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¿Cómo vamos a estudiar la psicología de la personalidad?

 Una de las formas de estudiarla es hablar del debate filosófico empirismo-


racionalismo.
En su momento el empirismo propuso que todos los conocimientos y
comportamientos provienen del aprendizaje, y que el aprendizaje consiste en la
apropiación de series de estímulos ambientales, no somos seres sustanciales. No
existe la personalidad como un dato genético, sino que todo lo que hay es
producto del aprendizaje de secuencias de estímulos ambientales.
El racionalismo, en cambio, formula la existencia de ideas y conceptos innatos, que
ya están en nuestro aparato psíquico cuando nacemos. Además no están inertes,
sino que pueden combinarse, articularse, orientar funciones. Desde el punto de
vista de la personalidad existen tendencias o elementos innatos.
La “mente” racional es activa y performadora del ambiente y la empirista es pasiva
y exclusivamente reactiva del ambiente.
Este debate nos lleva a una controversia más contemporánea la natura-nurtura.
Carácter: efecto de la sociabilidad.
Temperamento: lo genético.
 También se puede desarrollar la cuestión de la personalidad a la vista la cuestión
de los limites disciplinares o fronteras entre los distintos campos del saber. . Porque
la personalidad ha sido un constructo abordado por distintas ciencias, como la
teología, filosofía y sociología. Cada una de estas ciencias le ha dado un sello
propio.
 Otra forma son las escuelas psicológicas, vamos a ver la personalidad desde el
punto de vista psicodinámico, cognitivo, y el fenomenológico.
En el psicodinámico la personalidad es un sistema de fuerzas de oposiciones y de
conflicto, entre instancias de la personalidad y el mundo social. La personalidad
siempre es resultante de un conflicto, de fuerzas.
Desde el punto de vista cognitivo la personalidad se relaciona con un sistema de
creencias, construcciones o categorías que usamos como filtro para comprender y
aprender la realidad. No hay nada sustancial, hay una configuración de categorías
que hacen que la persona sea como sea y actué como actúa.
Y en fenomenológico la personalidad es una serie o estructura de motivaciones
vinculadas a una particular configuración de la identidad o del “si mismo” , de
modo que la personalidad es mas funcional o saludable en medida que percibe
correctamente sus motivaciones, sus necesidades y las disponibilidad de las
satisfacciones del mundo exterior.
 En las distintas definiciones de personalidad es posible reconocer distintos
criterios. Hay definiciones que se basan en el criterio estructural pretenden
decirnos los componentes o elementos de la personalidad. Por ejemplo Freud (Yo,
Ello y Súper yo). También está el criterio funcional pone atención a la utilidad o
función de cada elemento estructural. Por ejemplo en Freud el Yo sirve a los fines
de defensa y criterio de la realidad. El criterio dinámico establece la relación de
fuerzas energética o económica entre los elementos o partes, de modo que se
pueda ver la oposición de vectores. Por ejemplo para en neoanálisis hay tanto un
balance de fuerzas volcadas a la resolución de conflictos como a la adaptación del
mundo externo. Hay un criterio genético-histórico que se fija en los aspectos
históricos que dan nacimiento a la personalidad. Finalmente se encuentra un
criterio social.

¿De qué hablamos cuando hablamos de personalidad? Cuando hablamos de


personalidad estamos hablando de varios temas. El primero: libertad- determinismo
¿El hombre es libre? ¿En qué sentido? El segundo intimidad- publicidad ¿Es la
personalidad aquello más oculto o más visible? ¿Lo mas visible es lo verdadero o
autentico, o es el caso de coexistir aspectos artificiales o superficiales de la
personalidad con aspectos mas profundos y genuinos? El tercero: lo exterior-lo
interior ¿Qué parte de nuestra personalidad llevamos “dentro” (lo innato) y que es
producto de la socialización?

Definición de personalidad según Allport: “La personalidad es la organización dinámica,


dentro del individuo, de aquellos sistemas psicofísicos que determinan sus ajustes
únicos a su ambiente”.

Jung:
Conceptos principales:

Libido: Jung no le atribuye a la libido una connotación exclusivamente sexual, sino que
la ve como energía psíquica de cualidad indiferenciada, que solo en ocasiones puede
adoptar características sexuales.

Dirección de la libido (hacia afuera o hacia adentro): Jung categorizo el grado que las
personas estaban con la realidad interior y exterior. La energía psíquica fluía hacia
dentro o hacia afuera: hay que personas que fluye con más naturalidad con su mundo
interior (sus pensamientos, fantasías, emociones), y otras que se enfocan más al
mundo exterior (sus vínculos, objetos, responsabilidades). Naturalmente este ir y venir
de la libido debería ser espontaneo y funcional, pero esto no es así. Hay personas que
suelen estar sumidas a su espacio interno, las introvertidas, y otras personas pasan la
mayor parte de su tiempo volcadas a su espacio externo, involucradas a asuntos de
trabajo, ocio, etc., y son las extrovertidas. Nadie es completamente extrovertido ni
absolutamente extrovertido, (por ejemplo una persona introvertida no carece de la
tendencia a la extroversión: solamente la reprimió), y ninguna de las dos es mejor que
la otra, lo ideal es ser flexible y capaz de adoptar la actitud que resulte más apropiada.
Los extrovertidos son individuos que dependen de los demás, quienes se fían de las
ideas y opiniones de otros, sin tener las propias, y los introvertidos corren el peligro de
sumergirse demasiado en su mundo interior y perder el contacto con el ambiente
exterior. Introversión- extroversión es el primer par binario de clasificación para los
tipos de personalidad.

Funciones psicológicas: el pensamiento, sentimiento, sensación y la intuición: cada


una de ellas se puede presentar tanto en forma extrovertida como introvertida. La
intuición es captación implícita consciente de la realidad, es una forma de procesar la
información en términos de experiencias pasadas, metas futuras, procesos
conscientes, y la sensación es nuestros sentidos la percepción de los detalles, los
hechos concretos: lo que uno puede ver, tocar, oler, etc. Ambas funciones nos
permiten tomar registro de las cosas de este mundo del repertorio de entes, de lo que
hay o lo que existe. El pensamiento tiene relación con la verdad, con los juicios que se
derivan de criterios impersonales, lógicos y objetivos, lo que hoy llamamos cognición,
y el sentimiento son las reacciones biológicas que preparan al cuerpo para luchar, huir
o relajarse, es tomar una decisión de acuerdo con un juicio que uno tenga del valor,
como por ejemplo bueno malo, correcto. Estas dos funciones ayudan a formar juicios y
categorías, y a fundamentar decisiones y acciones. Nadie desarrolla las cuatro
funciones igualmente bien, cada uno tiene una función dominante muy fuerte y una
función auxiliar parcialmente desarrollada. Las funciones subdesarrolladas se
reprimen, y llama “función inferior” a la menos desarrollada.

Inconsciente colectivo: Jung dice que nacemos con una herencia psicológica además
de la herencia biológica, ambas son importantes en la conducta y experiencia. El
inconsciente colectivo incluye material psíquico que no proviene de la experiencia
personal. Además sostiene que la mente del niño ya posee una estructura que moldea
y canaliza todo desarrollo e interacción posteriores con el medio ambiente. Esta
compuesto por contenidos que no son adquisiciones individuales, son los mismos en
todas partes y no cambian de un individuo al otro. Sus contenidos (arquetipos) son las
condiciones primordiales o patrones de formación psíquica en general.
Arquetipos: son “estructuras” psíquicas que se encuentra dentro del inconsciente
colectivo, formas que no tienen contenido propio, y sirven para organizar y canalizar el
material psicológico. Son elementos estructurales de formación en el inconsciente.
Son representaciones conscientes, representaciones que pueden variar mucho en sus
detalles sin perder el patrón fundamental. Gran variedad de símbolos se pueden
asociar con un arquetipo, por ejemplo el arquetipo de la madre, no solo abarca la
madre real de cada individuo, sino todas las figuras de madre, y incluye también
rasgos negativos como una madre que amenaza. Cada una de las principales
estructuras de la personalidad son arquetipos, incluyendo el ego, la persona, el ánima,
el animus y el sí mismo.

Símbolos: el inconsciente se manifiesta a si mismo principalmente a través de


símbolos. No hay ningún símbolo concreto que pueda representar un arquetipo (no
tiene contenido específico), mientras más se asemeje al material inconsciente,
organizado alrededor de un arquetipo, mas provocará una respuesta vigorosa,
emocionalmente cargada. Jung se interesa por los símbolos “naturales”, los cuales son
productos espontáneos de la psique individual. Para el un símbolo es algo en si mismo,
es una cosa vidente, dinámica, representa la situación psíquica del individuo y es esa
situación en un momento dado.

Sueños: son un puente importante entre los procesos conscientes e inconscientes.


Para Jung los sueños juegan un importante papel complementario en la psique. Ellos
ayudan a equilibrar las influencias de distracción, a que estamos expuestos en nuestra
consciente, estas influencias tienden a moldear nuestro pensamiento es diferentes
formas, las cuales con frecuencia resultan inadecuadas para nuestra personalidad e
individualidad. La función general de los sueños consiste en tratar de restaurar nuestro
equilibrio psicológico produciendo material onírico que restablece, de manera sutil, el
equilibrio psíquico total. Jung trato de descubrir la importancia de los símbolos de los
sueños prestando mucha atención a la forma y contenido de estos, estudiando las
imágenes oníricas.

Ego: es el centro de la conciencia uno de los principales arquetipos de la personalidad.


Da sentido de congruencia (relación) y dirección de nuestra vida consciente. Tiende a
rechazar todo lo que pueda amenazar esta frágil consistencia de la conciencia., y trata
de convérsenos de que siempre tenemos que de que siempre tenemos que planear y
analizar conscientemente nuestra experiencia. De acuerdo con Jung, la psique, por
principio solo se compone de inconsciente. El ego surge del inconsciente y reúne
distintas experiencias y recuerdos, produciendo la división entre el inconsciente y el
consciente. No hay ningún elemento inconsciente en el ego, solamente el contenido
consciente derivado de la experiencia personal.

Persona: es la forma como nos presentamos ante el mundo. Es el carácter que


asumimos, y a través de ella nos relacionamos con los demás. La persona incluye
nuestro papel social, el tipo de ropa que escogemos y nuestro individual estilo de
expresión. La persona tiene aspectos negativos y positivos, por ejemplo una persona
dominante puede reprimir al individuo y aquellos que se identifican con su persona
tienden a verse solo en función de su papel social, y su apariencia superficiales. La
llamo también “arquetipo de conformidad “. Sin embargo no es totalmente negativa,
sirve para proteger el ego y la psique de las distintas fuerzas sociales y actitudes que
chocan con nosotros. Los símbolos utilizados para la persona son, los objetos con los
que nos cubrimos (vestidos velos), los de un papel ocupacional (herramientas maletín)
y los del estatus (automóvil casa diploma).

Sombra: es el centro del inconsciente personal, el centro focal para el material


reprimido de la conciencia, incluye aquellas tendencias, deseos, recuerdos y
experiencias que el individuo ha rechazado como incompatibles con la persona y
contrarias a los modelos e ideales sociales. La sombra representa lo que consideramos
que es inferior en nuestra personalidad e igualmente aquello que hemos rechazado y
que nunca hemos desarrollado en nosotros. Aparece frecuentemente en los sueños
como una figura oscura, primitiva, repelente, porque su contenido fue “desechado”, a
la fuerza de la conciencia. Es más peligrosa cuando no se la descubre, porque el
individuo tiende a proyectar sus cualidades no deseadas hacia los demás o dejarse
dominar sin darse cuenta. Cada parte reprimida de la sombra representa una parte de
nosotros mismos. En medida que mantenemos en el inconsciente este material, nos
estamos limitando a nosotros mismos, y a medida que la sombra se hace más
consciente, recobramos nuestras partes anteriores reprimidas.

El anima y el animus: Jung postulo una estructura inconsciente que presenta la parte
sexual de la psique de cada individuo, en el hombre es anima y en la mujer animus.
Esta estructura psíquica fundamental sirve como punto focal para todo el material
psicológico que no se ajusta a la imagen consciente de sí mismo que le individuo tiene
como hombre o como mujer. Cada hombre lleva dentro una imagen eterna de mujer,
una imagen femenina definitiva, es un sello o “arquetipo” de todas las experiencias
ancestrales de la mujer. El padre del sexo opuesto al niño ejerce la mayor influencia
sobre el desarrollo del animus o del anima, y todas las relaciones (incluso la de los
padres), se ve afectados por la proyección de las fantasías del anima y animus.
El sí mismo: es el arquetipo central, el del orden y la totalidad de la personalidad.
Para el consciente y el inconsciente no están en absoluta oposición, sino que se
complementan y formar el sí mismo. Se representa en forma impersonal en las
imágenes o en los sueños, como un circulo, una mándala, etc., o en forma personal
como una pareja real o un niño divino. El sí mismo no es solo el centro, sino también la
circunferencia total que abarca tanto el consciente como el inconsciente. El ego ya es
el centro de la personalidad, sino una estructura más de psique.

Desarrollo psicológico -Individualización: el hombre junguiano debe estar equipado


para hacer contacto con el mundo (conocerlo e interpretarlo) y actuar en el mundo
gracias a este conocimiento (adaptarse, cumplir sus propósitos), pero además debe
lograr la armonía el orden que es un reflejo del universo. La individualización es un
proceso de desarrollo personal que implica el establecimiento de una conexión entre
el ego (centro de la conciencia) y el sí mismo (centro de la psique total, lo consciente e
inconsciente), la búsqueda constante de armonía en su interior. Todo individuo posee
una tendencia hacia la individualización o el autodesarrollo, individualización significa
transformarse en un ser único, homogéneo y, también implica (hasta donde podamos)
llegar al sí mismo de uno. Es un proceso de desarrollo de la totalidad y un movimiento
hacia una mayor libertad. Incluye el desarrollo del eje ego-sí mismo y de la integración
de las distintas partes de la psique: el ego, la persona, la sombra, el anima o animus, y
los demás arquetipos.

¿Cuáles son los elementos internos entre los cuales debe reinar la armonía, para que
el hombre devenga saludable, integrado y fiel a su verdadera esencia? Son los
elementos que conforman la personalidad. Este proceso de individualización cuenta
con tres etapas: etapa de unidad e integración (simbiosis con la madre), la de
fragmentación y conflicto (socialización primaria y secundaria), y una tercera etapa
que nunca se totaliza, de “retorno” a la integración y armonía. Y a su vez cuenta con
tres pasos el primero consiste en el descubrimiento de la persona (sacar la máscara
que esconde al sí mismo y al inconsciente), el segundo es hacer frente a la sombra (si
aceptamos la realidad de la sombra y nos distinguimos de ella podemos librarnos de su
influencia y podremos asimilar el material del inconsciente personal), y el tercero es
hacer frente a la anima o animus (este arquetipo debe manejarse con una persona
real, como una entidad con la cual nos podemos comunicar y de la cual podemos
aprender).

Este proceso busca el desarrollo del sí mismo, constituir un individuo integrado.

Obstáculos en el proceso de individualización: la individualización no es siempre una


tarea fácil o agradable, el individuo debe poseer una salud psicológica relativamente
buena para iniciar el proceso. El ego debe ser fuerte para soportar los cambios. Es
difícil porque constituye totalmente una empresa individual.

Cada etapa del proceso de individualización viene acompañada de dificultades.


Primero el peligro de identificación de la persona, quienes se identifican con la
persona pueden tratar de volverse demasiado “perfectos”, incapaces de aceptar sus
errores flaquezas o cualquier desviación en el concepto de sí mismos. Quienes están
totalmente identificados con la persona tratan de reprimir todas aquellas tendencias
que no les quedan y las proyectan en lo demás, adjudicando a otros la tarea de
representar aspectos de reprimida identidad negativa. La sombra también puede
convertirse en un obstáculo, la gente que no conoce su sombra puede producir
impulsos peligrosos que ni siquiera reconocen como erróneos. La ignorancia de la
sombra también puede provocar una actitud de moralismo y proyección de la sobra en
los demás. La confrontación del anima o animus lleva el gran problema de relacionarse
con el inconsciente y la psique colectiva. El anima puede acarrear repentinos cambios
emocionales o melancolía en un hombre, y el animus se puede manifestar como
opiniones irracionales, sostenidas rígidamente en la mujer.

Una vez que el individuo recibe el material colectivo corre el peligro de dejarse
sumergir por el inconsciente. Esto puede presentarse de dos formas: primero existe la
posibilidad del engreimiento del ego, en el cual el individuo reclama todas las virtudes
de la psique colectiva, y la otra razón es la impotencia del ego, la persona siente que
no tiene control sobre la psique colectiva y se da cuenta, de los aspectos inaceptables
del inconsciente, irracionalidad, impulsos negativos, etc.

Estructura:

Cuerpo: sostuvo que los procesos físicos solo son importantes para nosotros porque
están representados por la psique, el cuerpo físico y el mundo nunca se pueden
conocer directamente, solo como experiencias psicológicas.

Relaciones sociales: la interacción social es importante en la formación y desarrollo de


las principales estructuras de la personalidad: la persona, el anima o animus, la
sombra. El contenido de las experiencias sociales ayuda a determinar las imágenes
específicas y los símbolos relacionados con cada estructura. La individualización es un
esfuerzo personal, pero también es un proceso que se desarrolla a través de las
relaciones con los demás.

Voluntad: la define como la energía que está a disposición de la conciencia o del ego.
El desarrollo de la voluntad está asociado con los valores culturales del aprendizaje, las
normas morales, etc. Tiene poder únicamente sobre el pensamiento consciente.
Emociones: el material psíquico que está directamente relacionado con los arquetipos
tiende a suscitar fuertes emociones y tiene una calidad imponente. La emoción
acompaña los cambios psíquicos, es la fuerza que sostiene el proceso de
individualización, es la fuente principal de la conciencia.

Intelecto: tiene que ver con los procesos conscientes dirigidos, y distingue la intuición
(que depende del material inconsciente).

Freud Jung
Libido Connotación de carácter
sexual

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