Professional Documents
Culture Documents
COLOMBIA: UN BALANCE DE SU
SITUACIÓN ACTUAL
Olga Ardila1
Universidad Nacional
Instituto Caro y Cuervo
1 El presente trabajo contó con la colaboración de Liz Castro , investigadora del instituto Caro y Cuervo
0
INTRODUCCIÓN
2ARANGO Raúl, y SÁNCHEZ, Enrique. Los pueblos Indígenas de Colombia en el umbral del nuevo milenio. Impreso Publicaciones,
Departamento Nacional de Planeación. Bogotá D. C. 2004. Pg 1.
1
sociolingüística actual de las lenguas indígenas y criollas. Inicialmente, se
realizará una presentación general de los grupos indígenas vistos desde los
censos poblacionales realizados en Colombia, para posteriormente
profundizar en la clasificación de las lenguas indígenas colombianas de
acuerdo a criterios de filiación genética, en las distintas denominaciones de las
lenguas indígenas y en las fechas de investigaciones lingüísticas en lenguas
colombianas. Luego, se analizará la situación sociolingüística de las lenguas
vernáculas de nuestro país dándole un espacio propio a la presentación de
dos fenómenos sociales de alta complejidad que se han evidenciado
recientemente en estas comunidades, como lo son el desplazamiento forzado
y la movilización de indígenas a los cascos urbanos más importantes del país.
Finalmente, un esquema similar se utilizará para el abordaje de las lenguas
criollas.
2
1. LAS LENGUAS INDÍGENAS DE COLOMBIA
1.1. POBLACIÓN3
3 Los datos referenciados en este aparte fueron extraídos de las siguientes fuentes: ARANGO Raúl, y SÁNCHEZ, Enrique. Los pueblos
Indígenas de Colombia en el umbral del nuevo milenio. Impreso Publicaciones, Departamento Nacional de Planeación. Bogotá D. C. 2004;
DANE. Los Grupos Étnicos de Colombia en el Censo de 1993 – Análisis de Resultados. División de Ediciones DANE.; DANE. Los Grupos
Étnicos de Colombia en el Censo de 1993 –Resultados. División de Ediciones DANE.; Colombia: una nación multicultural. Su diversidad étnica.
DANE. 2007.
3
Los censos modernos sobre indígenas comienzan a partir del Censo Nacional
de 1973 que contabilizó 368.000 indígenas, mientras que para 1985 se
reportaron 341.707. En 1993, se aplicó por primera vez un formulario especial
exclusivo para las regiones con mayor población indígena del país arrojando
un total de 603.280 indígenas. A esto se añade la proyección realizada por los
investigadores Raúl Arango y Enrique Sánchez quienes incorporaron a los
datos de población indígena ajustados por el DANE (Departamento
Administrativo Nacional de Estadística) en 1997, los datos complementarios
de la Guía Etnográfica de Colombia del DNP – Departamento Nacional de
Planeación y los datos de población de resguardos constituidos, ampliados y
reestructurados por el Incora a diciembre de 2001, registrando así una
población indígena para dicho año de 785.353 personas. Finalmente, el último
Censo Nacional, realizado en el año 2005, determinó en 1.392.623 la
población indígena y en 4.311.757 la población afrocolombiana, lo cual
correspondería a un 3,4% y 10,6% de la población colombiana,
respectivamente.
4
Tomado de: ARANGO Raúl, y SÁNCHEZ, Enrique. Los pueblos Indígenas de Colombia en el umbral del nuevo milenio. Impreso
Publicaciones, Departamento Nacional de Planeación. Bogotá D. C. 2004. Tabla elaborada con base en distintas fuentes y documentos,
revisados en las respectivas entidades y en la Antigua Unidad de Desarrollo Territorial del Departamento Nacional de Planeación.
Tomado de: URIBE, Margarita María. Los grupos étnicos de Colombia: intentos de cuantificación y criterios para el censo 1993. Tesis de grado
de Antropología de la Universidad de los Andes. DANE, 1998. En: Colombia: una nación multicultural. Su diversidad étnica. DANE. 2007.
5
1.2. CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LAS LENGUAS INDÍGENAS
1. andoque
2. awa – cuaquier
3. kamsá
4. cofán
5. guambiano
6. nasayuwe
6
7. ticuna
El grupo arhuaco, tal vez el más homogéneo a nivel tanto cultural como
lingüístico, se encuentra a lo largo y ancho de la Sierra Nevada de Santa
Marta, mientras que la lengua chimila, ubicada en la parte baja de la sierra, si
bien es de indiscutible filiación Chibcha no se reconoce dentro del
conglomerado cultural arhuaco; de la misma forma, aún más alejada de este
eje nororiental, en las inmediaciones de la Serranía del Perijá – Motilones
(Norte de Santander) encontramos la lengua barí. Ubicada dentro de la zona
nororiental colombiana, aunque hacia el extremo izquierdo, encontramos a la
lengua u’wa o tunebo hablada en la vertiente oriental de la Sierra Nevada del
Cocuy y, finalmente, hacia el otro extremo del país, en los departamentos del
Chocó y Antioquia, en límites con Panamá, encontramos a los cuna o tule.
Dado que la mayor parte de la población cuna se encuentra en Panamá esta
lengua ha sido ampliamente estudiada en este vecino país por investigadores
como Joel Sherzer, Luciano Giannelli, y Beatrice Pacini, entre otros.
5CASTRO, Liz Katherine. La Lingüística Aborigen en las Zonas Norte y Oriente de Colombia: Balance Bibliográfico de los Estudios Lingüísticos
Realizados en esta Región (1984-2008). Universidad Nacional de Colombia. Departamento de Lingüística. 2008. Manuscrito.
9
Además de las hipótesis de Paul Rivet, quien planteaba que las lenguas del
Chocó y otras como el panche, el pijao, el colima, el muzo, el pantagora o
palenque (lenguas hablada en la antigüedad en Colombia) y el desaparecido
patagón (departamento de Cajamarca -Norte del Perú) eran de procedencia
Caribe, y Greenberg, quien agrupa la familia Caribe en su sexta división
titulada Ge-Pano-Carib junto a lenguas como el andoke (aislada), el uitoto, el
bora, el yagua, varias lenguas chaqueñas y otras, no se han hecho nuevos
planteamientos con respecto a las lenguas colombianas pertenecientes a esta
familia. En nuestro país no quedan, entonces, sino dos vestigios de las dos
grandes expansiones caribe, a saber, la lengua carijona, ubicada en el alto
Caquetá, el Yarí, el Apaporis y el alto Vaupés, y la lengua yuko, ubicada en la
Serranía del Perijá – Motilones (Departamento de Norte de Santander), la cual
también cuenta con mayor número de hablantes en Venezuela. En este país
el yuko o yukpa ha sido estudiado por investigadores como Luis Oquendo,
Mariela Chavier, Raimundo Medina, Sergio Meira y Gisela Swiggers, entre
otros.
El tronco Tupí, uno de las más importantes de América del Sur, se divide en
ocho familias, siendo la tupí-guaraní una de las más importantes. Esta
subfamilia comprende 53 lenguas habladas o que se hablaban en Argentina,
Bolivia, Brasil, Colombia, Guayana Francesa, Paraguay, Perú y Venezuela, las
cuales se clasifican en once subgrupos y una lengua aislada. En nuestro país,
el tronco Tupí-Guaraní tiene una presencia marginal con las lenguas
10
nheengatú (língua geral amazônica) y la lengua cocama, pertenecientes al
grupo C III de esta subfamilia. La lingüista Ann Suelly Cabral plantea que los
ancestros de los cocama habrían anteriormente hablado una o más lengua(s)
no pertenecientes a la familia Tupí-Guaraní, pasando a hablar una lengua de
esta familia primero como lingua franca y luego como lengua materna.
6RODRÍGUEZ, Sandra Patricia. De lo visible a lo invisible. Un acercamiento sociolingüístico a tres asentamientos de la ribera del Amazonas
colombiano: Mocagua, Ronda y La Libertad. Departamento de Lingüística. Maestría en Lingüística. 2001.
11
Colombia. En nuestro país, este grupo se ubica en los resguardos de Santa
Sofía y El Progreso, así como en el Asentamiento de La Libertad – ribera del
río Amazonas. La lengua yagua ha sido estudiada en Perú por los lingüistas
Doris y Thomas Payne, Esther y Paul Powlison, y Daniel Everett
pertenecientes al Instituto Lingüístico de Verano.
Los primeros estudios sobre las lenguas Tucano fueron llevados a cabo por
Theodor Koch-Grünberg a principios del siglo XX. El autor alemán presenta
hipótesis acerca de las relaciones de proximidad lingüística existente entre las
diferentes lenguas Tucano, hipótesis que han sido validadas en estudios
posteriores. Entre algunas de las lenguas Tucano-Orientales existe un
estrecho parentesco lingüístico que permitiría postular la existencia de un
continuo dialectal en el cual las variedades contiguas muestran mayor
afinidad. Las siguientes variedades lingüísticas conforman agrupaciones con
mayores niveles de cercanía:7
7ARDILA, OLGA. “Lingüística aborigen colombiana: La problemática de las lenguas Tucano. Forma y Función No 17. Bogotá. Universidad
Nacional. Pag. 31
12
embargo el mayor número de hablantes de lenguas Tucano se encuentra en
nuestro país.
Esta familia está compuesta por el grupo de lenguas Makú y la lengua puinave
(Llanos del Meta y Vichada en Frontera con Venezuela y Brasil). Los grupos
makú son pueblos cazadores – recolectores del noroccidente de la Amazonía
en Colombia (nukak, cacua, yuhup, hupdë) y Brasil (yuhup, hupdë, nadëb y
düw) que se movilizan desde el río Apaporis hasta el río Guaviare. Dicha
8QUEIXALÓS FRANCISCO. “Lenguas Aborígenes de la Orinoquía de Colombia”. En: GONZÁLEZ DE PÉREZ, María Stella (Coord. y edit.)
Lenguas indígenas de Colombia: Una visión descriptiva pgs. 567 – 569. Bogotá: Instituto Caro y Cuervo. 2000. 848 pgs.
13
situación hace que ésta sea una familia heterogénea tanto antropológica como
lingüísticamente, dado que los puinave son sedentarios y enemigos
ancestrales de los makú, quienes son seminómadas. Igualmente, a nivel
lingüístico, son evidentes las diferencias entre las lenguas y aún en la
actualidad se cuestionan las razones de la filiación del puinave con las
lenguas makú.
Esta familia lingüística está conformada por las lenguas uitoto, ocaina y
nonuya, las cuales se localizan en la zona sur de la Amazonía colombiana
(ríos Caquetá, Putumayo, Igará-Paraná y Cará-Paraná) en frontera con Perú,
sobre el curso medio del río Putumayo y sobre el río Caquetá (aislados a
causa de los raudales del Araracuara). Se distinguen cuatro dialectos
diferentes de la lengua uitoto de acuerdo a su ubicación geográfica, a saber:
bue (Cará-Paraná); mɨka y mɨnɨka (Cará e Igará-Paraná); y nɨpode (río
Caquetá). El grupo que habla bue, se autodenomina como murui, mientras
que el sector de los uitoto que se conoce como muinane, diferente del grupo
étnico del mismo nombre, habla nɨpode. Sobre la lengua uitoto del territorio
peruano se encuentran los estudios de Dorothy Minor y Shirley Burcht
realizados a mediados de los setenta.
16
1.2.14.4. Lengua cofán
3) entre 5.000 y 10.000 personas (7): kogui, u’wa, waunana, curripaco, uitoto,
ticuna, awa
4) entre 1.000 y 5.000 personas (13): yuko, piapoco, damana, barí, cuna,
sáliba, desano, guanano, coreguaje, camsá, cubeo, tucano, puinave
5) entre 1000 y 500 personas (14): cofán, yukuna, chimila, piaroa, piratapuyo,
siriano, tuyuca, siona, bora, cuiba, guayabero, macuna, barasano, tanimuca
6) entre 500 y 100 personas (13): achagua, cabiyarí, hitnu, bará, carapana,
tatuyo, yurutí, andoque, miraña, nukak, hupda, cacua, yuhup
Por otra parte, esta información está basada en los datos proporcionados por
los últimos Censos Nacionales de Población (1993 y 2005), por investigadores
de las lenguas, así como en los datos que sobre grupos indígenas se
encuentran en el libro “Lenguas Indígenas de Colombia: Una Visión
Descriptiva” publicado por el Instituto Caro y Cuervo en el año 2000, y en la
publicación del Departamento Nacional de Planeación en conjunto con el Alto
Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados – ACNUR “Los
Pueblos Indígenas de Colombia en el Umbral del Nuevo Milenio”. Por esta
razón, en la mayoría de los casos estas cifras refieren a población indígena en
general y no hacen distinción entre hablantes y no hablantes de la lengua
indígena dentro de la comunidad de referencia, siendo de vital importancia
realizar estudios de tipo sociolingüístico que permitan establecer de manera
confiable el número de hablantes de lenguas indígenas en nuestro país en la
actualidad, así como sus niveles de bilingüismo; esto con miras a establecer
indicadores de vitalidad lingüística y perdida de lenguas.
2. Estudios realizados durante los siglos XIX y la primera mitad del siglo XX,
llevados a cabo por investigadores colombianos y extranjeros tanto misioneros
como etnólogos filólogos e historiadores. Estos trabajos contienen
principalmente vocabularios y algunas informaciones de carácter gramatical
sobre las lenguas. Se plantean hipótesis acerca de la filiación genética de
algunas de las lenguas estudiadas.
Sin embargo, es de resaltar que si bien en las décadas de los ochenta y los
noventa se llevaron a cabo diversas investigaciones por parte de egresados
de las Universidades Nacional y de Los Andes, lo mismo que por otros
investigadores, en la actualidad al parecer se han reducido los estudios sobre
21
lenguas indígenas colombianas por múltiples razones, entre ellas la falta de
apoyo de entidades tanto estatales como privadas a la investigación y el
contexto socio-cultural de conflicto que ha venido atravesando el país durante
estos últimos años, hecho que dificulta la realización de trabajos de campo en
los territorios indígenas. Esta situación se ve reflejada claramente al comparar
el número de lenguas que cuentan con estudios realizados en los años 80 –
90 frente al número de lenguas cuyos estudios son más recientes.
1. Trabajos llevados a cabo a partir del año 2000. En los últimos años se han
llevado a cabo investigaciones sobre las lenguas nukak, yuhup, ocaina,
muinane, puinave, tanimuca, totoró y miraña, entre otras. Se han continuado
también trabajos sobre otras lenguas iniciados en épocas anteriores. Por otra
parte se han elaborado diagnósticos sociolingüísticos en regiones como el
Amazonas, (diversas lenguas) Los Llanos (sikuani) y Cauca (nasayuwe)
22
1.6. SITUACIÓN SOCIOLINGÜÍSTICA
9FAGUA, Doris. Diagnóstico Sociolingüístico del Departamento del Amazonas. Los Lagos (periferia de Leticia): Contacto y cambio. Universidad
Nacional de Colombia. ENCUENTROS Colección Tesis Laureadas. Facultad de Ciencias Humanas. Departamento de Lingüística. Maestría en
Lingüística. 2001. Pg. 99
23
lengua indígena – español en otras. El nivel de asimilación cultural y
lingüístico de estas comunidades es específico para cada caso, por lo cual
realizar generalizaciones sería simplificar enormemente el complejo conjunto
de situaciones que se derivan del contacto de estos grupos con la sociedad
mayoritaria; factores como la intensidad y los contextos en los que se presenta
el contacto, el estatus y la valoración de la lengua vernácula, el nivel de
importancia que los hablantes le otorguen a su lengua como elemento de
identificación cultural y como vehículo de transmisión del conocimiento
tradicional, entre otros, determinan los niveles de bilingüismo, así como los
procesos de pérdida o mantenimiento de la lengua indígena.
11 RODRÍGUEZ, Sandra Patricia. De lo visible a lo invisible. Un acercamiento sociolingüístico a tres asentamientos de la ribera del Amazonas
colombiano: Mocagua, Ronda y La Libertad. Departamento de Lingüística. Maestría en Lingüística. 2004.
25
de determinar la vitalidad de una lengua, por encima de factores como el
número de hablantes de la lengua, ya que como lo señala la investigadora
Doris Fagua: “Una lectura comparativa del comportamiento comunicativo en
los diferentes asentamientos permite apreciar una correlación con el grado de
contacto con la sociedad nacional, a través de las redes que se tejen en los
ámbitos institucionales, comerciales, laborales y escolares … durante su
infancia y juventud las generaciones primera y segunda mantuvieron un uso
activo de la lengua ticuna, que se extendía en función gregaria a los diferentes
ámbitos de interacción. El contacto con la sociedad mayoritaria, a través de la
escuela, el trabajo asalariado y el comercio, estimuló el desarrollo de un
bilingüismo exógeno, el español fue adoptado en función vehicular. Las
alianzas interétnicas tomaron enseguida el relevo dando paso al bilingüismo
endógeno”12.
Por otra parte, otro factor determinante en la pérdida del uso de las lenguas
indígenas ha sido, sin lugar a dudas, el acceso cada vez más grande que
tienen los pueblos indígenas a los medios de comunicación masiva como la
televisión y radio, principalmente, y en mucha menor medida la internet. Esto
debido a que al penetrar estas nuevas tecnologías dominadas completamente
por el español dentro del seno de estas comunidades, se da inevitablemente
un arraigo cada vez más fuerte por la lengua y la cultura mayoritaria en
detrimento de los valores culturales tradicionales, especialmente en las
generaciones más jóvenes.
13RAMÍREZ, Héctor. Diagnóstico sociolingüístico de Cumaribo, zona de contacto indígena – Colono, Vichada. Universidad Nacional de
Colombia. ENCUENTROS Colección Tesis Laureadas. Facultad de Ciencias Humanas. Departamento de Lingüística. Maestría en Lingüística.
2003. Pgs. 67 - 68
26
(como es el caso de unos pocos programas radiales en lengua nasayuwe y en
lengua wayuunaiki dentro de sus territorios). Además, si a esta situación se
añade el hecho de que la educación indígena es impartida en la mayoría de
los casos en español, el resultado que se obtiene es el refuerzo del uso del
español por parte de las nuevas generaciones y, por consiguiente, la no
transmisión paulatina de la lengua indígena.
Por otra parte, en la Vereda Zolapa: “La lengua nasa ocupa un lugar
preferencial en la comunicación cotidiana a nivel local; ésta identifica en su
territorio la unidad familiar y comunitaria, a su vez, se constituye como el
símbolo de la identidad y la cultura de la vereda … los nasas hablan el nasa
como primera lengua -a pesar de la expansión del español en algunos niños- y
el español como segunda lengua. En otros términos, la lengua nasa ocupa la
mayoría de los contextos o tipos de eventos determinados dentro la
comunidad. El español es una herramienta de comunicación del nasahablante
14CHAPARRO, John Freddy. Acercamiento Sociolingüístico a Zumbico, una Vereda del Resguardo-Municipio de Jambaló. Trabajo de Grado.
Universidad Nacional de Colombia. Departamento de Lingüística. 2007.
27
con los que no pertenecen a la comunidad o con las instituciones formales:
iglesia, escuela, colegio entre otras.”15
15 UINO, Fernando. Estudio Sociolingüístico Acerca de la Vitalidad de la Lengua Nasa (Páez) Vereda Zolapa en el Resguardo-Municipio de
Jambaló-Cauca. Trabajo de Grado. Universidad Nacional de Colombia. Departamento de Lingüística. 2007.
16 CHAPARRO, John Freddy. Acercamiento Sociolingüístico a Zumbico, una Vereda del Resguardo-Municipio de Jambaló. Trabajo de Grado.
28
diagnóstico sociolingüístico de las lenguas curripaco, puinave, sáliba, cubeo,
tucano, ticuna, waunana, cuna, sikuani y cofán, a partir de datos de los
mismos hablantes de las lenguas. Posteriormente, se busca continuar este
trabajo con las cuatro lenguas de la región Caribe: wayuu, chimila, damana y
palenquero. Los primeros resultados de este proceso están previstos para el
segundo semestre del año en curso. Se espera que esta iniciativa brinde un
panorama actual del nivel de vitalidad de estas lenguas y que, a su vez,
propicie la implementación de estrategias para su revitalización.
“La disputa entre todos los actores armados por los recursos financieros
derivados de los cultivos ilícitos y actividades asociadas y, por otra parte, las
fumigaciones, las actividades de la policía antinarcóticos, del ejército y demás
acciones del gobierno y del Plan Colombia contra los cultivos de uso ilícito,
arreciaron el conflicto social, ambiental y armado, con sus consecuencias
sobre el desplazamiento de la población indígena”17.
17SÁNCHEZ BOTERO, Esther. Los Pueblos Indígenas en Colombia. Derechos, Políticas y Desafíos. UNICEF, Oficina de Área para Colombia
y Venezuela. Bogotá D.C. 2003.
29
cifra pública sobre homicidios de indígenas fue de 1.641, ocurriendo el 60% de
los mismos durante los últimos 5 años.
18REPÚBLICA DE COLOMBIA. DEFENSORÍA DEL PUEBLO. Informe Defensorial sobre el Desplazamiento Forzado por la Violencia en
Colombia.
19 UNHCR – ACNUR. Colombia, Desplazamiento Indígena y Política Pública: Paradoja del Reconocimiento. San José de Costa Rica, Instituto
Interamericano de Derechos Humanos, Mayo 17 de 2006.
20ARANGO Raúl, y SÁNCHEZ, Enrique. Los pueblos Indígenas de Colombia en el umbral del nuevo milenio. Impreso Publicaciones,
Departamento Nacional de Planeación. Bogotá D. C. 2004. Pg. 251.
30
Pacífica presentan altos índices de desplazamiento indígena hacia otras
zonas.
Es así como el mapa de los territorios indígenas coincide, en gran medida, con
el de los grandes proyectos de infraestructura, con el de una gran
biodiversidad y riqueza en el subsuelo, con el de los cultivos de coca y el de la
lucha armada, lo cual ha puesto a estas comunidades en una situación de
altísima vulnerabilidad al estar ubicadas en lugares política y militarmente
estratégicos. Por ejemplo, la permanencia constante de la guerrilla en algún
territorio indígena genera indudablemente (de forma voluntaria o involuntaria)
que los demás actores armados del conflicto crean que estas comunidades
son colaboradoras de la guerrilla y viceversa en las zonas bajo dominio
paramilitar. Y aunque, en la mayoría de los casos, las comunidades indígenas
han luchado por permanecer en sus territorios ancestrales, se han presentado
situaciones de alto riesgo que han configurado varios tipos de desplazamiento,
21SÁNCHEZ BOTERO, Esther. Los Pueblos Indígenas en Colombia. Derechos, Políticas y Desafíos. UNICEF, Oficina de Área para Colombia
y Venezuela. Bopotá D.C. 2003. pg. 33
32
a saber, el interno (dentro del propio territorio), especialmente de la población
masculina, el desplazamiento hacia otros territorios no indígenas dentro del
territorio nacional y, en algunos casos, el desplazamiento hacia zonas
fronterizas con otros países.
33
cordilleras, que eran precisamente las tierras en las que habían logrado
sobrevivir las comunidades indígenas de la región andina”22.
22 SÁNCHEZ BOTERO, Esther. Los Pueblos Indígenas en Colombia. Derechos, Políticas y Desafíos. UNICEF, Oficina de Área para Colombia
y Venezuela. Bopotá D.C. 2003. Pg. 37 - 38
23 REPÚBLICA DE COLOMBIA. DEFENSORÍA DEL PUEBLO. Informe Defensorial sobre el Desplazamiento Forzado por la Violencia en
36
2. LAS LENGUAS CRIOLLAS COLOMBIANAS
2.1. POBLACIÓN
37
Tomado de: URIBE, Margarita María. Los grupos étnicos de Colombia: intentos de cuantificación y criterios para el censgo 1993. Tesis de
grado de Antropología de la Universidad de los Andes. DANE, 1998. En: Colombia: una nación multicultural. Su diversidad étnica. DANE. 2007.
38
Tomado de: Departamento Administrativo Nacional de Estadística DANE. Los Grupos Étnicos de Colombia en el Censo de 1993 – Análisis de
Resultados. División de Ediciones DANE. 199-. Pg. 18
24 GUTIERREZ REYES, Mayelys Enid. Criollística Afrocolombiana: Balance Bibliográfico de Estudios Lingüísticos y Perspectivas de
Investigación. Trabajo de Grado. Universidad Nacional de Colombia. Departamento de Lingüística. 2008.
39
- Caribe Occidental: Jamaica, San Andrés y Providencia, Costa de Mismitos o
Miskitos (Honduras, Nicaragua), Puerto Limón (Costa Rica);
- Surinam, Bahamas, Gullah (islas y costas de Carolina del Sur y de Georgia)
Las lenguas criollas siempre han coexistido en los diferentes países en que se
encuentran con un idioma nacional y oficial, llamado en criollística de
superestrato, el cual es el instrumento del gobierno, de la educación, los
medios de comunicación, etc. Los vernáculos criollos, al igual que las lenguas
indígenas, se emplean por lo general en el ámbito familiar y mucho menos en
interacciones de mayor formalidad. Sin embargo, en algunos países las
lenguas criollas han adquirido recientemente el estatus de oficialidad, ya sea
en todo el país (Haití, Surinam, Antillas Holandesas) o en sus territorios, como
es el caso de Colombia.
A nivel sociolingüístico, si bien las dos lenguas criollas del país presentan
contextos distintos, es posible afirmar que ambas siguen el patrón de uso
general de las lenguas criollas, a saber, uso mayoritario en contextos de tipo
familiar e informal, con poca participación en contextos educativos y
administrativos, de carácter más formal. Inicialmente, se ha señalado que
desde el punto de vista teórico, el archipiélago de San Andrés
tradicionalmente presentaba una situación de continuo lingüístico que tenía en
un extremo al llamado basilecto – o la forma más pura del criollo – y en el otro
al inglés estándar caribeño, y como puntos medio a las variedades conocidas
como mesolecto – variedad más cercana al criollo – y acrolecto – variedad
más cercana al inglés estándar caribeño, respondiendo este continuo a
factores de estatus social y de contextos de mayor o menor formalidad.
40
Sin embargo, la situación del archipiélago ha variado en las últimas décadas,
especialmente desde la apertura del Puerto Libre en 1953, ya que el inglés fue
reemplazado como idioma de superestrato por el español, lo cual si bien evita
procesos de progresiva descriollización o absorción del criollo por la variedad
de mayor estatus, dadas las diferencias estructurales y léxicas entre las dos
lenguas, ha generado recientemente un contexto de multilingüismo y diglosia
en las islas que aún se encuentra en desarrollo. Las lenguas habladas en el
archipiélago son, entonces, el criollo sanandresano – conocido también como
creole o islander -, el inglés estándar caribeño y el español. En la actualidad,
el español, además de ser la lengua de educación formal por excelencia, se
utiliza cada vez con mayor frecuencia en todos los demás contextos de
interacción con la sociedad nacional (negocios, gobierno, turismo, etc.),
debido, en gran medida, a la cada vez más creciente presencia en las islas de
individuos y entidades que vienen desde el territorio nacional por diferentes
razones.
41
De acuerdo con los investigadores Ángela Bartens, Marcia Ditmann y Alberto
Abouchaar, el criollo sanandresano se encuentra sin duda en peligro, debido,
entre otros aspectos: a). el uso exclusivo tanto del español como del inglés
estándar en los colegios, ya que el criollo no se encuentra incluido dentro de
los programas curriculares; b). el establecimiento casi total del español como
lengua predominante en San Andrés, especialmente en las zonas urbanas,
reduciendo enormemente los contextos de uso del criollo; c). el gobierno local
promueve el español y el inglés y hasta impone su punto de vista a
representantes del gobierno nacional que estarían dispuestos a considerar la
posibilidad de promover el criollo.
Al respecto, cabe señalar que, al igual que la mayoría de las lenguas criollas
del mundo, el palenquero siempre ha sido estigmatizado por la sociedad
mayoritaria e incluso por el propio pueblo palenquero, al considerarlo un
“español mal hablado”, lo cual ha contribuido a su baja tasa de transmisión
generacional. Sin embargo, en la actualidad, en medio del contexto de
reivindicación socio-cultural de las minorías étnicas, el criollo palenquero se
está convirtiendo cada vez más en un emblema de identidad cultural del
Palenque de San Basilio, situación que ha permitido el desarrollo de
programas de etnoeducación tendientes a la estandarización del vernáculo
criollo para su uso continuo en la educación.
42
finalmente, entre los ancianos la gran mayoría conserva el uso de la lengua
criolla.
Por otra parte, desde que la UNESCO designó a Palenque de San Basilio
como “Patrimonio Intangible de la Humanidad” ha habido un cambio en la
valoración que la sociedad colombiana y el pueblo palenquero tienen del
vernáculo criollo y se han hecho esfuerzos por revitalizar su uso, a través, por
ejemplo, de la apertura de espacios de enseñanza de la lengua (2 horas
semanales en secundaria) en la escuela. Sin embargo, este pueblo de muy
escasos recursos no cuenta con materiales de enseñanza adecuados ni
tampoco con el apoyo tangible por parte del gobierno local para fortalecer este
proceso y se requiere entonces apoyo económico urgente para llevar a cabo
esta iniciativa.
43
A MANERA DE CONCLUSIÓN: EL FUTURO DE LAS LENGUAS
INDÍGENAS Y CRIOLLAS COLOMBIANAS
44
lenguas y, de esta forma, en cuestión de una o dos generaciones algunas de
las lenguas vernáculas colombianas habrán sido desplazadas por el español.
45
6. Igualmente, se hacen necesarios estudios que permitan establecer el
impacto del fenómeno del desplazamiento forzado y las movilizaciones a las
ciudades por parte de las comunidades indígenas en el mantenimiento de sus
culturas y sus lenguas. Es posible plantear que la pérdida de los patrones
socio-culturales tradicionales se da como consecuencia de la inmersión total
de estos grupos en las dinámicas de la sociedad mayoritaria y, en algunos
casos, también se debe a la pérdida de los nexos con sus territorios
ancestrales. Sin embargo, hasta que no se obtengan datos sobre la situación
específica de las comunidades indígenas en zonas urbanas, no será posible
definir de manera contundente en qué medida se ha perdido el uso de sus
lenguas vernáculas.
46
BIBLIOGRAFÍA
PÁGINAS DE INTERNET
48
ACNUR. La población indígena colombiana está siendo devastada por el
desplazamiento forzado. Disponible en:
http://www.acnur.org/index.php?id_pag=7855 <Consultado el miércoles, 01 de
julio de 2009>
PATIÑO ROSSELLI, Carlos. Sobre las dos lenguas criollas de Colombia. En:
Cuadernos del Caribe No. 3 - SEMINARIO LENGUA, educación y cultura en el
contexto del Caribe Occidental (mayo 20-22 de 1999). Universidad Nacional
de Colombia, Instituto de Estudios Caribeños. 2002. pgs. 13 - 19. Disponible
en:
http://www.caribe.unal.edu.co/Documentos/CUADERNOS_DEL_CARIBE_3.pdf
<Consultado el miércoles, 01de julio de 2009>
49
http://www.lablaa.org/blaavirtual/tesis/unal/linguist/lin1-60.pdf
http://www.digital.unal.edu.co/dspace/bitstream/10245/858/2/01PREL01.pdf
<Consultado el miércoles, 01 de julio de 2009>