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EL CONJUNTO DE LO QUE SOMOS

La cultura es el común denominador que hace que las acciones de los individuos sean
comprensibles para un grupo en particular. Es decir, el sistema de valores, creencias,
comportamientos y dispositivos compartidos que conforman el modo de vida de una sociedad.
La cultura puede ser representada por la forma de la cultura material o no material.

La cultura material es un término que representa las creaciones físicas hechas, usadas o
compartidas por los miembros de una sociedad determinada; son los medios a través de los
cuales esta sociedad interactúa entre sí y con su entorno natural, como los celulares y aviones.
Los componentes de la cultura material son todas las creaciones (objetos) del ser humano y la
mente, por ejemplo, automóviles, grifos, computadores, árboles, minerales, por mencionar solo
unos pocos.

La transformación de la materia prima en formas utilizables mediante el empleo del


pensamiento es primordial en el logro de la cultura material. Por ejemplo, hacemos casas para
protegernos de las adversidades del clima y para nuestra propia privacidad en el nivel básico,
más allá de esto hacemos, usamos y compartimos artículos elaborados, interesantes y esenciales
que transmiten nuestra orientación cultural.

Por ejemplo, los tipos de ropa que uno usa reflejan tanto en la cultura a la que nos
suscribimos como la escuela, la religión o incluso el lugar donde pasamos las últimas vacaciones,
y estos hechos pueden dar indicios de cómo se rige nuestro propio pensamiento.

La cultura no material, por otro lado, es la creación humana abstracta o no vista por la
sociedad enfocada en influir en la conducta de dicha sociedad. Los componentes para la cultura
no material incluyen símbolos, idiomas, valores y normas. Por ejemplo, las actividades que toma
una parte de la sociedad como el himno nacional, las instituciones sociales como las iglesias, las
escuelas, la familia, etc.

El uso del lenguaje, los patrones de comportamiento y creencias, y los valores que
conforman la dirección de una sociedad a lo largo del tiempo. El lenguaje en su influencia sobre
el pensamiento, los valores que guían lo que la sociedad debe ser y las normas que forman las
costumbres de la sociedad.
El lenguaje en sí mismo es la combinación de símbolos que expresan ideas que permiten
a las personas pensar y comunicarse entre sí, ya sea verbal o no verbalmente. El lenguaje ayuda
en la construcción del pensamiento y descripción de la realidad, comparte experiencias,
sentimientos y conocimiento con otras personas.

El uso del lenguaje permite la creación de imágenes visuales, la distinción de los


extraños, manteniendo así la solidaridad y los límites sociales. También sirve como una
herramienta única en la manipulación de símbolos para la expresión de conceptos y reglas
abstractas, creando y transmitiendo cultura entre generaciones, y todo este proceso nos ayuda a
construir nuestra propia percepción de la realidad, la cual a su vez es el resultado de la
interacción y puesta en práctica del pensamiento individual y colectivo de una sociedad.

El lenguaje además enseña patrimonio cultural y sentido de identidad en una cultura. Es


un refuerzo de poder y control social ya que puede crear o marcar desigualdades entre las
personas, esto se debe a que el uso del lenguaje puede dar lugar a palabras, frases o afirmaciones
que no solo expresan el pensamiento de quien o quienes las transmiten, sino que también pueden
llegar a ofender, denigrar y/o excluir a una persona o grupo de personas.

En mi opinión, es necesario tener en cuenta la estrecha relación que existe entre el


lenguaje y el pensamiento. La idea más aceptada sobre el lenguaje y el habla es que son la forma
de expresar el proceso de pensamiento interno de un individuo. Las personas expresan lo que
sienten con los medios del lenguaje y el habla. Pero, la construcción del lenguaje no se desarrolla
de manera uniforme entre todas las personas, el vivir en un contexto diferente hace que las
personas de diferentes partes del mundo perciban la realidad de diferentes maneras. El contexto
social y ambiental influye en su forma de vivir y pensar.

El lenguaje no es el motor principal de los pensamientos, pero el pensamiento si puede


dar como resultado el lenguaje. Los poetas y los compositores frecuentemente nos muestran
construcciones de lenguaje nuevas e innovadoras para materializar sus pensamientos. Entonces,
en este caso están generando lenguaje con sus pensamientos.

Pero por otro lado, el lenguaje en ocasiones aparece como puente o como muro para el
pensamiento, es decir a veces nos lleva a una dirección pero nos puede bloquear otra. Por
ejemplo, si alguien dice una mala palabra en un idioma que no conozco, no me afectará. Pero si
estoy familiarizado con la palabra, logrará algún efecto en mi proceso de pensamiento y
reaccionaré de alguna manera. Entonces, obviamente hay muchos procesos de pensamiento en el
individuo que solo pueden ser motivados e iniciados por el lenguaje y no de otra manera.

Entonces, la idea básica del argumento anterior es que el lenguaje y el pensamiento se


mueven continuamente del pensamiento al lenguaje y del lenguaje al pensamiento, en una
relación de interdependencia. El lenguaje nos ayuda a pensar con un punto de vista específico y
el pensamiento vuelve a desarrollar el lenguaje, ya que este se enriquece a diario. Y el
pensamiento no solo se expresa en palabras, sino que también surge a través de ellas. Cada
pensamiento relaciona un objeto con otro y se mueve, crece y se desarrolla, por tanto nos permite
crear o construir nuestra visión de la realidad, la cual se rige por la cultura tanto material como
no material de nuestro entorno, entonces en base a esto, ¿la realidad significa lo mismo para
todos? ¿y para usted qué significa?.

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