IMPACTOS DEL TURISMO Aunque el turismo genera muchos efectos positivos, también tiene sus consecuencias y efectos
negativos que hay que conocer y minimizar.Existe un gran riesgo de que el crecimiento turístico
1.--‐ Impactos positivos del turismo
El turismo es una fuerza impresionante que produce potentes cambios en el mundo, que genera
migraciones y que tiene efectos sobre los destinos, las economías, las sociedades y el medio
ambiente.
En las últimas décadas se ha convertido en un gran catalizador de crecimiento económico y de
prosperidad para muchos países.
El turismo genera desarrollo económico en tres áreas:
 Crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB)
 Genera divisas extranjeras
 Mejora la balanza de pagos.
En algunos destinos llega a suponer más del 10% de la economía.
El turismo actúa como catalizador para la atracción de inversión extranjera, necesaria para el
desarrollo de infraestructuras y grandes proyectos turísticos.
El turismo ayuda también a la diversificación de la economía, ya que genera sinergias con otros
sectores de actividad, como la agricultura o las manufacturas.
Incide en la redistribución de la riqueza, ya que los beneficios generados por el turismo se
reparten entre varios sectores de la economía, ya sea de forma directa o indirecta. Es lo que se
denomina el efecto multiplicador.
El turismo utiliza mano de obra de forma intensiva. Esto le permite generar mucho empleo y
ayuda a la fácil entrada en el mercado laboral de jóvenes, mujeres e inmigrantes, que son
normalmente las capas sociales que tienen más dificultades para encontrar un trabajo. Hay que
tener en cuenta que aproximadamente, entre el 60 y el 70% de los trabajadores en el sector
turístico, son mujeres.
El turismo ofrece también oportunidades para la creación de pequeñas empresas locales. Hay
que recordar que incluso en países muy desarrollados, el sector turístico está muy atomizado,
compuesto principalmente de pequeñas y medianas empresas.
Por otra parte, el turismo también se ha mostrado como un vehículo fundamental para procesos
de integración regional. El ejemplo más claro es Europa, donde los viajes han contribuido a la
integración y a lograr la mayor época de paz y prosperidad en la historia del viejo continente.
Los viajes hacen que se conozcan mejor la cultura y la idiosincrasia de otros pueblos, lo que
hace
más fácil el entendimiento, el respeto y la convivencia. Este mayor conocimiento mutuo puede
eliminar algunos tópicos y estereotipos, colaborando a mejorar la convivencia entre los pueblos
(en un mundo que cada vez está más poblado e interconectado).
Otros impactos positivos del turismo:
 Genera imagen de marca del país o del destino, que puede beneficiar otros sectores
de actividad (como las exportaciones de productos).
 Incide en la mejora de servicios de tratamiento de aguas, sanitarios y de seguridad,
que mejora la calidad de vida de los ciudadanos locales.
 Ayuda a desarrollar o mejorar las infraestructuras de transporte como aeropuertos,
carreteras o puertos marítimos (de los que la población local también se beneficia).
 Produce mejoras en los servicios de telecomunicaciones locales, para poder dar
servicio a los turistas.
 Posibilita la conservación de los recursos naturales como un atractivo para los turistas.
Si estos recursos no generaran beneficio económico (a través del turismo) sería difícil
justificar su mantenimiento.
se haga sin control. Esto puede generar o profundizar estos impactos negativos.
2.--‐ Impacto negativos del turismo
Aunque hemos visto que el turismo puede tener un efecto muy positivo, también tenemos que
analizar los múltiples impactos negativos que puede generar. En los últimos 50 años, el turismo
internacional ha pasado de suponer 25 millones de turistas al año, a pasar a más de 1.000
millones actualmente. Esta claro, que un fenómeno de tal magnitud y de crecimiento tan rápido,
está generando un gran impacto allí donde se desarrolla esta actividad.
Normalmente, los impactos que el turismo genera se pueden clasificar en tres categorías:
 Económicos
 Medioambientales
 Socioculturales
Lo primero que hay que entender es la volatilidad de este mercado y de las motivaciones de los
turistas. Aunque el turismo está creciendo en todas las regiones del mundo, diferentes
elementos pueden generar volatilidad en los flujos de turistas internacionales, que pueden
afectar a los destinos. Si un destino tiene una gran dependencia del sector turístico, estas
alteraciones del sector pueden tener consecuencias catastróficas para su economía.
El auge o fama de un destino turístico puede venir por la mejora en los medios de transporte
(que facilitan el acceso), el marketing o por la existencia de ofertas económicas interesantes
para los turistas.
Pero un destino puede dejar de estar de moda de la noche a la mañana o que su tipología de
turistas decida ir a otro destino parecido.
La llegada de turistas a un destino puede disminuir repentinamente por varios motivos:
 Por una recesión económica en los países que generan turistas hacia ese destino.
 Por cambios en los precios, originados por variaciones en los tipos de cambio de las
monedas o por guerras de precios entre proveedores.
 Por cambios en el coste del transporte, principalmente por el aumento del coste del
petróleo o por impuestos y tasas turísticas.
 Debido a la existencia de situaciones de crisis, catástrofes naturales, inestabilidad
política o inseguridad en los destinos turísticos.
 Por razones sanitarias.
 Por una imagen negativa del destino generada por crimen, inseguridad o insalubridad.
 bien, sencillamente por agotamiento del modelo o por cambios en las modas y
motivaciones de los turistas.
Muchos de estos factores son externos y están fuera del alcance del destino o de las empresas
turísticas. Pero pueden ser devastadores para el sector turístico local.
Los destinos, para evitar estos grandes cambios en la demanda se tienen que concentrar en
crear las condiciones que permitan:
 Crear una marca turística sólida y reconocida internacionalmente – con el desarrollo de
una buena comunicación, marketing y promoción.
 Diferenciarse de la competencia con elementos singulares del destino. La autenticidad
es un valor fundamental.
 Tener a todo el sector turístico local unido y remando en la misma dirección.
 Generar una demanda turística diversa, con diferentes tipologías de turistas (parejas,
familias, grupos, etc.), que vengan de diferentes mercados internacionales (países).
Así, si un mercado turístico se cae, podemos seguir recibiendo turistas de otros
mercados. Si la mayoría de nuestros turistas vienen de unos pocos mercados y estos
países tienen problemas económicos (por ejemplo) podemos experimentar un
tremenda disminución de los turistas que recibimos.
  Reinventarse cada cierto tiempo, mientras que se va construyendo la marca,
intentando añadir nuevos atributos positivos a nuestro posicionamiento.
Eso hará que estemos más preparados para un cambio en algunos de los mercados o
tipologías de turistas.
Vamos ahora a analizar los principales efectos negativos del turismo, desde los diferentes
prismas o áreas que hemos comentado antes:
Impactos económicos
Aunque como hemos vistos antes, el turismo genera importantes efectos económicos positivos,
también genera unos efectos económicos negativos.
Por una parte, incrementando los costes de muchos productos y servicios. Sube normalmente el
coste de la vida, los precios de la tierra y la mano de obra.
Este aumento de precios hace que algunas opciones de ocio o entretenimiento queden fuera del
alcance de algunas capas de la sociedad.
Otro problema es que algunos destinos llegan a tener una excesiva dependencia del capital
extranjero, necesario para desarrollar infraestructura y proyectos turísticos. Hay que tener en
cuenta que este capital internacional suele ser muy volátil y los inversores pueden llevarse el
dinero a otra parte, para obtener una mejor rentabilidad. Por ello, los destinos tienen que
favorecer inversiones que sean productivas y que tengan planteamiento a largo plazo, que
garanticen una estabilidad en el desarrollo turístico del destino.
Aunque en las primeras etapas del desarrollo turístico es normalmente necesario contar con
inversión extranjera, es fundamental que se creen grupos empresariales de propiedad local que
generen inversión y puedan recoger los frutos del boom turístico. Por lo general, las grandes
empresas multinacionales repatrian parte de sus beneficios, con lo que esa riqueza se pierde
para la comunidad local.
Por otra parte, muchas veces el desarrollo de grandes infraestructuras está muy enfocado a las
necesidades del sector turístico, aunque puede que esto no encaje con el desarrollo endógeno y
equilibrado de otras actividades productivas más tradicionales del destino (pero que se vuelven
menos rentables que el turismo).
El desarrollo turístico normalmente genera un aumento de los precios de productos básicos y de
los suministros (agua, luz, gas, etc.) en el destino. Esto se debe a un aumento de la demanda
de la tierra, del agua y de los alimentos producidos localmente.
Todos estos incrementos de precios generan un aumento en el coste de vida, la dificultad para
acceder a una vivienda o la expulsión de campesinos, que ante la falta de rentabilidad de la
agricultura (comprada con el desarrollo turístico) terminan volviéndose trabajadores de la
construcción o dando servicio a la industria turística (en puestos de muy baja cualificación).
Aunque siempre se habla de la capacidad del turismo para generar ingresos, hay que analizar
bien qué tipo de ingresos genera y qué porcentaje se queda en el país. Algunos de los sectores
que más se benefician del turismo (aviación y grandes grupos hoteleros), pertenecen a grandes
multinacionales y repatrian gran parte de los beneficios a otros países.
Por último, el turismo también puede tener un efecto negativo en la balanza comercial, ya que
se aumentan las importaciones de productos extranjeros para cubrir la demanda de los turistas.
Esto puede desplazar a los productos locales y al modo de vida relacionado con esa actividad.
Mercado Laboral
Aunque antes señalábamos que el sector turístico generar mucho empleo, este no siempre es
de calidad o estable. Veamos aquí algunos problemas relacionados con el empleo en el sector
turístico:
El empleo turístico es generalmente poco remunerado y de baja cualificación. En muchos
casos los puestos directivos o gerenciales, están ocupados por extranjeros lo que no permite la
especialización de los trabajadores locales.
Normalmente para la población local, el empleo es a tiempo parcial, muy estacional, poco
cualificado y en muchas ocasiones, muy dependiente de las mujeres. Además, suele competir
directamente con la oferta de mano de obra proveniente de la inmigración, dispuesta a asumir
salarios más bajos.
También hay mucho empleo turístico que no está regulado y que se encuentra fuera del
sistema, ofreciendo poca cobertura a los trabajadores. Esto puede generar problemas como el
trabajo infantil o los abusos laborales.
En sectores como hoteles y restaurantes el empleo tiene mucha rotación de personal, lo que
puede incidir en la calidad del servicio.
Por último, hay que destacar que la situación económica mundial y el desempleo han empujado
a la baja de los salarios que se pagan en hoteles, restaurantes y otros servicios turísticos.
Impactos políticos
El turismo suele generar corrupción en el desarrollo de proyectos turísticos. Las expectativas de
crecimiento económico lleva a los dirigentes políticos a la venta de espacios públicos y a la
recalificación de terrenos para dedicarlos al turismo, cuando antes estaban protegidos o tenían
otro uso (como el agrícola). Los grandes intereses económicos favorecen la corrupción. El afán
por crecer turísticamente puede hacer también que los políticos terminen canalizando excesivas
inversiones al sector turístico, quitando recursos a otros sectores de actividad, que quizás
podrían ser más productivos o generar mayor valor añadido al destino.
El crecimiento turístico genera grandes posibilidades de visibilidad mediática para los políticos.
Esto hace que muchas decisiones turísticas estratégicas estén más orientadas a mejorar su
imagen como político en los medios de comunicación, que a tomar medidas eficaces que
permitan mejorar el posicionamiento estratégico del destino, a largo plazo.
Cultura y sociedad
Una de los principales problemas del turismo es su impacto en el patrimonio histórico--‐artístico
de un destino. Una mayor afluencia de turistas generan un deterioro de los monumentos y
sitios históricos.
Otro impacto social que genera el turismo, es que una mayor afluencia de turistas puede
producir o atraer:
 Aumento del consumo de alcohol y de drogas por parte de la población local.
 Mayor crimen y narcotráfico.
 Aumento de la mendicidad.
 Aumento de la prostitución.
 Abuso sexual a menores.
El aumento de estos factores puede llevar a una imagen de destino poco seguro y la pérdida de
posicionamiento turístico.
El turismo puede tener también un efecto devastador en la cultura, destruyendo costumbres y
generando una pérdida de la identidad local. Puede influir en los valores, costumbres,
comportamientos y hábitos de consumo de la población local, que en muchos casos, intenta
parecerse a los turistas (sobre todo si estos vienen de países más desarrollados).
El turismo suele acelerar ciertos cambios culturales (presentes en todas las sociedades) que
despojan de su significado e identidad, a los elementos culturales del destino. No obstante, es
difícil cuantificar qué proporción de estos cambios son generados por el turismo y qué
proporción son generados por la cultura popular, internet y la publicidad.
En el peor de los casos, muchas tradiciones culturales se terminan volviendo un mero
espectáculo, destinado principalmente a su consumo por los turistas. La cultura se vuelve una
mera mercancía. Es lo que se llama banalización de la cultura.
Otros efectos sociales:
El turismo tiene efectos nocivos en la vida diaria de los ciudadanos de un destino, ya que
genera un aumento del tráfico y del ruido, más suciedad y más contaminación.
En grandes destinos, estos efectos y la masificación de ciertas zonas turísticas generan el
rechazo de la
población local.
El crecimiento del turismo puede influir sobre la estructura de la sociedad local, generando o
incrementando las diferencias sociales. En muchos casos, los beneficios del turismo suelen ser
monopolizados por un sector minoritario de la sociedad.
El turismo atrae a población de zonas más rurales y pobres del país. Pero si el turismo en ese
destino es estacional, estas personas (con poca cualificación) tiene meses sin ingresos, lo que
les puede llevar a actividades de economía sumergida o ilegal.
Medio ambiente
El turismo puede tener un gran impacto en el medio físico del destino donde se desarrolla. La
mayor afluencia de público puede generar una degradación de los recursos naturales,
destruyendo paradójicamente, uno de los principales reclamos para los turistas.
El turismo de masas se mostró desde sus comienzos como una gran amenaza al medio
ambiente. Los grandes desarrollos turísticos provocaban que zonas protegidas o con gran valor
ecológico, se urbanizaran. Ni siquiera se tuvo la visión de integrar esos recursos naturales en el
desarrollo turístico, para que fuera más armonioso.
Pero no solo influye en la pérdida de espacios naturales. El sector turístico también genera una
sobreutilización de recursos hídricos (agua), genera problemas al tener que tratar una mayor
cantidad de residuos (solidos y líquidos) y generar una mayor contaminación por el mayor uso
de medios de transporte y la climatización de la temperatura en hoteles y otros proveedores
turísticos.
El sector turístico también genera cambios en el paisaje por la construcción de complejos
deportivos, campos de golf o puertos marítimos.
En definitiva, el turismo, sobre todo el masivo, tiene un impacto muy negativo en la
biodiversidad y en la pérdida de hábitats autóctonos. Erosiona el suelo, genera una
sobreexplotación de recursos naturales como el agua o los alimentos, genera polución y pone
en peligro la conservación de monumentos y edificios históricos.
Impactos en la biodiversidad y el medio natural
Son varias las áreas vulnerables donde el impacto del turismo puede ser mayor:
La biodiversidad – el turismo tiene efectos sobre la flora y fauna:
 Modificación y destrucción de hábitats de flora y fauna terrestre y acuática (tanto
autóctona, como visitante en migraciones).
 Pérdida de especies.
 La caza legal y furtiva.
 Introducción de especies exóticas, que desplazan a las locales.
 La deforestación – ya sea por la tala de árboles para la explotación maderera o para
habilitar estas zonas para la agricultura o el turismo.
 La destrucción o masificación de zonas ecológicas de alimentación, reproducción o
anidación de diferentes animales, lo que cambia sus patrones de comportamiento o les
hace irse a otro sitio. Esta situación resta valor ecológico al destino.
 Cambios de uso del suelo forestal.
 Alteración de dunas costeras.
 Los vertidos incontrolados al mar que destruyen la flora y fauna marina. Por otro lado,
tenemos la erosión y daño causado al medio físico, destacando:
 La erosión del suelo – que puede provocar corrimientos de tierra en épocas
 de lluvias y reducir la productividad agrícola y ganadera.
 Pérdida de espacio público en las costas, privatizando el litoral a favor de hoteles y
proyectos turísticos. Esto bloquea el acceso de la población local a sus recursos
naturales.
 Un uso excesivo de recursos hídricos para consumo, actividad agrícola o para
equipamientos turísticos como piscinas y campos de golf. Esto puede llevar a la
pérdida de acuíferos y a restricciones al uso de agua.
 Obstrucción de cauces naturales de agua superficiales y subterráneos. Muchas veces
se construye hoteles y complejos turísticos sobre antiguos cauces de agua, que
actualmente están secos. El problema es que en ocasiones, cuando hay tormentas
importantes, el agua vuelve a circular por los antiguos cauces, lo que genera
inundaciones y deslizamientos de tierra.
 El deterioro de los monumentos y sitios históricos por el aumento de visitantes.
Otro impacto del turismo es la contaminación que genera, pudiendo ser de varios tipos:
 Polución de agua potable – que puede generar infecciones y enfermedades, tanto a los
turistas, como a la población local.
 Contaminación de suelos y acuíferos de agua por emisiones (aguas residuales,
aceites, lubricantes e hidrocarburos).
 Polución del mar por diversas fuentes:
 Vertidos industriales contaminantes.
 Gasóleo de las barcas recreativas.
 Presencia de plástico que no es biodegradable.
 Contaminación ambiental, generada tanto por el mayor número de coches, como por la
construcción de recursos turísticos.
 Polución acústica, con ruido que genera un mayor tráfico, el turismo de borrachera o
eventos al aire libre.
3.--‐ Impacto del turismo en destinos urbanos
Durante los últimos 20 años el turismo urbano ha experimentado un crecimiento exponencial.
El nacimiento de las líneas de bajo coste, ha permitido a muchos ciudadanos realizar
escapadas cortas de viaje, a destinos relativamente cercanos. Es el concepto de “city break”.
Viajes de corta duración enfocados, en la cultura y el entretenimiento.
Pero el gran aumento de la afluencia de turistas a estos destinos urbanos también están
generando muchos problemas.
Se ha demostrado que el turismo masivo puede ser corrosivo para el tejido social, comercial y
medioambiental de muchos barrios o zonas de un destino. Estos efectos son más claros en los
principales barrios históricos, que concentran gran parte de los recursos y atractivos turísticos
del destino.
El problema del incremento del turistas es que puede generar un conflicto de intereses entre la
población local (los residentes) y los turistas. Esto se debe a que ambos empiezan a utilizar y
compartir los mismos recursos naturales, espacios públicos y servicios de la ciudad (que antes
solo usaban los ciudadanos locales).
Se llega a un punto en el que la sensación de los vecinos de estas zonas turísticas, es que han
perdido la capacidad de tener una vida cotidiana de barrio.
El punto de inflexión se da cuando a los habitantes de una ciudad (o un barrio), ya no les
compensa los beneficios que les genera el turismo, en relación a los efectos negativos que
también tienen sobre sus vidas diarias.
Algunos de los principales problemas que generan los turistas en destinos urbanos son:
 Cambio de la dinámica interna de los barrios turísticos por la mayor afluencia de
turistas – que genera congestión en áreas peatonales y problemas de acceso para
acceder a la zona.
 Aumento de los precios --‐ tanto de productos y servicios turísticos, como de productos
básicos y suministros, que tiene su efecto en el coste de vida para los ciudadanos
locales (que en algunos casos tiene pocos recursos).
  Congestión de tráfico y mayores atascos.
 Mayor contaminación.
 Masificación de infraestructuras de transporte (como aeropuerto, estaciones de tren o
autobús y servicios públicos como el metro o los autobuses (en ciertas zonas de la
ciudad).
 Mayor suciedad.
 Destrucción del tejido comercial del barrio. Las tiendas tradicionales se van, dejando su
lugar a un comercio de bajo valor añadido y muy orientado al sector turístico (
souvenirs, alquiler de patinetes eléctricos, restauración...)
 Ruido nocturno.
 Actos vandálicos o antisociales (pintadas, gente desnuda, actos sexuales, consumo de
drogas y alcohol…)
 Aumento de la delincuencia.
 Destrucción de otros sectores de actividad (no enfocados al sector turístico) porque se
vuelven menos competitivos en relación al sector turístico.
 Gentrificación --‐ Emigración de población local, forzada por altos precios y por falta de
servicios que necesitan. En barrios o zonas turísticos de la ciudad, los propietarios de
las viviendas suelen ser mayores y de clases populares. Con el auge del turismo se
enfrenten a una presión por parte de inversores extranjeros que les quieren comprar su
vivienda.
 Especulación con las viviendas que son demandadas para un uso turístico. Esto
genera un aumento de precio de la vivienda y una escasez de viviendas destinadas a
uso residencial.
 Privatización de espacios públicos, para su uso por los turistas (con un coste).
Efectos sociales
Inversores quieren comprar viviendas para darles un uso turístico. Esto tiene un impacto brutal
sobre los equilibrios socioculturales del barrio. Un ejemplo es el barrio de la Barceloneta en
Barcelona. Tradicionalmente un barrio pescador y humilde, que se ha convertido en los últimos
años en el más caro por metro cuadrado de la ciudad.
El aumento del turismo masivo, produce ya un rechazo de los ciudadanos locales a grupos
grandes de turistas por las calles. En algunos destinos se han dado casos de atosigamiento a
profesionales como guías turísticos o transportistas, cuando están realizando su labor con
grupos grandes de turistas.
Problemática con la movilidad: en algunos barrios turísticos, las personas mayores (que
suponen buena parte de la población), tienen miedo de salir a la calle y encontrarse con gente
corriendo, grupos de jóvenes de fiesta, con caravanas de bicicletas o patinetes Segway a toda
velocidad.
El aumento de turistas (sobre todo en momentos puntuales de alta ocupación) puede generar
colapsos de servicios básicos de la ciudad como servicios sanitarios, de limpieza, emergencias
o seguridad.
Y es que otro elemento disruptivo que ha transformado radicalmente el sector turístico y la
dinámica en muchos destinos turísticos, es la aparición del fenómeno de la economía
colaborativa y el crecimiento de las plataformas entre particulares p2p (peer to peer), que ponen
en contacto a particulares que intercambian o comercializan otras opciones de alojamiento (ya
sea un apartamento completo o por habitaciones). En algunos destinos, la proporción de plazas
de alojamiento disponibles en plataformas p2p supone ya el 60 o 70% de toda la oferta de
alojamiento, dejando en minoría la oferta de alojamiento reglada (hoteles, hostales, pensiones,
campings y alberges).
Vamos a analizar ahora algunas de las problemáticas específicas que puede generar el
fenómeno p2p en los destinos:
Subida de los precios de la vivienda. Se produce un efecto especulativo, ya que hay inversores
que demandan este tipo de viviendas para explotarlas turísticamente. Esto hace que ciertos
colectivos, sobre todo estudiantes y trabajadores, ya no puedan acceder a esos barrios porque
son más caros o simplemente no hay viviendas disponibles.
Esta nueva oferta, con unos precios asequibles distorsiona el sector turístico local y presiona los
precios de hoteles y otras opciones de alojamiento regulado a la baja. Estos se quejan por su
parte (con cierto grado de razón) que esta nueva oferta alojativa lucha con ventajas
competitivas, ya que muchos no pagan impuestos ni tienes reglas tan exigentes para garantizar
los derechos del consumidor).
El mayor problema con estas opciones de alojamiento no reglado, es que los beneficios que se
generan no son recogidos por propietarios individuales de los apartamentos. En destinos muy
turísticos como Nueva York, la mayor parte de la oferta de la plataforma p2p Airbnb, está
controlada por grupos turísticos e inmobiliarios, no por particulares.
El concepto de la capacidad de carga
Cuando se habla de modelos de turismo sostenible, normalmente se utiliza el concepto de
capacidad de carga, que indica los límites que tienen los atractivos turísticos (ya sean culturales
o naturales) y los destinos, para absorber un determinado volumen e intensidad de turistas,
antes de que provoque efectos negativos sobre el destino y su población local.
La capacidad de carga se define como el máximo aprovechamiento que se le puede dar a los
recursos de la zona (ya sean naturales, culturales o sociales), sin que esto influya en la
satisfacción de los visitantes y sin generar un impacto negativo a la sociedad local y al medio
ambiente.