Cuando hablamos de brujería en México, en el México más profundo, hablamos
de bolas de fuego que surcan la noche, traileros y conductores nocturnos
aterrorizados por figuras encapuchadas que les cierran el paso en medio de la noche, y toda una ritualística para repeler a estas criaturas. La práctica brujeril como la conocemos actualmente, nace en los países de tradición céltica, más concretamente en el País Vasco, al norte de España, donde se tienen registros de que hacia el siglo XV se consolidó la práctica de un culto pagano, mayoritariamente integrado por mujeres, en el que se adoraba a un macho cabrío, se consumían plantas alucinógenas y se hacían pociones y rituales en los cuales se sacrificaba incluso a niños. Hubo incluso, la creencia, de que las brujas raptaban precisamente a niños, preferentemente recién nacidos, para destazarlos y sacarles la grasa de la piel y la sangre, y así hacer untos que se aplicaban sobre el cuerpo desnudo a la luz de la luna, con el fin de renovar su vitalidad y juventud. En 1487, Heinrich Kramer, Jakob Sprenger, sacerdotes alemanes, publicaron el Malleus Maleficarum, también llamado “El martillo de las brujas”, un libro calificado hoy en día de oscurantista, y en el cual se describían todas las características para identifiar a una bruja, con el fin de ponerla a disposición de la triste mente célebre Santa inquisición. La práctica de la brujería, sin embargo, y más allá de las leyendas que se montaron a su alrededor en toda Europa, respondía a la continuidad de cultos animistas a la madre tierra, a la luna como alegoría de la mujer y al sol como padre. Por ejemplo, en el culto de las brujas, la luna menguante simbolizaba a la niña que se inicia en las artes mágicas, con todo por aprender; la media luna, simboliza a la mujer fértil e indómita, representada en la Diana Cazadora, pero que aún tiene mucho por aprender; mientras que, la luna llena, representa al caldero de la bruja anciana, que vive para dejar su conocimiento en manos de las generaciones venideras. La práctica de la brujería se condimentaba con liturgias orgiásticas, en las cuales, las mujeres se untaban en la vaigina e ingerían plantas alucinógenas como la belladona, y bailaban alrededor de una hoguera. Esta escena era dominada por un macho cabrío, que no era una representación diabólica, sino Aker, el dios de la fertilidad. En México, la tradición del miedo hacia las brujas, tiene todas las características de la Tlahuelpuchi, figura vampírica femenina de la cultura azteca que operaba de la misma forma, buscando niños pequeños para raptarlos y chuparles la sangre. En los pueblos de México, sobre todo centro y sureste, es decir; Veracruz, Hidalgo, Querétaro, Michoacán o Oaxaca, existen diversas tradiciones para ahuyentar a las brujas, muchas de ellas producto del sincretismo entre lo pagano, prehispánico y católico. Fiel muestra de ello son el poner tijeras en forma de cruz bajo la cama, quemar leña verde para que esparza humo, o incluso algo tan curioso como dormir con la ropa volteada al revés. Nunca se sabrá con certeza si las historias que se cuentan en los pueblos están realmente relacionadas con mujeres que han vendido su alma a Satanás. Lo único cierto es que se trata de una tradición muy rica pese a lo inquietante que resulta, y es un muy fértil campo de análisis en materia tanto de la antropología, como de lo que se practica aquí, que es el periodismo de lo desconocido.
1. ¿Qué papel juegan los animales en la tradición de la brujería (sapos, gatos,
serpientes, búhos, etc.)? 2. Aprovechando. ¿Nos puedes contar sobre animales tradicionalmente considerados mágicos por alguna condición que los haga peculiares? (Percepciones distintas a las del ser humano; electromagnetismo, señales químicas, vibraciones terrestres, etc.) 3. ¿Qué elementos de la alquimia se retoman en la brujería? 4. ¿Bajo qué mecanismos, tanto contemplados por la ciencia o no, crees que se podrían lograr transfiguraciones de objetos, personas o animales? 5. ¿Qué nos puedes contar acerca de la tradición de la magia y la brujería en las culturas orientales?
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