EL OTRO SENDERO

PROLOGO

El otro sendero, es una historia de Hernando de soto, que aunque basada en datos y experiencias
de la realidad peruana, resalta aspectos de los países del tercer mundo.

Con una enseñanza explicita, que hunde sus raíces en la actualidad y se proyecta al futuro, asiendo
hincapié siempre en lo concreto y , a partir de un fenómeno hasta ahora mal estudiado y peor
comprendido , la economía informal, a cerca de la cual propone soluciones.

Es por eso, precisamente que causa una polémica interpretación de la incapacidad productiva de
los países del tercer mundo; enfocándolo desde una perspectiva distinta a la problemática del
subdesarrollo, desbaratando muchos mitos que suelen pasar por verdades científicas respecto de
los países pobres.

I. LA ECONOMIA INFORMAL

Cada vez que se escucha hablar de economía informal, entendemos que se refiere a problema;
puesto que suponemos que aquellos vendedores y empresarios clandestinos, cuyos negocios
no están registrados, constituyen una privación al estado de sus recursos necesarios para
atender a las necesidades sociales y realizar urgentes obras de infraestructura.

Es por ello que son los llamados competidores desleales de las empresas formales, pero este
no es cuestión de ser formal o no, sino de cómo poder serlo, es decir no es problema de la
economía formal sino del Estado. Para comprobar esto el instituto de libertad y democracia
monto un ficticio taller de confecciones ; en el que se pudo demostrar el “costo de la
legalidad”, es decir , verificar que para “ legalizar” una pequeña industria , se tendría que
gastar más de lo que se posee, y no precisamente , por gastos propios de los tramites , sino
por los sobornos , que habría que darles a los funcionarios de las entidades responsables ,
para agilizar el proceso , porque de no ser así , duraría mucho más tiempo , de lo que duro ,
que fueron 289 días con una suma de 1231 dólares ; lo que nos demuestra que en estas
condiciones, está fuera de las posibilidades de un hombre de recursos modestos , poder tener
un empresa formal.

Sin embargo, esto no termina ahí, Hernando de soto comprobó que si un grupo de familias
humildes solicita al estado una adjudicación de un terreno eriazo, para urbanizarlo y construir,
deben tramitar los papeles asfixiantemente durante 6 años y 11 meses, incluyendo a estos,
“desembolsos necesarios”.

De esta manera Hernando de soto nos provee de análisis y opiniones de una poderosa lógica.
Con la imagen de un país que muestra esa armazón de datos trágica y absurda; trágica porque
en esa sociedad el sistema legal parece concebido para favorecer exclusivamente a los de
mayores recursos y castigar, manteniéndolos en una permanente condición de fuera de ley a
los que tienen. Y absurdo porque un sistema de esta índole se condena a sí mismo al
subdesarrollo, es decir no solo a no progresar sino a hundirse cada día más en la ineficiencia y
la corrupción.

Es por eso que mientras el estado siga demostrando la incapacidad, para hacer frente a esta
situación los más pobres usan su creatividad, para poder comer día a día.

II. SUBDESARROLLO Y MERCANTILISISMO

Uno de los mitos más extendidos sobre América Latina es que su atraso es consecuencia de la
equivocada filosofía del liberalismo económico que adoptaron, en sus constituciones casi
todas las repúblicas al independizarse de España y Portugal. Esa apertura de sus economías a
las fuerzas del mercado las habría hecho presas fáciles de la voracidad imperialista y
originando las abismales desigualdades entre pobres y ricos.

Sin embargo Hernando de soto, en su tesis dice que el Perú jamás tuvo una economía de
mercado y que solo ahora, gracias a la informalidad, esta empieza abrirse paso.

El régimen que en verdad impero y sigue imperando es la economía mercantilista; el que es

definido en el Otro Sendero, como un estado burocratizado y reglamentarista que antepone el
principio de la redistribución al de la producción de la riqueza. Ocasionando que el estado, no
fuera expresión de colectividad, sino que se confundiera con el gobierno de turno.

Por ello es que la libertad económica solo existió en el papel antes de que por fuerza de las
circunstancias, los pobres de nuestros países empezaran a ponerla en práctica, cansados por
la discriminación de que eran víctimas.

Es todo esto tan indignante, que en el otro sendero nos ahorra críticas a esa clase empresarial
que, en vez de propiciar un sistema equitativo y promotor, se acomoda al sistema
mercantilista y dedique sus mejores esfuerzos a obtener el favor oficial, que sin duda es
inmoral y nos conlleve a un sistema corrupto e ineficiente; además de condenarnos a aún
impotencia económica , que nos impide prosperar ,anulando las posibilidades , de que en ella
funcione la democracia política , que pretendemos tener .