Professional Documents
Culture Documents
Antes de empezar a esbozar estas palabras, tenía dos opciones. Pero, en mis
circunstancias –una simple trabajadora del poder judicial-, la mera alusión me
parecía desconsiderada. Y, sin embargo, temía incurrir en una incuestionable
imprudencia si iba en pos de una inmediatez desconsiderada. Venció la
honestidad. He dispuesto el territorio donde mis palabras han de aniquilarse.
Ahora, cuando quisiera -cuando debiera- empezar a hablar del equipo de trabajo
con que he trabajado, prefiero la humana conveniencia de pronunciar lo que me
dicta el corazón apoyado en la razón a fin de no guardar silencio.
No hay duda que las grandes obras se gestan desde las raíces del corazón.
Hacía algún tiempo que no sentía la proximidad de una verdadera alegría, y este
grupo humano con quienes he trabajado me ha permitido sentirla, no sólo eso,
sino también la asombrosa impresión de que, felizmente, siguen existiendo
expresiones de sensibilidad humana en este enmarañado mundo del trabajo
esforzado; un equipo de trabajo no llega a ser innovador sin una motivación que
subyugue, y aquí lo hemos conseguido.
MUCHAS GRACIAS.