You are on page 1of 6

Idealtypus en la obra de Max Weber

Idealtypus (Ideal) es un término prestado de Georg Jellinek, aplicado para una


diversidad de easpectos de la realidad social que intenta explicar Weber; Sanchez (2006)
asume una clasificación desde las categorías siguientes: i) Qué es y qué no es un tipo ideal
y cuáles son las diferencias entre éste y un “concepto de género”; ii) Hasta qué punto
pueden los tipos ideales ayudamos en la conceptualización de una realidad social y cómo
deben hacerlo; iii) Los riesgos de la utilización de tipos ideales; y iv) La oportunidad y el
significado de la presencia de tipos ideales en una disciplina.

Según Weber, debe entenderse un tipo ideal desde el realce unilateral de uno o
varios puntos de vista y la reunión de fenómenos singulares, difusos y discretos; es
inhallable en la realidad: una utopia que plantea a la labor histográfica la tarea de
comprobar en qué medida la realidad se acerca o se aleja del cuadro ideal, es decir, apegado
a la realidad (Ibid, 2006). En pocas palabras, Webber plantea que el objetivo del ideal es
esclarecer elementos significativos de su contenido empírico, darles una explicación o
significado desde la perspectiva social; esto a su vez establece que ideal no es sinónimo de
positivo, deseable, perseguible, ejemplar, sino como abstracto, puro, lógico, utópico; más
bien un tipo ideal es un concepto o representación mental (situado en la mente del
historiador, del sociólogo o del teórico económico) cuya descripción describe un estado de
hechos lógicamente posible, pero que es difícil encontrar en el mundo real.

Mucha de la terminología de su obra se ve reflejada especialmente en escritos


dedicados al ámbito agrario. Respecto a los conceptos de género, Weber asegura que los
tipos ideales profundizan mucho más en puntos de comprensión para lograr el
entendimiento de la realidad.

Por otro lado Weber enfatiza que no necesariamente su propuesta de tipos ideales es
necesariamente la correcta al no denotar correctamente sus implicaciones metodológicas.
Aún así considera que la estructura del pensamiento lógico pasa forzadamente por el
planteamiento de ideales; es decir, la construcción teórica comienza precisamente por el
ideal. Esto incluye también, por supuesto, los procesos de desarrollo: los tipos ideales no
tienen por qué ser exhaustivos respecto a la realidad que conceptualizan (Sanchez, 2006).

Una de los contras en el aspecto del uso de ideales es precisamente el hecho de


explicar erróneamente la realidad o hasta suplantarla con un mismo ideal:

“El peligro de este procedimiento en sí totalmente legítimo reside en que el saber


histórico aparece aquí como servidor de la teoría y no a la inversa. Hay la
tentación, para el teórico, de considerar esta relación como normal o, lo que es
peor, de trocar los papeles de teoría e historia, confundiéndolas de este modo”
(Ibid, 2006).

Tipología ideal

Una tipología ideal cabe destacar que es la suma total de diferentes elementos o
imágenes mentales que componen una realidad; clasificadas en multiples (compuestas de
dos o mas tipos) y simples (un solo tipo ideal), o independientes y dialécticas: que los tipos
ideales no tienen una relación entre si o que dos tipos definidos han sido formulados a partir
de una lógica dialéctica.

Para el procedimiento de elaboración, existen cuatro posibilidades: elegir una


parcela de la realidad social y construir un tipo ideal de ella, a partir de una revisión amplia
de casos empíricos, a partir de un razonamiento de forma dialéctica o la de proyectar hacia
el futuro un concepto a partir de una tendencia social.

¿Para qué sirven realmente los tipos ideales?

El pensamiento de Weber parte del estudio de la sociología que abarca una


ostentación de concepciones generales y filosóficas, su metodología permite tener una
visión más compleja que parte de un vigor unitario que es un esbozo que Weber rechazo
intelectualmente.

Weber detalla de manera generalizada la tipología que desarrolla un ideal, sin


embargo; se sabe que un ideal o en su conjunto se utiliza al momento de entablar un
concepto, al momento de escribir, al momento de hablar, estableció tres intereses de una
tipología, por otro lado una tipología ideal nos indica parámetros que se utilizan al
momento de comparar la realidad con el objetivo de obtener conclusiones: y por último,
los tipos ideales son útiles para la formulación de la hipótesis. (Sánchez, 2006).

Freund hace un pequeño análisis acerca de la metodología empleada por Weber, en


la cual intenta profundizar un poco más aquellos esbozos que de manera general fueron
expuestos por Weber, en su análisis expresa su desacuerdo con la transición de ideal a
tipos, que permite a parir de esta terminología llegar al rigor conceptual, retorica vacía,
conclusiones lógicas, equívocos y errores perniciosos. (Ibid, 2006).

En segundo lugar encontramos una concentración de la tipología de Weber, la cual


se encuentra en la comparación de la realidad con ellos, que indica que no es recomendado
el hecho de instruir los ideales con la realidad empírica e histórica a la cual está sujeta la
subjetividad, en este caso; a partir de ello lo recomendable es analizar el material real y
girarlo en relación a la tipología ideal.

Weber define un tipo ideal como es una edificación mental que demuestra la
representación de una utopía en sí, que surge a partir de la ponderación mental de
determinados elementos expuestos coyunturalmente. La edificación de la realidad de un
ideal construcción involucra una argumentación lógica, que hasta cierto punto no es parte
de la realidad que se está estudiando, por ello: se puede descifrar esto diciendo que un tipo
ideal es una noción o forma mental cuya representación refiere un estado de hechos
evidentemente posible, pero que es difícil localizar en el mundo real. Weber está
especulando en cierto tipo de nociones metodológicas, conceptuales (Freund, 1986).

Las tipologías desarrolladas por Weber permiten percibir, analizar, estudiar y


determinar fenómenos sociales o históricos determinados a través de la asimilación entre el
tipo ideal y el fenómeno determinado.

Freund (1986) dice que:

“Los tipos ideales de Max Weber, cumplen una función heurística en un doble
paralelismo, el primero parte de la ostentación y la investigación que tiene como
objetivo entrelazar una alocución conceptual; mientras que el segundo tiene como
finalidad edificar a partir de ellos hipótesis aclaratorias e interpretativas de un
tipo propio”.

El tercer objetivo de los tipos ideales de Weber la formulación de una hipótesis,


dentro de esta utilidad se señala ciertas limitaciones que se forman de forma diferida en la
noción materialista que detona una ausencia de regularidades causales cautelosas y
características.

Weber (1944) dice que un tipo ideal es:

“Un tipo ideal no es un ideal en el sentido de que algo es admirable o algo a lo que
se deba apuntar. El tipo ideal no es la realidad, sino una simplificación de la
misma, es algo que nosotros creamos en nuestro cuarto de estudio para comparar
con algo más. En términos sencillos un tipo ideal es una cosa simple de lo que
creemos que debería ser algo y que existe sólo en nuestra mente, con el propósito
de compararlo con un modelo que si existe y es real”.

Tipos ideales de dominación en El Salvador.

Los tres tipos ideales de dominación postulados y descritos por Weber son
observables en la realidad social salvadoreña, así lo demuestran los siguientes ejemplos.

Dominación tradicional.

La legitimidad de la dominación tradicional mana, precisamente, de la tradición que


enviste a un sujeto con una autoridad legítima ante quienes le reconocen, siguen y
obedecen; y que además se replica a través del tiempo, un ejemplo en El Salvador lo
constiruye la alcaldía del común de Izalco.

Es la tradición existente desde el periodo colonial la que dota de autoridad para


ejercer dominación sobre la comunidad indígena izalqueña, a quienes integran dicha
alcaldía. La comunidad les reconoce como figuras de autoridad tradicionales.

Dominación carismática.
Este tipo ideal de dominación surge de la legitimidad que una sociedad otorga a un
líder carismático, sin embargo, su autoridad está íntimamente ligada a su figura. Dos
ejemplos de la realidad nacional salvadoreña se encuentran en:

Anastasio Aquino: ejerció autoridad sobre la población indígena de la región de los


nonualcos, la legitimación de su autoridad recayó directamente sobre su figura. “el rey de
los nonualcos”.

Nayib Bukele: personaje de El Salvador actual es una figura capaz de ejercer


dominación carismática, muestra de su legitimación es el poder de convocatoria que
arrastra a salvadoreños dentro y fuera del país, organizando estos en torno a su figura.

Dominación legal-racional.

La dominación legal-racional se ejerce desde la autoridad que confiere la posición


de un sujeto dentro de una estructura burocrática legítima ante la sociedad. Un ejemplo es
el Estado de El Salvador, estructura burocrática erigida en torno al contrato social que
representa la Constitución de la República.

La Policía Nacional Civil es un ejemplo de un institución que ejerce dominación


legal-racional sobre la sociedad, cuya autoridad es legítima por estar dentro de la estructura
burocrática del Estado.

Es vital señalar que los tipos ideales de Weber, al ser categorías de análisis de las
probabilidades de la realidad, no se presentan puros en la práctica. Coexisten, se encuentran
interrelacionados y se presentan en mayor o menor grado en cada caso particular.

Así por ejemplo, en el caso de Nayib Bukele y la Alcaldía del Común, son sujetos
de ejercer autoridad y dominación carismática y tradicional en un marco legal-racional, el
Estado salvadoreño. O al interior de una pandilla donde la autoridad proviene de la
tradición, del cabecilla, quien también puede ser una figura carismática quien a la vez tiene
un estatus otorgado por y desde la estructura legal-racional: terrorista, delincuente, reo, etc.;
concretamente puede mencionarse a Carlos Mujica, “el viejolín”, líder carismático y
tradicional de una pandilla que está inmerso en una estructura burocrática, el sistema
carcelario del Estado.
BIBLIOGRAFÍA

Freund, J. (1986). Sociología de Max Weber, Barcelona, Editorial Ariel.

Sánchez, F. (2006). Los tipos ideales en la práctica: significados, construcciones,


aplicaciones. EMPIRIA. Revista de Metodología de las Ciencias Sociales, (11).

Weber, M. (1944). Los tipos de dominación (Vol. 2). NoBooks Editorial.

You might also like