Este mantra es, sin duda, uno de los más importantes en el Budismo.

Es muy difícil
poder traducirlo correctamente pues su significado es muy profundo, tiene
muchos niveles de significación y se descubre cuando uno se entrega a las
prácticas budistas pues en ese camino se van descubriendo los tesoros poco a poco.

Este hermoso mantra, de acuerdo al Budismo, es en sí mismo un camino de

transformación, el camino para llegar al estado despierto, para ser un Buda. Se dice
que su recitación va purificando nuestro cuerpo, nuestra mente, nuestra habla,
todo, hasta que finalmente despertamos. Pero intentaré explorarlo en su
significado más sencillo y el que personalmente le doy cuando lo recito. Es un
mantra que nos llena de amor y de compasión.

OM es el sonido primordial de la creación. El origen de todo.

MANI significa joya. El resultado. Lo más preciado. El tesoro.

PADME se refiere a la flor de loto. A la sabiduría que nos ayuda a realizar lo que
somos en realidad. La flor de loto cada noche se cierra y se hunde en el lodo. Al
amanecer sale a la superficie y se abre rebelando toda su belleza. Es una flor llena
de magia pues viviendo en el lodo nunca se ensucia.

HUM significa el espíritu de la Iluminación o del Despertar.

Este mantra nos invita a ahondar en nuestras profundidades para encontrar

nuestro tesoro, nuestro centro perfecto de pureza, compasión y amor al que nada
ni nadie puede tocar. Nos enseña que cuando nos establecemos en nuestro centro,
en la joya en el loto, no importan las circunstancias externas, nada ni nadie nos
puede ensuciar a nivel esencial.