspectos. Pueden tomar la
forma de un enunciado, símbolo o gráfico en un producto o en la etiqueta de un envase, en la
documentación que acompaña el producto, en los boletines técnicos y en los medios de
publicidad o divulgación, entre otras. CRITERIOS ECOLÓGICOS 9 Los compradores, tanto
actuales como potenciales, pueden utilizar esta información para escoger los productos o
servicios que desean a partir de consideraciones ambientales y de otro tipo. El proveedor del
producto o servicio espera que la etiqueta o declaración ambiental influya eficazmente en la
decisión de comprar su producto o servicio. La etiqueta no implica que el producto no tenga
influencia negativa en el medio ambiente; sino que significa que el producto es
considerablemente mejor que otro producto o servicio en su influencia sobre el medio.

Sistemas de Gestión Medioambiental

Las certificaciones que afectan al producto son independientes de los sistemas de gestión
medioambiental (SGMA) que se pueden implantar en una empresa, y que buscan mejorar el
comportamiento ambiental de la organización más allá del cumplimiento de la legislación,
estableciendo un mecanismo de control de variables que afectan al medio ambiente en el
ámbito de la estructura organizativa, responsabilidades, prácticas, procedimientos, procesos y
recursos. A pesar de dicha independencia, a la hora de evaluar las solicitudes de etiquetas
ecológicas y comprobar el cumplimiento de sus criterios, se recomienda a los organismos
competentes que tengan en cuenta la aplicación de sistemas de gestión medioambiental
reconocidos, aunque legalmente éstos son voluntarios.

ACLARACIÓN DE TÉRMINOS
Cuando se habla del ámbito medioambiental es frecuente encontrar términos como “pinturas
ecológicas”, “pinturas verdes”, “pinturas naturales”… Pero, ¿qué significan exactamente esos
términos? ¿Son equivalentes?. No hay definiciones “oficiales” para los términos mencionados,
y cada fabricante les da unas características diferentes, y, en algunos casos, se atribuyen
ventajas medioambientales que no tienen o se mencionan desventajas medioambientales de
las pinturas convencionales que no se ajustan a la realidad. A menudo se publicitan las
“pinturas naturales” como aquellas que están formadas por materias primas de origen
vegetal/mineral sin biocidas o plastificantes, que no contaminan en su proceso de producción
o aplicación, que no provocan alergias o malos olores o que su aplicación es segura para el
operario. Ante estas afirmaciones, el comprador debería considerar una serie de cuestiones: 
Algunas materias primas, aunque no sean derivadas del petróleo, también contienen COV’s al
igual que los disolventes/diluyentes de las pinturas convencionales.  Los biocidas están
destinados a destruir, contrarrestar, neutralizar, impedir la acción o ejercer un control de otro
tipo sobre cualquier organismo nocivo por medios químicos o biológicos, según el RD
1054/2002. La utilización de estos productos en las pinturas está regulado y conlleva una carga
burocrática. Si la llamada pintura natural se publicita con los mismos efectos pero sin
sustancias biocídicas, cabría preguntarse si efectivamente proporciona los mismos resultados
que otra pintura que las contenga.  Durante la fabricación de cualquier pintura se consume
energía, y dicho consumo se puede convertir en una cantidad de CO2 emitido a la atmósfera,
por lo que la ausencia de contaminación es técnicamente imposible. Dado que existe una
normativa a tal efecto, se debería considerar como “pintura ecológica” aquella que posee una
etiqueta ecológica que certifica, no sólo que cumple la legislación propia de dicho producto,
sino otros criterios medioambientales (como hemos visto en apartados anteriores) y además
reúne los requisitos técnicos mínimos según su uso.

IDEAS ECOLÓGICAS

Es muy importante mantener la idea del balance ambiental a medio plazo ya que será
necesario tener en cuenta si un producto puede resultar menos contaminante en un aspecto y
más contaminante en otro (por ejemplo, menos emisiones a la atmósfera pero más al medio
acuático o viceversa). Igualmente la durabilidad, sistemas de aplicación o mantenimiento
influyen al hacer nuestro balance.

INTEGRANTES: GRUPO: 6IM2

-Alcalá Calderón Bruno

-Chaga Pillado Gustavo Alberto

-Garza Alejo Ana

-González Hernández Mayra Aura

-Martinez Cazarez Miguel Angel

-Ríos González Diane Natasha