You are on page 1of 12

RUPTURAS por Moisés Goiz.

Texto de apoyo para alumnos de Neuro.

-El espíritu: “El error de percepción mas común respecto a éste concepto radica en

pensar que el espíritu es lo que sentimos, y que en base a ello es que una persona es

espiritual o no. Sin embargo justamente es todo lo contrario, el espíritu de una persona

esta determinada por las acciones que toma con respecto a su comunidad, a su peque-

ño o gran universo. Dicho en forma mas abstracta, el espíritu es la relación que guarda

el universo con respecto a una persona (Espíritu=universo/individuo) que significado

tiene para el universo o comunidad una persona específica, no importando sus emo-

ciones, sus sentimientos o intensiones, si no únicamente sus acciones. Un bombero tie-

ne un espíritu heroico no por sus sentimientos si no por sus acciones.”

-El amor: “El error de percepción mas común respecto a éste concepto, radica en pen-

sar que el amor es lo que sentimos por una persona, ya sea en forma de emociones o

sentimientos. Sin embargo, el amor es uno de los instintos mas primitivos del ser hu-

mano, se desarrollo como un instinto de supervivencia colectivo, porque es más fácil

sobrevivir en comunidad que solos, por ende todos los miembros del universo peque-

ño o grande de un individuo son igual de valiosos, incluyéndolo. El amor es actuar en

beneficio de los miembros de la comunidad sin que esto signifique bajo ninguna cir-

cunstancia perjudicar a ningún de ellos sobre todo a él mismo. No tiene que ver con los

sentimientos o emociones porque éstos podrían estar encaminados a la satisfacción

personal y muy probablemente contraponiéndose a este instinto universal. El amor al

ser parte del ámbito espiritual es lo que hacemos y no así lo que sentimos.”

-La voluntad: “El error de percepción mas común respecto a éste concepto, radica en

pensar que la voluntad es una fuerza emocional, como algo externo a nuestra conscien-

cia que nos da la capacidad de ejecutar acciones y que sin ella no somos capaces de
hacerlo, pero en todo caso la voluntad no es una fuerza, es una ley, que no se omite

bajo ninguna circunstancia, ya que toda persona ejerce la voluntad de actuar como su

consciencia le dicta en cada momento de su vida, no importando que las opciones sean

limitadas. Por ende, la voluntad no debe considerarse una fuerza emocional, por que al

hacerlo, el individuo encuentra el pretexto perfecto para delegar responsabilidad de

sus actos, culpando a algo externo e inexistente de sus decisiones erróneas. No fue al

gimnasio por falta de voluntad si no que, precisamente no fue, porque esa era su volun-

tad, quedarse en cama por comodidad.”

-El valor: “El error de percepción más común respecto a éste concepto, radica en pen-

sar que el valor es la capacidad de sobrepasar el miedo o las consideraciones emocio-

nales. Sin embargo si consideramos que seguramente su concepto se remota al hom-

bre primitivo, en realidad se refiere a la utilidad que una acción representa en torno a la

comunidad, en torno al universo; y esa utilidad o beneficio constituye un VALOR para

los congéneres del individuo. En la antigüedad el valor de las cosas o de los actos era

literalmente el de las acciones que se ejecutaron para obtener un logro, no importando

si se tuvo miedo o no para conseguirlo. En algún momento se comenzó a utilizar una

connotación que manipulaba a quien deseaba comprar ese valor al usar argumentos

emocionales para otorgarle valía, para darle un valor imaginario a las acciones cometi-

das por el individuo. Ejemplo: El individuo no cumplió su cometido pero se escuda en

el esfuerzo que le implico el intento para no perder valía ante sus congeneres, cuando

en realidad no se obtuvo ningún beneficio y por lo tanto las acciones no tuvieron nin-

gún valor. Significa en otras palabras evitar las consideraciones emocionales para otor-

garle valor a una acción o una inacción.”

-La bondad: “El error de percepción respecto a este concepto, radica en pensar que

una persona es buena o mala por los sentimientos y emociones que existen en su inte-

rior. Pero en primer lugar, nadie actúa pensando que esta haciendo el mal, por el con-

trario cuando un individuo se percata que sus actos salen de su código moral, inter-

rumpe su acción en ese preciso momento. Nadie va a la cama disfrutando del mal que
le ha procurado al universo, toda acción está siempre encaminada a hacer el bien, el

problema radica en que esto puede ser subjetivo si no se tiene bien claro que es el

amor, y por consecuencia hacer el bien se convierte en un asunto de interpretación.

Luego entonces, la bondad es ejecutar nuestra voluntad en relación a la comprensión

del entorno (Bondad=voluntad/comprensión) Ejemplo: Un individuo lastima a otro

porque piensa que de esa manera esta mejorando el entorno. Comprender esto puede

significar resolver un sinnúmero de conflictos personales.”

-La empatía: “El error de percepción respecto a este concepto, radica en pensar que la

empatía es una especie de comunión emocional con otras personas, algo así como sen-

tirse cómodo con la forma de ser o de pensar de otro individuo; Sin embargo, esta idea

se ajusta más al concepto de simpatía. La empatía, más bien se refiere al hecho de ex-

tender el rango de aceptación que se tiene hacia otro individuo eliminando la resisten-

cia que se puede llegar a tener respecto a alguien que piensa de forma muy diferente.

Empatía significa empatar, comprender que aquello que me parece tan extraño e inclu-

so repulsivo de otra persona, existe en mi de alguna manera y que de la colaboración

con ese individuo tan aparentemente opuesto, nacen las mejores colaboraciones pues-

to que se suman cualidades diferentes y/o complementarias para ejecutar una tarea. No

importa cuanta razón o apoyo pudiera tener respecto a lo equivocado de otra persona,

su espíritu puede ser igual de valioso que el mío.”

-Congruencia: “El error de percepción con respecto a la congruencia estriba en pensar

que se puede ser incongruente. Que es posible decir una cosa cuando se piensa otra y

eso simplemente es imposible, tal idea tiene como función delegar la responsabilidad

de acciones u oraciones, pensando que se tiene un problema de tipo mental que oca-

siona este tipo de fallas, pero lo único que indica es que se esta empleando una menti-

ra. Mentir puede ser útil e incluso benéfico pero el individuo debe estar consciente de

dichas mentiras o podría acarrear con esto una sería de conflictos de tipo emocional. Lo

único que importa a final de cuentas es el hecho, o los enunciado proclamados y lo


demás no existe, no hay porque sentir culpa al respecto solo ser consciente de nuestras

mentiras”.

-Integridad: “El error de percepción respecto a este concepto radica en pensar que se

es integro por la calidad de sentimientos que existen al interior de una persona, y que

alguien con integridad nunca experimenta conflictos emocionales, confundiendo inte-

gridad con honestidad. Sin embargo una persona integra es aquella que no importan-

do sus emociones y sentimientos nunca traiciona el instinto mas importante de todos:

procurar el bien a su comunidad o universo. Como ejemplo podemos visualizar a esa tía

o familiar que a pesar de sus evidentes problemas emocionales siempre esta en dispo-

sición de ayudar a sus familiares."

-La mente “La mente tiene la función de procesar la realidad, abstraerla y guardar una

copia en la memoria, sin embargo los errores de percepción hacen incomprensible la

realidad y de esta manera no se pueden guardar en la memoria así que se vuelven a

procesar una y otra vez.”

-Emociones “Las emociones fueron desarrolladas como una forma de respuesta instin-

tiva a las circunstancias de la vida, carecen de interpretación y tienen funciones específi-

cas, normalmente los problemas emocionales radican en utilizar cada una de ellas

cuando no son necesarias. Los problemas de tipo emocional se incrementan con el

consumo de alcohol, y si disminuye significa que el problema es de otra índole. La fina-

lidad mas importante de ellas es conservar integro el instinto que supone el amor: Pro-

curar el bien a la comunidad o universo entre los que se incluye el individuo mismo.”

-Tristeza “Su función es solicitar apoyo tras sufrir una perdida, cuando un miembro de

la comunidad pierde a sus acompañantes mas cercanos surge la tristeza para avisar a

los otros miembros del grupo que esa persona requiere nueva compañía, el error en su

aplicación correcta estriba en el condicionamiento social que estipula que es malo que

una persona sustituya a un ser querido por otro, y que debe pasar un tiempo conside-
rable para que esto no suponga una especia de traición moral al respecto. Pero lo cierto

es que una persona que ha desarrollado cierta capacidad de profesar amor hacia una

persona y de pronto no puede hacerlo más sufre por entrar en conflicto con uno de sus

instintos mas básicos y debe encontrar la forma de

encaminar esa intención de procurar el bien hacia otra persona, lo que duele no es la

ausencia, es el amor que se deja de entregar.”

-Miedo “La función de esta emoción es una de las más importantes y esta relacionada

al amor propio en su forma más básica: preservar la vida. Sentir miedo se justifica cuan-

do la vida se encuentra en peligro, pero solo en ese caso. Resulta totalmente irracional e

injustificado sentir miedo bajo otra circunstancia, en la mayoría de los casos lo que se

siente no es miedo, es una forma de manifestación del Ego que fácilmente se confunde.

Cuando se tenga duda basta con reflexionar si la vida corre riesgo y si no es así, enton-

ces se debe hacer la aclaración lingüística al respecto, ejemplo: “No estoy sintiendo

miedo, lo que siento es mi ego”.

-Ira “La función de ésta emoción es provocar una respuesta de defensa instantánea en

el individuo que la experimenta, para proteger a un miembro de su universo entre los

que se incluye el mismo. Es la emoción contraria al miedo por lo que en muchas oca-

ciones está presenta cuando se tiene el prejuicio de que sentir miedo es malo, y como

el miedo se confunde un sentimiento, la ira puede provenir también desde esta circuns-

tancia.

Hay que pensar si la integridad física de un miembro de nuestro universo esta en peli-

gro por que de no ser así entonces lo que se siente tal vez no sea ira, tal vez sea miedo,

o tal ves sea apego y por consiguiente se deberá hacer la corrección lingüística: “lo que

siento no es ira, es miedo o es un sentimiento”.

-Anticipación: La función de esta emoción es prevenir un peligro antes que sea tarde

para tomar acción, se cree que la anticipación impulsó el desarrollo del intelecto. Es jus-

tificado buscar anticiparse ante circunstancias de riesgo de vida, sin embargo si no es


precisamente para prevenir la muerte entonces se trata de un sentimiento y no de una

emoción.

-Sorpresa: La función de esta emoción es percibir los sutiles cambios del entorno, so-

bre todo útil para percatarse de riesgos poco perceptibles. El problema en torno a la

sorpresa es que se confunde con miedo y se evita sentirla, pero de hecho es la ausencia

de sorpresa lo que deviene en exceso de anticipación, lo que podría estar relacionado

con la ansiedad. Luego entonces es posible hacer la corrección linguistica: “No tengo

problemas de anticipación o de ansiedad, tengo miedo de sentir sorpresa y tal vez mi

ego esté involucrado al respecto.

-Asco o aversión: La función de ésta emoción es evitar socializar con personas que pu-

dieran ser peligrosas para la comunidad, detectar de forma inconsciente que algunos

individuos de hecho pueden poner en peligro la vida de algún miembro de la comuni-

dad o universo. Esta emoción se justifica cuando alguien nos invita a hacer una acción

que perjudica de algún modo a algún miembro de la comunidad entre los que se en-

cuentra el propio individuo.”

-Confianza “La función de esta emoción es recordar de forma inconsciente las accio-

nes de valor que algún miembro de la comunidad o universo ejecutó en el pasado, por

este motivo la confianza se gana o se pierde en base a hechos. Un error típico de la

convivencia moderna es asumir que desconfiar de una persona tiene algo de malo; sin

embargo esto no es así, si la confianza se gana en base a hechos es natural no sentir

confianza por una persona que recién se conoce. Corregir la función de esta emoción le

permite a un individuo evitar la manipulación. Ejemplo: “No confío en ti, pero eso no

tiene nada de malo y en todo caso es mi derecho no sentir confianza si no hay hechos

en los cuales basarla”

-El ego: El Ego es exactamente lo opuesto al espíritu, es la relación que guarda un indi-

viduo con respecto a su universo. En otras palabras son los pensamientos, sentimientos
y emociones que un individuo experimenta en torno al universo. Tal relación, en térmi-

nos matemáticos y desde una postura realista debería tender al cero puesto que los

pensamientos de una persona son prácticamente insignificantes para todo el universo

en su conjunto. Sin embargo vivimos en una sociedad que promueve una fantasía, ac-

ceder a la

realización personal a través de la trascendencia y alcanzar la felicidad como producto

de nuestra importancia en el universo o comunidad. De forma inconsciente desearía-

mos que el producto de la relación Ego=Individuo/universo fuera algo mas que cero,

cuanto mas grande y mas importancia o relevancia mejor, no importando si las acciones

realizadas en beneficio de la comunidad o universo carecen de importancia y cada pen-

samiento y acción se encaminan al fin superior de ser reconocido o valorado por el uni-

verso.. Ego=Individuo/universo. La solución a tal relación trae como resultado la apro-

ximación al cero, lo que significa que realmente carecemos de importancia; Sin embar-

go aceptar esta idea es muy difícil para un individuo contemporáneo que busca por so-

bre todas las cosas ser alguien importante, destacar de entre los demás y ser recordado

por sus congéneres. El individuo va a necesitar de un error voluntario de lógica para lo-

grar sustentar la fantasía de un Ego alto.

-Sentimientos: Los sentimientos son pensamientos en donde se involucra el Ego y que

desencadenan una o varias emociones. Un sentimiento cede fácilmente bajo los efectos

del alcohol a diferencia de las cuestiones puramente emocionales que por el contrario

se incrementan. No existe una emoción que perdure mas de 90 segundos en el tiempo,

lo que se siente después de ese tiempo es un sentimiento.”

Importante: Al hablar con un usuario o consultante sobre los siguientes conceptos, es

muy importante olvidarse de él y concentrarse en uno mismo, en nuestros propios de-

fectos y usar nuestros ejemplos personales. Cuanto más sinceros, autocríticos y severos

seamos con nosotros mismos, llegando incluso a ridiculizar nuestras propias actitudes

egoístas, mas efectivo será la corrección de la lógica de los principios de nuestros usua-

rios.
-Irresponsabilidad: Es un error de percepción que desarrollamos como individuos con

la finalidad de justificar la diferencia entre las expectativas generadas por nuestro Ego

alto (ser importante trascendental) y la realidad (en realidad todos somos iguales).

Nuestra expectativa con un Ego alto es una fantasía inalcanzable, pues cuanto más re-

conocimiento conseguimos, más necesidad generamos; por lo tanto la expectativa

nunca es cumplida y en nuestra mente se genera la explicación creativa de culpar a

otros individuos, a las circunstancias o a cuestiones mágicas o esotéricas. Lo cierto es

que somos cien por ciento responsables de la vida que vivimos, de resolver los proble-

mas que se nos presentan, de permitir abusos, de la forma en que somos tratados por

otras personas, de las oportunidades desaprovechadas y de cualquier otro aspecto des-

favorable en nuestras vidas. Luego entonces, culpar a otras personas o circunstancias e

incluso solo tener una actitud pesimista ante la vida, es en realidad una manifestación

de un Ego enfermo, es una actitud narcisista, es muestra de nuestra vanidad y nos defi-

ne como seres llenos de soberbia. Culpar no es mas que soberbia.

-Inmadurez: Un niño recién nacido es totalmente incapaz de sobrevivir por si mismo,

por ende, se ve en la necesidad de manipular emocionalmente a sus padres con la fina-

lidad de satisfacer sus necesidades. Si él infante tiene hambre sufre y llora, cuanto más

sincero y trágico sea ese llanto, más efectiva será la solución a sus problemas. Sin em-

bargo durante el proceso de maduración, que culmina poco después de la adolescen-

cia, los individuos deberíamos ser cien por ciento capaces de sobrevivir en indepen-

dencia, esto seguramente ocurría en épocas primitivas, cuando los hombres no depen-

dían de sus padres o de una sociedad en lo absoluto, ese transitar de cero a cien pla-

gado de experiencias fuertes y reveladoras, dotaba a los individuos de un criterio realis-


ta sin conflictos del Ego. En la actualidad, no alcanzamos ese cien por ciento de capaci-

dades de supervivencia y pretendemos usar las mismas herramientas que funcionaron

cuando éramos unos indefensos niños, la manipulación emocional; por eso si las cosas

son desfavorables, nos entristecemos, nos enojamos, nos sentimos de muchas formas

pensando inconscientemente que eso solucionará nuestros problemas, cuando en

realidad lo único que denota es lo inmaduros que somos y se refleja en una actitud

egocéntrica y soberbia, en este mundo material lo único que puede cambiar la realidad

son las acciones, no las emociones. Así que la próxima vez que nos contrariemos imagi-

narnos como ese niño inmaduro y en pañales pudiera ser suficiente para sacarnos de la

inmadurez.

-Incertidumbre: Prácticamente la civilización moderna esta cimentada en este error de

percepción, los individuos pensamos que el propósito de la existencia es la trascenden-

cia por encima de la contribución. Nos preguntamos llenos de frustración ¿cuál es el

propósito de nuestra vida? y buscamos conocer de antemano ¿cuál es nuestro destino?

¿qué parte de ese camino estamos recorriendo? y ¿para qué nos suceden las cosas que

vivimos?. Sin embargo somos inconscientes de lo esotérico y mágico que resulta pensar

que algo o alguien se ha tomado la molestia de planificar nuestro destino, de lo vanido-

so y narcisista que resulta plantearse que tenemos un “camino” con diferentes paradas

llenas de propósito y peor aún, con un final lleno de gloria y reconocimiento. ¿Pues

quién diablos no creemos? concediendo que existiera un Dios, ¿Qué tamaño de ego

nos cargamos para pensar que él se pasa los días planeando nuestra vida, moviendo a

otros individuos como fichas de ajedrez para que cumplan un propósito dentro de ésta

escena protagonizada por nosotros? Qué soberbio somos buscando tener certidumbre

de las cosas.

-Sufrimiento (Soberbia): La civilización moderna ha llegado a una conclusión absurda:

sufrir es un síntoma de humanidad, de bondad y de nobleza. Bajo esta premisa los indi-
viduos sufrimos con plena justificación al pensar que la vida es injusta, cayendo co-

múnmente en la tormentosa pregunta ¿Porqué yo? ¿Porqué a mí? La ley de Murphy

promulga que si algo puede pasar, pasará, esto significa que en el universo suceden

eventos de todas las índoles, alegrías y bendiciones pero también pesares y tragedias.

Resulta improbable que las calamidades se presenten uniformemente distribuidas den-

tro de los miembros de la comunidad o universo, siendo además que las condiciones y

riesgos en las que habitan los individuos suelen ser muy diversas. Por consiguiente ha-

brá individuos que vivan mas desavenencias que otros y algunos de ellos necesaria-

mente serán los que peores experiencias vivan. Pero esto no tiene significado alguno,

todos estamos sujetos a las mismas probabilidades de experimentar bendiciones y tra-

gedias, la pregunta lógica entonces no es ¿porqué yo? ¿porqué a mi? la verdadera pre-

gunta debería ser ¿porqué yo no? ¿porqué no a mí?. Por otro lado, el sufrimiento es la

vanidad que se experimenta ante el dolor, puede convertirse en la necesidad de reco-

nocimiento a través de las experiencias difíciles de nuestras vidas, bajo la siguiente fan-

tasía: que al experimentar dificultades, automáticamente me debería convertir en una

mejor persona. Sin embargo todos vivimos dificultades, pero hay dos posibles actitudes

a asumir, el sufrimiento, el resentimiento, el sentimiento de injusticia que incluso nos

podría llevar a ajustar de forma artificial las condiciones naturales del universo, gol-

peando, insultando y lastimando a aquellos que pensamos son responsables de la in-

justicia, pero justamente eso es lo que piensan y hacen las personas que se encargan

de lastimarnos a nosotros. por ende somos capaces de convertirnos fácilmente de víc-

tima a victimario. El verdadero individuo noble y bueno aceptará lo que la ley de

Murphy ponga en su camino y no caerá en el pensamiento vanidoso de sufrir por lo que

acontece por que a final de cuentas su estabilidad emocional no tiene relación con la

adversidad. Ciertamente no sufrimos, solo experimentamos nuestra soberbia.

-Pasajero: Por sobre todas las cosas, el Ego significa buscar el reconocimiento a toda

costa y sentirnos bien ante los halagos o miserables ante las críticas. Ambas cosas son

destructivas porque nos alejan de nuestro propósito universal, de nuestro más grande

instinto: procurar el bien a los miembros de nuestro universo. Pero por más ilógico, ab-
surdo y nefasto que esto resulta y a pesar del ejercicio de consciencia que podamos

experimentar en otros ámbitos, de hecho existe una persona en todo el universo de la

que buscamos mas halagos, y de la que sentimos más dolor ante sus terribles críticas,

NOSOTROS MISMOS. Como si se tratase de alguien más, buscamos por todos los me-

dios cumplir nuestros propios estándares, y creemos que la felicidad es el tipo de len-

guaje que usamos para hablarnos a nosotros mismos, si son elogios absurdamente sig-

nificaría realización o si son descalificaciones significaría frustración. Sin embargo ese

tipo de pensamiento puede llegar a desarrollar comportamientos psicóticos hablándo-

nos al espejo, mientras manejamos o simplemente estando solos. De todas las formas

posibles de soberbia, quizá sea ésta, la más profunda y las más vergonzosa de todas; Es

ilógico y enfermizo, pero entendible, necesitar el reconocimiento de otras personas

pero es prácticamente psicótico necesitarlo de uno mismo, prácticamente como si nos

desdobláramos en otra persona, como si buscáramos quedar bien con alguien que no

existe, sentirnos mal por que esa persona ficticia nos ofende, nos descalifica, nos crítica;

que nivel de locura vive en nuestra mente para hacer tal ejercicio, y hacerlo a cada hora,

cada minuto y cada segundo de nuestras vidas. Quizá, sea ésta vanidad, el origen de

todos los males y de todas las enfermedades, un enemigo invisible e inaudible que ha-

bita en cada uno de nosotros; es la más absurda pero al mismo tiempo la más grave

clase de soberbia que pueda existir.

-Soledad: El error de percepción respecto a este concepto estriba en pensar que la so-

ledad es un sentimiento; sin embargo la soledad es una característica del entorno, ¿qué

diferencia implica para nuestra mente estar solo o acompañado? Para nuestra mente

conceptual no debería haber ningún diferencia, ni para bien, ni para mal. Sin embargo

vale la pena hacernos la siguiente pregunta: ¿Somos la misma persona cuando estamos

solos que cuando estamos acompañados? ¿Porqué no?. La respuesta es simple, POR LA

NECESIDAD DE RECONOCIMIENTO. Luego entonces no sufrimos de soledad, lo que

nos duele es la falta de individuos que nos reconozcan, que nos aplaudan o nos cele-

bren. Muchas de nuestras relaciones realmente no están construidas por amor, si no por

la necesidad de reconocimiento del otro individuo, una relación de verdadero amor


nunca se sufre, ni siquiera en la ausencia. Luego entonces ¿qué es lo que sentimos? la

falta de reconocimiento o dicho de otro modo nuestra propia soberbia. Este error de

percepción es aplicable para cualquier tipo de distorsión de la personalidad en torno a

la compañía o ausencia como la timidez, el pánico escénico, el exhibicionismo, la de-

pendencia o el apego hacia una persona.

-La relatividad: Es un hecho que nuestra mente esta determinada por el cúmulo de

nuestras memorias, sin embargo esos recuerdos no son una fiel interpretación de lo su-

cedido, por el contrario son una distorsión de lo acontecido, siendo que además, en

cada ocasión en que se piensa en ello se agregan nuevos errores de percepción. Llega

el momento en el que no tenemos idea de lo sucedido, nuestro pasado es entonces

una invención de nuestra mente. Para mirar su distorsión es posible hacer el siguiente

ejercicio: ¿Qué porcentaje de nuestras vidas creemos que ha sido de tragedia? a este

porcentaje le vamos a denominar ITM=(valor estimado, por ejemplo: 30%) ¿Cuántos

días de verdadera tragedia hemos vivido en nuestra vida? no cuanto tiempo las sufri-

mos, por ejemplo la perdida de un familiar significa un solo día. A este valor le denomi-

naremos DTV=(número de días) hay que usar un factor para aquellos días que pudieran

estar ausentes en nuestra memoria, así que multiplicarlo por 1.5 sería muy valido.

¿Cuántos días hemos vivido en este mundo? este dato es sencillo y le denominaremos:

DV=(días de vida) Al resultado de nuestros cálculos le llamaremos Indice de Tragedia

Verdadera (ITV) y se puede calcular de la siguiente manera:

ITV = DTV(1.5) / DVy posteriormente se puede mirar la diferencia entre el ITM y el ITV

de la siguiente forma :EGO = ITM - ITVEfectivamente el resultado de la operación deno-

ta el tamaño de nuestro Ego, y nos revela lo absurdo e ilógico de nuestra percepción en

torno al dramatismo que ocupamos para expresar nuestro nivel mágico de tragedia. Es

decir que exageramos las tragedias de nuestra vida por soberbia, por vanidad, por nar-

cisismo, para destacar por encima de los demás en base a nuestra historia de victima.

You might also like